Son 404 las casas dañadas en el sismo de 2014 en Zihuatanejo: Sedatu

 

El delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en Guerrero, José Manuel Armenta Tello precisó que en Zihuatanejo no son 100 las viviendas que faltan por ejecutarse, sino 404, de las 721 que resultaron dañadas en un sismo en 2014.
Agregó que la empresa que está a cargo de las construcciones dejó de trabajar un mes porque no le pagaban y por problemas de inseguridad, según dijeron.
Ayer se informó que habitantes de las comunidades de El Zapotillo, Las Higueritas y El Calabazalito, en la Sierra de Zihuatanejo, manifestaron que hay 100 casas sin terminar, luego de que fueron dañadas por el sismo.
En consulta telefónica, el delegado precisó que el número de viviendas que resultaron dañadas fue en total de 721, de las cuales 261 sufrieron daño total y 460 daños parciales. Detalló que de las 261, hasta la fecha se han reconstruido 186, y de las 460 se han hecho 131, es decir 317.
Aclaró que el contrato con la empresa Constructora Delta fue en la administración pasada, con el delegado Alfredo Fernández Peri, y que el trato fue que las viviendas que tuvieran daños totales se construirían, mientras que a las dañadas parcialmente se les agregaría una recamara adicional, y que no se repararía la casa dañada.
De la ausencia de la empresa durante un año, indicó que, “cuando yo llego a tomar la delegación, que fue en noviembre del año pasado, la empresa tenía un año sin trabajar en la zona, un año o poco más de un año los trabajos estaban abandonados, el argumento de la empresa es que no les pagaba y que además había tenido problemas, digo sin que a mí me conste, yo no llegaba en aquel entonces, (dijeron) por cuestiones de seguridad”.
Contó que, al llegar a la delegación se reunió con el alcalde de Zihuatanejo, el perredista Gustavo García Bello, a quien pidió auxilio en el asunto de la seguridad, garantías para seguir construyendo las viviendas, y entonces se continuó, y hasta ahora hay una avance del 68 por ciento, dijo.
El tipo de viviendas que hace la constructora no es el tradicional de ladrillo, block y cemento, sino que, mediante moldes, se pone una pared interior y una exterior que se rellenan con concreto a presión y luego se retiran los moldes. Queda una vivienda de paredes delgadas que, aseguró Armenta Tello, son muy resistentes.
Una pareja afectada por el sismo se había quejado de que para construir su casa les pidieron 12 peones, porque no incluía la mano de obra; sin embargo, no tienen el dinero para contratarlos.
“En aquel entonces, se le autoriza a la empresa que use un sistema de autoconstrucción, o sea que emplee mano de obra no calificada… es ahí donde creo que declaran que les piden que pongan albañiles y peones para la ejecución de sus acciones, porque así lo plasmó la empresa y así se le dio el contrato a la empresa”, explicó el delegado.
Dijo que piden a los damnificados mano de obra no calificada, que puedan acarrear material, que hagan mezcla, no trabajadores de plomería, electricidad o carpintería.

Están sin terminar las casas de los afectados por sismo de 2014 en la sierra de Zihuatanejo

Habitantes de la comunidad El Zapotillo en la parte alta de la sierra del municipio de Zihuatanejo denunciaron que a casi tres años del sismo de 7.2 grados en la escala de Richter ocurrido el 18 de abril de 2014, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), no ha cumplido con la construcción de sus viviendas, las cuales quedaron inconclusas porque en aquél entonces, representantes de esa dependencia les condicionaron el apoyo a cambio de que ellos pagaran los peones.
Ayer, durante una visita a esa comunidad, el matrimonio formado por don Ángel Rosas López y Yolanda Gallardo Portillo, ambos de edad avanzada y de escasos recursos económicos, denunciaron que después del fuerte sismo llegaron trabajadores de la Sedatu a tomarles sus datos porque supuestamente el gobierno les reconstruiría su vivienda, sin embargo, sólo colocaron un piso rústico y dejaron el armazón de alambre de lo que iban a ser las paredes de la vivienda.
Don Ángel Rosas dijo que los representantes de la Sedatu le dijeron que ellos tenían que pagar los peones si es que querían que se les terminara su casa, además de que les pidieron que echaran abajo vivienda dañada por el temblor para que no se les fuera a caer encima, lo que así hicieron.
Actualmente habitan una parte de su casa que se negaron a tirar y con mucho esfuerzo juntaron dinero para comprar láminas galvanizadas para protegerse de las inclemencias del tiempo.
Doña Yolanda Gallardo comentó que en junio del año pasado fue la última vez que acudieron trabajadores de la Sedatu a la comunidad, “pero nomás a ver” y desde entonces no han regresado, dijo que no comprenden cómo es que en otras comunidades sí les terminaron sus casas y en esa localidad así como en Las Higueritas y El Calabazalito no, “son como unas 100 casas (sin construir), con la gente que he platicado dicen que también a ellos les pidieron que pagaran los peones si es que querían que tuvieran su casa nueva.
El mismo testimonio lo dio la señora Etelvina Rumbo Morales, también de edad avanzada y vecina de El Zapotillo, quien lamentó que el gobierno sólo los engañó, “ya vamos para tres años y aquí seguimos esperando a que vengan a terminar nuestras casas que dijeron que nos iban a ayudar”.
“Aquí vinieron a mi casa, tomaron fotos de cómo la dejó el temblor, me hicieron preguntas y me dejaron una hoja que pegaron en la puerta, me dijeron que con el número que venía ahí, con ese me iban a hacer mi casa, pero luego salieron con que yo tenía que pagar 12 peones porque la mano de obra no venía, hasta se me rodaron las lágrimas porque de dónde voy a agarrar dinero para pagarle a unos peones, ya mejor me quedé así con mi casa cuarteada, gracias a Dios que no ha vuelto a temblar como esa vez”.