Ofrece el arzobispo de Acapulco misa en Cacahuatepec por catequista asesinada

El arzobispo de la Diócesis de Acapulco, Leopoldo González González y el párroco Javier Mendoza durante la misa en memoria de la catequista, Inocencia Prudencio Gómez Foto: Jesús Trigo

Ramón Gracida Gómez

El arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, celebró ayer una misa en la iglesia de la comunidad de Cacahuatepec en honor de Inocencia Prudencio Gómez, catequista de este templo católico que fue asesinada a machetazos por un hombre de la misma comunidad el jueves pasado.
Familiares de la víctima y el vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la presa La Parota (Cecop), Marco Antonio Suástegui Muñoz, pidieron justicia por el feminicidio de la mujer de 61 años, que participó activamente en el movimiento contra la presa y era muy reconocida en los Bienes Comunales de Cacahuatepec.
Inocencia Prudencio fue asesinada por un hombre de entre 30 y 40 años cuando iba en camino a recibir una despensa en el río Papagayo, como parte de los apoyos que ha gestionado el Cecop con organizaciones sociales y la iniciativa privada.
El homicida fue acorralado por policías comunitarios, a quienes también hirió, pero luego lo atraparon dentro de la iglesia. El victimario está en la cárcel y la carpeta de investigación está en curso para determinar la acusación formal.
Ayer, alrededor de 300 vecinos de distintas localidades del Acapulco rural asistieron a la misa convocada en su honor para escuchar al arzobispo Leopoldo González González, quien pidió paz para la comunidad después de este asesinato y condiciones de seguridad para los habitantes.
Durante su mensaje, monseñor Leopoldo González reiteró en diversas ocasiones la labor de Inocencia Prudencio como catequista en la comunidad de Cacahuatepec, donde enseñó catecismo a muchos residentes de la localidad y era rezandera cuando se le solicitaba.
Acompañado por el párroco de Cacahuatepec, Javier Mendoza, las palabras del arzobispo de Acapulco también tuvieron la intención de dar consuelo a los familiares presentes en la misa después del cruento asesinato.
Monseñor Leopoldo González suplicó “por su eterno descanso y por la paz de su familia y por la paz y la esperanza de la comunidad” y en sus plegarias pidió “construir condiciones de seguridad y la paz en nuestro convivir de cada día”.
La misa comenzó a las 4:20 de la tarde y terminó una hora después. La foto de la víctima fue colocada en frente y monseñor Leopoldo González la bendijo al igual que varias decenas de pequeñas cubetas llenas de agua. Una catequista le agradeció su presencia porque “necesitábamos muy bien su palabra para que también nosotros nos conforte nuestro corazón y nuestra mente por la pérdida de ella”.
El arzobispo de Acapulco habló y abrazó a los familiares directos de Inocencia Prudencio, y evitó dar una postura a El Sur sobre el asesinato porque lo hará en su mensaje de este domingo.

