Acuden familias al panteón de Las Cruces a arreglar las tumbas para el Día de Muertos

Familias se dieron cita en el panteón de Las Cruces para acompañar a sus difuntos y reunirse con quienes ya partieron a “otro plano”.
Los integrantes de la familia Muñiz Estévez llegaron a bordo de una camioneta 4×4 a la 1 de la tarde. Cubiertos con sombreros, sombrillas y con apenas un galón de agua, comentaron que solo limpiarían la tumba del abuelo Macri para pasar parte del día con él hoy.
“Ahorita nada más venimos a limpiar y a darle una pintada a la tumba porque ya tiene tiempo que no venimos”, dijo la señora Elvira, la mayor de las mujeres del grupo conformado por ocho personas: cuatro mujeres dos hombres una anciana y un niño de 5 años.
El grupo de acapulqueños, avecindados en Ciudad Renacimiento, descendieron de la caja de la camioneta, bajaron un bolso con tortas y se dirigieron al lado derecho del panteón.
Uno de los jóvenes que acompañaba y atendía más las indicaciones de doña Elvira, Esteban, comentó que desde niño él acompañaba a su abuela. Cargaba las flores, la cubeta de agua y la escoba para barrer. Detalló que desde hacía 10 años, desde que tenía 9, visitaba la tumba de su abuelo, ayudaba a su abuela en la limpieza del sepulcro de don Mauricio Muñiz, originario de Michoacán, quien llegó a Acapulco a trabajar en la hotelería.
Los integrantes de la familia comentaron que no era habitual que llegaran tantas personas para limpiar la tumba, pero que en esta ocasión habían decidido ir todos los que estaban descansando para ayudar a su abuela.
“Casi siempre veníamos mi abuelita y yo a ver a mi abuelo Macri, pero ahora nos quisieron acompañar todos, hasta el más pequeño. Pensamos que mañana vendremos para almorzar acá y pasar la mañana con el abuelo”, dijo el universitario.
La señora Elvira indicó que desde la muerte de su esposo, hace 10 años, ha visitado el sepulcro cada 2 de noviembre, el día de su cumpleaños y cada aniversario de bodas.
“Cada 2 de noviembre nosotros venimos juntos, así como el Día del Padre, yo vengo a ver a mi esposo porque aún lo extrañamos”, comentó la mujer, quien se encaminaba a la tumba.
Otros integrantes de la familia compraron flores entre los puestos asentados sobre la banqueta y se las mostraron a la matriarca, entre ellas cempasúchil, rollos de terciopelo y la escoba que no podía faltar para barrer los restos de las flores de otros meses.
Los demás compraron bebidas y algo para comer. Escogieron entre los bolillos con relleno de cerdo o de pollo, las enchiladas, los tamales o las frituras; entre el chilate, los refrescos, las bebidas energizantes, los refrescos y el agua.
Comentaron que más tarde, después de sus labores de limpieza, irían a una misa en su colonia dedicada a los difuntos.

 

 

Ofrendan organizaciones a los desaparecidos, activistas y luchadores en el Zócalo de la capital

 

