20 octubre,2022 4:20 am

Se disculpa el Estado con la familia de la abogada asesinada Digna Ochoa y reabre el caso

Digna, que días antes del crimen hace 21 años visitó la sierra de Petatlán para defender a los ecologistas perseguidos por el Ejército, “ha dejado un legado en la defensa de derechos humanos, en su trabajo en los pueblos indígenas y campesinos”, reconoce el subsecretario Encinas. “Teníamos razón… la asesinaron por defender los derechos humanos, y por esos mismos ideales estamos aquí… no vamos a parar hasta encontrar la verdad, la justicia y castigar a los que te arrebataron la vida y levantaron la hipótesis de suicidio”, advierte hermano de la defensora

Ciudad de México y Atoyac, Guerrero, 20 de octubre de 2022. “Ofrezco una disculpa pública a Digna Ochoa y Plácido y a su familia porque el Estado mexicano no pudo garantizar su seguridad y su integridad personal, y porque tampoco el Estado garantizó su acceso pleno a la justicia”, expresó Alejando Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, en un acto realizado este miércoles durante el cual también reconoció la responsabilidad del Estado mexicano en la violación a los derechos humanos de la abogada, encontrada sin vida el 19 de octubre de 2001 en esta ciudad.

“Ofrezco una disculpa pública por los fallos en la implementación de los protocolos especializados” para la investigación de su muerte, “las faltas al debido proceso y a las debidas diligencias”, dijo Encinas, en cumplimiento del mandato de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coidh) como medida de satisfacción para la reparación integral del daño.

“Ofrezco una disculpa pública porque su lucha y su memoria no pueden ser discriminadas ni estigmatizadas por su pertenencia de género y cultural”, añadió en su intervención, que tuvo lugar en el Complejo Cultural Los Pinos ante los familiares de Ochoa –12 hermanas y hermanos–, autoridades federales y de Ciudad de México, defensores de derechos humanos, entre otros asistentes.

Digna Ochoa, quien fue galardonada con diversos premios nacionales e internacionales por su trabajo, poseyó “una profunda sensibilidad ante la injusticia que definió su carácter militante y por la defensa de los derechos humanos en nuestro país”, agregó el subsecretario antes de indicar que, como lo ha establecido la sentencia sobre el caso de la Coidh, se implementarán “todas las acciones que sean necesarias para reabrir la investigación”.

Encinas adelantó que esto se hará “de manera diligente, efectiva y dentro de un plazo razonable para esclarecer los hechos y determinar las circunstancias de muerte”. Para ello, detalló, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) ha reabierto el caso y creado una unidad especial que llevará las indagaciones, después de que se hizo pública la sentencia de la Coidh, el 19 de enero de este año.

“Acudo en representación del Estado mexicano, a este acto de reconocimiento de responsabilidad, de disculpa pública, a la defensora de derechos humanos Digna Ochoa y a su familia. Reconozco a la familia por su infatigable lucha que, a lo largo de 21 años, ha buscado la verdad y la justicia sobre la muerte de su querida hermana”, insistió.

Manifestó que el propósito del acto fue reivindicar la carrera de Digna Ochoa, su compromiso y labor de defensa de los derechos humanos y la defensa jurídica que emprendió en favor de los más desprotegidos, “siempre apegada a principios, ética y con una fuerte convicción social”.

“Digna ha dejado un legado en la defensa de derechos humanos, en su trabajo en los pueblos indígenas y campesinos en Veracruz, Chiapas y Guerrero, y en muchos otros ámbitos en la defensa de los derechos humanos en el país, eventos relevantes donde se ha marcado el profesionalismo y el compromiso con quienes menos tienen. Nos encontramos aquí para reivindicar, dignificar su trabajo, para resarcir y dignificar su memoria”, enfatizó.

En Guerrero, Digna Ochoa fue defensora de presos de la Organización de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán, que fueron detenidos y torturados por efectivos del Ejército. Y dos semanas antes de ser asesinada, los primeros días de octubre de 2001, visitó comunidades de la sierra en las que dominaban caciques vinculados al narcotráfico, y le pidieron ayuda para la defensa jurídica de otros perseguidos por el Ejército y para proyectos sociales. La Organización demandó que la participación de la abogada en la sierra de Guerrero fuera una de las líneas de investigación para esclarecer el crimen.

Defensores y periodistas, en situación de riesgo: Segob

De acuerdo con Encinas, a menos de un año de la notificación de la sentencia de la Corte Interamericana sobre el caso Digna Ochoa, el 25 de noviembre de 2021, “se ha avanzado de manera sustantiva en el cumplimiento de las medidas de reparación, rehabilitación e indemnización para la familia”.

