Trabajadores basificados de las oficinas de Finanzas y del Registro Civil estatal, ubicadas en el edificio Juan N Álvarez, pararon parcialmente labores para demandar mayor seguridad en el inmueble y evitar que vuelvan a dañarlo.
El pasado viernes, normalistas del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero ingresaron al edificio y causaron destrozos.
La mañana de este miércoles, algunos trabajadores no ingresaron a sus áreas de trabajo y dijeron que piden a las autoridades estatales que refuercen la seguridad en el edificio, para evitar que las organizaciones sociales cada vez los estén encerrado cuando protestan en el lugar.
El delegado sindical del área de Administración Fiscal, Bruno Molina Cruz, dijo que suspendieron labores como protesta porque las autoridades estatales no han cumplido con las peticiones de seguridad que exigen para el edificio.
Informó que cuando los manifestantes ingresan al edificio y causan destrozos, en ocasiones los trabajadores sufren algunas agresiones físicas, pero también psicológicas, “uno queda espantado”.
Detalló que en el edificio laboran adultos mayores, por lo que ese tipo de actos los ponen en riesgo, “la última ocasión fue el puro susto y pérdidas materiales, pero tenemos la zozobra de qué va a pasar el día de mañana”.
Manifestó que los trabajadores “decidimos” alzar la voz y pedirle al gobierno estatal seguridad para todos, porque hay documentos importantes que alberga el edificio.
“Pedimos que se blinde el edificio, que no sea un inmueble vulnerable, porque acuden muchas personas y nosotros tenemos que pagar las consecuencias, porque estamos secuestrados todo el tiempo”, enfatizó Bruno Molina.
Los manifestantes sostuvieron que ya han hablado con las autoridades estatales para que solucionen el problema y les garanticen seguridad, incluso dijeron que hubo el compromiso de colocar un arco para detectar armas y enviar más seguridad, porque son insuficientes los que están, pero no cumplieron.
El edificio Álvarez es uno de los más concurridos, donde atienden a unas 600 personas al día, detallaron los inconformes.
Integrantes del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) causaron destrozos en el edificio Juan N Álvarez, en las oficinas de Finanzas y el Registro Civil, también bloquearon dos calles, como protesta contra la detención de sus compañeros de la Escuela Superior de Educación Física (ESEF) y para exigir material didáctico.
En su segundo día de protestas, a las 3 de la tarde, los normalistas ingresaron al edificio ubicado en el centro de la capital. Ahí rompieron computadoras, las ventanillas de las cajas de cobro, los escritorios de cristal, tiraron archiveros y sillas.
Además, los alumnos, quienes portaban su uniforme pero tenían el rostro cubierto, realizaron pintas con aerosol con las leyendas “FUNPEG vive”, “reunión”, “justicia Acapulco” y “ENUF”.
Los usuarios y trabajadores que estaban en el edificio salieron corriendo, espantados por las acciones de los manifestantes. Después llegaron agentes de la Guardia Nacional, para tomar fotografías de lo que ocurrió.
De acuerdo con versiones de algunas personas que estaban cerca del lugar, los normalistas incendiaron artefactos de fabricación casera afuera del edificio, pero el incendio lo sofocaron algunos comerciantes con sus extintores.
Este jueves, 37 alumnos de la ESEF fueron detenidos y llevados a las instalaciones de la Fiscalía Regional en Acapulco, luego de que intentaron llevarse un autobús de la terminal de la Estrella de Oro.
Bloquean calles
Los alumnos de la Escuela Normal Urbana Federal Rafael Ramírez y la Centenaria Escuela Normal del Estado Ignacio Manuel Altamirano cerraron dos vialidades en la capital, para exigir a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda solución a sus demandas, entre ellas, la entrega de material didáctico.
El bloqueo inició minutos antes de las 11 de la mañana, en las calles Cedros y Bugambilias, frente a sus escuelas, ubicadas en el fraccionamiento Jardines del Sur.
Los manifestantes se negaron a dar información, pero colocaron pancartas en las que se leían que piden a la gobernadora solución a su pliego petitorio y rechazaron la represión a sus compañeros.
De acuerdo con el director de Gobernación estatal, Francisco Rodríguez Cisneros, los alumnos piden computadoras de alta gama y uniformes de marca.
En el Recinto de las Oficinas del Poder Ejecutivo del Estado otro grupo de normalistas, casi a la misma hora que los estudiantes ingresaron al edificio Álvarez, dieron un posicionamiento.