El asesinato, a un costado de la Comisaría Municipal

Antes de la misa, compañeras catequistas de Inocencia Prudencio acudieron al punto donde fue asesinada y que se encuentra a un costado de la Comisaría Municipal, a unos 200 metros de la iglesia del pueblo.
Una cruz de madera está colocada en el punto donde cayó el cuerpo de la adulta mayor después de ser macheteada por el hombre a quien acusan de estar drogado cuando cometió el delito.
Familiares, quienes quisieron omitir su nombre, dijeron que Inocencia iba en camino al río Papagayo para recoger la despensa que había sido anunciada por parte del Cecop, cuando un hombre, cuyo nombre, señalaron, es Fernando, la alcanzó y la lesionó por la espalda con un machete, primero en el brazo.
La víctima quiso defenderse, pero el homicida la hirió más hasta matarla, de acuerdo con la versión que testigos han dado a los familiares porque ellos no estuvieron presentes, enfatizaron. Esto ocurrió a las 10:30 de la mañana del 7 de marzo.
El cuerpo de la víctima fue llevado a su casa en espera de que llegaran las autoridades. Horas después acudieron policías municipales y estatales para detener al presunto homicida, quien está preso en la cárcel de Acapulco en espera del curso legal de la investigación. El Servicio Médico Forense (Semefo) se llevó el cadáver y los familiares acudieron por él la mañana siguiente.
El vocero del Cecop, Marco Antonio Suástegui Muñoz, destacó que Inocencia Prudencio, conocida como Chencha, fue de las pocas mujeres que participaron desde el inicio de la lucha contra el proyecto de la presa La Parota.
Indicó que era una “persona muy buena, de verdad, una persona que no se metía con nadie, una mujer ejemplar. Lo que ha sucedido es culpa de las drogas, es culpa de este clima tan terrible que estamos viviendo de inseguridad en Acapulco”.
Destacó que el homicidio de Inocencia Prudencio debe ser calificado como un feminicidio “porque fue con saña, con dolo, con cobardía, con todas las ventajas, con un arma blanca, en este caso, con machete”.
Contó que el 7 de marzo el Cecop iba a entregar unas despensas e Inocencia Prudencio iba en camino al paraje conocido como El Fraile, cuando la alcanzó un hombre, quien, unas horas antes de cometer el asesinato, ya la había amenazado.
Los policías comunitarios de Cacahuatepec estaban del otro lado del río Papagayo y se cruzaron y lo acorralaron dentro de la iglesia de Cacahuatepec, donde hirió a dos comunitarios, uno de ellos recibió un machetazo de ceja a oreja, y el otro en la mano. Un tercer policía comunitario recibió un “rasguño”.
Afortunadamente lo detuvie-ron antes de que atacara a otras mujeres como pretendía hacerlo, destacó Suástegui Muñoz, y lo entregaron a la Policía Estatal. Recordó que ese mismo día del homicidio, ocurrió el asesinato de Yanqui Kothan Gómez Peralta, y fue incendiado su equipo inmobiliario de playa y motos acuáticas en la playa Icacos.
El vocero del Cecop pidió a las autoridades justicia, seguridad y que permitan trabajar a la Policía Comunitaria de Cacahuatepec porque si no hubiera estado, la “tragedia hubiera sido mayor”.

 

Llama el arzobispo de Acapulco a fieles a seguir orando por la paz

 

El arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González, encabezó la misa de lavado de pies en la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad, donde llamó a seguir orando por la paz.
Ante una iglesia llena de feligreses, el jerarca católico llevó a cabo la representación del lavado de pies que hizo Jesús a sus doce apóstoles.
Hincado, el arzobispo lavo los pies a doce personas que simbolizaba los doce apóstoles y que la Iglesia lo recuerda como un acto de humildad y servicio que Jesús hizo durante la última cena.
El lavado de pies es uno de los pasajes previos a la detención de Jesús en el huerto de Los Olivos. Hoy a las 11 del día se llevará a cabo el Viacrucis Solemne, es decir, el encuentro de Jesús con su Madre, el cual será en el Zócalo.
Monseñor dijo que ha visto el gozo de la gente en cada una de las celebraciones que se han hecho y es bueno porque son momentos especiales de estar con Jesús. (Karina Contreras).

 

No ser indiferentes ante los desplazados por la violencia, pide el arzobispo a feligreses

El arzobispo de la Arquidiócesis de Acapulco, Leopoldo González González durante la misa en El Encinal, en la parte alta del poblado de Carabalí Foto: Karina Contreras

Karina Contreras

El arzobispo Leopoldo González González llamó a no ser indiferentes “ante tantas familias que están dejando sus hogares por la inseguridad y el miedo por la amenaza de bandas criminales de nuestra región”.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Acapulco, que comprende Costa Chica y Costa Grande, añadió: “Sobre todo Tecpan están llegando de la parte alta donde ha habido tantas situaciones difíciles”, en referencia al desplazamiento de familias del ejido de San Antonio de Las Tejas.
Pidió a los feligreses orar y no ser indiferentes ante los asesinados, ejecutados y desaparecidos. “Cuan-do tengamos noticias de alguna de estas cosas que nuestro corazón pida por quien fue víctima y su familia. Si conocemos y podemos hacer sentir la cercanía de nuestro afecto no dejemos de hacerlo. Pero al ver una noticia de estas no pasemos delante así como así, den una suplica al señor para que le dé el eterno descanso y cuide de su familia”.
Tampoco ser indiferente ante “tantas personas que son extorsiones por cobro de cuotas o piso, por cobro de cosecha de sus productos o la compra de abarrotes, de materiales de construcción. No ser indiferente porque son algo que causa mucho daño”.
El jerarca católico subió al cerro de El Encinal, ubicado en la colonia Carabali, para realizar una misa por el 14 aniversario del monumento Cristo Rey de La Paz ante alrededor de cien feligreses.
En su mensaje dijo que en esa oración pedían a Dios por la paz en la ciudad y la región. Pidió a los católicos desterrar la violencia de los hogares y que está Pascua sea un momento para recibir en el hogar la paz con la que el señor Jesús saluda.
El jerarca católico dijo que este miércoles “sea camino a la bendita imagen de Cristo Rey de La Paz”, y los llamó a perdonar, que no quiere decir que se olvide, pero sí sanar el alma.
Dijo que cada uno debe ser un artesano de paz. Los fieles católicos subieron una pendiente de más de 500 metros para llegar al punto donde se realizó la misa. Muchos aprovecharon para tomarse la foto con el arzobispo, quien encabezó la liturgia tras dos años de no realizarla por la pandemia del Covid-19.
Al concluir la misa las personas se dirigieron a la gran piedra desde donde se tiene una vista espectacular de Acapulco y, otros, primero se dirigieron al monumento de Cristo Rey de La Paz, donde se tomaron fotografías.

