Ejecutan a cinco hombres en un taller en un pueblo de Taxco y a otro en la cabecera municipal

La tarde de ayer cinco hombres fueron ejecutados a balazos en un taller de hojalatería y pintura de la comunidad de Casino de la Unión, municipio de Taxco, en la carretera federal hacia Cuernavaca cerca de los límites con Morelos.
En un hecho distinto la tarde de ayer un vendedor de cocos fue asesinado a balazos en el barrio de El Gigante, en la cabecera del mismo municipio.
En un boletín el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia informó que alrededor de las 3 de la tarde de este miércoles cinco hombres fueron asesinados a balazos en la comunidad de Casino de la Unión.
Afirmó que según las primeras indagatorias de agentes de la Fiscalía General del Estado, testigos informaron que los asesinos fueron dos hombres y una mujer que viajaban en dos motocicletas, quienes llegaron al taller mecánico en donde estaban las cinco víctimas y sin más les dispararon.
Además se informó que en otro hecho seis hombres armados a bordo de tres motocicletas quemaron dos vehículos Nissan Tsuru en la comunidad de Paintla, en el municipio de Taxco.
Con esta nueva escalada de violencia en ese municipio suman 49 ejecutados en hechos en los que presuntamente ha estado relacionada la delincuencia organizada, de acuerdo con el registro de notas periodísticas publicadas en El Sur.
Reportes de fuentes policiacas indican que minutos antes de las 4 de la tarde de ayer, vecinos de la comunidad de Casino de la Unión informaron de una balacera y de al menos tres heridos.
Policías municipales, estatales, soldados del Ejército y rescatistas de Protección Civil llegaron al lugar y confirmaron que en un taller de hojalatería y pintura en la orilla de la carretera federal, había cinco hombres ejecutados a balazos.
Las víctimas del múltiple homicidio fueron identificadas por familiares y vecinos de la comunidad como Reynaldo de 38 años, Noel Timoteo de 30,  Martín de 39, Raúl de 30 y Víctor de 19, vecinos de Casino de la Unión y otras comunidaes cercanas como San Miguel Acuitlapa y Texcaltitla, municipio de Taxco.
Según los reportes policiacos y la información dada a conocer por testigos, dos hombres y una mujer llegaron a bordo de dos motocicletas abrieron fuego en contra de las personas que había en el taller de hojalatería. Afuera del negocio quedaron dos cuerpos y otros tres adentro.
La zona fue acordonada por agentes de las diferentes corporaciones policiacas y militares. Cerca de las 5 de la tarde llegaron peritos en criminalística y agentes del Ministerio Público de la Fiscalía del estado para el levantamiento de evidencias y agregarlas a la carpeta de investigación.
Se dio a conocer que fueron encontrados múltiples casquillos percutidos calibre .9 milímetros.
Al concluir las diligencias los cinco cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense de Iguala.

Otro ataque en El Gigante

En otro hecho y unas 3 horas después del ataque en Casino de la Unión, un vendedor de cocos fue ejecutado en el barrio de El Gigante, en la cabecera municipal de Taxco.
Fuentes policiacas reportaron que minutos después de las 7 de la tarde de ayer, un hombre armado a bordo de una motocicleta atacó a balazos a un vendedor de cocos en su negocio, en la carretera federal México-Acapulco en la avenida de Los Plateros, en la desviación hacia la vía alterna de Taxco y el municipio de Ixcateopan.
La víctima fue identificada como Luis de 21 años, vecino de ese municipio.
La zona fue asegurada y agentes de la Fiscalía del estado hicieron las diligencias. En el lugar fueron hallados cinco casquillos percutidos calibre .9 milímetros y el cuerpo fue enviado al Semefo de Iguala.

El incendio

En otro hecho fuentes policiacas de seguridad pública estatal informaron que al 911 vecinos de la comunidad de Paintla reportaron la presencia de seis hombres armados, quienes iban a bordo de tres motocicletas.
Los reportes indican que en la colonia Los Reyes en la avenida principal de la comunidad de Paintla y cerca del sitio de taxis, los delincuentes le prendieron fuego a dos vehículos Nissan Tsuru y se fueron rumbo a la comunidad de Atzala, sin que nadie intentara detenerlos.
No se dio a conocer que hubiera personas lesionadas, solo que los hombres armados llevaban sudaderas azul, blanco y negro.

Secuestraron civiles armados a 12 comerciantes y una bebé en Ajuchitlán; huyen y los abandonan

Anoche 12 comerciantes y una bebé de 10 meses que fueron secuestrados por civiles armados, fueron liberados en las inmediaciones de la comunidad Las Anonita, municipio de Ajuchitlán del Progreso, por soldados del Ejército y policías del estado, informó el vocero de seguridad Roberto Álvarez Heredia.
Por otra parte, los primeros informes señalan que fueron privados de su libertad el lunes por civiles armados en el crucero de la comunidad de Villa Nicolás, en dirección a Las Anonitas.
Fuentes de seguridad informaron que los rescatados son comerciantes tianguistas que recorren varios pueblos en los días en que se paga el programa Prospera, y que los hombres armados los secuestraron y se llevaron también tres camionetas con mercancía, en las que viajaban, desde la tarde del lunes.
Las versiones indican que el Ejército recorría esa zona la noche del martes y los secuestradores se dieron a la fuga al ver las patrullas, lo que les provocó sospechas.
Cuando los militares se acercaron vieron a la gente en el piso en un camino de terracería y sus camionetas en los costados, quienes informaron que habían sido secuestrados.
El lugar en donde se encontraban retenidos es un camino de terracería que conduce a Las Anonitas, la única población ubicada aproximadamente a 20 km de la carretera estatal que va de Ajuchitlán a Coyuca de Catalán y donde está también el pueblo de Villa Nicolás.
De los delincuentes no se pudo conocer su identidad pero dejaron abandonado en ese lugar un taxi del sitio Tlapehuala.
No se reportó que estuvieran pidiendo dinero por la libertad de los secuestrados por lo que se desconoce la intención de los sicarios de mantenerlos retenidos.
Entre quienes presentaron su declaración había algunos jóvenes que en el pantalón tenían manchas de sangre.
Se informó que algunas de las víctimas son de Altamirano, otras de Ajuchitlán, otro grupo del Estado de México y que todos son comerciantes ambulantes que llegan a vender a los lugares en donde pagan el programa Prospera.
El vocero Álvarez Heredia en un comunicado dijo que el Ejército y policía del estado rescataron a 13 personas que se encontraban secuestradas en las inmediaciones de la comunidad de Las Anonitas.
Dice que fue una acción conjunta dentro del Operativo Relámpago, con soldados del 34 Batallón de Infantería con sede en Ciudad Altamirano y policías estatales liberaron a vendedores de verduras y chácharas que habían sido privados de su libertad la tarde del martes por ocho personas armadas.
“Las personas liberadas de sus captores refirieron que la mayoría se dedica al comercio y se trasladaban al municipio de Tlapehuala cuando fueron interceptados por un grupo armado. Entre las personas hay diez adultos, dos mujeres y una niña”, agrega el boletín.
Informa que se decomisaron tres camionetas que fueron puestas a disposición de la agencia del Ministerio Público de Coyuca de Catalán junto con las personas “intervendrá personal de la Unidad Antisecuestros de la Fiscalía General del Estado para iniciar las investigaciones correspondientes y descartar que entre las presuntas víctimas se encuentren delincuentes”.
“En el área donde ocurrieron los hechos el Ejército mexicano y la Policía del Estado implementaron un operativo para localizar a los responsables para detenerlos y ponerlos a disposiciones de las autoridades competentes”, finaliza.

