Cuelgan trabajadores una manta en el hospital de Coyuca de Catalán; piden material y medicinas

Trabajadores sindicalizados del hospital regional de Coyuca de Catalán, protestaron este martes con una manta afuera de la institución ante la falta de medicamentos y de equipo de trabajo, además de falta de presupuesto para alimentos de los pacientes y de especialistas.
A las 10 de la mañana salieron los trabajadores y colocaron una manta en la entrada del edificio, en la que señalan sus demandas de mejor presupuesto para tener más medicamento, cubrir el presupuesto para la dieta de los pacientes y también la contratación de médicos especialistas.
El líder sindical, Jorge Ortiz Pineda dijo que tienen más de un año que solicitaron al gobierno presupuesto para solventar diferentes carencias que el año pasado debieron resolverse.
Señalan que no hay material quirúrgico ni medicamento suficiente, y que los mismos pacientes están comprando material como una sutura o un bisturí.
Los familiares de los pacientes tienen que correr a todas las farmacias para conseguir medicamentos porque en el hospital no los tienen, y el problema es que los familiares piensan que la enfermera y el médico son los que están negando el servicio.
Dijo que esperan respuesta del gobierno del estado a su petición, que los directivos y la Secretaría conocen. Señaló que están considerando un paro de labores si no hay respuesta. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Provoca la canícula proliferación de plagas en Coyuca de Catalán y Pungarabato

La temporada de lluvias se interrumpió en la Tierra Caliente hace tres semanas, lo que ha provocado la abundancia de plagas, de las que el gusano cogollero ya comienza a causar afectaciones en los municipios de Coyuca de Catalán y en comunidades de Pungarabato, donde ya se reportan casos.
Ante la entrada de la canícula, las siembras de maíz se ven severamente afectadas en la Tierra Caliente por el aumento de las plagas en los campos, que encarecen las cosechas porque se debe sumar el costo de los insecticidas especiales, que son caros, pues no cualquier químico sirve para combatirlo, se quejan los campesinos.
Varios campesinos en los municipios de Coyuca de Catalán y Pungarabato comenzaron a reportar los daños ante la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), pero todavía no hay una cuantificación oficial de los daños ocasionados por las plagas.
De acuerdo con agrónomos que asesoran a algunos campesinos, uno de los signos claros de la presencia de gusano cogollero es que la hoja de la planta de maíz está comida en diferentes puntos, debido a que este animal comienza a alimentarse de la hoja y poco a poco la va debilitando.
En 2014, la sequía y el gusano cogollero provocaron pérdidas en unas 3 mil hectáreas de terreno en Tierra Caliente. La disminución de las lluvias provoca las condiciones ambientales perfectas para su proliferación.
Los asesores explican que el gusano cogollero selecciona hojas y brotes tiernos, especialmente de los cogollos (brotes) para alimentarse, porque es un masticador del tejido vegetal. En las plántulas puede causar la defoliación completa.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el 16 de julio se declaró oficialmente el ingreso del fenómeno natural conocido como la canícula, que se registra anualmente en algunas regiones de México entre julio y agosto, con una duración de unos 40 días, cuando disminuyen las lluvias y aumentan las temperaturas. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Mueren tres trabajadores mientras limpiaban un pozo artesiano en Changata, Ajuchitlán