 

Se reúne el obispo González con penitentes de Taxco; “pidan a Dios por la paz”, les dice

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández oficia una misa en la parroquia de Santa Prisca, en Taxco Foto: Claudio Viveros

Claudio Viveros

Taxco

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, ofició una misa en la parroquia de Santa Prisca para cobijar y reanimar, ante las amenazas y la violencia de la delincuencia organizada, a los habitantes, integrantes de las hermandades y de penitentes de los barrios y comunidades para fortalecer la tradición y la fe que han mantenido para la celebración de la Semana Santa en Taxco.
Antes, pasada la una de la tarde de este lunes, el jerarca católico se sentó en un sillón bajo el altar mayor de la iglesia en donde ofreció sus palabras de aliento y su acompañamiento para mantener viva la Semana Santa, “que la defendamos”, no sin citar al Papa Francisco, “a que no perdamos la memoria histórica… que no se ha perdido, gracias a Dios”.
Aquí dio a conocer que previo a su llegada tuvo un encuentro en un retiro con jóvenes y adultos, los cuales participarán como penitentes durante la jornada y ofrecerán un sacrificio con su manda, y a quienes les dijo: “pídanle a Dios por la Paz, por la conversión, por aquellos hombres y mujeres que están muy necesitados, para que no nos maltratemos unos y otros, que nos queramos más, ya nos queremos, pero más no hace daño”.
El prelado católico reconoció el esfuerzo heredado por generaciones, transmitido de padres a hijos, “para mantener viva la celebración y animar a hacer lo mejor que puedan, que sean ustedes un canal que llegue a todos y sé que lo hacen seriamente, no se vayan a desconcentrar, porque el demonio, ustedes ya saben la experiencia, va a querer distraerlos de muchas maneras, y ustedes a vencer, no se distraigan”.
Hace diez días se conoció que sicarios de la Familia Michoacana pedían cuotas a los integrantes de las hermandades que participarán como penitentes en la Semana Santa en Taxco, cargando troncos con espinas o flagelándose la espalda.

“Quiero que México sea menos violento”

En su primera intervención, directa, sin la presencia de políticos y funcionarios, expresó que lo que más quisiera es contar los años de ahora en adelante “para que México sea menos violento, que esta Semana Santa cúbranse de la intención de los obispos de México, de que trabajemos para ser menos violentos…y ya saben ustedes dónde hay violencia, pues que disminuya la violencia, porque en la Semana Santa vamos a trabajar que haya menos violencia y menos muertos.
“Que la iglesia ponga su granito de arena, así de bonita, con los encruzados, con los cristos, con las imágenes, con todos” para que, en ocho años, en que se conmemorarán los 500 años de la aparición de la virgen de Guadalupe, haya menos muertos “y que no seamos fríos, que nos duela el que hay muchos desaparecidos y muchos muertos y no sabemos de ellos a causa de la violencia”, reiteró.
Para esa fecha, añadió, la virgen vino aquí en México y nos dio rostro y corazón propio y nosotros agradecidos con ella le ofrezcamos un México menos violento, “porque qué tristeza, qué pena, qué vergüenza, llegamos a celebrar los 500 de aparición de la virgen y tenemos un México desgarrado cuando ella vino a consolarnos, a darnos la felicidad, a darnos protección, ¿qué le vamos a ofrecer?”.
Y agregó que para dentro de 10 años en 2033, que fue cuando Jesucristo murió hace 2 mil años se cumple esa fecha, y eso quiere él y los obispos, de agradecerle y estar al lado de los demás y pedir perdón y perdonarnos para seguir caminando y dar un pasito por nuestro México, por Taxco y por todo el mundo, “feliz Semana Santa, yo les apoyo, animado y acompañándoles aquí… que no haya muerte, que haya vida, que no haya obstáculos y si los hay, hay que vencerlos, con amor, con respeto y salir adelante. No están solos”.
La visita del obispó reconfortó a la feligresía, al ciudadano común y las diferentes hermandades que le aplaudieron en varias ocasiones y agradecieron su gesto de atenderlos, de escucharlos y alentarlos en momentos de incertidumbre para tener tranquilidad durante estos días, lo mismo que ha hecho el párroco de Santa Prisca, Tomás Martínez Rivera, al lado de la ciudadanía, junto con otros sacerdotes que se encuentran en la región.
Con este encuentro se desarrolló más tarde la primera procesión nocturna en lunes Santo, conocida como la de Las Vírgenes, en la que participan en su mayoría mujeres que cargan y acompañan a las diferentes imágenes de distintos barrios y algunas comunidades.