Buscan a un levantado de Las Anonitas

Vecinos de la comunidad de Las Anonitas reportaron que hace una semana fue levantado un hombre de esa población y todavía se desconoce su paradero.
Entre los liberados ayer buscaron al desaparecido pero se confirmó que no estaba entre ellos.
Es un hombre de aproximadamente 30 años de edad de nombre Anicasio Guillermo Santos, vecino de esa población y de quien se informó que fue levantado el martes de la semana pasada.
Según el reporte se lo llevaron personas armadas desde el pueblo.
Se informó que los familiares tenían miedo de presentar algún reporte oficial pero que podrían levantar una denuncia por desaparición para su búsqueda.

Se enfrentan durante dos días grupos armados en Tlacotepec; reportan siete hombres muertos

Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal reportaron que la madrugada de ayer ocurrió un enfrentamiento entre hombres armados de las comunidades Puerto del Gallo y Pueblo Viejo, en el municipio de Heliodoro Castillo (Tlacotepec).
Inicialmente informaron que a las 3 y 4 de la madrugada recibieron reportes de que había un enfrentamiento entre grupos armados en la zona serrana del municipio, pero después de 9:30 de anoche, en un comunicado, el vocero en materia de Seguridad, Roberto Álvarez Heredia confirmó que siete hombres fueron asesinados en un enfrentamiento entre dos grupos antagónicos de civiles armados, el jueves y el viernes en el municipio de Heliodoro Castillo.
El portavoz del Grupo de Coordinación Guerrero señaló que ayer, la Policía del estado recibió el reporte, en la línea de emergencias 911, de que en el camino entre las comunidades de Pueblo Viejo y Las Juntas, dos grupos armados se enfrentaron a balazos.
Al lugar se trasladaron seis elementos de las Fuerzas Especiales de la Policía del estado en un helicóptero y, por tierra llegaron varios grupos de policías para verificar el reporte y dar seguridad a la zona.
Al aterrizar el helicóptero en la comunidad de Las Juntas, el comisario del lugar refirió que el jueves a las 4:30 de la tarde se suscitó un enfrentamiento que continuó hasta ayer, y que dejó un saldo de siete hombres muertos por arma de fuego, y que quedaron abandonadas dos camionetas.
La Policía estatal acordonó el lugar de los hechos, y adelantó que hoy, peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado se encargarán de las diligencias correspondientes. (Luis Blancas / Chilpancingo).

Dejan siete muertos balaceras de dos días en la sierra de Tlacotepec


Se enfrentan durante dos días grupos armados en Tlacotepec; reportan siete hombres muertos

Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal reportaron que la madrugada de ayer ocurrió un enfrentamiento entre hombres armados de las comunidades Puerto del Gallo y Pueblo Viejo, en el municipio de Heliodoro Castillo (Tlacotepec).
Inicialmente informaron que a las 3 y 4 de la madrugada recibieron reportes de que había un enfrentamiento entre grupos armados en la zona serrana del municipio, pero después de 9:30 de anoche, en un comunicado, el vocero en materia de Seguridad, Roberto Álvarez Heredia confirmó que siete hombres fueron asesinados en un enfrentamiento entre dos grupos antagónicos de civiles armados, el jueves y el viernes en el municipio de Heliodoro Castillo.
El portavoz del Grupo de Coordinación Guerrero señaló que ayer, la Policía del estado recibió el reporte, en la línea de emergencias 911, de que en el camino entre las comunidades de Pueblo Viejo y Las Juntas, dos grupos armados se enfrentaron a balazos.
Al lugar se trasladaron seis elementos de las Fuerzas Especiales de la Policía del estado en un helicóptero y, por tierra llegaron varios grupos de policías para verificar el reporte y dar seguridad a la zona.
Al aterrizar el helicóptero en la comunidad de Las Juntas, el comisario del lugar refirió que el jueves a las 4:30 de la tarde se suscitó un enfrentamiento que continuó hasta ayer, y que dejó un saldo de siete hombres muertos por arma de fuego, y que quedaron abandonadas dos camionetas.
La Policía estatal acordonó el lugar de los hechos, y adelantó que hoy, peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado se encargarán de las diligencias correspondientes. (Luis Blancas / Chilpancingo).