Solicitó a la titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Martha Yuriria Rodríguez –presente en el acto–, no cejar en “la atención oportuna e inmediata de toda la familia para cumplir con esta responsabilidad y garantizar una reparación integral”.

Por su parte, el gobierno de Ciudad de México y el municipio de Misantla, Veracruz, de donde era originaria la abogada, han avanzado en el cumplimiento de la Coidh para que calles de ambas ciudades lleven el nombre de Digna Ochoa y Plácido.

Asimismo, afirmó Encinas, el gobierno federal “reconoce la situación de riesgo en el ejercicio de la defensa de los derechos humanos y del periodismo en nuestro país, mencionado por la Corte Interamericana”. Por ello, la Segob, por medio de la Subsecretaría, impulsa la creación de un nuevo marco legal y normativo “que defina los ámbitos de competencia, concurrencia y obligaciones específicas de las autoridades de los tres órdenes de gobierno” en materia de protección a las personas que trabajan en estos dos ámbitos.

Entre las acciones de reparación y no repetición que ordenó la Coidh en su sentencia están: promover y continuar las investigaciones que sean necesarias para determinar las circunstancias de la muerte de Digna Ochoa y, en su caso, juzgar y eventualmente sancionar a la persona o personas responsables de su muerte; realizar un acto público de reconocimiento de responsabilidad internacional, diseñar e implementar una campaña para reconocer la labor de las defensoras y defensores de derechos humanos, y elaborar un plan de fortalecimiento calendarizado del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.

“No podía creer que era el cuerpo de mi hermana”

Jesús Ochoa y Plácido, hermano de Digna, aceptó la disculpa pública del Estado mexicano. “A nombre de la familia, acepto la disculpa pública emitida”, dijo. Contó que su familia estuvo conformada por seis hermanas y siete hermanos, por su papá Eusebio Ochoa López y su mamá Irene Plácido Evangelista. Todos originarios de Misantla.

De los 13 hermanos, narró, nueve estudiaron una carrera profesional, lo que implicó diversos sacrificios. “Estudiábamos y trabajábamos, con diversas carencias”. Recordó que a fines de 1988 Digna se trasladó a Ciudad de México, donde ejerció como defensora jurídica en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, donde ella tomó casos relevantes que la pusieron en peligro y por lo cual recibió amenazas de texto en su contra.

“El 19 de octubre de 2021, como a las 7 de la noche, me enteré por los medios de comunicación que mi hermana había sido asesinada en el despacho donde laboraba con dos disparos de arma de fuego, uno en la pierna izquierda, otro en el hueso parietal del cráneo”. Estaba en Misantla y se trasladó a la capital mexicana. En la funeraria, “vi un ataúd de una mujer de rostro pálido y sus fosas nasales taponeadas con algodones, diciendo los presentes que era el cuerpo de Digna Ochoa. No podía creer que era el cuerpo de mi hermana. Tuve que aceptar la realidad.

“¿Quién fue?, pregunté insistentemente a mi hermana. Pasaron tres años para aceptar que estaba muerta y que no regresaría a casa, aunque yo la había visto fallecida. Hace 21 años decidí tomar el caso, cosa que no ha sido fácil porque nos enfrentamos a los responsables de investigar el asesinato.

“En este proceso enfrentamos humillaciones, burlas, malos tratos de las propias autoridades y de una parte de la sociedad civil. Hubo momentos que me marcaron para siempre por el desprecio y la humillación que me hicieron pasar”.

Jesús Ochoa mencionó también que la abogada que en su momento llevó el caso lo dejó sin dar explicaciones. Y que el cuerpo de Digna fue exhumado para realizar nuevas muestras.

Además recordó cuando Renato Sales Heredia, actual fiscal general de Campeche, “escenificó en la Procuraduría cómo se había suicidado Digna, frente a medios de comunicación”. Sales, en aquella época, era subprocurador de Procedimientos Jurídicos y de Derechos Humanos de la entonces Procuraduría capitalina, y su teoría sobre suicidio fue refutada por la Corte Interamericana en su sentencia y por eso ordenó reabrir las investigaciones.

“Para justificar la tesis del suicidio, las autoridades insultaron, enlodaron, descalificaron la memoria de mi hermana, lo que entristeció y llenó de enojo a toda mi familia”, enfatizó Jesús Ochoa.

