Respaldan los padres de los 43 a Antonio Tizapa, quien increpó a López Obrador en Nueva York

El padre de un normalista desaparecido de Ayotzinapa, Antonio Tizapa cuestionó al presidente del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador sobre su relación con el alcalde de Iguala José Luis Abarca y con el gobernador Ángel Aguirre Rivero cuando ocurrieron los ataques contra los estudiantes en Iguala, y en respuesta el político tabasqueño lo acusó de “provocador” y lo llamó a pedir respuestas al Ejército, después de un mitin en Nueva York el lunes.
En México el comité de padres de familia de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos, emitió un boletín para respaldar a Antonio Tizapa porque sienten el mismo dolor que el papá que vive en Estados Unidos.
En el escrito se aclara que aún cuando no tienen los detalles del caso, el 17 de marzo una comisión de padres de los 43 viajará a Washington DC a participar en las audiencias del 161 periodo Ordinario de Sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), donde se van a supervisar las investigaciones del Estado mexicano, y van a dialogar con Antonio Tizapa del incidente.
Vía telefónica Antonio Tizapa precisó que no le interesa la política ni milita en partidos políticos, ni siquiera es parte de los colectivos que se solidarizan con la presentación con vida de lo jóvenes normalistas en Estados Unidos, “simplemente soy un padre que busca a su hijo de ciertas maneras”. Corre en maratones con fotografías de su hijo para visibilizar la impunidad del caso, exigir la presentación de los estudiantes y castigo a los responsables de los ataques del 26 y 27 de septiembre de 2014.
Ayer se deslindó de las acciones por los 43 durante del mitin de López Obrador, y aclaró que al final sólo cuando los seguidores del político se habían separado de él, se acercó para hacerle dos o tres preguntas y quedó muy sorprendido con su reacción.
Del acto político aclaró que asistió porque militantes de Morena lo buscaron días antes para que estuviera en la actividad, él no estaba interesado pero insistieron incluso el domingo, un día antes.
El lunes aún no sabía si tendría tiempo de acudir. No obstante llegó temprano a la actividad y un conocido lo invitó a sentarse en la primera hilera de sillas, y ahí notó que los organizadores con chalecos beige comenzaron a observarlo constantemente y le pidieron que se quitara de ese lugar. Sin un argumento tampoco insistieron demasiado.
“No entendía qué estaba pasando luego pusieron una hilera de sillas enfrente, pensé que eso era raro, después cuando veo que llegan cuatro personas a sentarse, sólo quedan tres y mueven el micrófono del podio al otro extremo”, relató.
Finalmente llegó López Obrador, lo reciben con aplausos y una señora alzó una manta alusiva a los 43, y a los pocos minutos la subieron al frente y ahí se quedó sin decir nada. De acuerdo con la crónica de la agencia Proceso, López Obrador pidió a sus seguidores que se inconformaron con la protesta por los 43 a dejarlos manifestarse, incluso señaló que se trataba de una causa justa.
Al concluir el acto, notó que los militantes de Morena rodearon al político, también dos personas con fotografías de los 43 y Antonio Tizapa intentó acercarse pero le fue imposible.
Mientras López Obrador atendía a sus seguidores él saludó a varios conocidos activistas y reporteros, y pensó que “ya no fue posible hacerle las preguntas, ni modo”.
Cuando la gente se dispersó y López Obrador subía a su camioneta se acercó, se presentó y le preguntó de su relación con Abarca y con Aguirre cuando todavía formaba parte del PRD, “no esperaba lo que él fuera a decir: que era un provocador, pregúntale a los militares, me dejó sorprendido su respuesta”.
Observaron el suceso periodistas y algunos dijeron que el dirigente de Morena lo empujó. Antonio Legideño aseguró que no fue así, incluso dijo que guardó distancia para no tocarlo ni a él ni a su coche, estimó que tal vez sabe algo y “es necesario que lo diga”.
Informó que hace un mes en la Universidad de Columbia fue a una conferencia del dirigente del PRI, Enrique Ochoa Reza, “fui a decirle, ustedes (los priistas) ejercen la impunidad, que hace 30 meses están pidiendo que devuelvan a sus hijos y que se investigue al exdirector de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio, y a los militares”.
Ratificó que a los padres no les interesan los partidos, sólo sus hijos y que se castigue a los responsables de los ataques, los asesinatos y la desaparición forzada de los estudiantes.
Por separado, el comité de padres de familia de los 43 señalaron que tienen claro que “los responsables de la desaparición de nuestros hijos”, de acuerdo con dos informes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), son los policías de todas las corporaciones y el Ejército, y de manera indirecta los presidentes municipales de la región Norte, así como el exgobernador Ángel Aguirre.
De igual forma señalaron a funcionarios de la PGR como Tomás Zerón, “que realizó investigaciones irregulares y turbias que encubren a los responsables”, y demandaron que lo sucedido en Nueva York no debe de convertirse en una cortina de humo que desvíe la atención, para seguir investigando a los implicados en la desaparición.
Señalaron que lo fundamental para los padres es que la PGR y otras autoridades avancen en la búsqueda e investigación para dar con el paradero de sus hijos, y no van a permitir que la desaparición sea utilizada por los políticos para sacar ventaja.
“El nuestro es un tema de graves violaciones a los derechos humanos que merece una investigación exhaustiva para obtener verdad y justicia, y no debe estar sujeto a los intereses electorales”, declaran.