Un ejecutado en Coyuca de Benítez, otro en San Luis Acatlán y uno más en Atoyac

Redacción, Jacob Morales y Francisco Magaña

Acapulco y Atoyac

Un hombre fue asesinado de un balazo en la vereda de Ejido Viejo perteneciente al municipio de Coyuca de Benítez.
Con este hecho suman 29 ejecuciones durante el año en este municipio, de acuerdo con un recuento de El Sur.
El hallazgo fue reportado después de las 9 de la mañana de ayer cerca de la carretera Acapulco-Zihuatanejo entre los poblados de Cerrito de Oro y Conchero, según el reporte policiaco.
Peritos informaron que los policías hallaron el cuerpo de un hombre con un balazo en la cabeza en un basurero clandestino.
Agentes de la fiscalía regional de Acapulco indicaron que el cuerpo tenía golpes contusos, al parecer fue torturado por sus agresores.
El hombre de unos 30 años vestía pantalón azul, playera roja y estaba descalzo.
Después de las diligencias el cuerpo sin identificar fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) de Acapulco.

Tenía dos disparos el de San Luis Acatlán

El cuerpo de un hombre de 30 años fue encontrado dentro de una camioneta de redilas en la carretera que va a la comunidad de El Carmen en el municipio de San Luis Acatlán. La víctima tenía dos impactos de bala; uno en el tórax y otro en la cabeza.
Según fuentes de Seguridad Pública, el hecho fue a las 7 de la mañana, el cuerpo estaba en la parte trasera de una camioneta Ford gris y roja cabina y media.
El lugar fue resguardado por policías comunitarios de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), rescatistas de Protección Civil (PC) de San Luis Acatlán y policías ministeriales.
Los familiares del hombre identificado como Ramón levantaron el cuerpo y se lo llevaron a su casa junto con la camioneta. Los peritos no pudieron hacer las diligencias.
Según versiones el hombre fue visto en El Carmen la noche del jueves en estado de ebriedad.

Ejecutan a balazos a un hombre en la periferia de Atoyac; tenía 40 años

El cuerpo de un hombre muerto a balazos fue hallado la mañana del viernes en la carretera serrana Atoyac-El Paraíso.
Según la Policía Municipal el hecho fue a las 9 de la mañana cerca de un basurero de la colonia El Parazal, en la periferia de la ciudad de Atoyac.
Según fuentes policiacas el hecho fue reportado por automovilistas que circulaban en la carretera Atoyac-El Paraíso y observaron el cuerpo cerca del basurero y un camino de herradura en El Ranchito.
El hombre fue identificado como Federico de 40 años vecino de la colonia Mártires en Atoyac.
Tenía disparos en la espalda y en la cara de calibre .9 milímetros y .38 súper.
El cuerpo fue llevado a la funeraria Sarabia para la necropsia de ley.

Atacan a balazos dos lavanderías, una en
la madrugada y
otra en la tarde de ayer en Chilpancingo

Matan a un chofer de un camión urbano y a su chalán en
la gasolinería
de La Venta

Un chofer y un chalán de un camión urbano fueron asesinados a balazos en la gasolinería de la entrada del poblado de La Venta.
El doble crimen se reportó a las 4:30 de la tarde en la gasolinería, en la calzada Acapulco-México, se indica en el reporte policiaco.
Testigos del crimen dijeron que un hombre armado se subió en el camión urbano y sin mediar palabras disparó contra sus víctimas, y posteriormente huyó del sitio.
Los policías encontraron al chofer en su asiento y al ayudante en el piso, entre los asientos delanteros del camión de la ruta Hospital-Vacacional.
El Ministerio Público de Renacimiento abrió una carpeta de investigación por el doble crimen.
Los peritos de la Fiscalía Regional de Acapulco localizaron varios casquillos .9 milímetros.
El camión fue acordonado por los agentes de la Gendarmería y policías del estado. No hubo detenidos.
La mayoría de los camiones de la ruta Hospital-Vacacional cargan combustible en esa gasolinería porque comprende su ruta establecida, que da vuelta en el Retorno, y circulan por la zona de hospitales de la ciudad.
Con estos homicidios van en el mes 62 víctimas relacionadas con el crimen organizado, y 448 durante el año, de acuerdo con un recuento de El Sur. (Redacción).

Asesinan hombres armados al ex alcalde de Tecpan Crisóforo Otero afuera de su casa

El ex presidente municipal de Tecpan, el perredista Crisóforo Otero Heredia, de 55 años de edad, fue asesinado a balazos, al igual que su escolta José Edwin Texta Ramos, antes de entrar a su casa la tarde de ayer. Otro escolta está grave.
En diferentes comunicados el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y el Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del PRD exigieron justicia y una investigación pronta y efectiva que castigue a los responsables.
Los hechos ocurrieron en la calle Ramos y Juan R. Escudero, a las 17: 40 de la tarde, según fuentes policiacas, a tres cuadras de las comandancias municipal y ministerial.
Según testigos, la agresión fue justo antes de que el perredista entrara a su casa, de dos niveles, ubicada a un lado de la escuela primaria Hermenegildo Galeana, y los agresores viajaban en un automóvil compacto en el cual se dieron a la fuga.
El perredista antes estuvo atendiendo personas en el restaurante La Fogata, a tres cuadras de su casa, donde tenía programado reunirse con reporteros locales hoy viernes.
Después de la reunión, Otero se trasladó con sus escoltas en un vehículo a su vivienda. pero al llegar fue agredido a balazos. Todavía herido, con un balazo en el cuello y otro en la cabeza, el ex alcalde fue trasladado a la clínica particular San Rafael, en Tecpan, donde murió pocos minutos después.
En un comunicado de prensa, el vocero de Seguridad, Roberto Álvarez Heredia, confirmó el homicidio de Otero Heredia e indicó que ocurrió unos 20 minutos después de las 6 de la tarde, cuando “varios individuos llegaron al domicilio del ex alcalde y le dispararon, al igual que a dos de sus guardias de seguridad, uno murió y el otro está grave”.
Indicó que “inmediatamente” la Policía del Estado y efectivos del Ejército mexicano iniciaron una búsqueda para rastrear a los homicidas y detenerlos.
La Fiscalía General de Estado (FGE) integró una carpeta de investigación e inició las diligencias que “permitan el pronto esclarecimiento de este lamentable y condenable homicidio”.

