Se comprometió la Codehum a insistir en la reinstalación de policías y no cumplió, denuncian

Luis Blancas

Chilpancingo

Policías estatales despedidos en mayo del año pasado se quejaron porque el presidente de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum), Ramón Navarrete Magdaleno no cumplió los acuerdos para insistir al gobernador y a la Secretaría de Seguridad Pública estatal el pago de los salarios caídos y la reincorporación de los agentes afectados.
En conferencia de prensa en la explanada de la Codehum el policía despedido José Muñoz Franco informó que un juez federal ordenó al gobierno estatal y a la SSP el pago del sueldo y reincorporar a los 176 agentes estatales despedidos a la corporación, lo que debió ocurrir hace 15 días, “pero con el desacato de Navarrete Magdaleno no se llevó a cabo este proceso”.
Comentó que el gobierno del estado ya agotó todo sus recursos legales para defenderse de la demanda de despido injustificado de los uniformados, pero el ombudsman guerrerense, “no ha sometido a las autoridades como corresponde conforme a la ley, debe aplicar la ley pero tiene que defender a su patrón, al gobierno del estado, pero seguiremos en la lucha”.
Señaló que el gobierno del estado y el ex secretario de la Seguridad Pública estatal, Pedro Almazán Cervantes violaron sus derechos laborales porque no han cobrado su salario desde mayo del año pasado, y están sin poder llevar un sustento a sus familias, “por eso le damos un ultimátum a Ramón Navarrete para que atienda nuestras peticiones”.
Indicó que en la lucha para defender sus derechos continúan 100 policías estatales despedidos de los 176 que eran, e insistió al presidente de la Codehum que los atienda, porque en caso de no hacerlo cerrarán las instalaciones y procederán contra él.
Por su parte la Codehum difundió un comunicado la tarde de ayer en el que dice que Navarrete Magdaleno atendió a los agentes despedidos, “les expresó que la Codehum ha realizado todos los trámites de acuerdo a lo que mandata la ley, recordándoles que esta institución emite recomendaciones y procura su aceptación y cumplimiento de los puntos recomendatorios, con lo cual la comisión, como en todos los casos, está cumpliendo con la responsabilidad con cada uno de ellos”.
El 29 de mayo de 2017 unos 600 policías estatales de las regiones Centro, Chilapa y Mártir de Cuilapan (Apango) pararon labores en el cuartel, en Chilpancingo, para exigir al gobernador Héctor Astudillo y a la Secretaría de Seguridad Pública estatal una jornada laboral de tres días de descanso por tres de trabajo, y un bono de riesgo de 3 mil 500 a 12 mil pesos.
El 31 de ese mes los agentes estatales terminaron el paro, marcharon del cuartel de la corporación a la Codehum y la Secretaría dio de baja definitiva la corporación a 176 policías que incurrieron en una conducta violatoria de ley.

 

