Brenda Escobar
Petatlán
Padres de familia de la primaria Nicolás Bravo, ubicada en la comunidad Palos Blancos, municipio de Petatlán, cerraron el plantel para exigir a las autoridades educativas que cumplieran con el acuerdo de enviarles a dos maestros que hacen falta en esa escuela.
La comunidad Palos Blancos se ubica en la zona costera poniente del municipio de Petatlán y la cruza la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo.
Desde marzo de este año, los padres de familia han estado demandando a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) que les envíe a dos maestros, ya que una maestra se retiró del plantel por problemas de inseguridad y otra maestra tuvo que dejar de trabajar porque padece una enfermedad, que no le permite estar frente a grupo.
En la protesta, que duró dos horas, la presidenta del comité de padres de familia, Laura Ramírez Cervantes, recordó que en mayo pasado hubo el compromiso por parte de las autoridades, de que para el inicio del actual ciclo escolar los dos maestros ya estarían frente a grupo, “pero no cumplieron y desde que empezó el ciclo escolar hemos tenido reuniones con los delegados de Gobernación, Onécimo Llanes Moreno, y de Educación, Marcos Luna Reséndiz, para que lleguen los maestros y así nos han traído”.
Este lunes, los padres de familia encabezados por Laura Ramírez, cerraron la escuela, colocaron pancartas en las que expresaron su inconformidad y no permitieron la entrada a los maestros, aunque no acudieron los alumnos, porque previamente habían convocado a un bloqueo a la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, pero no lo hicieron porque al lugar llegaron los funcionarios ya mencionados y establecieron una plática con ellos.
Ahí, los funcionarios presentaron a uno de los nuevos maestros y se comprometieron a que en el transcurso de esta semana llegará el otro maestro que hace falta, por lo que los padres de familia aceptaron retirar las pancartas de la entrada principal de la escuela y señalaron que hoy reiniciarán las clases.