Mandos de SSP están coludidos con la delincuencia, señalan en la sierra

Habitantes de comunidades de la sierra de Petatlán, Tecpan de Galeana y Coyuca de Catalán en la conferencia de prensa en la comisaría ejidal de Santa Rosa de Lima Foto: Brenda Escobar

Brenda Escobar y redacción

Santa Rosa / Chilpancingo

Comisarios y comisariados y habitantes de 21 comunidades de la sierra oriente de Petatlán que colindan con poblados de la sierra poniente de Tecpan de Galeana y con localidades de la sierra de Coyuca de Catalán, exigieron que el gobierno federal atienda el problema de inseguridad y violencia que genera un grupo de la delincuencia organizada que mantiene azolada esa región desde el 10 de diciembre pasado.
Ayer martes, unas 60 personas provenientes de comunidades de la sierra de los municipios mencionados, participaron en una conferencia de prensa que dieron comisarios municipales y comisariados ejidales en la casa ejidal de Santa Rosa de Lima, en Tecpan, que hicieron pública su demanda de seguridad y pavimentación de caminos en esa zona.
Por otra parte, a raíz de lo ocurrido el sábado en la localidad El Parotal, donde hubo tres civiles muertos junto con dos policías estatales, uno de ellos director de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Policía Estatal, capitán de la Marina Jaime Téllez Ruiz, además de 32 policías estatales desarmados y retenidos, y del enfrentamiento de ayer entre civiles en Santa Rosa, el gobierno estableció una Base de Operaciones Mixtas en la entrada a esta comunidad, donde militares, policías estatales y ministeriales, así como efectivos de la Guardia Nacional, resguardan el lugar.
Los asistentes a la conferencia que dieron los comisarios municipales y comisariados de esa región, llegaron de las comunidades Arroyo Seco, La Lajita, Arroyo Verde, El Palomar, El Barrio, El Parotal, Las Mesas, El Camarón, El Mameyal y Corrales del municipio de Petatlán; de La Florida, El Porvenir, La Ola y Santa Rosa de Lima, de Tecpan de Galeana y San Antonio Texas, Santa Clara, el Crucero de San Antonio, El Aguacate y El Durazno, de Coyuca de Catalán.
Ahí, en la comisaría ejidal, los comisarios municipales fueron haciendo uso del micrófono para expresar su sentir respecto al clima de violencia e inseguridad que prevalece en esa parte de la Sierra provocada por integrantes de un grupo de la delincuencia organizada, en alusión a La Familia Michoacana, pero en ningún momento alguien pronunció este nombre.
En la conferencia de pensa presentaron videos de lo ocurrido el sábado en El Parotal; en uno aparece una comandanta de la Policía Estatal, Blanca Estela N., que ante la cámara declara que el sábado ella fue a recoger en el hotel Fiesta Americana de Acapulco a uno de los civiles que después fue asesinado en esa comunidad de la sierra de Petatlán. También presentaron videos donde se muestra que fueron alterados con cinta negra los números de las patrullas de la Policía Estatal en las que llegaron los efectivos estatales y civiles presuntaente de la Familia Michoacana a El Parotal.
Habló el presidente del Comité de Caminos de la Costa Grande y Tierra Caliente, Víctor Espino Cortés, quien urgió al gobierno federal a que actúe, de lo contrario, “no vamos a poder trabajar, o nos vamos a defender y no vamos a poder trabajar tampoco, desde que pasó lo de El Durazno el 10 de diciembre, yo saqué la gente que tenía ahí trabajando, tengo 2 mil árboles de aguacate, creo que muchos de ustedes ya lo saben, están abandonados”.
