Debido a raptos y amenazas, suspenden clases cuatro escuelas de Acamixtla, Taxco

Alejandro Guerrero

Iguala

Pobladores de Acamixtla, municipio de Taxco, denunciaron que cuatro escuelas de esta comunidad suspendieron sus clases luego de que en las últimas dos semanas, al menos siete jóvenes habrían sido privados de su libertad; así como por una advertencia difundida en redes sociales de un presunto grupo criminal.
De acuerdo con un poblador y por denuncias realizadas mediante las redes sociales, a partir del miércoles las clases fueron suspendidas en la primaria Mariano Bernal, en sus turnos matutino y vespertino, hecho que fue confirmado por una madre de familia, mediante un mensaje de texto, indicando que el acuerdo es que se van a reactivar las clases “hasta nuevo aviso”.
Ese mismo día, se informó que también el kinder Antonia Nava de Catalán y la secundaria Caudillos de Guerrero tomaron la misma determinación, ésta última, luego de que el miércoles los directivos y docentes de la escuela convocaron a una reunión extraordinaria, en el que además se suspendieron las clases para los alumnos.
Medios locales informaron que también la Escuela de Diseño y Arquitectura, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), con sede en esta localidad, suspendió sus clases presenciales, después de que dos estudiantes habrían sido privados de su libertad la semana anterior.
El martes, mediante una página de Facebook con el nombre El Molino de Acamixtla, presuntos miembros de la delincuencia organizada de La Familia Michoacana, hicieron público un mensaje de texto, en el que pidieron a los padres de familia que no dejen ir a sus hijos a las escuelas.
“Este es un llamado a todas las escuelas de Acamixtla. No queremos llevarnos gente o niños inocentes, pero la limpia empezó y esto no se termina. Quisieron guerra y tendrán. Acamixtla tiene dueño y queremos que el pueblo nos apoye. Les pedimos a todas las familias que no dejen ir a sus hijos a las escuelas o que salgan a la calle, porque la guerra empieza”, advirtieron mediante el texto.
En las denuncias hechas mediante las redes sociales, se informó que el jueves de la semana pasada fue privado de su libertad un muchacho de nombre Adolfo Rosales, hecho ocurrido en Acamixtla. Asimismo, se denunció que al sábado siguiente también fueron raptados otros dos jóvenes, identificados como Rolando Díaz y Said Millán. Al día siguiente, es decir el domingo, a otros dos, a los que sólo se les menciona con los apodos El Cupón y El Nene.
En hechos distintos, también fueron reportados los raptos de dos mujeres, Reyna Martínez Bahena, ocurrida el jueves de la semana pasada, en el barrio La Zapata, de la cabecera municipal de Taxco; y al día siguiente, en el poblado Cacalotenango, de Lorena Díaz Martínez. Mientras que en la comunidad Tehuilotepec, vecinos denunciaron la desaparición de José Antonio Montenegro Nava, ocurrida el miércoles de la semana pasada.
De acuerdo con las fuentes consultadas, los familiares de las víctimas no han presentado denuncias de estos hechos, debido al miedo por amenazas que recibieron de los delincuentes, por lo que no ha sido publicado ningún boletín de búsqueda de estas personas.
Mientras que en los planteles educativos se buscó a docentes o directivos, pero se informó que tampoco quieren dar declaraciones. Hasta el cierre de esta edición, no había información oficial de lo denunciado por pobladores de Acamixtla.

 

La CAPASEG busca entregar una planta que no sirve, denuncian comisarios de Acamixtla, Taxco

 

