Dejan a un joven de 19 años ejecutado en una terracería de Sinahua, Pungarabato

 

El cuerpo de un joven de 19 años, ejecutado a balazos, fue localizado la mañana de ayer en un camino de terracería en la comunidad de Sinahua, municipio de Pungarabato.
Los hechos fueron reportados alrededor de las 9 de la mañana de ayer, cuando los campesinos que estaban trabajando hallaron el cuerpo del joven tirado cerca de un arroyo.
El sitio se ubica a unos 300 metros, a espaldas de las instalaciones del rastro TIF, junto a una huerta de mangos, en una zona adonde acuden los campesinos a preparar sus tierras para la siembra en estos días.
El cuerpo fue identificado más tarde como Isidro, de 19 años, vecino del Centro de Ciudad Altamirano, de quien no había reportes de que estuviera desaparecido.
Vecinos de la comunidad no pudieron identificar el joven, sino que más tarde supieron de su identidad en las instalaciones del Ministerio Público adonde fue trasladado.
Se confirmó que el joven fue asesinado de dos impactos de arma de fuego en la cabeza. El agente del Ministerio Público llegó a ayudar y a inspeccionar el lugar, donde no encontró cartuchos percutidos. También llegó la Policía Estatal para inspeccionar.
No se difundieron versiones acerca de los motivos del homicidio ni de cuándo fue asesinado.

Asaltan hombres armados a distribuidores de pollo en Iguala

Hombres armados asaltaron la madrugada de ayer a distribuidores de pollo que acababan de entregar productos a una guardería de la colonia Florida, ubicada al oriente de Iguala.
De acuerdo con información de fuentes policiacas de Seguridad Pública del estado, alrededor de las 5 de la madrugada de ayer se reportó al número de emergencia 911 el asalto con violencia a dos empleados de la empresa Bachoco, en la calle Paraíso, de la colonia Florida.
El encargado y chofer de la camioneta, de nombre Benito, narró a policías que luego de entregar pollo a la guardería Moni, en esa colonia, cuando abordaban la camioneta fueron interceptados por dos hombres armados con pistolas, quienes los despojaron de teléfonos celulares y del dinero que llevaban de las ventas, unos 3 mil pesos en efectivo, según informaron. Los asaltantes huyeron corriendo sin que nadie intentara detenerlos.

Abandonan un carro con reporte de robo cerca de la feria de la Bandera

Reportes de fuentes de la Policía Municipal indican que, durante los primeros minutos de ayer, al hacer recorridos de seguridad alrededor de las instalaciones de la feria de la bandera y colonias vecinas, un grupo de agentes fue abordado por vecinos de la colonia Quetzalcóatl, quienes denunciaron que un vehículo sospechoso había sido abandonado, mal estacionado, entre las calles Insurgentes y Tláloc.
El carro era un Audi A4 color negro, modelo 2013 con placas del Estado de México. Se informó que al buscar sus datos en el Registro Público Vehicular, se constató que cuenta con reporte de robo con violencia, ocurrido apenas la mañana del miércoles.
El carro fue decomisado y puesto a disposición de la agencia del Ministerio Público para su investigación.

Detienen a un presunto integrante de Los Tequileros en el Estado de México

La tarde de este jueves fue detenido en el Estado de México, Jesús Rayo Bernabé El Moto, presunto integrante de la banda de Los Tequileros en San Miguel Totolapan, quien fue policía municipal y tiene órdenes de aprehensión por secuestro y homicidio.
Según el informe, el delincuente fue detenido en un operativo en el Estado de México, y esperan que la mañana de este viernes sea trasladado a Arcelia, donde cuenta con órdenes de aprehensión del fuero común giradas por el juez del distrito de Cuauhtémoc.
Al hombre se le identifica como uno de los más cercanos a Arnulfo Pineda Pérez El Boinas, quien en días pasados fue reaprendido.
Al igual que Arnulfo Pineda, Jesús Rayo fue policía preventivo en San Miguel Totolapan, en la administración del ex alcalde y actual diputado con licencia, Saúl Beltrán Orozco. Tras el levantamiento armado en San Miguel Totolapan salió del municipio.
Fue localizado por policías federales en Coacalco, Estado de México, donde fue aprendido con al menos dos órdenes de aprehensión por homicidio y secuestro. Lo señalan también como parte de la banda de Raibel Jacobo Dealmonte El Tequilero.
Su nombre aparece también en la lista de presuntos responsables del homicidio del señor Ceferino, caso por el cual también hubo una orden de aprehensión contra el diputado Saúl Beltrán, pero que tras varios puntos de vista acerca de su fuero, no fue detenido. Actualmente se encuentra con licencia y no se conoce su paradero.

