Policías preventivos y de tránsito de Taxco no tienen prestaciones de ley, señalan




Alrededor de 200 policías preventivos y agentes de tránsito de este municipio no cuentan con servicios de salud ni con el apoyo adecuado a sus necesidades y las de su familia, denunciaron ayer a El Sur agentes que pedieron el anonimato.
Abundaron que cuando cumplen con su trabajo, los arreglos por debajo de la mesa de los mandos superiores echan por tierra las infracciones y detenciones realizadas.
En un recuento de violaciones y atropellos constantes los policías y agentes de tránsito informaron de los pormenores del problema.
Por separado, unos afirmaron que la mayoría de las veces sus labores rebasan las jornadas establecidas y, como trabajadores que cumplen con sus obligaciones, sus derechos son nulos y las supervisiones, exigencias y amenazas de sus superiores son constantes en el actual gobierno municipal y señalaron a Óscar Fernando Castañeda Carvajal y Julio César Colín Ángel como responsables.
Este problema fue evidente con la contratación y entrenamiento de unos 30 nuevos elementos y el despido y deserción de otros agentes que manifestaron su desacuerdo con la manera de conducir el área de seguridad pública.
Un policía narró: “nosotros estamos en un trabajo de riesgo todos los días, pero no contamos con seguro social y si uno de nuestros hijos o nosotros nos llegamos a enfermar, en el Ayuntamiento nos mandan al Hospital Adolfo Prieto pero también nos toca pagar y hasta después nos ayudan apenas con la mitad, que de todas maneras nosotros pagamos”; otro agente, entrevistado en otro punto de la ciudad, coincidió con su compañera.
Detallaron que cuando cumplen con su deber haciendo infracciones o deteniendo a presuntos infractores sus jefes hacen arreglos o condonan multas en infracciones.
“Fíjate que yo he quitado placas y también ya hice infracciones, pero resulta que al rato de llevarlas llega el dueño y se arregla con el director o hablan con el coordinador de seguridad pública, Oscar Fernando Castañeda, quien se las devuelve y nosotros quedamos como pendejos, esto es una burla porque cumplimos con nuestro deber”, espetó molestó otro agente entrevistado.
“Ahora hacemos nuestro trabajo de mantener despejadas las áreas y ahí en vía pública un grupo de guías piratas ya hizo negocio privado y se sienten protegidos por el presidente municipal (Ramiro Jaimes Gómez); y hay otros policías que permiten el estacionamiento de carros por ganarse una feria. Eso no se vale”, declaró un agente al mencionar como ejemplo la calle de la Muerte, a un costado de la parroquia de Santa Prisca.
En tanto, policías preventivos que en días recientes les fue asignada una patrulla nueva, denunciaron que les informaron que serán responsables de cualquier daño o descompostura que sufran esos vehículos.
“Mira nada más, como si el carro fuera nuestro y de lo que les pase nos dijeron que nosotros lo vamos a pagar de nuestro salario de los 2 mil 500 pesos que nos pagan y a veces se nos retrasan”, expresó un policía.
La mayoría coincidió en denunciar al director de Seguridad Pública, Julio César Colín Ángel, porque pretende despedir sin sus derechos ni indemnización correspondiente a un grupo de policías que le hicieron ver sus errores por algunas faltas que cometieron.
Advirtieron que ese malestar ha crecido y por eso su llamado a las autoridades para corregir esa situación en donde las inconformidades empiezan a ser notorias y de las cuales, según se deriva de sus declaraciones, podría devenir una protesta similar a mayor a una queja reciente que se apagó por la intervención del alcalde que evitó el escándalo fuera público.

