Retira Copriseg los sellos de clausura de cuatro áreas del hospital en Zihuatanejo, informan

Brenda Escobar

Zihuatanejo

Trabajadores del Hospital IMSS-Bienestar Bernardo Sepúlveda Gutiérrez, en Zihuatanejo, dieron a conocer que este jueves representantes de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Guerrero (Copriseg) retiraron los sellos de clausura que colocaron en cuatro espacios de ese nosocomio y por ello hoy se normalizaron los servicios.
El jueves de la semana pasada, la Copriseg y la Cofepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) clausuraron los dos quirófanos que tiene el hospital, así como los laboratorios de análisis clínicos y de rayos X, además del centro de colecta y transfusión sanguínea hospitalaria como medida de seguridad sanitaria ante el probable caso de contagio de VIH a una paciente a través de una transfusión sanguínea, pero después se aclaró que el donante dio negativo a la prueba.
El martes de esta semana, trabajadores del hospital denunciaron que debido a esta medida que consideraron como extrema por parte de las autoridades, afectaba de manera directa a la población debido a que los familiares de los pacientes hospitalizados costeaban los costos de estudios clínicos en establecimientos particulares porque los laboratorios del nosocomio permanecían clausurados.
Agregaron también que no tampoco recibían a personas heridas o atropelladas que necesitaran una cirugía, ni a mujeres embarazadas en labor de parto porque no tenían manera de atenderlas ni mucho menos de transfundirles sangre en caso de que llegaran a necesitar, como ocurrió el domingo 26, cuando una embarazada sufrió una hemorragia y las autoridades enviaron plaquetas a bordo de un helicóptero.
Los trabajadores advirtieron que, si las autoridades mantenían clausuradas las áreas, podrían parar labores y cerrar el hospital por considerar que los principales afectados son los usuarios al no recibir la atención médica adecuada debido a que no dejo de funcionar “el corazón del hospital”.
Ayer jueves, trabajadores del nosocomio informaron que muy temprano llegaron representantes de la Copriseg y quitaron los sellos. Una de las trabajadoras comentó que sólo les dijeron que “iban a retirarlos y que ya podíamos utilizarlos, acción que nosotros como trabajadores agradecemos porque prácticamente los usuarios del hospital ya tenían una semana haciendo gastos extraordinarios para poder recuperar su salud”.
A pregunta, la trabajadora comentó que todas las cirugías que estaban programadas antes al 23 de noviembre, que fue cuando se clausuraron las áreas, se reprogramaron a partir de este jueves, “lo bueno de todo esto es que ya hemos regresado a la normalidad”.

Afecta a usuarios clausura a tres áreas del hospital en Zihuatanejo, denuncian trabajadores

Brenda Escobar

Zihuatanejo

Trabajadores del Hospital IMSS-Bienestar Zihuatanejo Bernardo Sepúlveda Gutiérrez, denunciaron que debido a que algunas áreas de este nosocomio fueron clausuradas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Guerrero (Copriseg), “quienes están padeciendo son los usuarios, sobre todo las mujeres embarazadas porque están clausurados los quirófanos”.
El jueves pasado, los trabajadores denunciaron que Cofepris y Copriseg clausuraron tres áreas del hospital como medida de seguridad sanitaria ante el probable caso de contagio de VIH a una paciente a través de una transfusión sanguínea.
Ayer, una trabajadora dijo que se “está afectando a la población, eso no lo ven las autoridades, porque desde el jueves de la semana pasada están clausurados los dos quirófanos que tenemos en el hospital, los rayos X, el laboratorio de análisis clínicos y el centro de colecta y transfusión sanguínea hospitalaria”.
Señaló que “primero se dijo que se había clausurado porque se había puesto sangre contaminada con VIH a una mujer que vino a parir aquí a su hijo, pero resulta que ya se comprobó que no es verdad, que a la persona que donó la sangre se le han hecho varios análisis para determinar si es positivo al VIH y todas las pruebas han salido negativas y eso lo sabe la misma paciente a la que se le pusieron los dos litros de sangre”.
Agregó que pese a eso, las áreas mencionadas “siguen clausuradas, ahora con otros pretextos que no tiene caso mencionarlos pero que son pretextos que sólo están perjudicando a la población porque no se están haciendo análisis de laboratorio ni de rayos X, esos gastos los están absorbiendo los familiares de los pacientes hospitalizados”.
Otro trabajador aseveró que hay preocupación principalmente porque los dos quirófanos con los que cuenta el hospital están clausurados, “no estamos haciendo ninguna intervención quirúrgica, ninguna, pero le voy a mencionar que tampoco estamos recibiendo a las mujeres embarazadas porque no tenemos dónde o cómo atenderlas para que den a luz”.
“Tan sólo el domingo 26, se presentó una embarazada, tuvo una hemorragia y nos tocó estabilizarla y solicitar a las autoridades que nos apoyaran con plaquetas, las cuales nos trajeron en helicóptero, pero en vez de traernos las plaquetas, se hubieran llevado a la paciente en el helicóptero a un hospital que sí pudiera recibirla y atenderla, pero no lo hicieron así, díganos usted si eso no es una incongruencia”.
Continuó que lo que más les preocupa son las mujeres embarazadas en labor de parto, y más si éste se le cmplica y es de escasos recursos económicos “¿dónde se va a atender si no tiene la posibilidad de pagar el servicio médico?”.
Advirtió que si la situación continúa, están viendo la posibilidad de parar labores y cerrar el hospital, “porque no tiene caso que las áreas más esenciales como los laboratorios de análisis clínicos, de rayos X y el banco de sangre, los quirófanos estén clausurados si son el corazón del hospital; nosotros podemos estar ahí afuera de nuestra área de trabajo sin trabajar, total, nos están pagando, pero qué caso tiene si es la población la que está siendo afectada”, acotó.