No respondió la SSP a la CNDH ni pagó salarios caídos, dicen policías despedidos

Policías estatales despedidos en mayo del año pasado se quejaron de que el secretario de Seguridad Pública estatal, Pedro Almazán Cervantes no respondió la recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que pagara los salarios caídos de los 176 agentes y su reinstalación en la corporación, y ya venció el plazo este lunes para dar respuesta a la demanda.
En conferencia de prensa afuera de las instalaciones de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum), el policía despedido José Muñoz Franco dijo que en julio la CNDH emitió la recomendación número 069/2017 en contra de Pedro Almazán por el despido injustificado de los 176 agentes y por abuso de autoridad, lo que aceptó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Muñoz Franco dijo que hace más de 10 días la CNDH llamó al presidente de la Codehum, Ramón Navarrete Magdaleno, a que intervenga para que el secretario responda las demandas de los policías estatales despedidos con el pago de los salarios caídos y reinstalación a la corporación.
Comentó que el lunes venció el término constitucional para el pago de los salarios caídos de cinco de sus compañeros que ganaron la demanda en contra de la Secretaría de Seguridad Pública, pero trabajadores de la Secretaría de Finanzas del gobierno del estado ofrecieron pagar sólo tres quincenas, lo que no aceptaron.
“El lunes se venció el plazo, ya iban a pagar sus cheques a los cinco policías quienes no aceptaron porque el juzgado dio una orden del pago de salario completo, no parcial, y el gobierno sólo les iba a pagar tres quincenas”, declaró.
Muñoz Franco dijo que continúan en proceso las cinco demandas pendientes para el pago de salarios, viáticos, el bono Día del Policía a los uniformados despedidos, así como la reinstalación en la corporación.
El policía despedido se quejó de que los cuarteles de la corporación están en malas condiciones, no tienen una cama nueva, colchones o colchonetas para descansar, los consultorios médicos no tienen pastillas para el dolor de muela y cabeza, no les dan armas, patrullas ni uniformes.
“Los compañeros deben estar a la altura para el desarrollo de la sociedad en brindar seguridad, la SSP debe aportar todo el material, armamento, equipo de trabajo, patrullas, municiones, salario suficientes, pero si no tenemos todo el apoyo en nuestro trabajo cómo van a desempeñar su labor para proteger a la población”, declaró.
Pidió al presidente electo Andrés Manuel López Obrador que ponga atención a los cuarteles de los policías en el país, en el caso de Guerrero con el gobernador Héctor Astudillo Flores, “para que equipe a todas la corporaciones, como armas, uniformes, patrullas, dotar de medicamento a los consultorios médicos y respeto a los derechos laborales”.
“Le pedimos a López Obrador con sus comisionado observen de cerca lo que está pasando en la Policía Estatal en Guerrero, han ocurrido violaciones a los derechos humanos, laborales, lo que pedimos no era difícil: trabajar tres días y descansar tres días, no se ha cumplido, los compañeros siguen trabajando seis días de descanso por 12 días de trabajo”, informó.
El 29 de mayo de 2017 unos 600 policías estatales de la región Centro, de Chilapa y Mártir de Cuilapan (Apango) pararon labores en el cuartel de Chilpancingo, para exigir al gobernador y al secretario de Seguridad una jornada laboral de tres días de descanso por tres de trabajo, y un bono de riesgo de 3 mil 500 a 12 mil pesos.
El 31 los agentes estatales terminaron el paro con una marcha y la Secretaría informó en un boletín que los había dado de baja definitiva a los 176 porque incurrieron en una conducta violatoria de la ley.

 

Hoy vence el plazo para que se paguen salarios caídos a los 176 policías estatales despedidos

Policías estatales despedidos en mayo del año pasado informaron que el plazo que dio un juez federal para que se paguen los salarios caídos de los 176 agentes vence hoy, y en caso de no dar respuesta el gobierno estatal será multado.
Agregó que se notificó formalmente al secretario de Seguridad Pública estatal, el general brigadier Pedro Almazán Cervantes y al jefe de la Unidad de Contraloría y Asuntos Internos de la Secretaría, Constantino Leyva Romero.
En conferencia de prensa en las oficinas de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum), el policía despedido José Muñoz Franco explicó que esta es la segunda resolución en contra de Almazán Cervantes, como dieron a conocer el 28 de julio, y es parte del seguimiento del caso laboral de los uniformados.
Detalló que un juez federal emitió la notificación el jueves en contra de Almazán Cervantes y Leyva Romero, les dio un plazo de tres días que vencen hoy para responder a las peticiones de los afectados como el pago de los salarios caídos.
Dijo que de la resolución sólo solicitan el pago de salario, viáticos y del Día del Policía, hasta que el juez concluya el caso se determinará si regresarán o no a la corporación, “por eso pedimos al gobernador Héctor Astudillo Flores que si regresamos a la Policía Estatal que no haya represalias y no nos cambien de región, como lo hacen los altos mandos para vengarse, para que nos pase algo”.
Informó que en la movilización continúan 120 policías de los 176 y les adeudan más de 15 quincenas, que es un total de 400 mil pesos, “de las dos resoluciones que ha emitido el juez federal como continuidad en el proceso no hemos tenido respuesta del gobernador ni del secretario de seguridad”.
Responsabilizó a Astudillo Flores y a Almazán Cervantes de lo que les pueda pasar a los que continúan en la lucha para defender sus derechos laborales.
El 28 de julio en una nota se informó que un juzgado federal notificó al gobierno del estado y a la Secretaría de Seguridad Pública estatal su obligación de pagar los salarios que debe a 176 policías despedidos el año pasado, y de no cumplir la Secretaría podría ser multada.
El 29 de mayo de 2017 unos 600 policías estatales de las regiones Centro, Chilapa y Mártir de Cuilapan (Apango) pararon labores en el cuartel, en Chilpancingo, para exigir al gobernador y al secretario de Seguridad Pública estatal una jornada laboral de tres días de descanso por tres de trabajo, y un bono de riesgo de 3 mil 500 a 12 mil pesos.
Se quejaron porque les cambiaron su jornada laboral de tres días de descanso por seis días de trabajo.