En la sesión extraordinaria de Cabildo policías despedidos exigen su reinstalación



Roxana Ibarra

Policías preventivos que fueron despedidos intentaron manifestarse en la sesión extraordinaria de Cabildo de ayer, para pedir al alcalde Félix Salgado una explicación, pero minutos antes de empezar la sesión los colaboradores del presidente municipal llamaron a los agentes y ya no salieron, al menos por la misma puerta.
Consultada vía telefónica, la policía Beatriz Escobar Sánchez explicó que el alcalde les pidió no hacer declaraciones a los medios de información, y que hoy el encargado de despacho de la Secretaría de Protección y Vialidad, Salvador Vargas Villanueva, los atendería para buscar una solución a su situación.
Comentó que minutos después los sacaron por la recepción y salieron por la puerta principal acompañados por trabajadores de Presidencia hasta la calle.
Los preventivos entregaron una copia del oficio con fecha 2 de mayo, dirigido al síndico procurador Ernesto Mastache Manzanarez y a los regidores, donde informan que el 16 de abril fueron dados de baja sin que les pagaran la quincena correspondiente y solicitan que los reinstalen y se respete su antigüedad.
Firman el oficio, como policía primero, Manuel Alejandro Hernández Azcarate, operativo sector 2; primer oficial Apolunio Cebrero Galeana, operativo sector 2; policía preventivo Beatriz Escobar Sánchez, operativo sector 13; policía preventivo Faustino Basilio Valentín, operativo sector 15; policía preventivo Rocío Aquino Chávez, sector 8 y policía ecológico Alfredo Betanzo Morroy.
Asimismo, Beatriz Escobar anexa un oficio donde el coordinador administrativo Enrique Marban Sánchez le comunica de sus vacaciones del 2 de mayo al 15 de mayo del 2006, para reanudar labores el día 16 del mismo.
Dijo que se sigue presentando a trabajar.
La agente indicó que el 15 de abril se presentaron a cobrar pero no llegó su pago y al buscarse en la lista tampoco aparecieron, por ello acudieron con el director de Recursos Humanos, Joseph Williams Estévez, quien les informó que los dieron de baja a solicitud de Salvador Vargas.
Agregaron que al acudier con Vargas Villanueva “le echó la bolita al de Recursos Humanos y así nos trajeron dando vueltas y burlándose de nosotros”.
Después acudieron con la síndica María Antonieta Vizairo, quien llamó al director de Recursos Humanos y éste le informó que los policías estaban dados de baja “por flojos”.
Beatriz Escobar aseguró que en ningún momento se le ha notificado de su baja por escrito y negó que incumplan con sus funciones.
Agregó que a tres policías bancarios que iban con ellos el alcalde les solucionó su problema en ese momento.
Por otra parte, el Cabildo aprobó por unanimidad que se autorice al presidente municipal un convenio con el gobierno del estado para ejercer recursos del programa de Inversión Concurrente con municipios para proyectos productivos.
En el acuerdo, que leyó el secretario general Daniel Ríos, se especifica que el objetivo del programa es multiplicar los escasos recursos que disponen los gobiernos municipal y el estatal mediante el mecanismo de mezcla, a fin de financiar proyectos de inversión para soluciones de mediano y largo plazo a los rezagos en infraestructura social y productiva.
También mencionó los apoyos otorgados por el programa, que consisten en obras y proyectos productivos, proyectos ejecutivos y estudios técnicos de preinversión, obras y proyectos productivos intermunicipales, así como obras y proyectos productivos multianuales.
Antes de aprobar el orden del día, el regidor de Convergencia, Armando Tapia, pidió al alcalde retirar el punto número 1 a tratar sobre el análisis, discusión y aprobación en su caso, de la designación de oficiales del Registro Civil porque en la propuesta no les anexaron los expedientes de cada uno de los 48 candidatos.
En respuesta, el alcalde accedió y se aprobó por mayoría el orden del día, quedando como único punto la aprobación de la firma del convenio.

Denuncian policías preventivos de Cruz Grande que no tienen armas, patrullas, radios ni chalecos