 

“Estamos secuestrados y esclavizados” por el crimen organizado: obispo de Chilpancingo

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa José de Jesús González Hernández en el momento en el que les dice a los feligreses “estamos secuestrados y esclavizados colectivamente”, durante el sermón de la celebración de la misa del Miércoles de Ceniza Foto: Jessica Torres Barrera

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, llamó ayer a los feligreses y a la sociedad en general a empezar a cambiar “por uno mismo”, y no permitir la violencia, porque “estamos secuestrados y esclavizados colectivamente” por el crimen organizado.
Entrevistado por la mañana, después de la celebración de la misa con motivo del Miércoles de Ceniza en la parroquia de la Asunción de María de Chilpancingo, con la que da comienzo la Semana Santa, el prelado declaró que la situación está así porque las autoridades lo han permitido, pero que este es un tiempo para cambiar.
Antes, en su homilía, González Hernández se refirió al mensaje que dieron los cuatro obispos de Guerrero en su 32 Encuentro Provincial de Pastoral en Acapulco sobre las condiciones de violencia que vive el estado, y al preguntarle sobre ello en la entrevista, dijo que el diagnóstico que tienen es que “colectivamente estamos secuestrados, es decir, ya no es un secuestro individual o familiar, ahora son masas, son comunidades, regiones, municipios secuestrados por el crimen y por grupos a quienes se les ha dado mucha fuerza”.
Agregó que por eso (los obispos) alzaron la voz pero que no generalizan porque saben que no todos están a favor de los “secuestros colectivos”, sobre todo las víctimas que no pueden salir a comprar y a hacer sus cosas porque están “esclavizados” por los grupos armados.

“El mal no vencerá”

A pregunta expresa respecto a la situación de violencia que vive el estado, González Hernández respondió que “por eso tenemos que creérnosla nosotros, creer en nuestros gobiernos, en la sociedad y en nuestras personas que podemos cambiar”.
Pidió empezar “por uno mismo”, no permitiendo la violencia y ninguna maldad.
“En este tiempo de Cuaresma queremos que venzamos el mal a fuerza del bien, que autoridades, sociedad, nosotros, personalmente, cambiemos, este es un tiempo bueno para cambiar”, declaró.
Añadió que se necesita de todos porque el “mal parece que vence, pero no, al final no vencerá, vencerá el bien, tenemos la fuerza de Dios, somos religiosos, creemos en nosotros mismos y debemos tener confianza en los demás, tener confianza en la prensa para que se vaya publicando la verdad”, pidió.
Pero reconoció que “nosotros no podemos cambiar la mente y los corazones de los criminales, solamente Dios, por eso confiemos también en Dios”.
Indicó que la Iglesia quiere influir en sus fieles “y ojalá podamos influir también en la sociedad y poner nuestro granito de arena para que haya paz, confianza, libertad y verdad, confiamos en el ser humano”.