Dijo que los que estaban ahí reunidos, “es para dar a conocer al gobierno que nos urgen las tres bases para poder trabajar y producir lo que todos comemos en las ciudades; una de dos, nos vamos a dedicar a defendernos o no vamos a poder trabajar tampoco, nos urgen esas bases, urge para que los pueblos puedan tratar de avanzar un poquito más y poder siquiera ir a darle la vuelta a las vacas, hacer los mandaditos que tenemos todos”.
“La segunda, darle a conocer al gobierno que los pueblos, con lo que tengamos, con resorteras o con lo que haya, los pueblos se van a defender, que no les caiga de raro si llegan a un pueblo y encuentran a alguien por ahí con un fierrito porque no tenemos otra alternativa, que acudan y hagan su trabajo como gobierno”.
Continuó, “y tercero, por ahí vinieron y dieron a conocer una información la Fiscalía del Estado que yo creo que es una mentira y de eso hay pruebas, lo que yo he escuchado es que hay pruebas, hay videos de que esas cosas realmente no pasaron como están diciendo los mandos y quisiéramos decirle a la gobernadora Evelyn que no estamos en contra de ella, somos guerrerenses también, somos sus amigos y somos su aliados, pero estamos cansados, que le ponga atención a sus mandos, están corrompidos y se le está demostrando”.
Dijo que le van a mostrar más pruebas de que hay mandos y elementos dentro de la Secretaría de Seguridad Pública del estado que están involucrados con la delincuencia organizada, “para que ponga atención”.
Más adelante, comentó que en su momento, los pobladores de Santa Rosa hablaron con las familias que viven en esa localidad y que presuntamente están coludidas con el grupo de la delincuencia organizada al que se enfrentaron el lunes de esta semana, para pedirles que no se involucraran “para que esto no pasara, desgraciadamente, hay gente que siempre lo he dicho, esta guerra es de la gente de trabajo con la gente que no le gusta trabajar”.
“Esa el verdadero problema que hay, que ya no le gusta trabajar a la gente, que está caliente el sol a lo mejor, que es más fácil ir y quitarle al otro lo poquito que tiene, desgraciadamente este es un cáncer que está pasando en todo el país y en el mundo, el dios del mundo ahorita es el dinero, los gobiernos están corruptos, todo el mundo está sobre el dinero, ya no hay respeto, ya no hay honor, ya no hay justicia, ya no hay nada”.
Aseveró que este clima de inseguridad y violencia “se va a acabar hasta que los pueblos nos organicemos, qué está pasando en Zihuatanejo, en Acapulco, cómo es posible, ¿acaso no sabe realmente el gobierno qué es lo que está pasando, no se los matan ahí en los pies?, ¿cuántos policías no hay involucrados?, ¿cómo es posible que no vean esas cosas que están pasando ahí?, pues es simple, están corrompidos o son los que están realmente a la gente”.
Pidió a los habitantes de todos los pueblos de esa zona que “pongan atención a sus hijos, a sus familias, ya no se presten, si ven algo, denúncienlo, si no le tienen confianza al policía que está al pie de ellos pues hay otros números a los que pueden hablar, ya no hay que callar, tenemos que hacer un frente común contra la delincuencia, ya no podemos aguantar más, tenemos este problema, ya nos tocó a nosotros, hay que enfrentarlo por todos lados, ¿o quieren que sus hijos sigan con estos problemas que tenemos nosotros?, yo al menos no, estoy dispuesto a darle hasta donde sea, pero que este cáncer ya termine”.