Dijeron que el jueves, alumnos de la ESEF sufrieron una represión y abuso de autoridad por parte de la Guardia Nacional y de la Fiscalía Regional de Acapulco, a las que responsabilizaron de las consecuencias psicológicas y físicas de sus compañeros debido a las agresiones.
Manifestaron que son estudiantes y “no delincuentes”, que tienen derecho a la libre expresión, sin represión ni amenazas. Dijeron que se dirigían a una actividad “pacífica” con sus compañeros del FUNPEG en Chilpancingo, pero fueron detenidos.
Los normalistas destacaron que sus peticiones son a favor de las escuelas de nivel básico donde realizan sus prácticas profesionales y que no han tenido respuesta por parte de las autoridades educativas.
En un comunicado, el secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, llamó a los representantes de las normales públicas del estado, agrupados en el FUNPEG, a retomar el diálogo como la vía de atención a sus demandas. Expresó que con los representantes de las generaciones anteriores siempre hubo diálogo y acuerdos.
Manifestó que por instrucciones de la gobernadora Evelyn Salgado, el 26 de enero de este año él mismo presidió una reunión de trabajo con los representantes del FUNPEG, en donde llegaron al acuerdo de hacer un calendario de reuniones con cada normal, con fecha, hora y lugar.
Dañan normalistas el edificio Álvarez por la detención de jóvenes de la ESEF
Por segundo día protestan por la acción de la Guardia Nacio-nal contra los estudiantes que trataban de llevarse un camión de la Estrella de Oro en Acapulco
María Avilez Rodríguez
Chilpancingo
Integrantes del Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) causaron destrozos en el edificio Juan N Álvarez, en las oficinas de Finanzas y el Registro Civil, también bloquearon dos calles, como protesta contra la detención de sus compañeros de la Escuela Superior de Educación Física (ESEF) y para exigir material didáctico.
En su segundo día de protestas, a las 3 de la tarde, los normalistas ingresaron al edificio ubicado en el centro de la capital. Ahí rompieron computadoras, las ventanillas de las cajas de cobro, los escritorios de cristal, tiraron archiveros y sillas.
Además, los alumnos, quienes portaban su uniforme pero tenían el rostro cubierto, realizaron pintas con aerosol con las leyendas “FUNPEG vive”, “reunión”, “justicia Acapulco” y “ENUF”.
Los usuarios y trabajadores que estaban en el edificio salieron corriendo, espantados por las acciones de los manifestantes. Después llegaron agentes de la Guardia Nacional, para tomar fotografías de lo que ocurrió.
De acuerdo con versiones de algunas personas que estaban cerca del lugar, los normalistas incendiaron artefactos de fabricación casera afuera del edificio, pero el incendio lo sofocaron algunos comerciantes con sus extintores.
Este jueves, 37 alumnos de la ESEF fueron detenidos y llevados a las instalaciones de la Fiscalía Regional en Acapulco, luego de que intentaron llevarse un autobús de la terminal de la Estrella de Oro.
Bloquean calles
Los alumnos de la Escuela Normal Urbana Federal Rafael Ramírez y la Centenaria Escuela Normal del Estado Ignacio Manuel Altamirano cerraron dos vialidades en la capital, para exigir a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda solución a sus demandas, entre ellas, la entrega de material didáctico.
El bloqueo inició minutos antes de las 11 de la mañana, en las calles Cedros y Bugambilias, frente a sus escuelas, ubicadas en el fraccionamiento Jardines del Sur.
Los manifestantes se negaron a dar información, pero colocaron pancartas en las que se leían que piden a la gobernadora solución a su pliego petitorio y rechazaron la represión a sus compañeros.
De acuerdo con el director de Gobernación estatal, Francisco Rodríguez Cisneros, los alumnos piden computadoras de alta gama y uniformes de marca.
En el Recinto de las Oficinas del Poder Ejecutivo del Estado otro grupo de normalistas, casi a la misma hora que los estudiantes ingresaron al edificio Álvarez, dieron un posicionamiento.
Dijeron que el jueves, alumnos de la ESEF sufrieron una represión y abuso de autoridad por parte de la Guardia Nacional y de la Fiscalía Regional de Acapulco, a las que responsabilizaron de las consecuencias psicológicas y físicas de sus compañeros debido a las agresiones.
Manifestaron que son estudiantes y “no delincuentes”, que tienen derecho a la libre expresión, sin represión ni amenazas. Dijeron que se dirigían a una actividad “pacífica” con sus compañeros del FUNPEG en Chilpancingo, pero fueron detenidos.