En las regiones los grupos del crimen “controlan todo”

–En su homilía se refirió al mensaje que recientemente dieron los cuatro obispos en el Encuentro de Acapulco, ¿qué ven que está pasando, cuál es el diagnóstico que tienen de la violencia?
–Dijimos que colectivamente estamos secuestrados, es decir, ahora ya no es un secuestro individual, un secuestro personal o familiar, ya no lo podemos decir así, ahora son masas, son comunidades, regiones, municipios secuestrados.
–¿Por el crimen?.
–Pues por el crimen, exactamente, por los grupos que ya tienen mucha fuerza o se les ha dado esa fuerza, se les ha confiado. Así lo hemos detectado nosotros, los obispos en Guerrero.
Agregó que por eso alzaron la voz, “no tan fuerte para no generalizar porque sabemos que no todos están a favor de los secuestros colectivos, sobre todo las víctimas, pobrecitas victimas que están sufriendo, no pueden salir a comprar sus cosas, a hacer sus vidas, a buscar, entonces ya están esclavizados, claro, por los grupos armados, por los grupos delincuenciales que tienen mucha fuerza porque se les ha dado esa fuerza”.
Añadió que por eso en el mansaje de los cuatro obispos, pidieron a las autoridades que no se dejen influir por esas fuerzas: “creemos todavía en nuestros gobiernos, ellos tienen ese deber y son legalmente los responsables para que hagan lo más justo, lo más pacífico y no violentamente”.
–Se habla de que esos grupos contralan el comercio e imponen precios.
–Exactamente, controlan todo eso y nuestra gente está obligada a no salir y sabemos que eso es una esclavitud y no estamos para eso.
Dijo que ven que en Tierra Caliente está difícil que en la Montaña y en la Sierra, que es donde él se mueve, pero que los otros obispos le han dicho que igual está en la Costa Grande donde hay “fronteras; en todo Guerrero hay fronteras, aduanas de control, y no queremos esa situación, no queremos que nuestra gente esté debilitándose, frustrándose, de ahí viene que unos se levanten en armas y encuentran la muerte”.

Militares, sin autorización para intervenir ante la violencia

–¿Falta estrategia de seguridad, o que falta del gobierno? Porque están los militares y la policía en las calles.
–Yo dije que (las autoridades) no se dejen influenciar por el mal. Ellos sabrán dónde se han dejado. También dije (en su homilía) que permitimos, todos hemos permitido la corrupción, el soborno. Todos hemos permitido la maldad que tenemos en México, en todo el mundo y aquí en Guerrero. Nadie puede decir yo no he permitido la maldad en mi escuela, en mi empresa, en mi grupo.
“Pero dijo que la mayoría quiere salir de esto, confiar y coser desde los valores, la educación y la salud, porque hemos descosido el tejido social, hay que tejer los hilos que todavía estén buenos. Tenemos esperanza de que haya hilos buenos todavía en la misma autoridad, en la policía, en la sociedad, en los empresarios y padres de familia”.
Dijo que este es el llamado al inicio de Cuaresma al interior de la Iglesia.
Respecto a la limpieza de retenes de los grupos de autodefensa que las autoridades federales y estatales realizaron el fin de semana pasado en el corredor de Buenavista a Tierra Colorada, el prelado opinó que es lo que debe hacer la autoridad, “eso y más y permanente, porque mientras pasan ellos se hacen a un lado y después salen y vuelven a ponerse”.
Añadió que es a la autoridad a la que le toca la seguridad del estado y de los municipios, “si tenemos autoridades ellas deben ejercer su autoridad”, pero reprochó que han permitido que la autoridad la tengan otros individuos: “a pequeños grupos o ahora grandes grupos se les ha permitido que tengan autoridad y ahora uno se pregunta: ¿a que autoridad nos vamos a dirigir para exigir justicia, seguridad, fuentes de trabajo, salud, educación?
“O si ya ellos (los grupos armados) son la autoridad que tenemos, ya no tenemos gobierno, y no, queremos tener el gobierno al que confiamos”.
En seguida se preguntó: “¿Qué sentirá un militar cuando ve que no está defendiendo a México, que no está defendiendo a su sociedad, a su patria y que ve que hay muertos y no puede decir o hacer nada? Pobres militares, no está cumpliendo su función, o el que los manda, qué trae en mente, qué piensa. Pues que se conviertan, que no busquen sus intereses particulares, personales o grupales, que piensen en los demás, que para eso están”.
Antes, en su homilía, José de Jesús González dijo que “nosotros mismos propiciamos el mal y lo llevamos dentro y hacemos cosas malas, permitimos muchas cosas malas, somos causantes nosotros mismos de lo que pasa”.
Añadió que “el enemigo externo influye mucho en nosotros y nosotros obramos mal”.
Recordó que los obispos de Guerrero ya se expresaron diciendo que “nos sentimos colectivamente secuestrados y hay muchos ejemplos para decir que nos sentimos secuestrados, cada familia ya sabrá de qué estoy hablando porque se sufre interiormente”.
Añadió que en esta Semana Santa “tenemos esperanza de que Dios nos escuche y salga en nuestra ayuda”.
Dijo que como iglesia “pedimos a las autoridades que no se dejen influenciar, que también ellos crean y ejerzan su autoridad para que no permitan y no nos dejen que hagamos malas obras, es triste, es penoso ver que en nuestra propia nariz se ven injusticias y que no se puede hacer nada”.
Manifestó que a sus oídos sus feligreses le dicen: “Obispo, sea nuestra voz, a nosotros no nos hacen caso. Entonces los obispos tenemos que ser la voz de los que no pueden hablar y cuesta”.

