No llegan para reiniciar clases algunos maestros del corredor de la sierra en Costa Grande

Padres de familia de la comunidad Las Mesas, municipio de Petatlán, denunciaron que este lunes no llegaron los maestros del nivel básico a dar clases, como había sido el compromiso de las autoridades educativas.
Vía telefónica, uno de los padres de familia de esa comunidad, que se encuentra en el corredor Santa Rosa de Lima-El Durazno, dijo que desde la pandemia, los maestros se retiraron de ese poblado y estuvieron dando clases en línea, lo que no tuvo ningún provecho en los alumnos, “porque acá no todos tienen la manera de tener internet y ahora, desde las vacaciones de diciembre que se fueron, ya no regresaron”.
Comentó que siguen esperando a que lleguen los maestros, así como se lo solicitaron a las autoridades, “pero los maestros dicen que no van a subir, que a menos que nosotros como padres de familia les garanticemos la seguridad. Pero si no la tenemos ni garantizada ni para uno mismo, cómo les vamos a garantizar eso. Uno no es saurín para saber qué va a pasar”.
“Según que no quieren subir que porque está la inseguridad. Nosotros queremos decirles que la última vez que hubo algo violento por acá fue el 10 de febrero, pero desde ahí no ha habido ningún otro problema; además, están aquí dos camionetas con policías ministeriales, pensamos que sí hay modo de que ellos regresen a darles clases a nuestros hijos”.
Por su parte, vía telefónica, la comisaria municipal de El Durazno, Azucena Rosas García, manifestó que este lunes no se presentaron los maestros del nivel básico ni tampoco los de telebachillerato, pero que le avisaron “que van a subir mañana martes y la maestra de la primaria dijo que iba a ir a Chilpancingo, a recibir su nombramiento, y que sube el jueves”. (Brenda Escobar / Zihuatanejo).

 

No hay clases debido a la violencia en la sierra en la ruta de Santa Rosa a El Durazno, denuncian

 

Habitantes del corredor Santa Rosa de Lima-El Durazno, que junta comunidades rurales de los municipios de Petatlán, Tecpan de Galeana y Coyuca de Catalán, lamentaron que ante la inseguridad de la región, los principales afectados de manera directa son niños y adolescentes que siguen sin tener clases desde el periodo vacacional de diciembre, “se puede decir que están perdiendo el ciclo escolar porque los maestros tienen miedo de subir a la sierra y con justa razón”.
En comunidades como Las Mesas, El Porvenir, El Parotal, El Mameycito, Arroyo Verde, El Cayado, Corrales, El Durazno, Santa Rosa, entre otras, no hay clases en ningún nivel educativo desde la masacre en El Durazno el 10 de diciembre pasado, que derivó en más violencia en El Parotal, La Calera de Santa Lucía, El Manguito, Santa Rosa y recientemente en Las Mesas.
Ayer lunes vía telefónica, uno de los habitantes de estas comunidades, se dolió de la falta de interés de los gobiernos federal y estatal para establecer el orden y la paz social en esa región, “no es posible que teniendo el conocimiento, los hombres suficientes, el armamento igual o mejor que el que trae esa gente que anda haciendo males, no es posible que no sean capaces de enfrentarlos para que dejen vivir en paz”.
Dijo que el miércoles de la semana pasada estuvo en la reunión con el director de Gobernación Francisco Rodríguez Cisneros, con comisarios municipales y comisariados ejidales, en donde “le hicieron ver que los niños no tienen clases desde diciembre porque tienen miedo de subir a los pueblos porque la situación está difícil”.
“Según salió el compromiso de que iban a dar una respuesta para que pusieran las bases (de Operaciones Mixtas) acá arriba y entonces sí, los maestros pudieran venir a dar clases, también los doctores que hacen falta, pero pasó esto de Las Mesas, ¿usted cree que van a querer subir los maestros?, no van a querer y no los culpamos porque con el ataque a Las Mesas muchas familias se están saliendo de ahí y de otros pueblos, se están yendo para otros lugares”.
Criticó que los gobiernos federal y estatal “sean tan buenos con esa gente, no los persiguen, no los molestan, no les hacen nada, al contrario, hasta parece que mandaron a los soldados ahí en Santa Rosa para que cuiden que la gente no se defienda mientras ellos entran a los pueblos a meter miedo, terror, a agarrar a gente inocente y sacarle las tripas para que las familias nos salgamos y dejemos nuestras tierras”.

