Insisten padres de Ayotzinapa en que el mecanismo de seguimiento funcione hasta esclarecer los crímenes de Iguala

El mecanismo internacional de seguimiento del caso Ayotzinapa no se ha concretado porque el gobierno pretende que su mandato sea de seis meses, y los abogados de los padres han pedido que se extienda hasta que estén esclarecidos los crímenes del 26 y 27 de septiembre en Iguala, informó el vocero de los padres de los 43 normalistas desaparecidos, Felipe de la Cruz.
Dijo que están preocupados porque mientras los preacuerdos alcanzados de consenso entre las tres partes involucradas (la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el Estado mexicano y los padres) no se concreten en un convenio, tampoco hay avances.
Aclaró que la postura de los padres de los 43 desaparecidos es que el mecanismo permanezca en México hasta la conclusión del caso, y seis meses son insuficientes.
Agregó que esa es la razón por la que se ha retrasado la conformación, porque no se han puesto de acuerdo en el tiempo de duración, pese a la disposición que expresaron las autoridades en la reunión con la CIDH, subsidiaria del mecanismo, que se celebró hace doce días en Washington.
El abogado de las víctimas, el director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), Mario Patrón declaró después del encuentro que sería inaudito que el mecanismo no terminara de concretarse la siguiente semana, dadas las señales políticas que dio el Estado.
Concluido el plazo, Felipe de la Cruz informó que han encontrado dificultades para conformar el mecanismo.
Recordó que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) estuvo dos periodos de seis meses y no encontró indicios de los normalistas desaparecidos debido a los obstáculos burocráticos de las autoridades judiciales y en la investigación.
El vocero de los padres insistió en que seis meses no serán suficientes si las autoridades no tienen intención de llegar a la verdad. La posición de los padres es que el nuevo mecanismo, que inicialmente será coordinado por el presidente de la CIDH, James Cavallaro, se retire cuando termine el proceso de resolución del caso y se conozca la verdad. (Lourdes Chávez / Chilpancingo).