Fue dirigente del CEM del PRD y regidor antes de ser alcalde

Crisóforo Otero Heredia fue dirigente del Comité Ejecutivo Municipal del PRD en Tecpan, regidor y después alcalde, en el periodo 2012-2015.
En su periodo también fue elegido por sus compañeros coordinador de los alcaldes del PRD, cuando este partido gobernaba 41 ayuntamientos. También fue candidato a diputado local en la pasada contienda de 2015, pero perdió ante la priista Ángeles Salomón Galeana.
Fue integrante de Grupo Guerrero (GG), que encabeza el actual diputado federal David Jiménez Rumbo, pero en abril de 2016 junto con un grupo cercano de militantes de su corriente, se sumaron a Alternativa Democrática Guerrerense (ADG) del dirigente estatal Celestino Cesáreo y el diputado local Carlos Reyes Torres.
Se dedicó al término de su administración, a la compra de venta y ganado, porque tiene un rancho en la comunidad El Moreno, en la sierra de Tecpan. Le sobrevive su esposa y dos hijos.
El ex alcalde de Tecpan de Galeana es el cuarto político asesinado en el estado en menos de dos meses.
Apenas hace dos semanas, el 23 de mayo, el asesor del gobernador Héctor Astudillo, el ex alcalde de Coyuca de Catalán, Eli Camacho Goicochea, fue asesinado a balazos a las 9 de la noche, afuera de una paletería de la sucursal La Michoacana de la cual era propietario en Ciudad Altamirano.
Antes, el 10 de abril, fue asesinado el abogado Modesto Carranza Catalán, diputado suplente del priista Saúl Beltrán Orozco, acusado de homicidio.
El 9 de abril fue ejecutado el ex presidente municipal de Acapetlahuaya y ex diputado local perredista, Roger Arellano Sotelo.
El ex diputado federal perredista Catalino Duarte Ortuño fue secuestrado el 12 de abril, en plena temporada de Semana Santa y hasta este jueves no se sabía nada de él.

Temía por su vida, dice Celestino

Por separado, el presidente estatal del PRD, Celestino Cesáreo Guzmán, confirmó el asesinato del ex coordinador de los alcaldes de su partido, quien le había manifestado temor a sufrir un ataque como el que ocurrió en marzo contra su hermano, en el que fue asesinado.
Consultado por teléfono después de las 7 de la noche, el dirigente comentó que iba llegando a la casa del perredista en Tecpan.
El dirigente perredista dijo: “Lamentamos mucho su muerte, era un compañero, un amigo perredista de primera línea”.
Comentó que hasta esa hora sólo sabía que un grupo de hombres armados atacó a Otero Heredia en su casa en Tecpan, donde mataron a “un agente que lo cuidaba” desde hace varias semanas, porque el ex alcalde tenía temor de ser asesinado tras el homicidio de su hermano David Otero Heredia.
Su hermano fue su director de seguridad pública durante el gobierno municipal y fue asesinado en marzo pasado en su rancho en la zona serrana del municipio de Costa Grande.
A partir del asesinato de su hermano, comentó Celestino Cesáreo, Crisóforo Otero “temía por su vida”.
Pero precisó que no por problemas que tuviera el ex alcalde, sino por el antecedente del homicidio de su hermano.
El presidente estatal del PRD dijo que desconoce los motivos de los asesinatos de los hermanos Otero Heredia, “pero de cualquier forma él (Crisóforo) había expresado su temor de que las mismas personas que atacaron a su hermano pudieran atacarlo a él”.

Indignación del CEN?del PRD

El CEN del PRD expresó su indignación por el asesinato de Otero Heredia y sostuvo que la impunidad no puede ser la ruta ante asesinatos de militantes de izquierda.
En un comunicado llamó al gobernador Héctor Astudillo Flores para que escuche las exigencias de los guerrerenses y replantee la estrategia de seguridad que hasta el día de hoy no ha dado resultados.
Y al gobierno federal lo llamó a que asuma su responsabilidad y garantice la seguridad de los ciudadanos.
“Consideramos que la inacción del gobierno federal en el caso de Guerrero, se debe a los cálculos políticos por los procesos electorales de 2017 y 2018, en los que el gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto sí estuvo presente”.
Reclamó justicia ante el asesinato de Otero Heredia y “la serie de crímenes en contra de compañeros perredistas propiciados por la injusticia e impunidad que prevalece en Guerrero”.
Por su parte el CEE perredista pidió justicia por el asesinato de Otero Heredia a quien calificaron como un “perredista de primera línea, un compañero leal, un amigo de una sola pieza, un hombre de palabra”.
“A la indignación por el compañero caído le acompaña un ¡ya basta! ¡Ni uno más! Nuevamente nos mueve el reclamo de justicia por la cadena de crímenes en contra de compañeros perredistas que ha exhibido la injusticia que se vive en Guerrero”.
Señala que la atmósfera de incertidumbre que se vive en el estado es “irrespirable. Guerrero es un gran cementerio y no podemos resignarnos a ello”.
El PRD recordó a quienes gobiernan que el tiempo corre y los resultados no llegan y señala que “mirar al pasado ni justificarse como lo hacen de manera reiterada, no dará consuelo a las viudas, ni a los hermanos, ni a los hijos y amigos de los caídos”, porque la demanda es de justicia.
Indica que el PRD no ha sido obstáculo para la marcha de este gobierno, y desde su trinchera de partido opositor llamó a que se rompan los círculos viciosos de las instituciones que impiden que los guerrerenses recobren la tranquilidad. El PRD se solidarizó con la familia del ex alcalde y de su acompañante que falleció.