Los comisarios municipal y de bienes comunales de Acamixtla, Taxco, denunciaron que la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG) pretende entregarles una planta tratadora de aguas residuales que no funciona y afecta a por lo menos nueve comunidades, en tres de las cuales la contaminación llega hasta los pozos del agua potable.
Asimismo, revelaron que CAPASEG elevó a más del doble el costo proyectado para la obra, de 7 millones 500 mil pesos a 16 millones 600 mil pesos.
Los comisarios municipal y de bienes comunales de Acamixtla, Felipe de Jesús Salazar y Felipe Rodríguez Pérez, denunciaron en una llamada a la redacción de El Sur que la CAPASEG abandonó la obra del humedal artificial, que funcionaría como una planta tratadora de aguas residuales natural, con plantas y materiales del suelo.
Felipe de Jesús Salazar informó que, como autoridades de la comunidad, no han querido recibir la obra de la CAPASEG porque no han atendido las observaciones del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA), que recomendó que se reduzca el caudal de agua a la planta y se cambien filtros saturados.
Denunciaron que, por la cantidad de agua que está llegando al humedal, está apunto de desbordarse, además de que el agua que se revierte al río aún está contaminada.
Explicaron que el río San Juan nace en el cerro del Huixteco, pasa por las comunidades de El Azul, La Quebradora, Acamixtla (que es el contaminador principal con sus aguas negras), El Cedrito, Tehuilotepec, la unidad habitacional El Boliche, San Juan de Dios, Juliantla, Xochuila, Hueymatla y, finalmente desemboca en el río Balsas.
El río ya contaminado tiene contacto con los pozos de agua potable que abastecen a Juliantla, San Juan, Huimatlan y Acamixtla.
Los comisarios se resisten a recibir de la CAPASEG la obra del humedal porque tiene fallas que ocasionan que el agua tratada no cumpla con las normas de sanidad.
Sin embargo, el agua que aún tiene “altos niveles de contaminación” es vertida al río.
Las comunidades, junto con la asociación civil Pueblo Sa Bio, hicieron y presentaron el proyecto del humedal artificial a la CAPASEG, que finalmente aprobó su ejecución y liberó los recursos, pero a consecuencia de las modificaciones que aplicó la dependencia estatal, no funciona como se esperaba, denunciaron las autoridades de la comunidad.
Explicaron que el costo proyectado inicialmente por las comunidades y la asociación civil era aproximadamente de 7 millones 500 mil pesos, pero la CAPASEG lo elevó hasta 16 millones 600 mil pesos, más del doble de lo estimado.
La dependencia modificó “el proyecto original y elevó drásticamente los costos”, denunció el comisariado de bienes comunales, lo que ocasionó que el agua tratada no cumpliera con los estándares de limpieza del agua tratada.
El comisario explicó que entre las modificaciones que se hicieron hubo una reducción al desarenador, los filtros no fueron rellenados con el material adecuado, algunos ya se saturaron y las aguas negras pasan encima sin ningún tratamiento.
Como consecuencia del incumplimiento de las dimensiones y materiales se generaron fallas en los resultados de la calidad del agua.
Comentó que algunas de las modificaciones menores que la CAPASEG aplicó al proyecto inicial fueron consultadas con la asociación y los representantes de las comunidades, pero no todas, y a pesar de que solicitaron el proyecto final la dependencia se los negó.

Cierran feligreses la parroquia de Apango y seis capillas contra el cambio de su sacerdote

