Siguen colgados los cables en las calles de la ciudad al cumplirse 100 días del huracán Otis

Los trabajos de remodelación en la plaza Quebec, tres meses después de ser afectada por el huracán Otis a días de haber sido inagurada Foto: Carlos Carbajal

Ramón Gracida Gómez

Transeúntes de la avenida Cuauhtémoc tienen que esquivar los cables que siguen colgados de los postes de luz después de más de tres meses del paso del huracán Otis y que no han sido acomodados o retirados de las banquetas.
Durante un recorrido de El Sur a mediodía de ayer se pudo constatar que algunos cables llegan hasta la cabeza de los vecinos de Acapulco que caminaban por la banqueta del área de Las Anclas, con la sospecha de prevenir algún accidente si es que los llegaran a tocar.
La falta de recolección de basura prevalece y aumenta con los pedazos largos de cables que permanecen arrumbados en las esquinas o en algunas calles de distintas colonias, a pesar de la reinstalación del servicio eléctrico por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y las compañías privadas de telefonía e Internet.
Y es que el meteoro del 25 de octubre hizo estragos en los postes de energía eléctrica que cayeron por los fuertes vientos que alcanzaron los 300 kilómetros por hora, a muchos automóviles les cayeron encima los postes y la sociedad acapulqueña quedó sin luz, algunas colonias hasta por un mes.
La devastación fue respondida inmediatamente por empleados de la CFE que vinieron de otros estados del país para auxiliar en la emergencia provocada por el huracán categoría 5 y rápidamente subían a los postes y arreglaban el daño; pero era bastante la devastación y los trabajadores tardaron en completar su cometido.
Después vinieron los trabajadores de las empresas privadas de telefonía e Internet que acudieron también al auxilio del municipio y reinstalaron sus servicios, aunque persisten las quejas de muchos usuarios que aún no cuentan con Internet, cable de televisión o teléfono porque las empresas no han acudido a su colonia.
Ayer se cumplieron 100 días del paso del huracán Otis que golpeó Acapulco, Coyuca de Benítez y San Marcos, y una de las consecuencias más visibles en los espacios públicos de Acapulco son los cables que cuelgan de los postes de luz y entorpecen el trayecto de los transeúntes.
Un ingeniero electricista consultado al respecto, consideró, sin embargo, que estos cables no representan algún riesgo físico si los vecinos del municipio los llegaran a tocar porque posiblemente pertenezcan a las empresas de telefonía e Internet, y no a la CFE, que sí traen consigo una carga eléctrica que sí podría afectar a las personas.
El ingeniero electricista acotó su comentario a tener más precisión sobre el origen de estos cables, si es que son de la empresa pública de energía o de alguna compañía privada que los abandonó en las calles, pero que es más probable que sean de esta última porque no se ha difundido algún percance hasta el momento.
Antes del huracán Otis, muchas calles de Acapulco ya padecían el problema de cables colgados casi a ras de piso o simplemente tirados en las banquetas, y se complicaba aún más porque la CFE se deslindaba de recoger estos cables si correspondían a las empresas privadas; todo ello se agravó después del meteoro.