Ante el aumento en el precio de las gasolinas, y tras una autorización de la Comisión Técnica de Transporte y Vialidad del estado, a partir del lunes la tarifa en el transporte público urbano de las diferentes rutas en la cabecera municipal de Iguala aumentó a ocho pesos.
El incremento autorizado de un peso, sólo incluye las combis y Urvan de rutas establecidas en la zona urbana de la ciudad, no así a los taxis, para los que la tarifa establecida sigue siendo de 30 pesos en la zona dentro del periférico, y 35 hacia las colonias fuera de éste.
El delegado regional de Transportes en la zona Norte, Jesús Munive Juárez informó a reporteros que en 2016, tras la aplicación de un estudio socio-económico, se había autorizado un incremento a la tarifa del 25 por ciento, sin embargo, líderes y concesionarios del transporte en Iguala, en común acuerdo aplicaron el aumento sólo del 12.5 por ciento, que dejó la tarifa en 7 pesos
Fue a partir del lunes que se aplicó un “ajuste” a la tarifa y el aumento del 12.5 por ciento restante al incremento que se había aprobado en 2016, que fue de un peso.
En las Urvan y combis fueron colocados avisos para los usuarios, de que la delegación regional de la Comisión Técnica de Transporte y Vialidad, con fundamento en lo dispuesto en los numerales 8 y 14, y en cumplimiento de la Ley de transporte y vialidad, y con base en el aumento autorizado el 1 de septiembre de 2016 de 25 por ciento, a partir del lunes se ajustó la tarifa, que dejó el servicio en 8 pesos.
Se justificó el aumento en el incremento que a diario se está dando en el precio de las gasolinas, además de las refacciones automotrices.
Hasta ayer, en gasolineras de Iguala se observó que el costo del litro de gasolina Magna era de 17.92 pesos, cuando el miércoles de la semana pasada estaba en 17.77, mientras que la gasolina Premium pasó de 19.26 pesos a 19.43 en el mismo lapso.
Usuarios del transporte a los que se consultó informaron que los tomó por sorpresa el aumento de la tarifa, aunque la principal queja que se escuchó fue las malas condiciones en las que se encuentran algunas Urvan y combis que prestan el servicio.