Niega el gobierno balaceras en la capital; son dos ataques y un vehículo quemado: vocero

En un boletín oficial y en declaraciones radiofónicas del gobernador Héctor Astudillo Flores, el gobierno del estado negó que la noche del martes haya habido balaceras en colonias céntricas de Chilpancingo, como se publicó en éste y otros medios.
Temprano en la mañana, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, difundió un comunicado en el que negó “que hayan ocurrido múltiples balaceras”, sino que sólo se trató de dos ataques a casas y un vehículo quemado.
Más tarde, en un noticiero de radio de Acapulco el gobernador Astudillo Flores subrayó que “no pasó como se dice que pasó”, y responsabilizó a los reporteros de sobredimensionar la situación.
“Lo que pasó es que hubo una balacera de carro a carro, que recorrió varias calles, y esto generó que se pensara que había una balacera generalizada”, agregó.
El titular principal de la edición del miércoles de El Sur fue “Incendian un taxi y reportan 13 balaceras anoche en Chilpancingo”. En la nota se precisa que fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado informaron que a las 9:30 de la noche recibieron el reporte de que había una balacera cerca del mercado central Baltazar R. Leyva Mancilla y de las dos centrales de autobuses, Estrella Blanca y Estrella de Oro.
Después hubo balaceras en las colonias San José, CNOP, Hujal, Sección Séptima, Xocomulco, Galeana, San Rafael Norte, El Amate, Electricistas, Los Ángeles, Los Sauces, el viejo libramiento a Tixtla, en el barrio de San Mateo y las calles Allende y 5 de Febrero en la colonia Centro.
“En ocasiones se dicen cosas de más, que no existen. Lo que pasó en Chilpancingo ayer, no pasó como se dice que pasó”, agregó.
A pesar de que existen los reportes al 911 e incluso los que recibieron los trabajadores de la Secretaría de Protección Civil, el gobernador Astudillo Flores insistió en que el 7 de junio, Día de la Libertad de Expresión, los reporteros y medios de comunicación deberían “revalorar la certeza y precisión del periodismo”.
“Vale la pena, porque fácilmente se utiliza, se sobre dimensiona o se exagera en el uso de las redes, notas del periodismo, que es un asunto de responsabilidad y no un ejercicio que va más allá de la objetividad, valorar hasta donde se tiene que llegar y sobre dimensionar. Estoy convencido de que se dicen cosas de más”, agregó.
En la entrevista de radio el gobernador recordó que hace dos años ganó las elecciones a la gubernatura, y que recibió al estado en la situación más complicada que pudo haber recibido cualquier gobernador del país.
“Ahí vamos, hay menos problemas en Guerrero, hay mayor gobernabilidad, mejor turismo, funciona el Acabús, se concluyó el Macrotúnel, la obra pública la hacen los guerrerenses”, agregó.
Por la mañana, el vocero en materia de seguridad distribuyó un boletín de prensa donde inicialmente explica que las “décadas de descuido” provocaron la situación de violencia que se vive en el estado.
En el corto comunicado, el funcionario estatal negó que se hayan registrado 13 balaceras, dijo que sólo se trató de que “personas armadas balearon dos casas e incendiaron un taxi, con la intención de generar caos”.
Se dice que “no ocurrieron múltiples balaceras”.
Dijo que el gobierno el estado, encabezado por Héctor Astudillo, emprende una lucha día a día contra la delincuencia en estrecha unidad y coordinación con las instituciones federales y estatales.

Muere uno de los policías heridos en Tixtla; el otro fue dado de alta, informa Salud

 

Uno de los dos policías estatales que resultaron heridos en el enfrentamiento con civiles armados el domingo en Tixtla murió anoche en el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo, informó en la noche el vocero de seguridad, Roberto Álvarez Heredia.
En un boletín se expone que “aproximadamente las 19:15 horas falleció en el Hospital General de Chilpancingo el policía estatal preventivo Alberto Juárez Carmona de 42 años, a raíz de las lesiones que le infringieron en Tixtla los sicarios que agredieron a los uniformados con armas de fuego y una granada de fragmentación,cuando perseguían un vehículo blanco, en el que se daban a la fuga dos individuos que minutos antes habían agredido a balazos a dos jóvenes en las inmediaciones del mercado Baltazar R. Leyva Mancilla de Chilpancingo”.
Dice que era de la Unidad de Fuerzas Especiales, tenía 9 años, 11 meses y 5 días en la Secretaría de Seguridad Pública, “perdió la vida como consecuencia de la lesión causada por un proyectil de arma de fuego que se le impactó de manera penetrante en la región del tórax”,
“Hechos como estos entristecen a toda la corporación policial y al propio gobierno del estado que día a día ponen su mayor esfuerzo para revertir los elevados niveles de violencia que generan los grupos delictivos que lograron crecer ante el descuido que desde hace varias décadas se tuvo en materia de seguridad pública, y que hoy nos hace lamentar la pérdida de este oficial de la Policía Estatal que durante el tiempo que sirvió a la corporación se caracterizó por ser un buen elemento que actúo con determinación y valor, poniendo siempre en alto el prestigio de la corporación, especialmente en los hechos registrados el pasado domingo”, dice.
El secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos informó que el otro agente herido en Tixtla fue dado de alta el lunes.
Consultado por teléfono, De la Peña dijo que Uriel Jijón Flores de 37 años fue dado de alta el lunes, sólo recibió un rozón de bala en el tórax.
La tarde del domingo el secretario del Colegio de Abogados de Tixtla y dirigente municipal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Eduardo Catarino Dircio, de 43 años fue asesinado en Tixtla por policías del estado que se enfrentaron a balazos con civiles armados en diversos lugares de la ciudad, ahí fueron heridos los dos policías.