Tres personas fallecieron al caer a un pozo artesiano, la tarde de este martes, en la comunidad de Changata, municipio de Ajuchitlán, al parecer mientras limpiaban el pozo que surte de agua al pueblo, como parte de una obra municipal de mantenimiento.
Los muertos fueron identificados como J Guadalupe Valente Gordiano, de 32 años, originario de la comunidad de las Juntas del Río Chiquito, municipio de Coyuca de Catalán; Hulbert Arrizon Valente, de la misma comunidad; y Miguel Ángel Valenzuela Hernández, originario de Amuco de la Reforma, Coyuca de Catalán.
Se reportó que primero sacaron del pozo a Hulbert y a Miguel Ángel, y los llevaron a la clínica de Villa Nicolás donde el Ministerio Público recibió el reporte de que fallecieron y que los familiares fueron a recoger sus cuerpos.
Mientras que a J Guadalupe lo llevaron al hospital regional de Coyuca, pero también llegó muerto.
El Ministerio Público y la Policía Ministerial se encargaron de continuar el trámite para apoyar a los familiares con la documentación de la certificación oficial de las muertes.
Testigos declararon ante el Ministerio Público que los trabajadores estaban limpiando un pozo artesiano de más de 15 metros de profundidad, y usaban una bomba a gasolina, que con el humo que despedía fue acabando con el aire abajo, y que cuando intentaban salir del pozo, uno de los trabajadores resbaló y arrastró en su caída a los otros dos.
Para la limpieza del pozo, el municipio contrató a un ingeniero que trajo sus propios trabajadores para la actividad. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Temen campesinos de Tierra Caliente perder sus cosechas ante la irregularidad de las lluvias

Campesinos de la Tierra Caliente están preocupados porque durante los últimos 15 días disminuyeron las lluvias en la región, y mientras algunos ya sembraron otros tienen listos los campos en espera de que mejore el temporal.
En los últimos 15 días, en la mayor parte de la Tierra Caliente cayó solo una llovizna ligera. Los campos ya muestran la falta de agua, al grado de que los caminos rurales están firmes, sin lodo y sin charcos.
Durante mayo y junio, las lluvias fueron constantes y varios campesinos se animaron a comenzar la siembra en los nueve municipios de la Tierra Caliente.
En un recorrido por zonas de siembra de Coyuca de Catalán y Pungarabato, algunos campesinos llegaron recorrer sus terrenos. No todos sembraron, pero los que ya lo hicieron se ven preocupados por el temporal irregular de lluvias.
La producción de maíz más importante se da en Ajuchitlán del Progreso, Cutzamala, Coyuca de Catalán y Zirándaro; en el resto de la región la cantidad de la siembra es menor.
De acuerdo con la Sagarpa, en la región de la Costa Chica se sembraron 125 mil hectáreas el año pasado, es la zona con mayor superficie sembrada; en la región Centro fueron 76 mil hectáreas; 71 mil hectáreas en la región Costa Grande; en la Tierra Caliente 70 mil hectáreas; en la región Norte 63 mil hectáreas, y la región Montaña 48 mil hectáreas.
En Tierra Caliente, la mayor parte de la siembra del maíz es usada para el autoconsumo en las comunidades, y otra parte como forraje para el ganado, pues esta zona también se considera como de alta producción ganadera.
Actualmente los campos se ven marchitos, a causa de más de 15 días con escasas lluvias y mucha insolación. Otros campos se ven preparados, pero sin siembra, pues los campesinos esperan que en agosto mejore el temporal.
La Secretaría de Protección civil estatal prevé que en Guerrero se forman nubes de tormenta en varios puntos, pero para Tierra Caliente sólo se prevén cielos nublados y algunas lluvias ligeras. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Temen que dañe casas el socavón en Pinzán Morado; piden vecinos que los reubiquen

Unos 20 vecinos de Pinzán Morado, municipio de Coyuca de Catalán, solicitaron al Ayuntamiento que busque la manera de reubicarlos, ante el temor de que se derrumben sus viviendas a causa del socavón que se abrió en calles del Centro del pueblo, y que conduce hasta uno de los túneles de la mina que opera ahí; y también temen sufra daños que el jardín de niños que se ubica cerca de la zona donde se abrió el socavón.
Socorristas de Protección Civil acudieron la semana pasada a inspeccionar la zona, y están haciendo evaluaciones del suelo en el pueblo de Pinzón Morado.
Protección Civil confirmó que el socavón que se abrió en el Centro del pueblo, de unos 5 metros de diámetro, conduce a un túnel de la mina a aproximadamente a 300 metros de profundidad.
La mina de Pinzán Morado se explota desde hace unos 40 años y tiene cinco túneles. El socavón que se abrió conduce al túnel que está más cercano de la superficie, pues se considera que los demás son más profundos, de entre 1 kilómetro y 1.5.
El pueblo de Pinzán Morado se ubica a una hora de recorrido desde la cabecera municipal, en la ruta a Zihuatanejo y tiene unos 600 habitantes, en su mayoría campesino y empleados de la mina. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Se abre un socavón en Pinzán Morado, Coyuca de Catalán; lo atribuyen a túneles de la minería

