La sindica administrativa María Antonieta Guzmán Vizairo informó que en tres semanas concluirá el análisis del proyecto para modificar los sueldos de los funcionarios municipales de acuerdo con la actividad desempeñada.
Detalló que esta semana la comisión de Hacienda del Cabildo se reunirá con el secretario de Administraciónny Finanzas, Alberto Torreblanca Galindo, y el director de Recursos Humanos, Joseph Williams Rosario Estévez, y abordará el tema por primera vez.
Explicó que el proyecto de tabulador de salarios consiste en establecer límites en cuanto a las percepciones salariales que debe recibir un coordinador, director, subdirector o jefe de departamento de acuerdo con la responsabilidad, los resultados, el compromiso y conocimiento.
En entrevista, Guzmán Vizairo indicó que en caso necesario se contratará a una empresa para hacer la evaluación y aclaró que dentro de la estructura municipal hay el departamento de Evaluación y Control de Puestos que es el que en primera instancia se encargará de entregar los reportes de las diferentes áreas.
Dijo que hay “varias dependencias” donde han encontrado a funcionarios que cobran un sueldo muy elevado en comparación con las responsabilidades que tienen a cargo, por eso la intención de establecer un tabulador en el que “no influyan compromisos políticos ni favoritismos” en determinar el sueldo de un funcionario.
Expuso que también hay cargos fuera del organigrama municipal, en ambos casos se negó a detallar nombres de quienes ocupan dichos cargos o las dependencias donde hay estas irregularidades.
Admitió que los sueldos de los funcionarios se establecen de manera discrecional y que la intención de establecer un tabulador de sueldos no es para homologar las percepciones económicas de los directores, coordinadores o jefes de departamento sino para evitar sueldos exagerados para ciertas funciones de la administración pública.
Expresó que “por justicia” los sueldos deben de nivelarse porque hay quienes hacen un trabajo serio, responsable y calificado, y no es remunerado de acuerdo con el grado de responsabilidad.
Manifestó que la decisión “no es de mala fe” sino que el “desaseo” se arrastra de tiempo atrás y por eso es necesario corregirlo, “los ciudadanos lo piden y el Ayuntamiento lo necesita entonces sí tenemos que hacerlo”.