Ciudad Altamirano, Guerrero, 26 de mayo de 2020. La pesca se incrementó en los últimos días en los municipios colindantes con los ríos Balsas y Cutzamala, como una opción para las familias que se quedaron sin empleo debido al cierre de negocios por la pandemia del coronavirus.
Los municipios de Zirándaro, Coyuca de Catalán, Pungarabato, Ajuchitlán, Tlapehuala y San Miguel Totolapan se ubican junto al río Balsas, mientras que el municipio de Cutzamala cuenta con el paso del río Cutzamala que es el segundo afluente más importante de Tierra Caliente.
Se estima que en la región unas 2 mil 500 personas se quedaron sin trabajo en el último mes por el cierre de negocios en los nueve municipios. Los que trabajaban en la ciudad y eran de zonas rurales tuvieron que regresar a su tierra natal.
En las tardes se puede observar en toda la ribera del río Balsas a decenas de personas que están acudiendo todos los días a pescar.
Comienzan a llegar en la caída del sol y se retiran muy de noche, mientras que otros llegan alrededor las 5 de la mañana y se van con la salida del sol.
La pesca la utilizan principalmente para consumo familiar. Los mercados se abastecen todavía de los productores que cuentan con granjas acuícolas, y principalmente de la producción de la presa El Gallo.
Ante la falta de empleo las bondades de los ríos en Tierra Caliente ahora tienen una mayor importancia, pues llegan las familias a llevar de comer lo que pescan.
Arriba del puente Miguel Alemán que une a Ciudad Altamirano con Coyuca de Catalán se observan todas las noches unas 10 personas con anzuelo que tardan de dos a tres horas.
En el río Balsas todavía se puede encontrar mojarra Tilapia que es la principal especie que abunda en los ríos de esta región. En otras dimensiones y como un pez más grande se extraen carpas, se han pescado carpa plateada de hasta 8 kilos de peso. Además del langostino. También abunda el pez sapo que en los últimos 10 años las familias aprendieron a cocinarlo.
La venta de los productos en el mercado es de 70 pesos el kilo de mojarra en promedio, y en las orillas de los ríos está hasta 3 kilos por 150 pesos.
Todos los ayuntamientos acordaron con el inicio de la pandemia el cierre de las orillas de los ríos con fines de diversión, y los cuerpos policiacos recorren la zona para retirar a las personas que se bañan o pasan la tarde de día de campo, pero se autorizó la pesca.
Texto y foto: Israel Flores