En pleno centro de la comunidad de Pinzán Morado, municipio de Coyuca de Catalán, se abrió un socavón de más de 5 metros de diámetro y profundidad desconocida, que los vecinos atribuyen a que debajo del pueblo pasan varios túneles de la empresa minera de la misma localidad.
Con las recientes lluvias, un pequeño bache que había en el Centro de Pinzán Morado terminó convirtiéndose en un socavón muy profundo, y vecinos solicitaron la intervención de Protección Civil para determinar el riesgo que representa.
Ante el miedo que provoca el socavón, los pobladores están buscando la oportunidad de evacuar la comunidad mientras expertos de Protección Civil determinan la calidad del suelo.
La comunidad de Pinzán Morado se ubica a una hora de recorrido desde de la cabecera municipal, en la ruta que sale a Zihuatanejo.
En el poblado está una mina, explotada desde hace 40 años. La comunidad tiene una población aproximada de 500 habitantes.
Versiones de los mismos pobladores indican que las excavaciones de la mina encontraron hace varios años un río subterráneo que atraviesan las excavaciones y tienen varios túneles que pasan debajo del pueblo.
Protección Civil ya acudió a la localidad y colocó cintas de protección alrededor de este espacio; sin embargo, todavía no se ha explorado la profundidad del socavón y los motivos por los cuales se dio este hundimiento, por lo cual solicitan que el gobierno del estado intervenga y envíe personal especializado que ayude a determinar los riesgos en los que pudiera estar la población y sus viviendas. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Levantan a líder de Morena en Ajuchitlán; reportan hombres armados en Tlalchapa

En Ajuchitlán reportaron que la líder de Morena, Sara Castro Chamú, fue levantada por hombres armados que la sacaron de su casa la mañana de este domingo, y la liberaron por la tarde, lo que se sumó a los reportes de hombres armados en casillas de la región Tierra Caliente.
Misael Medrano Baza, representante general de Morena, se presentó a las oficinas del distrito electoral federal 01, con sede en Altamirano, para denunciar que la mañana de este domingo hombres armados levantaron a la señora Sara Castro Chamú, quien es una de las líderes de su partido en la comunidad de San Cristóbal municipio de Ajuchitlán.
La comunidad de San Cristóbal se ubica prácticamente a la misma altura de Ajuchitlán pero del otro lado del río Balsas.
Misael Medrano Baza dijo que el hecho enrarece el proceso electoral en la localidad de Ajuchitlán e hizo un llamado para que las autoridades competentes permitan que la gente salga a votar con tranquilidad en esta región.
Sara Castro Chamú fue dirigente municipal del PRD hace 10 años y una de las principales líderes. Fue regidora perredista de la administración pasada y recientemente se sumó a Morena.
A las 2:20 de la tarde, la representante de Morena ante el consejo distrital 01, del Instituto Nacional Electoral (INE), Lidia Hernández Reséndiz, confirmó que la lideresa de Ajuchitlán ya había sido liberada.
Previamente, Lidia Hernández había pedido en el pleno del INE la intervención de las diferentes instancias para que Sara Castro fuera liberada y acusó al PRI de haber ordenado que la levantaran.
El PRI hizo llegar a la sesión del Consejo Distrital 01 en Altamirano, que en la comunidad de Colonia Cuauhtémoc municipio de Tlalchapa, se reportó que hombres armados retiraron a los representantes del PRI en las casillas. Se retiraron ocho representantes de otros partidos y sólo quedó del PRD.
Más tarde se confirmó que en Colonia Cuauhtémoc se estaba realizando la votación normalmente.
En San Miguel Totolapan el PRI denunció que no permitieron la presencia de sus representantes en las casillas en la cabecera municipal.
En Altamirano militantes del PRI decomisaron 15 despensas en un estacionamiento en el centro de la ciudad en el mismo punto donde está instalada la casilla 1957, y que presuntamente eran utilizadas por el licenciado Ramón Mendoza Arce para comprar votos a favor del PRD.
Mendoza es uno de los coordinadores del PRD en el municipio y al momento de la acción aseguró que sólo las tenía guardadas en un vehículo viejo. El hecho ocurrió a las 11 de la mañana de este domingo, en la casilla 1957 del centro de Altamirano. Ahí denunciaron que había gente entrando y saliendo de un estacionamiento privado con despensas, pero que tiene una barda pequeña como de un metro de altura, por lo que desde afuera se pudo observar todo.
Entraron militantes del PRI, y sacaron de una camioneta las despensas, y se las llevaron. Señalaron que estaban usándolas para comprar votos para el PRD.
En otro caso ocurrido en Altamirano, el candidato a regidor del PRD, Nicandro Mojica Alvear, se jaloneó con militantes del PRI, que lo acusaban de que con una señora, tenía una bolsa con dinero comprando votos.
Se encontraban en la escuela primaria Redención Proletaria, en la colonia Esquipulas. Ahí reportaron que se encontró al candidato a regidor en la entrada, con una bolsa de donde sacaba dinero para comprar votos, por lo cual el grupo de vigilancia del PRI, acudió con intenciones de quitarles la bolsa y exhibirlos.
Nicandro le entregó la bolsa a la señora, y cuando dos hombres intentaban quitársela, el candidato se metió en medio y forcejeó con los del PRI, con quienes hubo empujones, pero se contuvieron. Cada quien se retiró sin mayor pleito. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