Los normalistas destacaron que sus peticiones son a favor de las escuelas de nivel básico donde realizan sus prácticas profesionales y que no han tenido respuesta por parte de las autoridades educativas.
En un comunicado, el secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, llamó a los representantes de las normales públicas del estado, agrupados en el FUNPEG, a retomar el diálogo como la vía de atención a sus demandas. Expresó que con los representantes de las generaciones anteriores siempre hubo diálogo y acuerdos.
Manifestó que por instrucciones de la gobernadora Evelyn Salgado, el 26 de enero de este año él mismo presidió una reunión de trabajo con los representantes del FUNPEG, en donde llegaron al acuerdo de hacer un calendario de reuniones con cada normal, con fecha, hora y lugar.
Padres de familia de la secundaria José Martí, denunciaron que de nueva cuenta se metieron a robar al plantel, en esta ocasión abrieron una de las casetas de la cooperativa escolar, causaron destrozos y se robaron mercancía y objetos de valor.
Este jueves, una de las madres de familia de esta escuela, que está ubicada a unos 200 metros del Palacio Municipal y a un costado de la unidad deportiva de esa ciudad, dio a conocer que la directora Noemí Ibarra Ramírez, les informó que fue durante el horario de entrada que notaron la fechoría, en una de las casetas de la cooperativa.
Comentó que según se conoció, los delincuentes forzaron los candados de la caseta metálica y causaron destrozos en su interior, “aplastaron paquetes de galletas y se robaron jugos, yogures y una licuadora”, razón por la que levantaron un acta, para dejar constancia de este hecho.
El 28 de febrero pasado, se robaron 104 metros de cable eléctrico, por lo que ese día no hubo luz en toda la escuela, el que ya fue repuesto y tuvo con costo de 10 mil pesos; con el de este jueves, es el segundo robo que se comete en esa escuela durante el actual ciclo escolar.
La secundaria José Martí tiene una antigüedad de 22 años en las instalaciones que ocupan, y desde entonces, la Secretaría de Educación Guerrero no ha autorizado un vigilante o velador nocturno.
El Comité Ejecutivo de la sección 14, del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), reprobó la irrupción y los destrozos que integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) causaron en sus oficinas en la capital.
Mediante un boletín de prensa firmado por el secretario general, Javier San Martín Jaramillo, el Comité Ejecutivo señaló que el SNTE “es una institución gremial, que se constituye y conduce de manera interna por su propia norma estatutaria y en estricto apego a las reglas y leyes del Estado Mexicano, velando en todo momento por cumplir los objetivos y metas planteadas en la que se privilegia el diálogo, la inclusión, el respeto a la diversidad y tolerancia, entre otros principios rectores, que nos permite tener la unidad y fraternidad entre los agremiados, para el buen logro de los objetivos en beneficio propio y de la sociedad”.
Aunque nada menciona de la reelección del dirigente nacional Juan Díaz de la Torre, quien presidió el Séptimo Congreso Nacional Extraordinario en Puerto Vallarta, pese a que sus actos fueron suspendidos de manera legal por un juez de Tijuana, se refirió a los hechos del 12 de febrero como lamentables, debido a la irrupción “sin motivo y razón, de manera brutal y violenta”, en los que señaló como responsables a trabajadores, dirigentes y simpatizantes de la CETEG.
“Considerando que de manera sistemática, éstos (los manifestantes), han vandalizado el patrimonio del sindicato y atentado en contra de quienes pensamos de manera diferente, rebasando los límites del diálogo y la tolerancia”, el Comité Ejecutivo manifestó un: “¡Basta! A los promotores de la división, vandalismo, rapiña y todo acto que derive en perjuicio de los trabajadores y de su patrimonio”.
Reprobó categóricamente la actitud de los autores intelectuales y materiales, por los daños cuantiosos y robos al patrimonio de la sección 14 del SNTE; además, los responsabilizó por los daños físicos y emocionales de que fueron objeto los trabajadores que se encontraban en las oficinas.
Exigió a las autoridades que correspondan la recuperación “total de bienes muebles que fueron sustraídos del edificio sindical y que corresponde a 80 computadoras, 80 cañones e igual número de impresoras, consumibles y material de oficina”; también responsabilizó a los manifestantes por la pérdida total de archivos diversos para trámites de jubilación, seguros y defunciones, entre otros.