 

Llama el arzobispo a la “conversión” de aquellos que “perpetran el mal”

Karina Contreras

Al encabezar la misa de Miércoles de Ceniza, el arzobispo de Acapulco Leopoldo González Gonzalez llamó a los fieles católicos a mirar el inicio de la Cuaresma como un tiempo de esperanza.
Asimismo, a ser misericordiosos con los que menos tienen y compartir la comida, porque “nuestra ciudad está considerada con más pobreza extrema”.
Este miércoles decenas de personas acudieron a la catedral para seguir con tradición de recibir ceniza, en la frente con lo que se da inicio la Cuaresma, que es el momento de la reflexión que llama a “reconvertirnos” y volver a Dios.
En la misa de mediodía en la Catedral de Nuestra Señora de La Soledad, en el Zócalo del puerto, el jerarca católico volvió a pedir para la “conversión de aquellos hermanos nuestros que perpetran el mal”.
Dijo que en tiempo de la Cuaresma Dios esta más insistente en el corazón para llevar en el camino de Jesús.
Agregó que Dios llama a “reconvertirnos” donde está la situación de violencia, de extorsión y por eso “pidamos al señor por la reconversión de aquellos hermanos nuestros que perpetran el mal y a que a todos nosotros todos los días no llame a dejar intenciones de daño que tengamos en el corazón”.
Llamó a mirar con esperanza la Cuaresma porque el Dios tiene en el corazón a sus hijos y que tomar la ceniza es una expresión de nuestra voluntad de volver nuestros pasos al Señor”.
Dijo que “nos debemos reconciliar con el señor, el venir a tomar la ceniza expresa a Dios nuestro voluntad de ir hacía él, en nuestra mente y corazón este Dios presente y le hablemos y platiquemos, les pidamos perdón y que todos regresemos a nuestra casa reconciliados con Dios”.
Este año no hubo restricciones de ingreso a la catedral por la pandemia del Covid-19 porque los fieles pudieron recibir la hostia directamente en la boca, aunque el que quisiera se lo daban en su mano.
Tampoco fue obligatorio el cubrebocas y se vio que las personas adultas es los que más lo portaban, y el arzobispo Leopoldo González, quien en ningún momento se retiró el cubrebocas, fue quien colocó la cruz de ceniza en la frente de muchos de los asistentes.

 

“Estamos secuestrados y esclavizados” por el crimen organizado, advierte obispo

“Estamos secuestrados y esclavizados” por el crimen organizado: obispo de Chilpancingo

José de Jesús González afirma que ya no se trata de secuestros individuales o familiares, “ahora son masas, son comunidades, regiones, municipios secuestrados por el crimen, por pequeños grupos que ahora son grandes grupos, a quienes se les ha dado mucha fuerza”. Y proclama: “Si tenemos autoridades ellas deben ejercer su autoridad”

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa José de Jesús González Hernández en el momento en el que les dice a los feligreses “estamos secuestrados y esclavizados colectivamente”, durante el sermón de la celebración de la misa del Miércoles de Ceniza Foto: Jessica Torres Barrera