 

Marchan mil vecinos de Tierra Caliente en Tlapehuala contra robos de la Gendarmería

 

Unos mil vecinos protestaron en Tlapehuala en contra de la Policía Federal división Gendarmería, y los cateos de los agentes que entran a las casas de donde se llevan dinero en efectivo y aparatos electrónicos, además de agredir a quienes consideran sospechosos, para exigirles información.
A las 5 de la tarde, la manifestación en Tlapehuala comenzó a nutrirse cuando se fueron sumando vecinos de Ajuchitlán y de Arcelia, quienes bloquearon la carretera unas tres horas y media, y marcharon al crucero de San Juan Mina, ubicado en la salida en dirección a Arcelia.
Los inconformes intentaron encerrar una patrulla de la Policía Federal de caminos que hacía un recorrido de inspección en el lugar; cuando el chofer trató de dar la vuelta comenzó el primer intento por encerrar la patrulla, pero los agentes lograron escapar.
A unos 500 metros de la manifestación, se habían colocado unas cinco patrullas de la Policía Federal de caminos, pero también de la Gendarmería, para vigilar la protesta.
Entonces, los inconformes a bordo de camionetas llegaron a donde estaban las patrullas, pero los federales volvieron a escapar en medio de una lluvia de piedras.
Las patrullas se alejaron 1 kilómetro, y hubo un tercer intento de alcanzarlos a bordo de un autobús que pasaba por el lugar, pero finalmente los policías se retiraron de Tlapehuala.
La marcha continuó en dirección a San Juan Mina, y en el trayecto se topó con dos camiones con soldados del Ejército, que retornaban a Altamirano; los inconformes corrieron para encerrarlos, y los militares dieron vuelta en el primer retorno, donde prácticamente le echaron los carros encima a la gente para escapar y regresar a Arcelia.
La marcha bloqueó la carretera federal desde las 5 de la tarde hasta casi las 8 y media de la noche.

