Toman normalistas de Ayotzinapa la caseta de Palo Blanco; piden cooperación a conductores

Luis Blancas

Chilpancingo

La mañana de este jueves, estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa tomaron durante media hora la caseta de cobro de Palo Blanco, de la Autopista del Sol, para recaudar fondos y continuar con las movilizaciones por sus 43 compañeros desaparecidos desde hace más de 38 meses.
A las 11:20 de la mañana, un grupo de unos 90 jóvenes tomó la caseta de cobro y pidió cooperación voluntaria a los automovilistas, además colocaron lonas en las que se leía: “Vivos los llevaron, vivos los queremos, nos faltan 43. Ayotzinapa”.
Uno de los normalistas informó que la toma de la caseta de cobro era para recaudar fondos y continuar las movilizaciones por sus 43 compañeros desaparecidos en septiembre de 2014 en Iguala, y apoyar económicamente a los padres de familia de los estudiantes.
Minutos antes de las 12 del día, los estudiantes se retiraron en dos autobuses con dirección a la Normal Rural Raúl Isidro Burgo de Ayotzinapa, en Tixtla.

Piden jubilados estímulos; protestan afuera del acto con el gobernador por del Día del Maestro

Maestros jubilados y pensionados protestaron afuera del Centro de Convenciones Mundo Imperial, cuando el gobernador Héctor Astudillo encabezaba el acto por el Día del Maestro.
Cerca de 70 maestros pidieron que se les pague el estímulo a la jubilación y los seguros de vida pendientes desde el año pasado.
El representante Ricardo Jimón Campos dijo que los jubilados son víctimas de las consecuencias de la reforma educativa, porque debido a esa reforma se vieron obligados a jubilarse.
La protesta también obedeció a la preocupación porque la sección 14 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) anunció la publicación de una próxima convocatoria del estímulo a la jubilación, pues el adeudo también es de 2015 y hay todavía casos de 2014.
Estimó que hay mil 200 jubilados afectados y la participación en la protesta de este lunes era de una comisión de maestros de Acapulco.
Con tres lonas colocadas en las rejas del centro de convenciones, llegaron los maestros a las 8 de la mañana, una hora antes de la recepción a los proferoes que recibieron reconocimientos por el Día del Maestro.
La segunda demanda es la agilización de trámites de pensiones, el cual avanza “lo que sí tenemos problemas es en el pago de nuestros seguros, que esos no tienen discusión porque lo generamos desde el primer día que empezamos a trabajar”. Uno de los seguros, el llamado colectivo, no se les ha entregado. El Pago de Previsión Social (PPS) tampoco se les ha entregado.
La maestra jubilada Guadalupe Eugenio Feliciano dijo que han seguido los protocolos pactados con el gobernador, sin obtener resultado, “sin embargo notamos con mucha tristeza e indignacion, que a pesar de que nos hemos guiado conforme a las recomendaciones  emitidas por ellos, la sección 14 está emitiendo informaciones para que compañeros se sigan jubilando”. Lo que se traduce en el incremento de los adeudos, en todos los rubros, que mantiene el gobierno del estado.
Llamó a los próximos a jubilarse a “que se preparen”, pues la pensión les llegará después de cinco meses.
La representante de los jubilados, dijo que ellos terminaron el trámite de retiro a finales del año pasado, y luego de seis meses siguen sin recibir su pensión.
Minutos antes de las 10 de la mañana, una comisión de jubilados entró a entregar su pliego petitorio al gobernador del estado, para que se dé cumplimiento a las demandas expuestas. Informaron que la próxima semana tentativamente se reunirían en una mesa de trabajo, para desahogar los puntos expuestos.

No reconstruyó las casas el gobierno federal a tres años de un sismo en Petatlán, se quejan damnificados

Brenda Escobar

Zihuatanejo

A tres años del sismo de 7.2 grados en escala de Richter del 18 de abril de 2014, los damnificados de Petatlán lamentaron que el gobierno nunca cumplió la reconstrucción de sus viviendas.
Uno de los damnificados y comerciante de ropa y huaraches, Rafael Abarca Fernández manifestó que son más de 300 familias sólo de la cabecera municipal de Petatlán las que tuvieron afectaciones en sus casas, y que el gobierno federal mediante la entonces secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, prometió que los apoyaría, pero “ni siquiera un grano de arena nos dieron”.
Aseguró que las familias afectadas por el temblor fueron censadas en dos ocasiones por brigadistas de la Secretaría de Desarrollo Social federal (Sedesol) y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), pero nunca cumplieron la reconstrucción de las viviendas.
El movimiento telúrico dejó afectaciones  principalmente en casas de las colonias Centro, Barrio de la Hoja, Emiliano Zapata, Benito Juárez y Vicente Guerrero; así como en comunidades rurales como Juluchuca, Alpuyeque, Chaveta, La Molonga, Coyuquilla Norte, La Barrita.
Este martes, se cumplieron tres años de que ocurrió el sismo, Abarca Fernández aseveró que las casas están ahí, muchas de ellas inhabitables y las familias tuvieron que irse por temor a que las paredes se les vengan encima.
Agregó que el gobierno federal sólo mintió a los afectados, “supimos que en ese entonces hicieron llegar ayuda para la reconstrucción de algunas de las casas pero no fue directamente a los damnificados sino se la dieron al Ayuntamiento, y quienes estaban de gobierno le dieron el apoyo a quienes quisieron, incluso a gente que ni siquiera fue afectada”.
La parroquia San Pedro Apóstol, santuario del Padre Jesús de Petatlán, resultó severamente dañada, principalmente el campanario, el cual fue completamente reparado a los pocos meses luego de la aportación de casi 2 millones de pesos del gobierno el estado, encabezado por el entonces gobernador Ángel Aguirre Rivero, mientras que más de 700 damnificados sólo se quedaron con una calcomanía pegada en la puerta de su casa como prueba de que fueron censadas, pero la ayuda nunca les llegó.