Los feligreses de la parroquia de San Francisco de Asís de la cabecera municipal de Mártir de Cuilapan (Apango) y otras seis comunidades cerraron sus capillas este domingo, en protesta porque el obispo Salvador Rangel Mendoza pretende cambiar al párroco Carlos Cristino Luna.
Los feligreses cerraron la parroquia de Apango y las capillas de las comunidades de Zotoltitlán, Hueyitlalpan, Ahuexotitlán, Xicomulco, Tebernillas y Aixcualco desde el domingo, donde se suspendieron los servicios religiosos, informaron ayer.
Advirtieron que la parroquia y las capillas las abrirán hasta que reciban una respuesta del obispo Rangel Mendoza, a quien le piden que no cambie a su sacerdote Cristino Luna.
El conflicto religioso inició el 14 de enero cuando un grupo de feligreses de Apango retuvo 5 horas en la iglesia de San Francisco de Asís al vicario de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Humberto Cervantes Sánchez, quien llegó a formalizar el cambio de su sacerdote Cristino Luna. Ese día Cervantes Sánchez fue retenido de las 2 de la tarde a las 7 de la noche después de que feligreses, personal de la Subsecretaría de Asuntos Religiosos del gobierno del estado y el vicario firmaron una minuta de acuerdos, en la que se lee que el obispo acudiría el martes 19 de enero a las 9 de la mañana a dialogar con los inconformes.
Otro acuerdo fue que las parroquias de las comunidades de Atliaca y Acatempa del municipio de Tixtla se separarían de Apango.
Sin embargo ni el obispado ni la Subsecretaría de Asuntos Religiosos dieron seguimiento a estos acuerdos, y el sábado después de una reunión los feligreses dijeron que se manifestarían este lunes 25 de enero en el obispado, para exigir al obispo que desista del cambio de su sacerdote.
La protesta no se hizo porque los vecinos de la comunidad nahua de Zotoltitlán instalaron tres retenes para impedir el paso a la comunidad de La Esperanza, hacia Apango la cabecera municipal, en protesta debido a la desaparición del campesino Antelmo García.
El domingo 24 acordaron cerrar la parroquia de la cabecera municipal y seis capillas del municipio hasta que el obispo se desista del cambio de su sacerdote.
El obispo pretende cambiar al sacerdote Cristino Luna de Apango a la comunidad de Acamixtla, municipio de Taxco.
Sin embargo, feligreses de Taxco también protestaron el 20 de enero en la sede del obispado en la capital, porque tampoco quieren que les cambien a su cura, Francisco Jiménez García.
El 20 de enero unos 50 feligreses de Acamixtla, con pancartas protestaron en la sede de la diócesis Chilapa-Chilpancingo para exigir al obispo que no sea removido el párroco Jiménez García.
Ayer, la parroquia de San Francisco de Asís de Apango y seis capillas del municipio estaban cerradas y los feligreses advirtieron que no las abrirán hasta que el obispo se desista del cambio de su párroco.

No los atiende el obispo, se quejan feligreses de Acamixtla, Taxco; insisten en mantener a su párroco

 

El coordinador del Frente de Organizaciones Democráticas del Estado de Guerrero (FODEG), Oguer Morales Miranda informó que no recibieron respuesta del subsecretario de Asuntos Religiosos del estado, Jorge Alberto González Rivero para reunirse con el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza para exigirle que el párroco de Acamixtla Francisco Jiménez García no sea destituido de su cargo.
El pasado 20 de enero, alrededor de 50 feligreses de Acamixtla, municipio de Taxco, protestaron con pancartas en la curia de la diócesis Chilapa-Chilpancingo para exigirle al obispo Salvador Rangel Mendoza, que el párroco Francisco Jiménez García no sea destituido, pues el 6 de enero se les notificó que el sacerdote sería removido y en su lugar enviarían al sacerdote de Apango, quien ha sido acusado por diversos problemas.
Tras no obtener respuesta, los inconformes bloquearon la calle Abasolo, y después fueron atendidos por el subsecretario de Asuntos Religiosos del gobierno del estado, José Alberto González Rivero quien firmó una minuta de acuerdos y se comprometió a confirmar una reunión con el obispo.
Vía telefónica, Oguer Morales informó que no recibió la confirmación de la reunión con el obispo Rangel Mendoza, pues Jorge Alberto González no se comunicó el pasado viernes ni el sábado como habían acordado.
Explicó que los habitantes de Acamixtla continúan a la espera de reunirse con el obispo, “confiamos en su sensibilidad por el respeto que merece nuestra petición y la opinión del pueblo, dialogar es lo que exigimos”.
Pese a que durante la protesta fueron recibidos por el vicario general de la diócesis, Pedro García Delgado, quien les dijo que el obispo no los recibiría porque la decisión de sustituir al sacerdote ya estaba tomada, el coordinador del FODEG indicó que esta decisión no es irrevocable, “ya que lo irrevocable se dialoga y el pastor de la diócesis debe sentarse a dialogar con nosotros”, expresó.
Asimismo, comentó que el actual sacerdote de Acamixtla no ha recibido ningún señalamiento en su contra y cuenta con buena reputación entre los pobladores, “al pueblo no le importa el pasado del sacerdote, sino cómo ha ido encaminando la buena fe entre las personas”.
Subrayó que los habitantes respaldan la labor del sacerdote, por lo que esperarán hasta el próximo miércoles para recibir una respuesta favorable.
De lo contrario, el coordinador aseguró que los pobladores intensificarán su protesta dentro de la curia diocesana.