Los robos afectarán la siembra de maíz, se quejan campesinos

En los pueblos de Villa Nicolás y Hacienda Santa Fe, municipio de Ajuchitlán, así como en la misma cabecera municipal, los policías han robos de mil a 15 mil pesos en diferentes domicilios, pues es la temporada en la que los campesinos juntan dinero para comprar para la siembra.
Los robos de la Gendarmería afectarán la siembra de maíz, afirmó el señor Teodoro Alejandro Félix, quien dijo que además se trajeron varias armas calibre 22, y que calcula que en el municipio decomisaron unas 30 armas de calibre bajo, la mayoría con registro.
“Son para el campo, todo esto forma parte del trabajo del campesino. Hasta las cazuelas se llevaron, las que vieron bonitas. Se llevaron víveres, se llevaron teléfonos, se llevaron gasolina que tenemos en el campo para bombear agua”, se quejó.
Por su parte, el señor José Luis Núñez Martínez, quien se dedica a tapar hoyos en las carreteras pidiendo cooperaciones voluntarias, dijo que, “la Gendarmería llegó y me puso contra el pavimento, dijo que yo era halcón (espía de los grupos de delincuentes), me quitó el teléfono revisó todo, y mientras yo contra el suelo caliente. Me golpearon me torturaron y luego me dejaron libre”, denunció.
Dijo que estaba en San Juan Mina cuando lo agredieron, “me exigían decir a dónde se esconde la delincuencia, pero pues yo qué voy a saber”.
Tambien expresó que, “yo no soy de manifestarme, no me gusta, pero cuando me enteré de esto aquí me vine”, dijo el inconforme, quien marchó vendado de la cabeza con una herida cortante que le provocaron los policías, dijo.
Las armas, dinero y artículos decomisados por la Gendarmería, no han sido puestos a disposición del Ministerio Público, para justificar las acciones emprendidas en estos municipios.

 

Cierra la Pepsi Cola sus operaciones en Altamirano ante la inseguridad y la violencia

A causa de la violencia y la falta de garantías de seguridad, la embotelladora Pepsi Cola en Ciudad Altamirano, cerró actividades, informó ayer la empresa Grupo GEPP.
Asimismo, una distribuidora de Grupo Bimbo podría encontrarse en la misma situación, informó vía telefónica el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Chilpancingo, Joel Moreno Témelo.
La empresa Pepsi Cola, ubicada en la glorieta de las Américas, en el centro de la cabecera municipal de Pungarabato, se estableció como depósito en 1980 y cubría los nueve municipios de la región y de San Lucas, Michoacán; unos 50 trabajadores laboraban en la embotelladora que cerró actividades el pasado martes.
En un comunicado a clientes y consumidores de Ciudad Altamirano, la empresa anuncia: “Grupo GEPP informa a sus Clientes y Consumidores sobre el cierre temporal de las operaciones comerciales del centro de distribución directa de Ciudad Altamirano, Estado de Guerrero, al no estar presentes las condiciones requeridas para la continuidad de la distribución de su portafolio de productos al mercado”.
Antes, el 27 de marzo se informó que, después de 40 años de operación en la región, la Coca Cola cerró por completo debido a la violencia, los ataques a balazos, robo de vehículos, y trabajadores heridos y secuestrados.
En declaraciones telefónicas, el empresario Moreno Témelo informó que “ya no sólo estamos preocupados, estamos consternados porque los empresarios vemos que cada día la Policía Federal no ha podido contener la ola de violencia en la zona de Tierra Caliente”.
Manifestó que no sabe si falla la estrategia de seguridad de la policía o si no se aplica, y llamó a las autoridades federales a “que apliquen el Estado de derecho”.
El presidente de la Coparmex destacó que es la segunda empresa “importante” de la región que se va por falta de seguridad, lo que repercute en la economía y en los empleos, “(los empresarios) no queremos que esto se vuelva como una enfermedad que se vaya extendiendo en el estado”.
Moreno Témelo informó que las grandes empresas son “asediadas” por la delincuencia organizada, por lo que han tenido que cerrar y huir de la zona, “debe de ser algo muy fuerte lo que les pasó, si las grandes empresas cierran, qué se esperan los pequeños negocios”, cuestionó.
Dijo que la empresa Pepsi Cola publicó un pronunciamiento sobre las condiciones desfavorables para permanecer en la zona, “fue todo lo que informaron”, dijo el presidente de la Coparmex, y destacó que, “nos comentan que hay más empresas, en este caso una distribuidora de Bimbo, que están con el mismo tema de cerrar, la mayoría son empresas que tienen reparto son los que padecen el problema”.
Reiteró que la estrategia que implementó el gobierno federal no está funcionando, porque a pesar de que hay marinos en algunos retenes en la carretera, no se ha visto una disminución de la violencia. (María Avilez Rodríguez / Chilpancingo).