En México no se respeta la vida, dice desde EU el maratonista padre de uno de los 43

Antonio Tizapa, padre del normalista desaparecido de Ayotzinapa Jorge Antonio Tizapa Legideño, comenzó a correr en maratones hace cuatro años en Estados Unidos donde trabaja y vive como migrante desde 1999. Desde la desaparición forzada de los 43 alumnos de la Normal Rural de Tixtla, el 26 de septiembre de 2014, lleva en su vestimenta la demanda de presentación con vida de los estudiantes y castigo a los responsables.
Hace dos días corrió el medio maratón de Nueva York y vía telefónica desde el extranjero informó que se prepara para otras carreras en New Jersey y en Boston, Massachusetts.
Dio a conocer que este mensaje no se transmite en las cadenas nacionales de televisión, pero tiene una amplia difusión en las redes sociales.
Aseguró que en la Unión Americana hay muchos mexicanos inconformes no sólo por los crímenes atroces ocurridos hace casi un año y medio en Iguala, sino por todos los hechos de violencia que suceden en el país, y “por esta telenovela que el gobierno difunde en el extranjero”, en alusión a la fuga del narcotraficante Joaquín, El Chapo, Guzmán y su relación con la actriz Kate del Castillo, tema del que no quiso abundar.
Destacó la labor de los padres de los 43 alumnos desaparecidos que mantienen viva la exigencia en medio de tantos hechos de violencia en México. Él, dijo, quiere difundir esta demanda entre los deportistas.
Lamentó que ningún atleta mexicano o futbolista de la selección haya condenado los ataques de Iguala, a pesar del respaldo que reciben de los mexicanos cuando van a los partidos en Estados Unidos, “de ellos no hemos obtenido nada, ni un decir ya basta, sé que hay reglas pero se trata de humanismo, no de profesionalismo”.
De esta campaña por las calles de diferentes ciudades señaló que muchos activistas “de gran corazón”, están ahí para documentar la protesta y levantar la voz. En el medio maratón de Nueva York volvieron a contar del 1 al 43 junto al grito de justicia, lo que se difunde en un video en Internet.
Está seguro que estas acciones llegan a oídos de los gobiernos, de los deportistas y amplios sectores de la sociedad.
De esta experiencia recordó que el primer maratón que hizo por los 43, el primero de noviembre, encontró a dos políticos de origen hispano de los que no supo precisar sus nombres, pero esperaba de ellos una palabra de solidaridad y de apoyo, “dije, como paisano quizá te van a echar la mano”, sin embargo en el saludo sólo hablaron de que la situación era muy grave en México.
Adelantó que participará en un maratón el primero de Mayo, y espera que su hijo y sus compañeros ya se encuentran de regreso con sus madres, sino es así seguirá denunciando la violencia que vive la nación.
Indicó que en Estados Unidos, México está catalogado como un país seguro y exige que se le saque de esa categoría porque no se respeta la vida, no sólo de los estudiantes sino que todos los ciudadanos están en riesgo.
De una de las visitas del presidente Enrique Peña Nieto a las Naciones Unidas para decir que el país está bien, que no hay violaciones a los derechos humanos de los agentes del gobierno, respondió “si dices que todo está seguro quizá en tu círculo, pero ven a vivir a mi círculo y me dices si es seguro”.
Aunque en los maratones todavía hay personas que se sorprenden por su causa y otros le toman fotos, llevan pancartas y grita forty three con ellos “voy a seguir en esto”.
Recordó que el trabajo en los Estados Unidos es duro, emigró a este país porque no tuvo otra opción. Estudió una carrera técnica que resultó insuficiente para conseguir un empleo bien remunerado.
“La verdad el trabajo es forzado allá (en México), acá también es forzado pero se siente más tranquilo”, dijo.
De su hijo con quien siempre tuvo comunicación telefónica y en los últimos años en redes sociales, recordó que hablaron de su decisión de entrar a la Normal Rural, “yo le decía, su mamá le decía, tú sabes, tienes todo nuestro apoyo”. Antes quiso entrar a otra Normal Rural en el Estado de México.
Ya en Ayotzinapa le pidieron que le echara muchas ganas, “te gusta la escuela échale ganas y cómo le decía, el bien es para ti no para mi. Nosotros nada queremos, es para ti y tu familia más no para mi ni su mamá”.
El 27 de septiembre después de los ataques su hija le llamó para darle la noticia, “me comuniqué con él pero no contestó, pensé esto ya pasará, no es la primera vez, pero conforme pasaron los días las cosas se van complicando”.
Pidió que se lleve a juicio al exgobernador Ángel Aguirre Rivero, al exprocurador Jesús Murillo Karam que creó una hipótesis para cerrar el caso, y a todos los involucrados, “nadie se va a librar de esto, no quiero que se mueran, que se enjuicien, que paguen por lo que han hecho”.