Exigen tres Bases de Operaciones Mixtas

Enseguida, el comisario municipal de Santa Rosa, Guillermo Salas Guillén, pidió a los presentes a que se animaran a hablar, “si no es ahorita, cuándo, al rato hay otro movimiento de miedo y vamos a estar todos escondidos”.
La comisaria municipal de Arroyo Verde, María del Carmen Salas Orozco, criticó que la situación de violencia que están viviendo en todas esas comunidades debe llevarse hasta el gobierno federal, “porque a nivel estado, al contrario, en vez de apoyarnos, el gobierno nos ha estado dañando y perjudicando nuestros hogares y no, se trata de defendernos y si no nos van a apoyar, nos va a tocar a nosotros mismos buscar la forma de cómo defendernos”.
El comisario municipal de La Lajita, consideró injusto darle la mitad del dinero que ganan “a otras personas, pues no; hay que defender nuestro pueblo, nuestra familia, los hijos y de la gobernadora, de su gobierno que se presta a cosas corruptas, queremos un gobierno de justicia, de paz, queremos tranquilidad para las comunidades de esta ruta, necesitamos un gobierno que sea de justicia”.
Luego, habló el comisario de El Parotal, Francisco García, para pedir ayuda al gobierno federal, porque en su localidad ya no confían en el gobierno estatal, “la verdad estamos cansados de vivir esta situación de esto que se está viviendo en la sierra, hay muchos problemas, homicidios por parte de la gente armada porque nosotros no tenemos la capacidad para defendernos”.
Sostuvo que “somos unos humildes campesinos que nos dedicamos al campo, al trabajo, a nuestro ganado y la verdad ya nos da miedo salir al campo a trabajar”.
Enseguida, el comisario de Las Mesas, Pablo Mejía, demandó que el gobierno federal intervenga, “porque la situación está muy crítica ahorita, tenemos el ganado abandonado, el cultivo todo tirado, cosechas tiradas, ocupamos que nos echen la mano”.
Por su parte, la comisaria de El Durazno, Azucena Rosas García, dijo que “esas personas empezaron por El Durazno y así van a seguir y es un llamado para el presidente, al gobierno federal porque esto es delincuencia organizada y le pertenece al gobierno federal hacerse cargo, que no se quede nada más en el estado, que se haga cargo el gobierno federal, que ponga cartas en el asunto, a nosotros nos llegan los balazos y a él los abrazos, así que por favor, que ponga cartas en el asunto”.
De El Porvenir, el comisario Jesús Ayala, pidió justicia “a todo lo que está pasando, porque ya ven, nuestras familias no duermen, llore y llore, qué nos irá a pasar, se oyen para acá puras maldades que vienen a hacer y por todos lados”, por lo que pidió que el gobierno ponga las bases de operaciones mixtas, “donde vemos que puede estar más peligroso, en Santa Rosa, Las Mesas y el Crucero del Aguacate”.
Luego, volvió a hacer uso de la palabra Víctor Espino para denunciar que desde lo ocurrido en El Durazno, en toda esa región se han suspendido las clases en la mayoría de las comunidades, “ya no conocemos a los médicos ni los maestros”.
Mencionó que en el ejido San Antonio de las Tejas tienen 17 mil hectáreas de bosque, 8 mil en estudio, “arriba de 200 mil metros cuadrados, el metro vale 3 mil pesos, saquen la cuenta, cuál es el interés de esa gente, de ahí nosotros sacábamos para apoyar poquito a los maestros y a los médicos, las clínicas las hemos hecho nosotros, los caminos también, esos recursos nos los van a quitar, si entra esa gente ya no los vamos a volver a tener”.
“Decirle a la gobernadora que tenemos un año yendo al Palacio, nos estuvieron recibiendo con puras palmaditas, quedamos en un acuerdo, nos quitaron muchas cosas pero nos dijeron cuál era nuestra prioridad y es la seguridad e infraestructura, queremos caminos en la sierra para que puedan llegar los militares, para que puedan llegar los doctores y los maestros”.
Reprochó que en esas reuniones acordaron que se pavimentarían 5 kilómetros de carretera por año de administración de la gobernadora “y ahorita autorizaron 3 millones para una ruta nada más, qué vamos a hacer con eso, que cumplan sus acuerdos, nos urge la seguridad, es básica, los caminos son indispensables para que suba el gobierno a las comunidades más cercanas que están a 100 kilómetros de aquí, duran 24, 48 horas para llegar en tiempos de secas, en tiempos de agua no van a pasar”.

“Necesitamos las tres bases y le hacemos un llamado al presidente de la República, nosotros votamos por él y todavía creemos en él, hay muchos problemas en el país, pero la Sierra qué, pa’ cuándo”, cuestionó.
En esta reunión estuvo el coordinador auxiliar de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Gustavo Verdeja Salas, con sede en Tecpan de Galeana, quien dijo ir comisionado por la presidenta de este organismo, para atenderlos luego de lo ocurrido el sábado 28 en El Parotal ante algún presunto abuso de autoridad, al tiempo que los conminó a hacer la denuncia correspondiente ante esta institución.

En Santa Rosa ya hay una BOM

De acuerdo con pobladores de Santa Rosa, la noche del domingo 29, fueron avisados por funcionarios del gobierno del estado que el lunes 30 por la mañana en ese lugar se instalaría una Base de Operaciones Mixtas para garantizar la seguridad de los habitantes, pero antes de que llegaran los elementos de las corporaciones policiacas, ocurrió el enfrentamiento entre habitantes del poblado e integrantes del grupo criminal que tiene azolada la región.
Ayer martes, una de las vecinas comentó que la balacera duró poco más de una hora pero que ésta concluyó con la llegada de los militares, marinos, policías estatales, elementos de la Guardia Nacional y policías ministeriales, los cuales se dirigieron con el comisario de Santa Rosa para pedirle que les apoyara con la asignación de un espacio para permanecer, por lo que se establecieron en la entrada a la comunidad, frente al arco.
Otro de los vecinos comentó que el lunes, “cuando estaba recio la balacera”, dos helicópteros sobrevolaron la zona y que el aparato de la Secretaría de Seguridad Pública aterrizó para llevarse a integrantes de las familias que no hace mucho tiempo se asentaron en ese lugar y que de acuerdo a los habitantes, han fungido como informantes y simpatizantes del grupo delincuencial al que se enfrentaron el lunes, “fueron los ministeriales los que se los sacaron en camionetas y los arrimaron al helicóptero para que se los llevaran”.
Dijo que esta acción, una vez que se conoció, provocó agravio entre los habitantes de las comunidades, pues consideran que es una evidencia “de que el propio gobierno del estado apoya a ese grupo criminal, por eso es que estamos pidiendo que el gobierno federal intervenga mientras la gobernadora hace una limpia de toda esa gente corrupta que tiene metida en su gobierno”.