 

Intentan desalojo de colonos para instalar un cuartel en Teloloapan; irrumpen militares en casas de Tlapehuala

 

Pobladores de la colonia La Mohonera, de la cabecera municipal de Teloloapan, denunciaron ayer que unos 200 policías antimotines, policías ministeriales y soldados armados, así como funcionarios del gobierno estatal intentaron desalojar a más de 80 familias de este asentamiento sin una orden judicial, ya que en la zona se construyen las instalaciones del cuartel del 41 Batallón de Infantería.
Por separado, vecinos de la comunidad de San Juan Mina, municipio de Tlapehuala, denunciaron que la madrugada de ayer, gendarmes y soldados del Ejército ingresaron por la fuerza a catear sus casas y robaron dinero y diversos artículos.
Un vecino de La Mohonera, Cristino Bahena Salgado denunció, vía telefónica, que ellos tienen constancias de propiedad de esos predios, que son usados como parcelas de cultivo de maíz hace más de 17 años, y que durante el gobierno perredista de Ignacio de Jesús Valladares Salgado y Ángel Aguirre Rivero, se falsificaron las escrituras para ceder los terrenos a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En un video que los afectados compartieron con el reportero, se ve a los antimotines con los escudos de la policía del estado y toletes, también se ve a otros policías, al parecer ministeriales, cubiertos del rostro, y a soldados del Ejército armados.
En la grabación de uno de los vecinos se alcanza a escuchar cómo los pobladores, entre ellos mujeres, reclaman a los policías y soldados que, “así deberán de actuar en contra de los delincuentes que agredieron a los estudiantes de Ayotzinapa, allá sí se necesitan armas para pelear con los delincuentes y los asesinos de los estudiantes de Ayotzinapa y encontrar a los culpables, no con la gente humilde, los campesinos, vienen a hacer sus ‘panchos’, allá vallan a hacerlos y busquen a aquellas personas”.
Cristino Bahena denunció que, la mañana de ayer llegaron unos 200 antimotines y después de las 3 de la tarde empezaron a avanzar hacia ellos de una forma intimidatoria.
Señaló que el gobierno municipal le cedió parte de esos terrenos a la Sedena para la construcción del cuartel, que el gobierno sacó una escritura “falsa” de la propiedad de ese predio en 2012, pese a que ellos tienen constancias de propiedad desde hace 17 años. Precisó que esas tierras son ejidales y las utilizan para la siembra de maíz, y que de hecho empezaron a preparar las tierras para este ciclo agrícola.
Puntualizó que ellos no están en contra de que se construya el Batallón en esa zona, “sino al contrario, pero que respeten nuestro trabajo y nuestras tierras”.
Comentó que en ese asentamiento viven 140 familias, pero las afectadas directamente son unas 80. El predio donde se construye el cuartel militar está en la carretera Teloloapan-Apaxtla, a unos 5 kilómetros de la carretera federal Iguala-Ciudad Altamirano, y en el área en disputa se construye una barda.
Dijo que en el gobierno de Ignacio Valladares se compraron casi 14 hectáreas del terreno que después se donaron a la Sedena, pero que ahora pretenden invadir otras 15 hectáreas del predio y los pretenden desalojar sin una orden judicial y con el uso de la fuerza pública.
Señaló que las autoridades han ofrecido reubicar a las familias, pero en un terreno “más feo” y pedregoso, que no les conviene, y declaró que ayer por la tarde se dialogó sin que se diera ninguna confrontación, y después se retiraron del lugar los antimotines.
Advirtió que ellos defenderán sus tierras hasta las últimas consecuencias, y responsabilizó a las autoridades estatales y militares de lo que llegue a suceder; dijo que, de ser necesario convocarán a vecinos de otras colonias de Teloloapan para defender sus terrenos, y que el ofrecimiento de reubicación que les dan es en un predio de tres hectáreas, lo que rechazan, y exigen la presencia del ex alcalde, Ignacio de Jesús Valladares, para que aclare la situación.