 

Continúa con pronóstico reservado el estado de salud de la locutora de RTG en Ometepec

 

La locutora de radio, Marcela de Jesús Natalia, atacada a balazos el sábado en Ometepec, continúa con pronóstico reservado, según el informe médico. Hoy se le hará una tomografía para revisar el proceso de inflamación.
Su esposo, Mario Martínez Bautista, dijo que Marcela no les informó si había sido amenazada o intimidada.
Consultado respecto al avance de la investigación, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, dijo que la Fiscalía le informó que hay tres líneas, sin embargo no le precisaron cuáles son.
De Jesús fue herida de bala el sábado pasado, cuando le dispararon en el rostro al salir de las instalaciones de Radio y Televisión de Guerrero (RTG) en Ometepec, donde trabaja de locutora. El hecho ocurrió aproximadamente a las 9:30 de la mañana, al salir del turno que trabaja de 5 a 9.
El parte médico, después de su revisión matutina, indicó que tenía frecuencia cardiaca normal, así como su frecuencia respiratoria. La presión arterial estaba baja y presentó una temperatura de 37 grados. Continuaba sedada, conectada a un respirador artificial, sin cambios neurológicos y cardiopulmonar sin compromiso.
El esposo de Marcela de Jesús y regidor del PRI en Xochistla-huaca, Mario Martínez, dijo que la ve “con mejor semblante y respirando mejor”. Indicó que los médicos le dicen que la herida es delicada y están cuidando que no se vaya a presentar una infección y el organismo reacciona bien.
Hoy le harán una Tomografía Axial Computarizada (TAC) para revisar cómo está reaccionando su cerebro al medicamento y ver si ha cedido la inflamación.
Al preguntarle a Martínez si su esposa le había dicho de alguna amenaza o si fue intimidada por alguien, dijo que no le había hecho ningún comentario.
De si ha tenido información del avance de la investigación sobre la agresión, manifestó que no les han avisado nada.
Por la tarde, el gobernador Héctor Astudillo Flores visitó el Hospital General de Acapulco, para conocer el estado de salud de Marcela de Jesús. Martínez comentó que el gobernador le preguntó si requería algún apoyo urgente, y le respondió que la urgencia es la salud de su esposa.
“Se comprometió a que los mejores médicos están al pendiente de la salud de Marcela, yo le dije que lo que costaba es la buena atención médica para Marcela. También me dijo que ya dio instrucciones para la investigación”.
Vía telefónica, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero indicó que la Fiscalía solamente le había informado que tiene tres líneas de investigación, “que no conozco y no me han informado”. Añadió que el gobernador Héctor Astudillo solicitó al fiscal Javier Olea darle prioridad a este caso.

Se retracta Álvarez Heredia de que el abogado y dirigente de Morena en Tixtla era un sicario

El vocero en materia de Seguridad, Roberto Álvarez Heredia, junto al vicefiscal, José Antonio Bonilla, se retractó de que el abogado y dirigente de Morena en Tixtla, Eduardo Catarino Dircio era un sicario, además informaron que el arma AK-47 sembrada a la víctima no fue considerada en la carpeta de investigación.
Este domingo el secretario del Colegio de Abogados de Tixtla y dirigente municipal de Morena, Eduardo Catarino Dircio fue asesinado en su casa según sus familiares por policías estatales cuando se refugiaba junto con su esposa, hija y sobrino de la balacera que ocurrió en la transitada avenida Insurgentes, en el barrio Santuario. También los familiares acusaron que los agentes le sembraron un arma AK-47.
Ante los hechos en Tixtla, que además dejó un sicario muerto y dos policías estatales heridos, el gobernador Héctor Astudillo Flores convocó a una reunión del Grupo de Coordinación Guerrero (GCG) para abordar los hechos.
Al término del encuentro que se llevó a cabo en la sala de gabinete de Casa Guerrero, a la que asistieron el fiscal general del estado, Javier Olea Peláez y el secretario de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes, se distribuyó un boletín oficial y el vocero y el vicefiscal ofrecieron una conferencia de prensa.
En la conferencia, Roberto Álvarez Heredia se retractó de su señalamiento hacia Catarino Dircio de que era sicario, argumentó que nunca se reveló su identidad y que además se manejó como presuntos.
“A la Fiscalía General del Estado (FGE) le corresponde realizar una investigación exhaustiva para determinar si hubiese responsabilidades que sean atendidas y actuar en consecuencia”, dijo el vocero.
En tanto, José Antonio Bonilla dijo que entre las armas usadas en el enfrentamiento y presentadas por los agentes de la Policía Estatal, el AK-47 no está relacionada en ningún momento con el asesinato de Eduardo Catarino.
“Fueron encontrados dos fusiles en relación a los hechos, pero en los actos de investigación no se refiere que haya sido relacionado con el abogado uno de los fusiles”, agregó.
De los señalamientos de la familia del abogado que narró cómo le colocaron el arma luego de dejar solo unos minutos el cadáver, el vicefiscal respondió que dicha “manifestación no obra dentro de la carpeta de investigación en ninguna parte”.
“Debemos ser cuidadosos y apegarnos a los datos de investigación que obran en la carpeta y realizar las diligencias periciales para poder determinar a quién correspondía ese fusil”, agregó.
Al vicefiscal se le preguntó quién mató a Catarino Dircio, respondió que apenas se están juntando los datos y la evidencia para determinar qué proyectil fue el que lesionó al abogado.
El funcionario de la Fiscalía justificó que no se pudo hacer la necropsia de ley al abogado y determinar la causa de su muerte, porque los familiares no lo permitieron.
De si se investigará la evidencia del arma sembrada a Catarino Dircio, comentó que todos los hechos registrados serán investigados.

La versión oficial del asesinato del dirigente político

El vicefiscal, José Antonio Bonilla narró la versión oficial de los hechos ocurridos este domingo en la avenida Insurgentes en la cabecera municipal de Tixtla, cuando fue asesinado Eduardo Catarino Dircio en su casa.
Explicó que a la una de la tarde la Policía Estatal recibió mediante el C-4 de Chilpancingo el reporte de un ataque armado que dejo dos jóvenes heridos en el sitio de camionetas de transporte público de la ruta Chilpancingo-Chilapa, ubicado cerca del mercado Baltazar R. Leyva Mancilla en la capital, al llegar al lugar los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), se percataron de que los agresores huyeron a bordo de un carro blanco que después de una persecución lograron alcanzarlo en la avenida principal de la ciudad de Tixtla.
Sin embargo, dijo que en la avenida Insurgentes los policías perdieron de vista el vehículo que perseguían, y cinco hombres a bordo de una camioneta Pick up Ranger azul metálico sin placas de circulación los atacaron a balazos con armas de grueso calibre.
Aseguró uno de los integrantes del grupo delictivo lanzó una granada de fragmentación, y impactó el vehículo en el portón de una casa contigua al domicilio del abogado.
Afirmó que los delincuentes abrieron las puertas del vehículo y se dispersaron hacia diferentes casas, entre ellos a la del abogado, mientras seguía el enfrentamiento.
Manifestó que el enfrentamiento entre civiles y policías dejó dos personas muertas uno de ellos el abogado y un miembro de un grupo delictivo, así como dos policías estatales lesionados de gravedad.
Agregó que posteriormente fue detenido un hombre que tenía un fusil AR-15 y varios cartuchos útiles calibre .223 milímetros, quien después del enfrentamiento intentaba darse a la fuga en un automóvil Sentra gris, y que minutos antes le había robado con violencia a un ciudadano de Tixtla.
El vicefical manifestó que los policías del estado no cuentan en su armamento con fusiles AK-47, también denominados cuerno de chivos, como se difundió.