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, llamó ayer a los feligreses y a la sociedad en general a empezar a cambiar “por uno mismo”, y no permitir la violencia, porque “estamos secuestrados y esclavizados colectivamente” por el crimen organizado.
Entrevistado por la mañana, después de la celebración de la misa con motivo del Miércoles de Ceniza en la parroquia de la Asunción de María de Chilpancingo, con la que da comienzo la Semana Santa, el prelado declaró que la situación está así porque las autoridades lo han permitido, pero que este es un tiempo para cambiar.
Antes, en su homilía, González Hernández se refirió al mensaje que dieron los cuatro obispos de Guerrero en su 32 Encuentro Provincial de Pastoral en Acapulco sobre las condiciones de violencia que vive el estado, y al preguntarle sobre ello en la entrevista, dijo que el diagnóstico que tienen es que “colectivamente estamos secuestrados, es decir, ya no es un secuestro individual o familiar, ahora son masas, son comunidades, regiones, municipios secuestrados por el crimen y por grupos a quienes se les ha dado mucha fuerza”.
Agregó que por eso (los obispos) alzaron la voz pero que no generalizan porque saben que no todos están a favor de los “secuestros colectivos”, sobre todo las víctimas que no pueden salir a comprar y a hacer sus cosas porque están “esclavizados” por los grupos armados.

“El mal no vencerá”

A pregunta expresa respecto a la situación de violencia que vive el estado, González Hernández respondió que “por eso tenemos que creérnosla nosotros, creer en nuestros gobiernos, en la sociedad y en nuestras personas que podemos cambiar”.
Pidió empezar “por uno mismo”, no permitiendo la violencia y ninguna maldad.
“En este tiempo de Cuaresma queremos que venzamos el mal a fuerza del bien, que autoridades, sociedad, nosotros, personalmente, cambiemos, este es un tiempo bueno para cambiar”, declaró.
Añadió que se necesita de todos porque el “mal parece que vence, pero no, al final no vencerá, vencerá el bien, tenemos la fuerza de Dios, somos religiosos, creemos en nosotros mismos y debemos tener confianza en los demás, tener confianza en la prensa para que se vaya publicando la verdad”, pidió.
Pero reconoció que “nosotros no podemos cambiar la mente y los corazones de los criminales, solamente Dios, por eso confiemos también en Dios”.
Indicó que la Iglesia quiere influir en sus fieles “y ojalá podamos influir también en la sociedad y poner nuestro granito de arena para que haya paz, confianza, libertad y verdad, confiamos en el ser humano”.

En las regiones los grupos del crimen “controlan todo”

–En su homilía se refirió al mensaje que recientemente dieron los cuatro obispos en el Encuentro de Acapulco, ¿qué ven que está pasando, cuál es el diagnóstico que tienen de la violencia?
–Dijimos que colectivamente estamos secuestrados, es decir, ahora ya no es un secuestro individual, un secuestro personal o familiar, ya no lo podemos decir así, ahora son masas, son comunidades, regiones, municipios secuestrados.
–¿Por el crimen?.
–Pues por el crimen, exactamente, por los grupos que ya tienen mucha fuerza o se les ha dado esa fuerza, se les ha confiado. Así lo hemos detectado nosotros, los obispos en Guerrero.
Agregó que por eso alzaron la voz, “no tan fuerte para no generalizar porque sabemos que no todos están a favor de los secuestros colectivos, sobre todo las víctimas, pobrecitas victimas que están sufriendo, no pueden salir a comprar sus cosas, a hacer sus vidas, a buscar, entonces ya están esclavizados, claro, por los grupos armados, por los grupos delincuenciales que tienen mucha fuerza porque se les ha dado esa fuerza”.
Añadió que por eso en el mansaje de los cuatro obispos, pidieron a las autoridades que no se dejen influir por esas fuerzas: “creemos todavía en nuestros gobiernos, ellos tienen ese deber y son legalmente los responsables para que hagan lo más justo, lo más pacífico y no violentamente”.
–Se habla de que esos grupos contralan el comercio e imponen precios.
–Exactamente, controlan todo eso y nuestra gente está obligada a no salir y sabemos que eso es una esclavitud y no estamos para eso.
Dijo que ven que en Tierra Caliente está difícil que en la Montaña y en la Sierra, que es donde él se mueve, pero que los otros obispos le han dicho que igual está en la Costa Grande donde hay “fronteras; en todo Guerrero hay fronteras, aduanas de control, y no queremos esa situación, no queremos que nuestra gente esté debilitándose, frustrándose, de ahí viene que unos se levanten en armas y encuentran la muerte”.

