Karina Contreras
El abogado general de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Jaime Kahan Hernández, acudió a las instalaciones de los Laboratorios de Análisis Clínicos, para dialogar con los trabajadores que mantienen un paro de labores desde hace 30 días, pero no se llegaron a acuerdos.
En un video, el delegado sindical Flaviano Herrera Mejía dijo que nada más los fueron amenazar, porque fueron más de 15 funcionarios. El dirigente sindical manifestó que la administración, que encabeza el rector Javier Saldaña Almazán y el dirigente del Sindicato de Trabajadores Académicos de la UAG (STAUAG), Ofelio Martínez Llanes, no han atenido sus demandas.
Señaló que fueron amenazados, por exigir sus derechos, por todo el departamento jurídico de la UAG, “sólo acudieron a intimidarlos y no a resolver los problemas que hay”. Señaló que no van a “claudicar en sus justas demandas” e insistió en que en los laboratorios no cuentan con insumos para hacer los estudios clínicos que se demandan.
Mientras, el abogado general de la UAG, Jaime Kahan, indicó que a la reunión acudió una comisión ampliada, que incluyó a las áreas de Derechos Humanos, Contraloría y Asuntos Jurídicos, y llevaba carácter de resolutiva.
Agregó el funcionario que en ningún momento se les amenazó, pero sí dijo que hay procedimientos que se siguen cuando se atenta contra el patrimonio de la UAG y recalcó que los “cuatro” inconformes no acudieron a la audiencia que les ofreció el rector Javier Saldaña Almazán, pues a fuerza quieren que vaya a los laboratorios, por lo que la “UAG no puede ser presa”.
Subrayó que quienes conocen al rector, saben que es un hombre que le gusta el diálogo, que es un hombre de buena voluntad y le gusta generar consensos, pero los manifestantes están en todo o nada, no quieren generar un punto medio.
Indicó que no es amenaza el decir que hay un procedimiento que se sigue y que se les dijo, a lo que ellos respondieron que “están dispuestos a que se inicien los procedimientos que se deban realizar”. Agregó que se les hizo saber que lo que están haciendo es una acción ilegal, porque están obstaculizando los accesos al centro de trabajo y es una toma “ilegal, porque no tienen motivos justificables reales para realizarla”.
Aseguró que se les dijo que si ellos siguen en ese tipo de acciones, se tienen que tomar las medidas y acciones legales, con base en la normativa, lo cual no es una amenaza. Señaló que se les dijo que la administración tiene la voluntad de solucionar las cosas, pero ellos no quieren y que se dieron cuenta de que, más que mejorar sus condiciones de su centro de trabajo, buscan un beneficio personal.
Indicó que entre las peticiones que tienen los manifestantes está que se contrate a sus hijos y que la jefa de los laboratorios sea puesta por ellos, cuando eso es facultad del rector. Agregó el abogado que acudieron a los laboratorios para tomarle protesta a una encargada de éste e iniciar el diálogo, pero los manifestantes están cerrados radicalmente y piden equipo nuevo y contrataciones, pero que sean sus hijos.
El abogado añadió que los laboratorios no pueden estar cerrados y señaló que los pacientes no pueden acceder al servicio médico, porque los inconformes tienen cerrada la entrada.
Indicó que, como trabajadores de la universidad, tienen que hacer su trabajo, que no fueron amenazar y que no se puede bloquear un acceso a las instalaciones universitarias. Dijo que hay quejas porque con esta toma se genera que el laboratorio no funcione y el servicio médico no pueda funcionar.