No disparen, soy el casero, estoy con mi familia, suplicó Eduardo Catarino al policía que lo mató, dice su esposa

Antes de que recibiera el balazo que lo hirió y después le quitó la vida, el abogado y líder de Morena, Eduardo Catarino Dircio pidió piedad bocabajo tirado en el piso: “No disparen, soy el casero, estoy con mi familia”, pero un policía ignoró su súplica y ordenó, “¡Mátenlo al hijo de su puta madre!”.
La mañana de este lunes en conferencia de prensa afuera de su casa en Tixtla, la viuda de Catarino Dircio, Hilda Vázquez Cipriano contó que su esposo todavía tardó varios minutos vivo pidiendo ayuda, pero los policías no la dejaron acercarse para auxiliarlo, “si te acercas disparamos”, le advirtió uno.
Dijo que afuera, en la calle Insurgentes, militares y policías estatales impidieron el paso de una ambulancia para que los paramédicos lo atendieran.
Explicó que luego de que murió su esposo, uno de los policías le dijo que su suegra la llamaba en la planta baja de la casa, fue a ver qué quería y cuando regresó, vio cuando le estaban tomando fotografías a Eduardo ya con un arma larga en las piernas, ella intentó quitársela, pero la amenazaron.
Eduardo Catarino vivía en el número 61 de la transitada avenida Insurgentes, entrada principal de la cabecera municipal de Tixtla, y salida a la carretera hacia Chilpancingo.
La casa de Eduardo es de dos niveles, la planta baja está construida de tabique y concreto, la planta alta es de hojas de triplay y techo de lámina galvanizada. A 1:30 de la tarde del domingo entró a esta casa uno de los delincuentes que era perseguido por la Policía Estatal desde Chilpancingo.
Los sicarios quienes se dispersaron en varias casas vecinas entraron violentamente impactando la camioneta Ford Ranger azul en la que escapaban en el portón de la iglesia La Luz del Mundo, ubicada en la calle Alejandro Sánchez Castro, del patio de este terreno uno de ellos saltó una barda, atravesó un terreno baldío y luego brincó una malla para entrar a la casa de Eduardo. Hasta allí lo siguieron los policías, algunos entraron por la misma ruta del delincuente y otros derribaron su portón en la avenida Insurgentes con una patrulla.
A esa hora Eduardo Catarino cortaba la maleza de su patio en la parte posterior de su casa, su esposa Hilda Vázquez estaba en la planta alta donde viven, pues en la planta baja habita la mamá de Eduardo, una mujer de la tercera edad que se mueve en silla de ruedas.
Hilda contó que estaba con su hija de 11 años y un sobrino de 12, apenas habían terminado de almorzar. Su hija y su sobrino veían una película en la computadora en una habitación contigua y ella se colocó un gorro para ayudar a su esposo cuando oyó los primeros disparos y decidió quedarse en la cocina con su hija y su sobrino.
–Son cohetes–, trató de calmarla su sobrino.
–No, son balazos– respondió ella.
Narró que los primeros balazos se escucharon en la calle y mientras pasaban los minutos se oían cada vez más cercanos.
Hilda corrió con su hija y su sobrino a refugiarse a un cuarto ante el temor de ser heridos por las balas.
Dijo que al poco rato Eduardo subió al segundo piso donde estaban ella, su hija y su sobrino, y cuando los vio les dijo, “allí estense porque hay una balacera”. Después le dijo a su mujer, “acaba de entrar un hombre, se metió a la sala donde está mi mamá, es uno de los malos”, luego cerró la puerta del cuarto donde estaban para protegerlos.
Hilda observó la desesperación de Eduardo porque su madre estaba en la planta baja, dijo que cuando intentó bajar a verla le suplicó, “por favor no salgas”, pero el insistió que su madre estaba sola y temerosa, a pesar de que ella le volvió a suplicar que se metiera.
Manifestó que desde la habitación donde se encontraban oían los destrozos en la planta baja y la balacera que se intensificaba en la calle. Hilda, su hija y su sobrino rezaron, mientras después de unos minutos se dejaron de escuchar los balazos y ella se asomó en una ventana, desde allí vio que la casa vecina estaba llena de policías, estaban en el patio y apuntaban en todas direcciones.
Asustada jaló a su esposo hacia la habitación y se tiró al piso con su hija y su sobrino, encima se echaron un colchón, “pero mi mamá, mi mamá, Hilda”, le decía Eduardo, pero ella le insistió, “si, pero por favor, no salgas”. Entonces oyeron el tropel de los policías en el patio, luego en la planta baja de la casa.
Vázquez Cipriano aseguró que no sabe por dónde entraron los policías a su casa, si por el patio o por la puerta principal, sólo escuchó el alboroto y la irrupción violenta cuando los agentes se metieron al baño y destrozaron todo, después oyeron balazos adentro de la casa, y luego gritos, “allí está tírenle”.
Escuchó que los policías gritaban que saliera y supone que le hablaban al sicario que había entrado a su casa, al final, no supo cómo se escapó entre los policías y militares, “yo no sé cómo se les pudo escapar de sus narices”.
Vázquez Cipriano consideró que como a los policías se les escapó el delincuente tenían que justificar su trabajo, “tenían que matar a alguien para presentarlo como el maloso”.
Hilda oyó que un policía gritó, “allá está una puerta, allá va a estar escondido” y escuchó los pasos de los policías que subían a la planta alta hacia donde estaban por las escaleras de metal gritando, “abran, abran esa puerta hijos de su puta madre”. Vio que Eduardo iba a abrir la puerta, aunque ella le pidió que no lo hiciera, pero los policías seguían gritando, “abran si no vamos a balacearla”.
