La presidenta del colectivo Memoria Verdad y Justicia de Acapulco, Socorro Gil Guzmán, cuenta que tardó 27 horas para para llegar de la Ciudad de México a Acapulco, el 25 de octubre, cuando había pasado el huracán
Chilpancingo, Guerrero, 21 de noviembre de 2023. Pese a las adversidades causadas por el huracán Otis, el colectivo Memoria, Verdad y Justicia de Acapulco realizó la tercera exposición itinerante de fotografías de sus familiares desaparecidos en el Zócalo de Chilpancingo, cada vez más amplia, para denunciar la crisis humanitaria de desaparición de personas en México y en Guerrero.
Esta exposición que comenzó a realizarse el segundo sábado de cada mes en la capital del estado por la memoria de 113 mil personas desaparecidas en el país, también es parte de la búsqueda digna, y para evitar la revictimización de los familiares, “y la burla de familiares que no dan resultados”, señalaron en un pronunciamiento.
En este acto, reconocieron el apoyo de defensores de derechos humanos y ciudadanos de la Ciudad de México, Estado de México y Chilpancingo, que el 2 de noviembre enviaron agua y víveres a las familias acapulqueñas que participan en el colectivo, damnificadas del huracán categoría 5 que devastó la ciudad.
Agregaron que habrá otro viaje con apoyos para entregar en propia mano a los afectados en sitios de Acapulco.
Recordaron que el 4 de noviembre, que estaba prevista la exposición itinerante en Acapulco, realizaron una búsqueda en vida de las personas que continúan incomunicadas por las fuertes lluvias y vientos huracanados que tocaron Acapulco los primeros minutos del 25 de octubre y duraron en la ciudad dos horas.
La presidenta del colectivo, Socorro Gil Guzmán, indicó que sólo faltan dos personas por localizar en colonias de la periferia.
En la tercera exposición itinerante también denunciaron que el comisionado de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, dependiente de la Secretaría General de Gobierno, Arturo Solís Felipe, no respondió a una solicitud de búsqueda en vida a principios de diciembre que han gestionando desde septiembre.
Aclaró que debido a que la estructura del gobierno está volcada a la reconstrucción de Acapulco y Coyuca de Benítez, espera que esta vez se programe para enero de 2024.
Sin embargo, se queja de que el funcionario les dijo que todas las acciones se encontraban suspendidas por la búsqueda de personas desaparecidas a causa de Otis en Acapulco, y se negó a decirle dónde estaba trabajando.
“Cuando pedimos sumarnos a la búsqueda, no nos quiso decir dónde estaba. Realmente no creo que Arturo Solís ande en Acapulco, porque cuando le pedimos que vaya a supervisar a los licenciados de la Comisión de Búsqueda que nos revictimizan, nunca lo ha querido hacer, ahora dice que anda en campo”.
Las dificultados para entrar a Acapulco después de que pasó el huracán
La señora Gil indicó que ella no estaba en Acapulco la noche del martes 24 de octubre, cuando el huracán Otis azotó la costa de Guerrero, pero sí estaban sus hijas y su nieto. El miércoles 25, pudo viajar de la Ciudad de México en un automóvil particular, porque no había servicio en el transporte público.
Salieron a las 7 de la mañana de la Ciudad de México, y llegaron a las 2 de la tarde a la entrada Acapulco, y a las 7 de la noche a la avenida Costera, junto a la estatua de Diana cazadora, pero dejaron el automóvil ponchado en la zona de la Condesa.
De ahí, con un compañero caminaron durante la noche y madrugada rumbo a Caleta, con algo de agua y víveres, más pesados por la distancia. Hasta el último tramo recibió un raite.
Llegó a las 10:48 de la mañana del siguiente día a su casa. “Caminé muchísimo, no sentía cansancio sólo quería ver a la familia”.
El jueves, buscando señal por el club de yates, dijo que avisó a sus compañeros del colectivo en la Ciudad de México que llegó a salvo, y comenzaron a rastrear a sus compañeras. El 4 de noviembre, fueron a buscar en sus domicilios a quienes aún no tenían señal de telefonía, para llevarles despensas.
En el acto, la señora Gil recordó a su hijo desaparecido, Jhonatan Guadalupe Romero Gil, detenido desaparecido por policías municipales en Acapulco, frente a la playa Tlacopanocha, el martes 5 de diciembre de hace cinco años, sin que ninguna autoridad responda por el hecho, ni haya indicios de justicia.
Señaló que sólo recibió una llamada donde le decían que le habían quitado la vida el mismo día que se lo llevaron, y le dieron un lugar donde supuestamente habían dejado sus restos, pero no los han encontrado. Adelantó que tramita una nueva búsqueda.
Asimismo recordaron a Jhonathan Muñivez Mayo, que el 3 de noviembre cumplió 15 años desaparecido de manera forzada en Chilpancingo.
Texto: Lourdes Chávez/Foto: Foto: Jesús Eduado Guerrero