 

Portarán verificadores de la Copriseg cámaras cuando realicen inspecciones

El comisionado Pablo Navarrete Candelario y la secretaria de Salud Aidé Ibarez Castro en consulta ayer Foto: Jessica Torres Barrera

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El titular de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del estado de Guerrero (Copriseg), Pablo Navarrete Candelario, informó que verificadores portarán cámaras de solapa en sus chalecos durante la verificación de controles sanitarios en restaurantes, farmacias, consultorios y hospitales privados, como parte de la Estrategia Nacional de Buen Gobierno, que se formalizó ayer en Guerrero
En entrevista, el comisionado indicó que en una primera etapa se adquirieron 20 cámaras por un costo de 20 mil pesos, para la verificación en las ciudades más pobladas, por transparencia y para evitar actos de corrupción.
En un boletín de prensa de la Secretaría de Salud Guerrero, indicó que serán 70 equipos de grabación para las siete coordinaciones regionales de Cofepris, a partir de enero.
El acto protocolario en un salón del hotel Holiday Inn, de la capital de estado, suscribieron la Estrategia Nacional de Buen Gobierno para fortalecer la transparencia en el servicio público de control y regulación sanitaria, la Secretaría de Salud Guerrero, la Copriseg y la Secretaría de Contraloría y Trasparencia y la Secretaría Ejecutiva del Sistema Estatal Anticorrupción.
En el acto, la secretaria de Salud, Aidé Ibarez Castro, expresó que la regulación sanitariamente “es una gran labor humanitaria, siempre con la visión de la mejora continua”.
De Copriseg, Navarrete Candelario explicó que la Estrategia Nacional de Buen Gobierno incorpora la realización de diversas acciones encaminadas a fortalecer la transparencia en el servicio público de control y regulación sanitaria, como de fortalecer a través de campañas de difusión los procesos de trámites, costos de los mismos, los derechos de los establecimientos al momento de recibir una visita de control sanitario en todo momento, el servicio a los usuarios.
Detalló que la estrategia contempla que se incorpore al personal verificador, cámaras de videograbación de solapa durante la verificación sanitaria, que estarán en funcionamiento dentro de los inmuebles particulares.
Además, de difusión, capacitación, supervisión y vinculación con los diferentes sectores para fortalecer la transparencia y la integridad en el servicio público de control sanitario en la entidad.
Inicialmente se preveía la asistencia de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, pero al mismo tiempo protestaban normalistas de Ayotzinapa en las calles de la ciudad a 11 años de desalojo a balazos de estudiantes en la Autopista del Sol, al sur de la capital.
En entrevista, Navarrete Candelario explicó la cámara será un mecanismo para la transparencia del servicio público, y para evitar quejas por presuntos sobornos a empresarios o a los funcionarios, pero no hay denuncias al respecto, aclaró.
No precisó con exactitud el número de verificadores en el estado, solo detalló hay 10 en Tierra Caliente, y como 20 la Norte, con sede en Iguala, a parte del área administrativa.
“Como dijo la compañera, todas las verificaciones será grabadas, para evitar, una, que a veces son agredidos, a veces vienen demandas de que les pidieron dinero cuando no es así, no tenemos ninguna demanda formal”.
Aclaró que cuando haya una transgresión a la norma sanitaria, las sanciones van de amonestaciones hasta el cierre el establecimiento, luego de obtener los resultados de laboratorio, o de inmediato si el verificador ve un riesgo a la salud.
Sobre la feria de navidad y año nuevo de Chilpancingo, que inicia con el recorrido del pendón el próximo domingo, y que se realizará en medio de una obra en remodelación, adelantó que pronto se reunirá con el director de Salud municipal, Cipriano Gutiérrez Niño, para revisar la estrategia de verificación, no solo en los locales de la feria, una vez que se haya instalado, sino de la capital.
Por la Dirección Ejecutiva dependiente de la Coordinación General de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), acudió a la firma del programa de la estrategia, Oscar Ángel Morales Bustamante. Por el Sistema Estatal de Anticorrupción, la secretaria técnica, Itzel Figueroa Salazar.