Karenine Trigo Cruz Grande

Policías preventivos de este municipio se quejaron de no contar con el equipo necesario para realizar sus funciones y señalaron que las armas que tienen no están en buenas condiciones, los radios no sirven, la antena repetidora fue robada en la administración pasada y no cuentan con chalecos antibalas.
Los policías –que solicitaron permanecer en el anonimato– explicaron que son 36 elementos divididos en dos turnos y que cubren 24 horas por 24 y que la única patrulla con la que cuentas es insuficiente, pues “el municipio es grande y tenemos que recorrer las 19 comunidades”.
Abundaron que la dependencia cuenta con otra patrulla, pero que ésta la trae el director general de Seguridad Publica, Javier Palma Pérez, quien le da uso personal, pues en diversas ocasiones se le ha visto en el vehículo con su familia.
Insistieron que el sistema de radiocomunicación está deteriorado; los cinco radios que tienen no funcionan adecuadamente, además de que la antena repetidora “fue robada en la administración pasada”, en cuanto a las armas, solamente cuentan con 10 armas largas y seis cortas, las cuales, “ya necesitan mantenimiento, pues ya están viejas”
En el municipio solamente existen dos módulos de policía ubicados en la cabecera municipal, uno sobre la carretera nacional Acapulco-Pinotepa, y otro en la planta baja del Ayuntamiento; sin embargo, en ninguno se cuenta con una línea telefónica para que la ciudadanía solicite auxilio en casa de una contingencia.
Por su parte, el jefe de la policía, Atilano Mendoza Morales, a pregunta expresa señaló que ya se le solicitó al presidente municipal Margarito Genchi Casiano el equipo “y está por llegar” pero no precisó fecha.
Sobre la línea telefónica que hace falta en los módulos de policías dijo: “los teléfonos están en la oficina del presidente” y que solamente se puede solicitar el auxilio en horas de oficina; fuera de ellas, el ciudadano tiene que trasladarse a los 2 módulos de la policía, los cuales dijo, “funcionan las 24 horas del día”.

Denuncia albañil a policías preventivos; lo asaltaron y secuestraron tres días, dice

Jorge Nava

El albañil Roberto Abarca Ibarra denunció ante el Ministerio Público y la Coordinación Regional de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Guerrero que policías preventivos lo asaltaron y lo tuvieron incomunicado por tres días en los separos de esa corporación.

Ayer, Roberto Abarca, acompañado de su esposa y su madre, acudió con el médico legista para que le certificara las lesiones por los golpes que le propinaron los policías el sábado, a un costado del Centro Internacional Acapulco.

El joven explicó que cuatro efectivos municipales que puede identificar, quienes tripulaban la patrulla 125, lo arrestaron cuando salía de cobrar su semana por trabajar en una obra cerca del CICI.

Señaló que a los policías les dijo que no había cometido ningún delito y sólo se dirigía a su casa en la colonia Izazaga, pero los oficiales lo acusaron de robarle una videcámara a unos turistas.

Recordó que lo subieron a la patrulla y se dirigieron a una calle oscura que está a lado del Centro de Convenciones, donde lo golpearon y le robaron los mil 500 que cobró.

El agraviado envió un mensaje al alcalde Félix Salgado “¿así es la seguridad que nos prometió?”.

Abarca Ibarra añadió que el trabaja de sol a sol para ganar dinero honradamente y cuestionó la acción porque “a los que deben de agarrar no los agarran”.

En su queja Codehum/CRA/068/2006-3, el albañil, de 24 años de edad, expone que lo tuvieron tres días incomunicado en los separos de la Policía municipal y sin la posibilidad de ver a su madre que lo anduvo buscando.

Dijo que lo tuvieron en una área escondida de los separos y nadie se daba cuenta que allí estaba –dicha área pequeña es para detenidos por faltas al Bando de Policía y Buen Gobierno, cerca de los sanitarios para esos detenidos–.

El médico legista Óscar Laina de la Cruz anotó en su reporte que le encontró dos lesiones un moretón que mide 17×10 en la espinilla, otra de dos centímetros en pierna derecha

Acusan a policías de Petatlán de golpear a dos jóvenes de Zihuatanejo

 

 Brenda Escobar Zihuatanejo

Dos jóvenes azuetenses, uno de ellos locutor y gerente operativo de una estación de radio local, fueron golpeados y detenidos por policías preventivos de Petatlán, el domingo por la noche, luego de que se negaran a ser extorsionados.

Ayer lunes, en la agencia del Ministerio Público, Iván Guerrero Jacobo, de 24 años de edad e, Israel Hidalgo Miranda, de 18, denunciaron a dos preventivos que además de insultarlos los agredieron fìsicamente con la culata de uno de sus rifles.

Hidalgo Miranda dijo al representante social que el domingo por la noche fue con tres personas más a Petatlán para disfrutar de la feria que se celebra en aquella ciudad, y que al estacionar su vehículo, cerca de la entrada, se les acercaron dos policías municipales que no permitieron que dejara su coche porque estaba prohibido.

