El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán informó que varios ex funcionarios serán llevados al Tribunal Universitario para expulsarlos de los puestos que ahora ocupan en la institución debido a que en auditorías se han hallado desvíos en diferentes áreas, entre ellas el área laboral, donde en pagos de guardias hay casi 3 millones de pesos que fueron a dar a cuentas personales.
Agregó que también en el área de becas se hallaron al menos unas 500, por más de 150 mil pesos, que no fueron entregadas a los beneficiarios, y que en el área de Cultura se han detectado malos manejos de 800 mil pesos.
El rector estuvo en Acapulco, primero en la Facultad de Contaduría y Administración para dar posesión a los funcionarios de la Zona Sur, y posteriormente en la Facultad de Psicología para presenciar el informe de la directora, Marisol Salado Barrera; en ambos actos habló de los malos manejos de algunos funcionarios de la administración pasada, también encabezada por el rector Saldaña.
En su mensaje en la Facultad de Psicología, el rector Javier Saldaña subrayó que lo que más le “encabrona” es que le carguen la mano a los estudiantes, pues dijo que se detectó que en el área de Cultura de Iguala y Chilpancingo, funcionarios se quedaron con las becas, y por eso los que cometieron esos desvíos serán llevados al Tribunal Universitario, “porque eso no se puede hacer, al joven no se le puede tocar su bolsillo bajo ninguna circunstancia”.
Indicó que se tienen los casos focalizados y se van a llevar al “Tribunal Universitario y espero que expulsen a estas personas, no importa su condición, para que sea una medida ejemplar para que no vuelva a pasar”.
Indicó que son unas 500 becas de 500 pesos, que suman 157 mil pesos, y que no fueron cobradas por los interesados, pero “así sea un peso, no se puede permitir a nadie que le quite el dinero a los jóvenes”.
El rector informó que también en la renta de las casas de estudiantes se hizo un ajuste, pues algunas estaban sobrevaluadas, ya que cobraban 15 mil por un inmueble que tendría que ser de 3 mil, y que con la revisión que se hizo se logró ahorrar un millón 100 mil pesos, que fueron utilizados en 895 becas que se entregaron el miércoles.
Reconoció que en muchos causó enojo la medida, pero que le gustaría que lo llevaran al Consejo Universitario para “cancelar el contrato”.
Agregó que también se concluyó el cruce de nómina con el gobierno del estado, que terminó con la disminución de 500 tiempos completos que dejarán a la universidad un ahorro de 10 mil millones de pesos al año; y subrayó que “ya basta de que eres líder y quieres estar simulando que trabajas en dos y tres lugares, esto va servir de ejemplo para que el que quiera trabajar, porque la transparencia va en serio”.