 

Lleva 10 años asolado Totolapan por El Tequilero; mil 400 familias se han ido y sólo quedan 400

Escuelas cerradas, casas abandonadas, comercios con las cortinas abajo –y los pocos abiertos lucen estantes vacíos– es lo que ha dejado en San Miguel Totolapan la violencia atribuible a Raybel Jacobo de Almonte, El Tequilero, contra quien desde el lunes se rebelaron los pocos habitantes que quedan en este pueblo y pretenden hacerle frente con escopetas hechizas y rifles de bajo calibre, hasta acabarlo.
La violencia provocada por el grupo criminal Los Tequileros cambió la vida radicalmente en este pueblo desde hace aproximadamente un año, aunque el líder del grupo criminal comenzó a cometer delitos en la cabecera municipal y en pueblos vecinos hace aproximadamente 10.
Un miembro de la autodefensa aseguró que a partir de entonces unas mil 800 familias dejaron el pueblo y solamente quedan unas 400, cuyos integrantes son los que cansados de los secuestros, asesinatos, extorsiones, robos, violaciones amenazas y humillaciones se armaron y enfrentaron luego de que se convencieron de que cuenta con el respaldo del gobierno.
Mientras tanto las consecuencias saltan a la vista. En San Miguel Totolapan, la cabecera municipal, desde el lunes pasado los tres kínder, las tres escuelas primarias, la escuela secundaria y el bachillerato cerraron sus puertas ante el temor de los maestros y de los padres de familia que decidieron no mandar a sus hijos.
Muchos meses antes de por sí algunos de los maestros habían dejado de asistir a sus labores regularmente por el miedo al grupo criminal, contó Daniel, un hombre de unos 60 años que el mediodía de este miércoles empuñaba una escopeta con el rostro cubierto con un paliacate, sentado en la contra esquina de la casa del ingeniero Isauro de la Paz Duque.
De la Paz Duque es la víctima más reciente de El Tequilero, a quien hasta la tarde de este jueves mantenía secuestrado, lo que motivó que los habitantes se armaran de valor y de rifles y escopetas para enfrentar al criminal, vecino de San Antonio de La Gavia, una comunidad ubicada a unos 40 minutos de la cabecera municipal.
De entrada detuvieron el lunes pasado, un día después del secuestro del ingeniero Isauro, a 24 de sus seguidores de este pueblo, entre ellos a su madre María Félix de Almonte, así como a la regidora priista María del Carmen Barrera Delgado. Al resto los acusaron inicialmente de servir de halcones al presunto criminal. Sin embargo el martes soltaron a seis de ellos porque comprobaron que no tenía nada que ver, y hasta la tarde de ayer mantenían a 18 detenidos.
Desde el lunes Daniel y decenas de los vecinos del pueblo se mantienen afuera de la casa del ingeniero que estaba secuestrado, en espera de su liberación. Habían emplazado tanto al presunto delincuente como al gobierno estatal para que entregara a su víctima a las 12 del día de ayer, de lo contrario asumirían otras medidas, dijo el vecino de este pueblo que hacia guardia.
Una de estas medidas explicó, es el cierre de la carretera que comunica a San Miguel Totolapan con San Antonio de La Gavia en cuyos alrededores creen que se esconde el delincuente, que tiene asolados a los pueblos de la zona.
Mientras tanto en el resto del pueblo las calles lucían vacías, las casas abandonadas, los comercios cerrados y los niños encerrados en sus viviendas por sus padres para no arriesgarlos ante cualquier incidente violento.
“Pero esto no es de ahorita, ni por lo que estamos haciendo. El pueblo se ha venido quedando solo desde hace más de un año”, contó Daniel.
Explicó que en el pueblo, que hasta hace poco más de un año era de unos mil 800 habitantes, ahora sólo quedan unos 400, “las familias se han ido poco a poco a distintos lugares del estado o del país, no sabemos a dónde y allí dejaron sus casas, sus tierras, sus bienes”.
Dijo que todos se fueron porque les mataron, les secuestraron o les desaparecieron a un familiar, “o igual porque los extorsionaron o los amenazaron”, y aseguró que en este pueblo, “sin exagerar el 80 o 90 por ciento ha sido víctima de El Tequilero.
“Y le estoy hablando solamente de aquí, de la cabecera municipal, pero el cabrón ha hecho lo mismo en las comunidades vecinas: Santa Catarina, Valle Luz, La Comunidad, San Francisco, Los Guajes, La Tinaja, Terrero, El Cubo, Villa Hidalgo y El Romance, que son las más cercanas y que conocemos. Todos esos son pueblos fantasmas, sus habitantes se han ido y los que quedan son gente de él, de El Tequilero.
Dijo que de hecho en la propia cabecera municipal hay gente que lo apoya, como los que fueron detenidos con su madre y la regidora priista, “que le sirven de halcones”.
Al mediodía de ayer un grupo de mujeres fue a reclamarle a los integrantes del grupo de autodefensa que hayan retenido un camión de Diconsa, cargado de viveres y que según dijeron su destino era San Antonio de La Gavia, y que era para alimentar a la gente de El Tequilero.
Sin embargo el grupo de mujeres que fue a reclamar la mercancía que trasladaba el cambión, aseguró que llegó para surtir la tienda Diconsa del pueblo ante el desabasto que hay en las tiendas particulares, “si de verdad dicen que están luchando por el pueblo entreguen la mercancía porque es para beneficio del pueblo, les exigió una mujer al grupo de hombres armados y encapuchados, pero estos bajaron toda la mercancía y llenaron cientos de bolsas para que las despensas fueran entregadas a la gente que participa en el movimiento.