Al refutarles que no había ningún señalamiento y que además había otros carros, les pidieron entonces 20 pesos por el estacionamiento, y al negarse los insultaron con palabras obscenas, “y para ya no seguir discutiendo alejé el carro 50 metros, y al regresar me detuvieron porque supuestamente estaba haciendo arrancones”.

Guerrero Jacobo, quien es locutor y gerente operativo de Radio Aguamarina, en este puerto, dijo que los preventivos, quienes golpearon a su amigo con la culata de sus armas, los llevaron detenidos, “a Israel que por arrancones y a mí por insultos a la autoridad, cuando no cometimos ningún delito, lo único malo fue que no les dimos los 20 pesos que nos pedían por dejar el carro”.

Ambos jóvenes interpusieron su denuncia penal ante el MP, y será en el transcurso de esta semana cuando acudan a la Codehum a presentar su queja.

Quejas en la Codehum de Petatlán contra soldados y policías preventivos

* Soldados allanaron su vivienda, dice en campesino

 Brenda Escobar, corresponsal, Zihuatanejo * Un anciano campesino denunció ante la oficina receptora de quejas de la Codehum en Petatlán, que soldados del Ejército Mexicano se introdujeron arbitrariamente en su domicilio y le quitaron una pistola que tenía para su defensa.

También dos jóvenes acusaron –en la dependencia– que fueron golpeados y detenidos sin motivo alguno por policías preventivos de Zihuatanejo.

Rafael Garibo Gallegos, de 63 años de edad, acudió con el representante de la Codehum en Zihuatanejo, Mario Alberto Quiroz Bello, para denunciar que el 18 de marzo, a las 3 de la tarde, en su domicilio ubicado en Rancho Longarez, en el municipio de Petatlán, unos militares allanaron su vivienda sin una orden por escrito.

Dijo que al preguntarles el motivo de su presencia y pedirles el documento que les autorizaba meterse a su casa, “porque yo no he cometido ningún delito”, los soldados lo intimidaron al igual que a su esposa.

Agregó que de manera brusca buscaron y revolvieron sus pertenencias, donde encontraron una pistola calibre 22 sin tiros que él ha conservado desde hace 20 años para la protección de su familia, y se la quitaron.

Rafael Garibo añadió que los militares –no precisó si pertenecen al 19 Batallón de Infantería de Petatlán– le pidieron como pago de multa por tener una pistola la cantidad de mil 500 pesos, y que al momento de darles el dinero lo amenazaron: “no vaya a abrir la boca porque le puede ir mal a su familia y a usted”.

Por otra parte, también ayer se presentó en esa oficina el joven César Adrián García Bravo, con domicilio en la cabecera municipal de La Unión, para denunciar que el 17 de marzo fue detenido sin haber cometido algún delito, junto con su amigo Virgilio Ayala Paniagua, por policías preventivos de Zihuatanejo que iban a bordo de la patrulla 02.

García Bravo dijo que al principio se resistieron a subirse a la patrulla, “porque el único delito que cometimos fue haber comprado unas cervezas para llevarlas a la casa”, y que los uniformados los rociaron con gases lacrimógenos y los remitieron a los separos, donde pagaron cada uno una multa de 550 pesos “y todavía no sé qué delito fue el que cometí”.

De igual forma, el joven Fredy Palma Ramírez, mesero del restaurante los Mandiles, en Ixtapa, y con domicilio en la comunidad de Barbulillas, dijo al representante de la Coddehum que el 19 de marzo, a las 9 de la noche, salió de su trabajo y cuando esperaba el microbús para irse a su domicilio fue abordado por policías turísticos, a bordo de la patrulla 17.

Palma Ramírez dijo que fue confundido con un delincuente por los policías, quienes sin más le propinaron un culatazo que le abrió el entrecejo, pero al darse cuenta de su error le dijeron “ahí muere”, y lo dejaron herido. Hasta ayer el mesero todavía tenía sangre en la nariz y el rostro hinchado a causa del golpe.

Los tres denunciantes coincidieron en que demandarán justicia, por considerar que fueron afectados en sus garantías individuales.