Jacob Morales Antonio
A días de cumplirse tres meses del impacto del huracán Otis en Acapulco, y luego de la entrega total del dinero para la reconstrucción de sus casas, por parte del gobierno federal, los damnificados de Ciudad Renacimiento informaron que siguen esperando el material de obra porque no llega a las tiendas.
Los damnificados, además, aseguraron que no hay disponibilidad de albañiles, herreros o carpinteros, porque ante la alta demanda no encuentran, y ellos han aumentado el precio de sus servicios.
En un recorrido por la colonia Renacimiento, se observó que en la mayoría de las casas siguen con las láminas dobladas en los techos o alguna estructura de metal, que los fuertes vientos del huracán no alcanzaron a despegar. En algunas casas, las fachadas ya han sido pintadas, pero siguen a la espera del material de construcción y de la disponibilidad de albañiles y ayudantes.
En los contados centros de venta de materiales de construcción y ferreterías ya no se observan largas filas, ni personas aglomeradas, en busca de cemento, tabicón, varilla, alambres, tinacos y láminas, para el techo y otros materiales.
En la fila de espera de los enseres en la Unidad Deportiva Jorge Campos, estaba el señor Isaías Roberto Domínguez, quien indicó que no ha encontrado albañiles y peones disponibles para la reparación de su casa.
Dijo que algunos están primero reconstruyendo sus casas, además de que en las casas materialistas no hay inventarios, entonces, la gran mayoría de sus vecinos ha optado por ir a pagar lo que se necesita y guardar los recibos de compra, y esperar la fecha de entrega entre febrero y marzo. “Yo sí quiero reconstruir mi casa, con el dinero que nos dio el gobierno. No la voy a hacer nueva, pero sí la voy a mejorar, colocarle el techo de lámina”.
El hombre de 66 años dijo que es consciente de que el dinero que se dio como apoyo del gobierno federal se tiene que usar para lo que se destinó, y por ello, lamentó que algunas personas se lo hayan malgastado.
Isaías Roberto se quejó por la falta de peones y por el aumento desmedido de lo que están cobrando por día o por trabajo. Comentó que un albañil, antes del huracán, cobraba entre 400 y 450 pesos por día de trabajo, y ahora piden de 600 y hasta 800 pesos.
Brenda Mazanares Charles, de 40 años, coincidió en que los albañiles y herreros están cobrando muy caro, “te están sacando los ojos”. Dijo que en su casa el techo se le voló, que era de lámina galvanizada y de tejas.
Luego de preguntar por el presupuesto a varios herreros, optó por contratar a unos vecinos que saben trabajar la herrería, y otros que son peones. En total, le van a cobrar 6 mil pesos para colocarle el techo, pero otros le ofrecieron colocarlo por 10 mil pesos, casi el doble de lo que va a pagar.
Por el momento, la mujer sólo pudo sobreponer algunos pedazos de láminas del techo, que cayeron en los tres cuartos que tiene, porque en donde compró el material sigue escaso y le prometieron que se lo entregarán esta semana.
La señora Estela Blancas expresó: “Material no había, hasta ahorita que comienza a haber. La mano de obra, menos, y los pocos que hay han abusado de sus precios”.
La mujer de 67 años indicó que para demostrar que sí usó el primer pago de apoyo que dio el gobierno federal en arreglar su casa, ante el alza de precios de las pinturas y la escasez que había, compró de la más económica.
Dijo que para ella ha sido muy difícil poder salir de su casa para conseguir el material, porque es una persona ostomizada y no puede estar mucho tiempo en movimiento, ni levantar algo pesado, por lo que tuvo que solicitar la ayuda de uno de sus hijos, porque vive sola y cada quien tiene a su familia.
“No hay albañiles, pintores no hay, carpinteros tampoco, que son los que yo hubiera necesitado. Herreros tampoco, he ido a sus casas a buscarlos personalmente, con quienes ya han trabajado en otras ocasiones en la casa, pero no están disponibles y quieren cobrar por día o por un costo total, pero es mayor. Un techo de 6 mil pesos lo subieron a 12 mil pesos, la mano de obra, yo no accedí y voy a esperar un poco de tiempo”.
Rogelia Cervantín Vázquez dijo que “ahora sigue escaso el material y está carísimo”, por eso, ella optó por comprar lo necesario para demostrar a los “Servidores de la Nación” que sí compró el material para arreglar su casa y le entregaron el segundo apoyo.
La señora comentó que algunos de los materiales que han subido de precio son el cemento, que estaban en 150 pesos, y ahora supera los 230 peso por bulto; la varilla pasó de unos 140 a 200 pesos por pieza, por eso “vamos a esperar que pase un poco la gran demanda y que bajen los precios”.
Respecto a los albañiles, dijo que ha cotizado y que por un trabajo pequeño están cobrando 10 mil pesos, que no conviene pagarles por día, porque piden 600 pesos de pago diarios y luego se demoran más días, para cobrar otro poco, “tienen sus mañas”. Indicó que por colocar una loza de un cuarto, de cuatro por cuatro, le estaban cobrando 30 mil pesos más el material.
La señora de 68 años indicó que su casa es de techo de lámina, pero después de Otis no quiere volver a vivir una experiencia similar, así que con todos sus ahorros, más el apoyo que recibió, tratará de hacer un cuarto con techo de loza de concreto, para tener un lugar donde refugiarse en caso de otro huracán.