Marchan en México 9 mil ciudadanos junto a los padres de los 43 contra las reformas estructurales

Los padres de los 43 alumnos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa se sumaron a la marcha de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y del Frente Amplio Social Unitario (FASU), contra la política y reformas neoliberales que implementa y proyecta el gobierno federal, bajo el lema “Salario y empleo digno, soberanía alimentaria, unidad social y derechos humanos”.
En la marcha en la que participaron unas 9 mil personas, se hizo presente la demanda de liberación de la coordinadora de la Policía Comunitaria de Olinalá, Nestora Salgado García, a través de pequeñas pancartas de colores que distribuyeron integrantes del Comité Nestora Libre, de la Ciudad de México.
Las organizaciones campesinas, sindicales y sociales integradas a los colectivos nacionales, en solidaridad con los padres de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, llamaron a esta jornada de lucha que comenzó el 26 de enero, día de acción global por Ayotzinapa, y concluyó ayer con esta marcha nacional.
Entre sus demandas que enarbolaron está la presentación con vida de los 43 normalistas, justicia y medidas para la no repetición de los ataques del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, la libertad de los presos políticos, y solución a los conflictos de los jornaleros de San Quintín, Baja California. En general, la demanda principal fue la abrogación de las reformas estructurales y la construcción de una coalición capaz de sacar adelante una agenda social para transformar al país.
La marcha partió del Ángel de la Independencia con los coordinadores de la jornada nacional en la vanguardia, los representantes sindicales de los telefonistas, de distintas universidades y de organizaciones nacionales, entre ellos, el abogado de los padres y alumnos de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales Sierra, y el representante de los padres de familia de los 43, Melitón Ortega Martínez.
El acuerdo del orden de los contingentes fue que detrás de los representantes sindicales y dirigentes sociales irían los padres de los estudiantes desaparecidos y los normalistas de Ayotzinapa, el Frente Popular Francisco Villa, el Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM) y el Frente Popular Revolucionario (FPR), entre otros.
La marcha comenzó sin incidentes en el Paseo de Reforma, fue monitoreada por policías de Tránsito para agilizar la vialidad, hasta que cerca de la Alameda; antes de entrar al Centro Histórico, el bloque del STUNAM se metió detrás de la vanguardia con sus banderines blancos, frente a los padres de familia.
Alrededor de las 5 de la tarde, la marcha entró al primer cuadro de la ciudad, y comenzó un mitin que duró alrededor de una hora. Subieron al templete los dirigentes de las organizaciones, y después de unos momentos, llevaron a los padres de los 43 a la esquina izquierda del templete.
En su intervención, Rosales Sierra advirtió que el gobierno federal no sólo está aplicando reformas contra la población, “está desapareciendo a los luchadores y a los sindicatos, porque somos los que defenderemos a capa y espada los derechos conquistados, que nos ha permitido tener una vida mejor”.
Señaló que el movimiento de los padres de Ayotzinapa coincide con las demandas de cambio de las organizaciones y sindicatos, y dijo que están decididos a no claudicar hasta lograr la presentación con vida de sus hijos.
Lanzó un mensaje a las autoridades federales sobre la continuidad de esta lucha, “si pensaban que a un año y cuatro meses nos íbamos a cansar y nos íbamos a dividir, decimos ‘aquí estamos’, con los sindicatos, el pueblo y los trabajadores, caminando juntos por un cambio de este modelo económico que nos esta matando”.
Convocó a la reunión nacional por la dignidad que están convocado los padres de los 43 alumnos desaparecidos, este 5 de febrero, en el sindicato de los telefonistas en la Ciudad de México, para analizar y diseñar una estrategia que permita un cambio profundo en el país, sin violencia ni desapariciones forzadas.
En la protesta, activistas del movimiento Nestora Libre distribuyeron carteles exigiendo la libertad de Nestora Salgado García, que ondearon el representante de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), Francisco Jiménez Pablo; el dirigente de la Central Campesina Cardenista, Max Correa; y el secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), Mario González Aguilera.
En su pronunciamiento, la UNT y FASU llamaron a construir una coalición social capaz de llevar una agenda social para transformar al país y diseñar una plataforma para transformar el régimen económico, político y social de México.
Tras una hora de intervenciones de los líderes, concluyó el mitin político con el canto del Himno Nacional.

Protestan telefonistas afuera del Congreso del Estado en Chilpancingo en apoyo a Ayotzinapa

 

Como parte de las acciones a nivel nacional del Frente Amplio Social Unitario (FASU) para respaldar la lucha de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, ayer unos 50 trabajadores de Teléfonos de México (Telmex) realizaron un mitin afuera del Congreso local.
Los trabajadores, aglutinados en la sección 69 del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), que pertenece al FASU, se reunieron a las 5 de la tarde de este viernes en el acceso principal de la sede del Poder Legislativo, donde también se declararon en contra de las reformas estructurales.
La secretaria general de la sección 69, Erika Sevilla Lucas recordó que el 26 de enero comenzó la jornada nacional de lucha del FASU para respaldar al movimiento que encabezan los padres de los estudiantes detenidos y desaparecidos en Iguala entre el 26 y 27 de septiembre de 2014.
Este viernes, concluyeron las actividades correspondientes a esa jornada en todas las capitales de los estados del país, que sirvió para “convocar a todos los mexicanos a rechazar el actual modelo de política económica neoliberal”.
Sevilla Lucas demandó, mediante un equipo de sonido, la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos y garantías de no repetición, también se pronunció por la liberación de los presos políticos y la solución al conflicto de los jornaleros agrícolas de San Quintín, Baja California.
En el mitin, se exigió armonizar las leyes nacionales con los tratados internacionales de derechos humanos, e impulsar una ley de consulta para comunidades indígenas que contemple la creación de la figura de un comisionado con autonomía de gestión y presupuestaria.
“También exigimos la abrogación de las reformas estructurales neoliberales, la anulación de todos los contratos firmados con las empresas del sector energético privado, el rescate, desarrollo y ampliación del ejercicio pleno a los derechos sociales afectados”.
La líder sindical aseguró que con la reforma laboral el gobierno pretende desaparecer al sindicato, lo que dejaría vulnerables a todos los derechos de los trabajadores, afectando principalmente a los que tienen más años brindado sus servicios.
En el acto, los telefonistas convocaron a campesinos, mujeres, estudiantes, maestros y a investigadores a que asuman el compromiso de defender los derechos humanos e impulsar “el cambio de régimen económico, político y social que requiere nuestro país”.
Durante el mitin, no se bloqueo ninguna avenida, y después de una hora los telefonistas se retiraron.