La alternativa a la inseguridad agravada en los periodos de transición de los gobiernos, es la organización de la sociedad para obligar al Estado a cumplir con sus funciones señaló el director del Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco), Javier Monroy, en el altar de Día de Muertos para recordar a los desaparecidos, activistas y luchadores sociales, la mayoría de ellos asesinados, que instalaron organizaciones en el Zócalo de esta ciudad.
Denunció que los secuestros difundidos en los últimos días no representan ni el 10 por ciento en la capital, pues por medio del Comité de Familiares y Amigos de Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados en Guerrero reciben información de otros casos.
Reconoció que estos datos no se pueden confirmar pero personas liberadas sin la intervención de las autoridades, dijeron que “hay muchos más en las casas de seguridad”, donde estuvieron retenidos.
También hay casos de secuestrados que fueron asesinados y no se denunciaron por temor, y de los rescatados recientemente, fueron encontrados en Morelos, dijo.
Javier Monroy expuso que el Tadeco ha denunciado hace mucho tiempo que en Guerrero existe una crisis humanitaria, pero en estos momentos la crisis mayor es de seguridad, “porque se incrementa y las autoridades no dan pie con bola”.
Resultado del monitoreo que hacen, señaló que la violencia se incrementa en los cambios de gobierno, como sucedió en la transición de René Juárez y Zeferino Torreblanca, y cuando éste último entregó a Ángel Aguirre Rivero.
Ocurre de nuevo con Héctor Astudillo Flores, “entendemos que no es gratis, porque hay un reacomodo de las empresas del narco a partir de compromisos que hacen con candidatos. Este reacomodo lleva a ajustes de cuentas y confrontaciones muy fuertes, donde lamentablemente cae mucha gente que no está vinculada”.
Señaló que hace 15 y 20 años sólo se hablaba de dos o tres cárteles, ahora en cada región hay muchos.
Añadió que no se puede aceptar que se enfrente el problema con más policías y militares, como propuso el nuevo gobernador, porque el problema está en la relación del crimen con el gobierno, “el narcotráfico sostiene la riqueza del país, y (las autoridades) no van a enfrentarlos porque se ponen la soga al cuello”.
Dijo que la presencia de policías y militares sólo pretende la contención social, porque en cualquier momento la población puede reaccionar y va a responder ante las injusticias y la impunidad. Pero opinó que sería un error de los ciudadanos hacer la tarea del Estado, si se arman para enfrentar a la delincuencia.
Aclaró que a quien le corresponde buscar en las fosas a los muertos y detener a los delincuentes es al Estado.
Agregó que la Policía Comunitaria es la solución en algunos lugares, pero un proyecto con principios no con intereses de grupo.
Reconoció también que son tiempos difíciles para las organizaciones, “cada uno piensa en si mismo”, y se estigmatiza a quien lucha por los presos, los asesinados y los desaparecidos.
Llamó a la población a organizarse y adoptar a un secuestrado, desaparecido o asesinado para reclamarlos, porque las autoridades tienen doble moral “dicen que casi no duermen por esta situación, pero todos los recursos y personas con las que cuenta el Estado se destinan a otra cosa, menos a proteger a la ciudadanía”.
Ayer hubo actividades culturales en el altar que colocaron el Comité de Familiares y Amigos de Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados en Guerrero, Nahuales de Ixtlitezcatl, el Comité Independiente de Solidaridad con los caídos del 60, la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero, el Frente Democrático Unitario en Lucha y el Tadeco.
La ofrenda se colocó frente a la catedral, donde pusieron fotografías de los alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa asesinados en 2011, la defensora de derechos humanos Digna Ochoa, luchadores sociales asesinados en 2013 como Rocío Mesino, también la foto de Isidro Ortiz Bernal, Chilo, y el universitario Renato Ravelo Lecuona. d

Visitan unos 20 mil vecinos los dos panteones de Chilpancingo para ofrendar a sus difuntos

En el segundo día de la celebración del Día de Muertos unos 20 mil vecinos visitaron los dos panteones de la capital, quienes desde las 8 de la mañana comenzaron a llegar, algunos con flores, música y comida para sus fieles difuntos.
En un recorrido por el panteón central y el nuevo se observó mucha afluencia, en donde la Policía Municipal, Bomberos, Protección Civil (PC) y Tránsito implementaron una operación para evitar algún percance.
En la entrada del panteón se observó a algunas familias comprando flores, veladoras, botes, y comida para adornar las tumbas de familiares y amigos. En la entrada, algunos niños ofrecían sus servicios de limpieza y para acarrear agua.
Dentro del panteón se escucharon canciones como, Te Vas Ángel mío, Cruz de madera y Una página más, se escucharon también llantos de mujeres, mientras que otros rezaban en la tumba de quien en vida fuera un ser querido, el ambiente se alegraba por los niños que corrían, gritaban y brincaban en las tumbas.
Algunos visitantes se quejaron de los altos precios de las flores y del poco espacio para caminar en el panteón, porque las tumbas están muy juntas, dijeron.
Pese a que estuvo prohibido vender dentro de los panteones, comerciantes de comida y golosinas ofrecieron sus productos sin ningún problema, porque el personal de Gobernación del Ayuntamiento cobró.
A las 12 del día el obispo de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza y el sacerdote Benito Cuenca Mayo ofrecieron una misa por la celebración del Día de Muertos.
Los comerciantes de flores, veladoras, adornos y comida coincidieron en que la venta de este año fue similar a la del 2014, “no hubo ni altas ni bajas, hubo muy buena respuesta de los vecinos”, dijo un comerciante de flores.
El coordinador de Protección Civil municipal, Gustavo Vela Guevara dijo que unas 15 mil personas acudieron al panteón central, a una cuadra del encauzamiento del río Huacapa, y casi 5 mil en panteón nuevo ubicado al norte de la ciudad, sobre el bulevar Vicente Guerrero.
No hubo percances durante la celebración del Día de los Muertos, “sólo dos señoras mayores fueron atendidas porque se les bajó la presión”, dijo el coordinador de PC municipal.
Agregó que el panteón central estaría abierto hasta las 9 de la noche, y el nuevo hasta las 7 porque no hay suficientes lámparas.