Matan a un hombre en ataque a Las Mesas, sierra de Petatlán; señalan vecinos a la FM

Un adulto mayor fue asesinado por presuntos integrantes del grupo delincuencial La Familia Michoacana (FM), en un ataque a balazos a la comunidad Las Mesas, en la sierra del municipio de Petatlán, la madrugada del sábado 11.
Habitantes de esa localidad denunciaron que esa madrugada, a las 3 de la mañana, cuando todos estaban durmiendo, fueron despertados por las fuertes detonaciones de los balazos y que este hecho causó terror entre los vecinos, principalmente en mujeres, niños y adultos mayores que a esa hora buscaron refugio debajo de sus camas y otros más corrieron hacia el monte para ponerse a salvo de los disparos.
La comunidad Las Mesas se ubica en la sierra oriente del municipio de Petatlán y está en el corredor de la ruta Santa Rosa-El Durazno; las principales actividades económicas de la población son la agricultura y la ganadería.
Uno de los pobladores, vía telefónica, dijo que la víctima fatal de este ataque fue un adulto mayor que vivía casi a las afueras de la comunidad y que fue asesinado de manera muy cruel; agregó que en el momento del ataque, algunos vecinos pidieron ayuda por teléfono a funcionarios del gobierno del estado para que los militares que están en la Base de Operaciones Mixtas (BOM) en la entrada a Santa Rosa, subieran a apoyarlos pero que ese día del ataque pasaron más de 12 horas y no llegaban.
Comentó que vecinos de Santa Rosa dieron aviso a los militares que están en la entrada al poblado, pero que les respondieron que no están autorizados para salir de noche, “por eso llegaron acá hasta 12 horas después de que pasó todo y por la mañana del sábado y hoy domingo todavía, algunas familias empezaron a salirse a dejar sus casas porque tienen miedo”.
“La gente está empezando a salirse y otros están enojados y dispuestos a enfrentarse con ellos porque dicen que lo que están haciendo es terrorismo, lo que quieren es meter miedo a los pueblos, para que se salgan y ellos adueñarse de todo lo que dejen y que los que se queden, que se pongan sumisos para empezarles a cobrar cuota como lo hacen en Tierra Caliente donde hasta a los que trabajan de peones les cobran 50 pesos por trabajar y si no, los matan”.
El vecino atribuyó esta agresión a una represalia por parte del grupo delincuencial, ya que hacía apenas tres días, es decir, el miércoles de la semana pasada, que las autoridades locales de esa comunidad y de ese ejido, acudieron a una reunión en Santa Rosa con funcionarios del gobierno del estado donde pidieron de manera urgente una BOM en ese poblado porque es un lugar estratégico para que los delincuentes puedan llegar hacia Petatlán y a Santa Rosa.
“Nosotros somos una comunidad de gente que no se mete en problemas y que no hace el mal a nadie, al contrario, la mayoría de las familias que viven aquí, si no es que todos, somos familias católicas que hemos hecho procesiones por las calles de la comunidad para orar por la paz de la región y la paz del mundo; hacemos rosarios, ofrecemos misas por la paz porque si no hay paz, no se puede hacer nada”.
Dijo que lo que pasó en Las Mesas, debería de ser una situación que debe preocupar a los habitantes de Petatlán y de Zihuatanejo, “porque este grupo está metiéndose y si no lo para el gobierno, entonces la gente de allá van a empezar a sentir lo que nosotros estamos sintiendo acá de este lado y lo que siente toda la población de la Tierra Caliente donde este grupo ha hecho tanto daño”.
“Nos sentimos solos, como despreciados por la demás gente, como si nosotros no valiéramos como personas, aunque vivimos en la sierra, nos damos cuenta de lo que pasa y nos da tristeza que nadie, ni los políticos, esos que luego suben a vernos para que les demos el voto porque quieren ser gobernadores, diputados federales, presidentes municipales, diputados locales, nadie alza la voz para pedirle al gobierno que detenga a esos delincuentes y dejen de hacer tanto daño”.
Al presidente Andrés Manuel López Obrador, “le exigimos que ya paren a La Familia Michoacana, que ya no sigan matando, extorsionando, desplazando comunidades enteras, tenemos derecho a vivir en paz, no somos gente de guerra, somos gente de paz, gente de trabajo, que detengan a esos que no quieren trabajar honradamente”. (Redacción).