También agradeció a las personas que lo acompañaron en el proceso. “En estos 21 años he encontrado grandes amistades que han brindado apoyo. Teníamos razón. A Digna Ochoa la asesinaron por sus ideales, por defender los derechos humanos, y por eso mismos ideales estamos aquí, para decirles… para decirte, querida hermana, que no vamos a parar hasta encontrar la verdad, la justicia y castigar a los que te arrebataron la vida y que levantaron la hipótesis de suicidio.

“Digna Ochoa no está muerta, está más viva que nunca y exige justicia”.

Renombran “Digna Ochoa” a la calle de la FGJ de Cdmx

La fiscal general de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, informó que la Fiscalía capitalina consideró procedente la reapertura de la investigación, y que la continuación de las indagaciones se encuentra a cargo de un área creada ex profeso, cuyo nombre es Unidad de Investigación Especializada para el Caso Digna Ochoa.

Esta unidad, aseguró, cuenta con el voto de confianza de la familia y se encargará de identificar a los responsables de los hechos.

El secretario de Gobierno de Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, recordó que Ochoa participó en casos emblemáticos como la masacre de Aguas Blancas (el asesinato de 17 campesinos el 28 de junio de 1996 en ese lugar de la sierra de Coyuca de Benítez, Guerrero) y que recibió premios internacionales por su labor. “Ha sido identificada por su amplia vocación social y ética”, dijo.

“Entre los años 2002 y 2003, por medio de la gestión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y con conocimiento del Estado, un grupo de expertos fue convocado para realizar un estudio respecto a si las pruebas técnicas realizadas en el marco de la investigación se adecuaban a los estándares internacionales. En el informe se concluyó que algunas de las pruebas practicadas no fueron evaluadas en la investigación en forma ajustada a los métodos y procedimientos”, estableció Batres.

Dijo que su muerte, de acuerdo con la Coidh, se dio en un contexto de hostigamiento de personas defensoras de derechos humanos en México.

Dentro de los resolutivos de la Corte, dijo, se estableció otorgar el nombre de Digna Ochoa y Plácido a una calle en la ciudad de Misantla, en Veracruz, y otra calle en Ciudad de México.

“En la Comisión de Nomenclatura de la Ciudad de México se acordó que se modifica la calle General Gabriel Hernández, entre las calles Doctor Lavista y Doctor Río de la Loza, por calle Digna Ochoa y Plácido, en la colonia Doctores, alcaldía Cuauhtémoc”, corroboró. El tramo se encuentra justo enfrente de la FGJ y Batres dijo que el cambio, por decreto, se efectuó este miércoles.

En efecto, en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México de ayer se anunció que la calle adjunta al búnker que es sede de la Fiscalía General de Justicia, en la colonia Doctores, dejó de llamarse Gabriel Hernández para llevar el nombre de Disgna Ochoa y Plácido.

La senadora Olga Sánchez Cordero, presente en el acto, indicó que la voz de Ochoa “se sumó a la lucha por la democracia en los ochenta y al respeto y defensa de los derechos humanos en la década de los noventa.

“Ahí me tocó conocerla, en la Suprema Corte, cuando ella iba a defender estas causas. Siempre se enfrentó a riesgos por revertir injusticias, hasta que las inercias institucionales de ese México la alcanzaron, y la revictimizaron con el manto de la impunidad”.

Martha Yuriria, la titular de la CEAV, aseguró que asumía “el compromiso ante la familia y autoridades para que el legado de Digna en la CEAV nos guíe para buscar que se respeten los derechos humanos de todas y todos hasta que un día podamos decir ‘no viviré con miedo’”.

Siembran un árbol en la carretera de la sierra de Atoyac en memoria de Digna Ochoa

En el 21 aniversario luctuoso de la defensora de derechos humanos Digna Ochoa, organizaciones sociales del municipio de Atoyac, activistas y líderes sociales sembraron un árbol de ceiba en la carretera serrana Atoyac-Paraíso en la periferia de la ciudad en memoria de su lucha y su legado para la preservación de los bosques.

Los dirigentes sociales Diana Hernández, hija de Ranferi Hernández, Gonzalo Martínez y Micaela Cabañas señalaron que lamentablemente el caso no ha tenido atención para su esclarecimiento y castigar a los autores intelectuales y materiales del asesinato.

Asimismo, lamentaron que a la preparatoria popular del poblado de La Venta del municipio de Acapulco, que tenía el nombre de Digna Ochoa, se le haya cambiado por el del ex rector de la UAG Javier Saldaña.

Exhortan principalmente a campesinos a seguir su legado de cuidar y preservar los bosques que siguen siendo explotados de manera irracional.

Texto: Guillermo Rivera y Francisco Magaña / Foto: Francisco Magaña