No visitan organizaciones ni familiares las tumbas de guerrilleros sepultados en Atoyac

Desde hace cinco años, las tumbas de los tres guerrilleros que están sepultados en el panteón Libertad de ciudad de Atoyac, han dejado de ser visitados, cuando en años anteriores hasta columnas de grupos armados dejaban flores en su aniversario luctuoso y en Día de Muertos.
Este Día de Muertos, ni organizaciones sociales ni familiares visitaron las tumbas de los tres guerrilleros sepultados en el panteón Libertad de la ciudad de Atoyac ubicado en la periferia de la ciudad de Atoyac.
Desde el año pasado se acentuó el olvido de las tumbas, principalmente una colectiva donde están sepultados dos guerrilleros que murieron en un enfrentamiento en El Guanábano, de la cual sólo hay una lápida sin la cruz que estaba en años pasados.
Para este año, de la tumba de los combatientes de El Guanábano se retiró la tierra que la tapaba, ya que había quedado cubierta accidentalmente durante los trabajos de maquinaria pesada que arregló el camino.
Asimismo, la tumba del joven Isidro Molina Sánchez, originario de Agua Fría, quien murió en enfrentamiento en San Juan de las Flores, luce abandonada y con los floreros rotos.
Sólo hojas secas y basura a los costados de las tumbas que años pasados eran visitadas por organizaciones sociales y, anónimamente, por grupos armados que llegaban al lugar cuando no estaba tan poblado.
La figura de los guerrilleros ha sido parte de la bandera y los discursos de organizaciones sociales principalmente en el aniversario de Lucio Cabañas.

Llenan familias de Chilpancingo con flores y velas los dos panteones para festejar el Día de Muertos

