Por el hoyo no hay cancelaciones pero sí bajó la afluencia de visitantes: AHETA

 

El presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Jorge Laurel González, confirmó lo dicho por el gobernador Héctor Astudillo Flores de que el socavón del Paso Exprés afectó la llegada de turismo al estado.
Consultado vía telefónica, Laurel González dijo que la ocupación hotelera está por debajo a la del año pasado: “sí se ha visto en la primera semana de vacaciones que hay un decremento en cuanto a la afluencia de visitantes al puerto. Nosotros estamos calculando unos 10 puntos menos comparados con el mismo periodo el año pasado”.
Sin embargo dijo que todavía no podría considerarse afectación para la temporada porque el comportamiento del turismo repunta en la siguiente semana.
Reiteró que no hay cancelaciones de reservaciones que se hicieron antes de la temporada, pero reiteró que el accidente del Paso Exprés influyó en la decisión de vacacionistas de descansar en Acapulco.
En lo que va de la semana, los hoteleros han platicado con los turistas que pasaron por las obras de reparación en esa vía que redujeron los carriles a dos, y la mayoría les externó de la tardanza para llegar a su destino. En la semana se han abierto más carriles sin embargo el retraso persiste.
El miércoles 12 de julio, se abrió un socavón en los carriles del Paso Exprés con dirección de sur a norte. En el hundimiento, de ocho metros de diámetro, cayó un automóvil y dos personas que iban en él murieron.
El Paso Exprés en la autopista México-Cuernavaca, es una obra inaugurada el 5 de abril y consiste en una ampliación de cuatro a 10 carriles en 14 kilómetros, y es paso obligado de todos los automovilistas que salen de la Ciudad de México y se dirigen a Acapulco. La inversión fue de 2 mil 213 millones de pesos.
Laurel González aseguró que con la apertura de más carriles se espera que en las próximas semanas de las vacaciones se recuperen los hoteleros.
Para el representante de los hoteleros las semanas “fuertes” inician hoy y la próxima “vienen eventos fuertes y sobre todo entra más gente”.
Los hoteleros han dado facilidades a los visitantes al permitirles registrar su hora de salida más tarde o su hora de llegada más temprano de lo que normalmente se hace. En redes sociales y medios de comunicación han informado del cambio en sus programas.

Sin administración, electricidad ni agua potable, el rastro TIF, señalan ganaderos

 

El representante de la Asociación Ganadera en Acapulco, Miguel Villavicencio Jackson, declaró que el Rastro de Inspección Federal (TIF) no cuenta con servicio de electricidad ni agua potable, y falta que las autoridades estatales y municipales decidan quién va a administrarlo para que comience a funcionar.
Ayer, Villavicencio Jackson declaró que la sequía y la falta de agua afectan a los ganaderos en las zonas de La Providencia y Piedra Imán, porque se agota la alimentación de las vacas y eso ocasiona que baje la producción de leche que además, dijo, “pagan barata”.
Reconoció que hay apoyo del gobierno municipal pero no es suficiente porque son muchos ganaderos, “y por ello tocamos las puertas en otras financieras para que nos apoyen para la engorda del ganado, y la entrada en operación del rastro sería un detonante”.
Explicó que en el rastro, que se construye desde hace más de cinco años en el poblado de El Salto, el equipamiento “se está oxidando, hay que darle mantenimiento nuevamente, es costoso, y no sabemos quién va a absorber los costos”.
Declaró que la empresa TAESA, que instaló el equipo en el rastro, ha dado el apoyo a los ganaderos con capacitación para que el equipo “no se eche a perder”.
Miguel Villavicencio Jackson agregó que hace falta conocer quién “lo va a operar, cómo va operar, cuáles y bajo qué condiciones va a funcionar; nosotros desconocemos quiénes están involucrados; son los tres órdenes de gobierno, federal, estatal y municipal; a nosotros los ganaderos nos incluyen porque somos la parte elemental para el funcionamiento del rastro”.
Aclaró que no critica el avance de la obra, pero “hace falta la electricidad, agua, que son importantes, qué hacemos si no tenemos agua, sino hay electricidad cómo se moverán las máquinas”. Adelantó que prevé que a finales de junio, “de tres a cuatro semanas”, entre en funcionamiento.
“El municipio no se puede retirar del rastro, es nuestra clave en esta zona, y si el municipio se retira y nos deja abandonados no va a operar ese rastro, y debe estar ahí” dijo el ganadero, y abundó que los tres órdenes de gobierno deben estar para que funcione bien.
Villavicencio Jackson explicó que a causa de la sequía no tienen forraje, porque no hay suficiente zacate y se agotan los insumos para la alimentación del ganado. “Con la lluvia, lo que sucede es que todo el pasto que había se pierde, en lo que vuelve a retoñar el forraje nuevo… se tarda de 20 a 30 días y afecta la producción” afirmó.
Contó que otra dificultad a la que se enfrentan es que el litro de leche se vende a 5 pesos, “con eso no solventamos nuestros gastos, hay que pagar a los ordeñadores, a la máquina ordeñadora que requiere combustible y electricidad”.