Secuestrados en su propio
pueblo

Francisco, otro de los vecinos, que a diferencia del resto no estaba cubierto del rostro ni portaba arma, dijo que hace casi medio año que los camiones y camionetas proveedoras de mercancía dejaron de ir a surtir las tiendas de la cabecera municipal, y que sólo los que tienen carro en el pueblo se van a surtir de lo que necesitan a Ciudad Altamirano que está a poco más de una hora en vehículo, o a Arcelia ubicada a unos 45 minutos, los demás tienen que conformarse con lo poco que encuentran, contó el hombre de unos 50 años.
Aseguró también que en esta cabecera municipal hace mucho tiempo que no hay transporte público, porque El Tequilero no deja trabajar, exige cuotas y el que se niega a pagarle lo levanta o lo mata, “y así prefieren no dar el servicio”.
Dijo que desde hace más de tres años los habitantes de San Miguel Totolapan están secuestrados en su propio pueblo, “no podemos ir a trabajar nuestras tierras porque si nos encuentran solos nos levantan o nos matan” denunció don Francisco.
“No le voy a exagerar pero en menos de un año solamente en la cabecera municipal se han llevado a unas 100 gentes, incluyendo niños”, por eso la gente ya no quería salir de sus casas, mucho menos fuera del pueblo a trabajar, “pero ya perdimos el miedo y decidimos organizarnos para ahora sí hacerle frente”.
Después corrigió: “bueno, no le voy a negar, estamos con miedo pero es preferible esto a seguir como estábamos”, reconoció en referencia al movimiento de autodefensa que integraron el lunes pasado, un día después del secuestro del ingeniero Isauro de la Paz Duque.
En este pueblo, la gente está convencida de que Raybel Jacobo de Almonte, El Tequilero, cuenta con el apoyo del gobierno, “no es posible que en 10 años que lleva cometiendo delitos por aquí no haya podido ser detenido, y a ver explíqueme usted, el gobernador (Héctor Astudillo Flores) dice que están negociando para la liberación del ingeniero, eso quiere decir que sabe quién es y donde está, pero en vez de detenerlo negocia con él para que entregue a los que tiene secuestrado”, se quejó el hombre rodeado de otros de edad adulta como él, quienes somnolientos se guarecen del candente sol bajo la sombra de las cornisas de las casas de puertas cerradas y enmohecidas por el abandono.