Demandó “la recuperación total de 180 electrodomésticos y línea blanca que se encontraban en la oficina de la Secretaría del Nivel Medio Superior y Superior, producto de la negociación SEG-SNTE, para el personal homologado no transferido y que su entrega a los beneficiarios se encontraba en proceso”.
Con respecto a las despensas que se encontraban en las oficinas, aseguró que se trata de “ayuda permanente” que la sección 14 del SNTE recibe para los damnificados por los huracanes y sismos; así como para los grupos vulnerables del magisterio y la sociedad, que se entregarían este jueves y viernes mediante la Benemérita Cruz Roja, “en cumplimiento con el Eje de Corresponsabilidad Social”, por lo que lamentó el saqueo “por quienes medran con la necesidad de las personas vulneradas y que se sumarían a las más de 80 toneladas de víveres ya entregadas”.
El Comité Ejecutivo de la sección 14 del SNTE aseguró que este tipo de acciones por parte de la CETEG ya rebasaron los límites de “la sana y buena convivencia”, advirtiendo que de continuar podrían originar “enfrentamientos con serias consecuencias que pudiéramos lamentar”, las cuales los sindicalizados evitan.
Por último, exhortó a los dirigentes de la CETEG “a privilegiar el diálogo y la tolerancia, en un marco de respeto mutuo y civilidad política, así como el cuidado de los bienes muebles e inmuebles, patrimonio de todos los trabajadores de la educación”.
El lunes, integrantes del magisterio disidente irrumpieron en las oficinas de la sección 14 del SNTE y extrajeron electrodomésticos, que fueron exhibidos frente al Palacio de Gobierno, así como algunas de las despensas que se encontraban en la primera planta del edificio sindical.
El Congreso local colocará cámaras de vigilancia en sus instalaciones para grabar las agresiones que sufra el inmueble durante actos de protesta y contar con elementos para presentar las denuncias correspondientes a fin de que se identifique a los responsables.
La presidenta de la Comisión de Gobierno del Congreso, la priista Flor Añorve Ocampo, informó que el Legislativo tomará esa medida porque muchas veces las denuncias que se presentan por destrozos ocasionados al inmueble durante las manifestaciones no dan resultados por falta de pruebas.
El martes, luego de la toma de protesta de Héctor Astudillo Flores como gobernador, estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos arremetieron con piedras y cohetones contra el Congreso y un grupo de policías antimotines que se hallaba en el patio principal del inmueble, a manera de bienvenida a la nueva administración.
Consultada ayer por la mañana luego de la colocación de la primera piedra de lo que será el hotel Holiday In en Chilpancingo, acto que estuvo encabezado por el gobernador Héctor Astudillo, Flor Añorve informó que el Legislativo presentará una denuncia por esos hechos.
Explicó que la denuncia será contra quien resulte responsable, pues no hay forma de identificar a las personas que lanzaron las piedras y los cohetones al interior del Congreso.
Por esta razón anunció que en la sede del Poder Legislativo se instalarán cámaras de vigilancia que grabarán las acciones de protesta que se realicen en el Congreso, a fin de que, en caso de que durante las manifestaciones el inmueble sea agredido, se pueda identificar a las personas que realicen esos actos y presentar las grabaciones como evidencia junto a las denuncias correspondientes.
“Yo estoy dispuesta a tomar las medidas necesarias, a hacer las denuncias correspondientes, también estoy con el asunto de colocación de cámaras porque a veces estas denuncias no proceden porque necesitamos llevar evidencias, que es lo que a veces ha faltado en el Congreso, esto permitirá ejercer ese tipo de denuncias”, dijo.
Indicó que aún no se sabe el monto de los daños ocasionados el martes en el Congreso, pues en el lugar ya había cristales dañados en otras protestas pero que por falta de recursos no se han cambiado.
De la nueva estrategia de seguridad que anunció el gobierno federal para Guerrero el martes pasado, manifestó que la Comisión de Gobierno confía en que este nuevo operativo funcione.
Sin embargo indicó que “este programa no va a caminar si no es con la conjunción de todas las fuerzas, de todos los poderes, y yo creo que es buen momento porque todos vamos iniciando y una preocupación muy fuerte es la inseguridad en Guerrero, así que todos debemos abonar desde nuestros ámbitos”.
Reconoció que los operativos que se han implementado en otras administraciones no han dado resultados, “pero como bien lo he dicho, un programa, una persona sola no puede con esta situación, debemos involucrarnos todos para sacar esto adelante”.