En el video se alcanza a ver al Subsecretario de Asuntos Agrarios del gobierno estatal, Fernando Jaimes Ferrel.
En hechos separados, vecinos de la comunidad de San Juan Mina, municipio de Tlapehuala, denunciaron que la madrugada de este miércoles gendarmes y soldados del Ejército irrumpieron en sus casas para hacer cateos y terminaron robándose dinero en efectivo y diversos artículos que encontraron.
Frente al centro de salud de San Juan Mina, vecinos reportaron que en dos viviendas se metió la gendarmería reclamando que tenían reportes de que ahí había mariguana escondida, y exigiendo a los dueños que la entregaran.
En una de las viviendas estaba una pareja con una niña de unos nueve años de edad, a quienes amenazaron y apuntaron con rifles y pidiendo que entregaran la droga.
La familia reportó que los gendarmes encontraron sobre la mesa una bolsa llena de hojas secas y semilla de hierbabuena, que la señora siembra, y que mostró en el patio el lugar donde tiene sembrada la planta, pero que los gendarmes insistieron en que era mariguana.
Tiraron muebles, ropa, camas, y en el cateo se llevaron el dinero en efectivo que ahí había.
“Eran sólo mil pesos que tenía para la semana. Mi esposo es albañil y eso tenía guardado”, dijo la mujer entre lágrimas. “Tenemos miedo de presentar denuncia, nos amenazaron y tenemos miedo de que vayan a volver. Si nosotros anduviéramos en cosas malas, no tendríamos así la casa, de humilde”, dijo la mujer.
Al fondo, la vivienda se conecta con otra casa. En donde rompieron una cama en la búsqueda de diversos artículos. Ahí reportan el robo de un celular y unas bocinas. El dueño dice que se dedica a la venta de agua, y que a la hora del cateo no estaba en su casa.
La localidad de San Juan Mina está muy pegada a Tlapehuala, y en la ruta que conduce a pueblos del río Balsas que pertenecen al municipio de Ajuchitlán.
En San Jerónimo, municipio de Ajuchitlán, ubicado a 5 kilómetros de San Juan Mina, también reportaron la incursión de la Gendarmería, pero también reportaron la presencia de una patrulla del ejército. Ahí señalaron que, alrededor de las 11 de la noche llegaron buscando a hombres armados en un rancho abandonado.
Amenazaron a los vecinos de un rancho abandonado, para exigirles que les dijeran dónde estaban los hombres.
“Nos apuntaron a toda la familia, somos cuatro, tenemos una niña en casa y así con el rifle se metieron a la casa. Se llevaron como 12 mil pesos que teníamos, se llevaron unos cartuchos de un rifle 22, tenemos una escopeta y se la querían llevar, pero está muy vieja y la dejaron. Luego escuchamos disparos y se fueron”, indicaron.
“Sólo pedimos al gobierno que no venga a robar, si vienen contra alguien, vayan contra ellos, pero por qué se meten a las casas a robar, eso no está bien”, expresó uno de los inconformes.
En el rancho se observó una camioneta estacionada; de acuerdo con los vecinos, el dueño desapareció hace varios años y el lugar está solo. A la camioneta le rompieron los vidrios y había un cartucho percutido a un costado. Luego se fueron del lugar.

Reportan decomiso de droga y un vehículo en Tlapehuala

La Gendarmería puso a disposición del Ministerio Público federal, con sede en Altamirano, una camioneta con reporte de robo, 5 kilos de mariguana y una moto, decomisados en el municipio de Tlapehuala.
Informes policíacos señalan que aproximadamente a las 10 de la mañana, la Gendarmería puso a disposición una camioneta en la que señalan que llevaban un cargamento de 5 kilos de mariguana en una bolsa.
También pusieron a disposición una moto con reporte de robo, tipo Itálica. No se reportaron detenidos, ni se pusieron a disposición dinero, armas o teléfonos.
Los hechos ocurrieron en el municipio de Tlapehuala, donde reportaron la presencia de la Gendarmería y el Ejército desde las 10 de la noche en la localidad de San Juan Mina y en San Jerónimo, municipio de Ajuchitlán.