20 octubre,2018 8:09 am

Marchan familiares y amigos de la maestra asesinada en la Costera para exigir justicia

Increpan a la alcaldesa Adela Román los padres y hermanas de la también sicóloga Itzel Vega y familiares de desaparecidos a quienes ofreció que empeñaba su palabra y su honor por hacer lo que como autoridad municipal le correspondiera.
Acapulco, Guerrero, 20 de octubre de 2018. Vestidos de negro y con un pañuelo violeta en la cabeza o cuello, familiares y amigos de la maestra Itzel Vega Radilla marcharon del Zócalo al Asta Bandera para exigir el esclarecimiento de su asesinato y que cese la violencia.
El contingente que reunió a unas 500 personas al principio, congregó al final de la caminata a unas mil abarcando el carril en sentido Zócalo-Base.
Posteriormente se reunieron a un mitin convocado por feministas y al que acudió en los últimos minutos la alcaldesa Adela Román Ocampo.
La alcaldesa fue increpada por familiares de otras personas desaparecidas y por los padres y hermanas de la también sicóloga Itzel Vega, quien les dijo que empeñaba su palabra y su honor por hacer lo que como autoridad municipal le correspondiera. “No puedo hacer en 19 días lo que en años no han podido”, les expuso a los asistentes, quienes reclamaban a gritos justicia por la desaparición de hombres y mujeres, así como por múltiples asesinatos y delitos sin esclarecer.
Los familiares las personas desaparecidas y asesinadas le pidieron a la alcaldesa ser un enlace con el fiscal general del estado, Jorge Zuriel de los Santos Barrila, para que éste informe sobre los avances de cada uno de los casos y señalaron omisión de algunos servidores públicos.
En respuesta, la alcaldesa Adela Román les dijo a los asistentes que pueden acudir a la Comisión Estatal de Derechos Humanos para denunciar las omisiones en sus casos, luego de que Helena Radilla, la madre de Itzel le informó que presentó pruebas a la Fiscalía para la pronta localización de su hija y la dependencia no hizo nada al respecto.
Los familiares cuestionaron la actuación de las autoridades de la Fiscalía y confesaron sentir temor por algún tipo de represalia.
La marcha y las consignas
El contingente que partió del Zócalo a las 4:30 de la tarde estuvo encabezado por las hermanas Paloma e Ivette de la también sicóloga, y por sus padres María Elena Radilla Méndez y Rogelio Vega Saavedra.
Entre las consignas que rezaban durante el avance del contingente estuvieron las siguientes: “queremos justicia y resultados, justicia, justicia”, “gobierno vendido que agarres al asesino”, “Itzel, descansa que el pueblo se levanta”, “mujeres, alerta exijamos transparencia”, “gobierno asesino, ni una más en el camino”, “Itzel, escucha, el pueblo está en la lucha”, “mujeres unidas, jamás serán vencidas”, “Astudillo renuncia. ¡Ni una más, ni una mas!”, “Itzel, escucha tu llama nos llega al alma”.
Otra consigna frecuentemente repetida fue “denuncia activada, mujer asesinada”, en referencia a la actuación tardía de las autoridades ante el reporte de desaparición de mujeres.
“Alto a la impunidad, ni una asesinada más”, “señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente”, “mujer escucha, únete a la lucha”, “no fue crimen pasional, fue un macho patriarcal”, “jueces y fiscales también son los culpables”, eran otras consignas que más tarde fueron repetidas durante el mitin en el Asta Bandera.
Algunos de los mensajes en las pancartas eran “Esta batalla la ganamos juntas”, “Somos el grito de las que ya no tienen voz”.
En el mitin pasaron lista de las mujeres muertas y desaparecidas registradas, y en algunos casos dijeron su edad y dónde fueron vistas por última vez.
También recordaron el caso de la doctora Adela Rivas Obé, el cual consideraron un parteaguas en la búsqueda de justicia pues un año después del mismo día que fue encontrada, el juez del caso dictó la sentencia contra el feminicida a 38 años de prisión por el crimen.
Los asistentes guardaron un minuto de silencio por todas las víctimas en dos momentos: uno antes de que se expusieran los testimonios de las sobrevivientes de la delincuencia, así como las peticiones de justicia a las autoridades; y en segunda ocasión levantando la mano izquierda con el puño cerrado.
Deploraron que la respuesta ante los feminicidios son las alertas de género y se destacaron los casos de la alumna de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Betsy Ríos Guzmán, el de la maestra Itzel Vega Radilla y el de la doctora Reyna Valenzo.
Exigieron que se detenga la simulación del gobierno estatal y haya seguridad y libertad para las mujeres.
Se escucharon los testimonios de varios de los asistentes y se hizo un altar delimitado con veladoras que formaron una figura en el suelo, en cuyo interior fueron colocadas rosas blancas y zapatos color rojo.
La familia de la maestra
En declaraciones a reporteros antes y después de la marcha, la hermana de la profesora de primaria Paloma Vega y su madre, María Elena Radilla, exigieron resultados al fiscal Jorge Zuriel de los Santos Barrila, y que se modifiquen los protocolos de actuación pues el Ministerio Público no comenzó a investigar sino 72 horas después de que se informara de su ausencia.
La madre acusó que las autoridades ministeriales comenzaron a actuar de forma tardía a pesar de que presentaron elementos para hallar a su hija antes.
La hermana también dijo que aunque el fiscal les proporcionó su número telefónico no precisó una fecha para la entrega de resultados.
La localización sin vida de la docente de 34 años, madre de tres niños y viuda, ocurrió a cuatro días de que la doctora oftalmóloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Reyna Valenzo, fuera asesinada a balazos en la Colonia Progreso en Acapulco, cuando conducía su camioneta.
Paloma Vega aclaró que tanto las autoridades como diversos medios de comunicación señalan a un sospechoso e incluso que hubo “un novio (pero) existe novio alguno, existe una persona que estaba con ella la última vez y nosotros quizás señalamos como sospechoso, pero nosotros no sabemos lo que realmente pasó, esperaremos una respuesta de la Fiscalía, que nos muestre los videos, que nos muestre las evidencias y el avance que han tenido en la carpeta de investigación”.
Durante el mitin, los familiares compartieron una reseña de vida de la profesora de primaria y pidieron no revictimizarla, pensar en los huérfanos y a los hombres a sumarse a las acciones por la igualdad. Ofrecieron respaldo a las familias que han vivido el peregrinar y los procesos burocráticos de un familiar desaparecido.
“Mi hija fue una semilla que dará frutos”, dijo María Elena en tanto que el padre, Rogelio Vega, agradeció la solidaridad de quienes participaron en la marcha y exhortó a denunciar a los agresores aún si se trata de hijos o esposos.
“Quiero convocar a los hombres a que tengamos la conciencia de salir a la calle, de unirnos, porque ellos también tienen hijas y tienen una madre”, expresó el padre de la profesora.
Texto: Karla Galarce Sosa/ Foto: Carlos Alberto Carbajal