Eduardo le dijo a su esposa que abriría porque si no matarían a toda su familia, Hilda vio cómo se tiró al piso para salir del cuarto donde estaban y abrió la puerta de la sala contigua, mientras anunció a los policías, “yo soy el casero, por favor, está aquí mi familia. Voy abrir la puerta, pero soy el casero”.
Catarino Dircio se enderezó para abrir la puerta, pero luego se volvió a tirar al piso bocabajo para que no le dispararan, pero los policías entraron gritando, “¡mátenlo al hijo de su puta madre!”.
Hilda vio todo desde las rendijas de la habitación donde estaba, dijo que subieron muchos policías y que los tres primeros no le dispararon, incluso dijeron, “él es el casero, no disparen”. Sin embargo, atrás subían más agentes gritando, “denle al hijo de su puta madre”, entre éstos iba el policía que le disparó, “fue un despiadado, un desgraciado”, acusó con rabia la mujer.
En la pequeña sala, su marido seguía implorando bocabajo, pidiendo piedad, “aquí está mi familia, yo soy el casero”, “pero el maldito policía lo mató a sangre fría. Yo lo vi, cómo le disparó cuando él estaba pidiendo piedad, tirado bocabajo, le disparó cruelmente ese maldito”, narró Vázquez Cipriano.
Contó que el dirigente municipal de Morena estaba vivo y ella se hincó mirando desde la puerta de la habitación contigua suplicándoles, “yo soy la esposa, acaban de matar a un hombre inocente”, cuando la vieron, los policías entraron a la otra habitación apuntándole con sus armas, revisaron todo, abrieron un ropero, mientras uno gritaba, “vamos a darles a estos hijos de su puta madre”, otro policía, vio el colchón y les ordenó, “levanten ese colchón allí está el hijo de la chingada”, pero era la hija y el sobrino de Hilda, la hija de Eduardo suplicó, “somos unos niños, no nos maten por piedad”.
Hilda Vázquez comentó que cuando los policías dejaron a los niños, todavía hincada les pidió que le permitieran ver a su esposo quien pedía ayuda, “movía la mano, pidiendo ayuda, pero los policías no me dejaron, nos apuntaron y nos dijeron, ‘no se muevan de aquí porque les vamos a disparar’”.
Manifestó que pidió varias veces que llamaran una ambulancia para que Eduardo fuera trasladado a un hospital, pero los policías la ignoraron, “sólo bajaban a la planta baja y volvían a subir para revisar todo”.
Detalló que vía telefónica pidió a sus hermanos y cuñados que mandaran una ambulancia, la cual llegó minutos después, pero los policías y militares tenían un cerco en la calle Insurgentes y no le permitieron pasar, sólo dieron paso a trabajadores de Protección Civil quienes no llevaban nada para auxiliarlo.
Hilda reconoció a Félix, un vecino, quien acompañó a los trabajadores de Protección Civil, sintió alivio y valor, y salió corriendo de la habitación para abrazar a su esposo quien ya había muerto.
“Murió sin que yo pudiera si quiera ir a tocarle la mano. Murió tirado cerca de la puerta bocabajo. ¡Malditos policías!, me lo mataron en un ratito”, reprochó con coraje.
Manifestó que un policía que subió de la planta baja le preguntó, “¿qué es para usted la señora que está allá abajo?”, es mi suegra respondió, y el agente le ordenó que fuera a verla porque le estaba llamando, ella no quería bajar porque dejaría solos a su hija y a su sobrino quienes lloraban, pero el policía le insistió, “baje, yo los voy a ver”.
Contó que bajó sólo para avisarle a su suegra que habían matado a su hijo y cuando regresó, los policías ya habían puesto un arma larga encima de las piernas de Eduardo y otro le tomaba fotografías, ella les reclamó por qué le pusieron el arma, “son unos cobardes, vinieron a matar a un hombre inocente a su casa”.
Hilda Vázquez les exigió que le quitaran el arma, pero le dijeron que nadie la había puesto, y otro de los agentes le dijo que tenían que mandar un reporte. La viuda agregó que cuando cubrió el cuerpo con una sábana intentó quitarle el rifle, pero un policía le apuntó y le ordenó, “no la mueva porque le voy a disparar”, y ella sólo lo cubrió.
Dijo que cuando los policías se bajaron, uno de ellos se quedó cuidando el cadáver, a quien le pidió que por piedad le quitara el arma porque cuando le dispararon no la tenía, pero se negó con el argumento de que él no la había puesto.
“Fue uno de ellos, yo lo vi con mis propios ojos”, acusó Hilda, indicó que cuando subieron los trabajadores de Protección Civil y su vecino Félix vieron que no tenía ninguna arma.
“Mi esposo estaba limpio, mi esposo es inocente, quiero justicia para que ya no se siga repitiendo esto. Ya no le hagan más daño a gente inocente. Ya no. Quiero justicia, por favor”, suplicó frente a los reporteros.
La viuda del abogado Eduardo Catarino Dircio consideró a quienes dicen que su esposo era un sicario unos sinvergüenzas e ignorantes, porque insistió que quieren culpar a gente inocente.
Exigió al gobernador Héctor Astudillo Flores que haga bien su trabajo, “que ya no forme parte de esa delincuencia”, para que ya no haya gente inocente muerta y si no puede que renuncie.
Al inicio de la conferencia, Hilda Vázquez explicó que decidió hablar a pesar de las condiciones en las que se encuentra, porque ya no quiere que se cometan más injusticias, que ya no se haga daño a más gente inocente.
Exigió que se limpie el nombre de su esposo, quien fue señalado en un boletín de prensa de sicario por el vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia.