Ramón Gracida Gómez
Ambientalistas acapulqueños iniciaron un proceso de reforestación el sábado y domingo pasado en el Club de Golf, donde construyeron barricadas naturales para que en la siguiente lluvia finalmente ya se comiencen a sembrar árboles nativos, evitando las especies exóticas.
En la actividad, participaron los grupos Acá Reforestación, Raptor Runners, Vigilantes del Cambio Climático, Boy Scouts y Centro Decorplant, sólo el domingo asistieron 115 activistas del medio ambiente e hicieron 14 retenes.
Estela Jiménez Castañeda, del Centro Decorplant, que produce árboles nativos en peligro de extinción, precisó por teléfono que el sábado se llevó a cabo la actividad de manera exclusiva para los integrantes de los Boy Scouts y al día siguiente fue abierta para el público en general.
“Todavía no se ha plantado nada porque se está esperando hasta la segunda lluvia, ahorita nada más se hicieron como tipo retenes para que cuando llueva, el agua no deslave la tierra, las piedras, y todo eso”.
Son barricadas “naturales con cosas de ahí mismo, troncos, ramas, hojas, de ahí se fueron haciendo los retenes, pero la reforestación se va a hacer después de la segunda lluvia”, puntualizó.
Ya que se haya mojado la tierra, se va a proceder a la plantación de árboles nativos porque “son los que mejor se adaptan al clima, a la fauna y a las condiciones del suelo, o sea, es lo mejor no estar metiendo cosas exóticas; ése es el chiste, hay que conocer cuáles son los árboles nativos”.
Una guía de reforestación del Centro Decorplant explica que las especies nativas se dividen en cuatro grupos: manglar; selva mediana subcaducifolia, en el que está la parota y la ceiba; selva baja caducifolia en el que están el guaje y el ciruelo; y pinar tropical, donde están el encino y el nanche.
El Sur publicó el 10 de abril que, de acuerdo con el presidente de la mesa directiva del Club de Golf, Efrén Leyva Acevedo, el 80 por ciento de los árboles se cayeron tras el paso del huracán Otis, se calcula que fueron unos 5 mil, devastación aún visible desde la avenida Costera, donde se encuentra la entrada principal del club.
En una conferencia de prensa el 29 de abril, Leyva Acevedo afirmó que hay un avance del 80 por ciento en el funcionamiento del inmueble que mide 27 hectáreas, e informó que una asociación civil colocará un vivero con 5 mil plantas en el club, para ayudar a la reforestación del lugar que va a ser declarado área ecológica.
El huracán categoría 5 devastó las principales áreas verdes con las que cuenta Acapulco, como son el parque El Veladero, que sufrió después los incendios forestales, el parque Papagayo que no ha sido abierto al público y en el que el gobierno federal planteó construir un cuartel de la Guardia Nacional y el Club de Golf.
Este domingo se produjo una ligera lluvia en distintos puntos de la ciudad, la temporada empezó formalmente el 15 de mayo y la cual se tiene que aprovechar para reforestar Acapulco, han insistido desde el inicio de la catástrofe distintos ambientalistas locales.