 

Rechazan la respuesta del gobierno de que no hay riesgos de salud por contaminación del Balsas

 

La comisión de autoridades agrarias y municipales de los pueblos del Alto Balsas que denunciaron la contaminación del río, rechazó ayer la respuesta que dieron al respecto dependencias federales.
Guillermo Álvarez Nicanor, vecino de la comunidad de San Miguel Tecuiciapan, municipio de Tepecoacuilco, dijo que la invitación está abierta para que los funcionarios de las dependencia vayan a bañarse y a consumir pescados del río, si están seguros de que el agua no está contaminada. Además aseguró que sí hay vecinos que han enfermado, sobre todo de la piel, por utilizar el agua.
El martes, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG) y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Guerrero (Copriseg), informaron en un boletín que, de acuerdo con los estudios aplicados, “no se observaron daños a la salud por causas asociadas al agua del río Mezcala, y ninguno de los parámetros determinados en los estudios realizados resulta nocivo para la vida acuática o la salud humana”.
Además, recomendaron mantener la cloración en los sistemas formales de abastecimiento de agua, que deberá hacerse en los tanques de almacenamiento, así como dar tratamiento de desinfección a nivel intradomiciliario, hirviendo el agua acarreada de los manantiales.
Álvarez insistió en que los representantes de las dependencias, “nunca nos informaron qué fue lo que provocó el cambio de color del agua, que es lo que queremos saber; ellos mismos reconocen que algo vertieron en el río, algo que dicen que ni ellos saben, cuando hay un organismo que depende de la Conagua y que está para cuidar la cuenca del Balsas, lo que indica que no está haciendo nada”, se quejó.
Dijo que les confirmaron que hay elementos químicos contaminantes del río, pero que están dentro de los parámetros normales y no dañan a la salud, “¿qué esperan, que se agregue un milímetro para que la gente se empiece a morir y entonces empiecen a preocuparse?”, cuestionó.
Asimismo, denunció que si los representantes de los pueblos afectados no hubieran hecho la denuncia, los funcionarios de esas dependencias no hubieran intervenido.

 

Demuestran estudios que no afecta la salud la contaminación del río Balsas, insiste el gobierno

La Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG) y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Guerrero (Copriseg), informaron que, “no se observaron daños a la salud por causas asociadas al agua del río Balsas y ninguno de los parámetros determinados en los estudios” implica riesgo, “para la vida acuática o la salud humana”.
Luego de una reunión el lunes, de representantes de estas dependencias federales y estatales con autoridades municipales y agrarias de los pueblos del alto Balsas, quienes el 15 de marzo denunciaron la contaminación del río que cambió de color azul a verde, las dependencias difundieron este martes un boletín conjunto en el que aseguraron que entregaron los resultados del estudio a los representantes de los pueblos.
“En forma colegiada, la Secretaría de Salud, la CONAGUA, la CAPASEG y la Copriseg, dieron a conocer el Informe de acciones y estudios realizados en la cuenca del Río Balsas (Mezcala)”, dice el boletín.
Agrega que, ante los comisariados ejidales de las comunidades ubicadas en los márgenes del río, en una reunión en las oficinas centrales de la Secretaría de Salud, con la presencia de su titular, Carlos de la Peña Pintos; del titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales del estado (Semaren), Alan Ramírez Hernández; y funcionarios de las dependencias, les dieron a conocer las conclusiones y recomendaciones.
En el boletín se informó que “no se observaron daños a la salud por causas asociadas al agua del río Mezcala”.
Asimismo, informan que las recomendaciones son mantener la cloración en los sistemas formales de abastecimiento de agua, en los tanques de almacenamiento. Asimismo, desinfectar el agua en las casas, hirviendo el agua que se acarrea de los manantiales.
Recomiendan establecer convenios con Conagua, Ssa, CAPASEG y municipios, para garantizar el suministro de cloro a los sistemas y el monitoreo permanente de la calidad del agua, así como mantener el Fomento de los Seis Pasos de Salud con Prevención, a través de las unidades de salud, y acordar con los municipios de la cuenca del alto Balsas, acciones para establecer sistemas de tratamiento y eliminar las descargas directas al río.