En el primer día de festejos de Todos los Santos los dos principales panteones en la capital están listos para recibir a las familias que llevan flores y velas a sus parientes; en la entrada de los panteones el Parque Cementerio La Paz instaló sus puestos de información para ofrecer la venta de criptas desde 35 mil pesos.
En el panteón central ubicado a una cuadra del encauzamiento del río Huacapa se observó que hay poca afluencia de familias, sólo algunos niños y señoras realizaban la limpieza de sepulcros.
Algunas mujeres que se ofrecieron a limpiar las tumbas, pertenecen a familias de damnificados por la tormenta tropical Manuel, quienes aprovechan la fecha para ganar “unos centavos más”.
Se observaron algunos niños entre 7 y 12 años, quienes se encontraban en el estacionamiento con cubetas y latas de metal, para ofrecer sus servicios de limpieza, sólo algunas personas de edad avanzada los contrataban.
En el panteón central hay sobrepoblación, lo que ha ocasionado que algunas tumbas estén sobre otras; en la parte principal se concentran la mayor cantidad de criptas, muchas de ellas con decoraciones ostentosas.
Desde temprano la dirección de Tránsito municipal, la Policía Municipal y la dirección de Gobernación instalaron una operación en los dos panteones de Chilpancingo, para mantener una circulación fluida de carros y personas.
El panteón central lucía limpio porque hay brigadas de limpieza del Ayuntamiento, que constantemente recorrían los pasillos, para evitar que la basura se acumulara. También se observó un camión de Obras Públicas para mantener desahogado el contenedor de basura del panteón, ya que los vecinos al limpiar las tumbas arrancan plantas, quitan arreglos viejos y flores secas.
Entre brochas, escobas, detergente, cubetas de pinturas, algunos vecinos se organizaban para asignar tareas y atender la tumba de sus familiares.
Para aprovechar la oportunidad, el Parque Cementerio La Paz instaló sus puestos de información en los dos panteones, donde ofreció la venta de criptas desde 35 mil pesos.
En la entrada de los panteones se repartieron folletos para promocionar las “fosas tipo ideal”, son gavetas para 2, 3 y 4 personas, los precios van de 35 mil a 56 mil pesos de anualidad, que incluye la construcción de una lápida, una plancha, dos floreros y servicios para el entierro.
Para acceder al plan de venta se deben de pagar mensualidades desde 620 pesos, dependiendo de la gaveta que se elija.
En la capital del estado no se cuenta con más panteones públicos, lo que implica un gasto importante para los vecinos para enterrar a sus familiares.
En el caso del conocido Panteón Nuevo ubicado al norte de la ciudad, sobre el bulevar Vicente Guerrero, la situación que se vivió fue similar, y se permitió la instalación de vendedoras de comida, lo que ocasionó dificultades para que los carros pudieran estacionarse y salir del lugar.

Este Día de Muertos, en Atoyac, a lo alto de la estatua de Lucio Cabañas estaba el número 43

Atoyac se convirtió en el principal proveedor de flores en la región, por la mañana del sábado y domingo se observaron muchos autos que llegaron a la ciudad para hacer compras del Día de Muertos.
Algunos vecinos y creyentes de esta tradición dijeron que gastan de 300 pesos a mil pesos, las familias que gastan más tienen como siete difuntos.
Las flores de cempasúchil, amaranto y otras variedades inundaron el primer cuadro de la ciudad, en donde cerraron las calles principales para la venta.
Los vendedores de flores no sólo estuvieron en el centro, también en las colonias y las principales entradas de los negocios de la ciudad.
Los vecinos compran coronas de flores, ramos de flores naturales para su altar, velas, comida, dulces y bebidas, en algunos casos alcohólicas.
En el Zócalo de la cuidad se observó un altar hecho por el DIF de Atoyac, decorado con catrinas y figuras alusivas al Halloween, algunos vecinos dijeron que “es importante rescatar las traiciones que tenemos, pero pusieron dos calabazas gigantes de las que usan los gringos”.
Asimismo, el monumento de Lucio Cabañas tenía tres ramos de flores de cempasúchil, la bandera de México y el número 43 en lo alto de la estatua, donde visitantes y vecinos se tomaron fotos.

Bajó 50% la venta de productos del Día de Muertos, se quejan comerciantes

Comerciantes del Mercado Central y del Tianguis Campesino se quejaron que este año bajaron un 50 por ciento las ventas de productos del Día de Muertos.
Para el comerciante del Mercado Central, Enrique Morelos, este año es uno de los más difíciles pues ha visto a la ciudadanía “muy apática”. En los últimos cinco años la intención de compra de calaveras de dulce, pan de muerto, veladoras y tendidos de papel picado, ha bajado drásticamente.
Aseguró que sus clientes asiduos por años son los estudiantes que montan altares en sus escuelas, y que desde el lunes que inició la venta de los artículos alusivos fue evidente la ausencia de los menores de edad.
Por su parte, la vendedora de plantas de invernadero en el Tianguis Campesino, Rogaciana Cuevas Felipe, manifestó que a dos días de que puso en venta cempasúchil en macetas no se han vendido en la misma proporción que años anteriores. Sólo el miércoles y jueves vendió 150 macetas cuando hace un año era el doble.
Estimó que acercándose los días de muertos pueda incrementar su venta a 200 macetas por días. Cada una cuesta 30 pesos.
Aseguró que prefiere vender la flor en maceta que en cadena o suelta porque se recupera el 50 por ciento, mientras que la cadena “no sale”.