Militares, sin autorización para intervenir ante la violencia

–¿Falta estrategia de seguridad, o que falta del gobierno? Porque están los militares y la policía en las calles.
–Yo dije que (las autoridades) no se dejen influenciar por el mal. Ellos sabrán dónde se han dejado. También dije (en su homilía) que permitimos, todos hemos permitido la corrupción, el soborno. Todos hemos permitido la maldad que tenemos en México, en todo el mundo y aquí en Guerrero. Nadie puede decir yo no he permitido la maldad en mi escuela, en mi empresa, en mi grupo.
“Pero dijo que la mayoría quiere salir de esto, confiar y coser desde los valores, la educación y la salud, porque hemos descosido el tejido social, hay que tejer los hilos que todavía estén buenos. Tenemos esperanza de que haya hilos buenos todavía en la misma autoridad, en la policía, en la sociedad, en los empresarios y padres de familia”.
Dijo que este es el llamado al inicio de Cuaresma al interior de la Iglesia.
Respecto a la limpieza de retenes de los grupos de autodefensa que las autoridades federales y estatales realizaron el fin de semana pasado en el corredor de Buenavista a Tierra Colorada, el prelado opinó que es lo que debe hacer la autoridad, “eso y más y permanente, porque mientras pasan ellos se hacen a un lado y después salen y vuelven a ponerse”.
Añadió que es a la autoridad a la que le toca la seguridad del estado y de los municipios, “si tenemos autoridades ellas deben ejercer su autoridad”, pero reprochó que han permitido que la autoridad la tengan otros individuos: “a pequeños grupos o ahora grandes grupos se les ha permitido que tengan autoridad y ahora uno se pregunta: ¿a que autoridad nos vamos a dirigir para exigir justicia, seguridad, fuentes de trabajo, salud, educación?
“O si ya ellos (los grupos armados) son la autoridad que tenemos, ya no tenemos gobierno, y no, queremos tener el gobierno al que confiamos”.
En seguida se preguntó: “¿Qué sentirá un militar cuando ve que no está defendiendo a México, que no está defendiendo a su sociedad, a su patria y que ve que hay muertos y no puede decir o hacer nada? Pobres militares, no está cumpliendo su función, o el que los manda, qué trae en mente, qué piensa. Pues que se conviertan, que no busquen sus intereses particulares, personales o grupales, que piensen en los demás, que para eso están”.
Antes, en su homilía, José de Jesús González dijo que “nosotros mismos propiciamos el mal y lo llevamos dentro y hacemos cosas malas, permitimos muchas cosas malas, somos causantes nosotros mismos de lo que pasa”.
Añadió que “el enemigo externo influye mucho en nosotros y nosotros obramos mal”.
Recordó que los obispos de Guerrero ya se expresaron diciendo que “nos sentimos colectivamente secuestrados y hay muchos ejemplos para decir que nos sentimos secuestrados, cada familia ya sabrá de qué estoy hablando porque se sufre interiormente”.
Añadió que en esta Semana Santa “tenemos esperanza de que Dios nos escuche y salga en nuestra ayuda”.
Dijo que como iglesia “pedimos a las autoridades que no se dejen influenciar, que también ellos crean y ejerzan su autoridad para que no permitan y no nos dejen que hagamos malas obras, es triste, es penoso ver que en nuestra propia nariz se ven injusticias y que no se puede hacer nada”.
Manifestó que a sus oídos sus feligreses le dicen: “Obispo, sea nuestra voz, a nosotros no nos hacen caso. Entonces los obispos tenemos que ser la voz de los que no pueden hablar y cuesta”.

Suple el obispo emérito Salvador Rangel a Jesús González, quien contrajo Covid

El obispo emérito Salvador Rangel es flanqueado por los presbíteros Antonio Salgado y Tomás Martínez ayer en la catedral de Chilapa antes de la misa de ordenación a sus nuevas parroquias Foto: Luis Daniel Nava

Luis Daniel Nava

Chilapa

El obispo José de Jesús González contrajo Covid-19 y no podrá tener actividades en siete días, informó ayer su par Salvador Rangel Mendoza.
Rangel Mendoza también pidió los gobiernos federal y estatal, que presiden Morena, purificarse para cumplir sus promesas de campaña.
Y recomendó a la policía comunitaria de Tlacotepec concretarse en su territorio y dejar de cometer fechorías.
El obispo emérito, Salvador Rangel Mendoza acudió este martes a Chilapa para dar posesión, en una misa a las 3 de la tarde, al párroco Antonio Salgado Bravo, como nuevo responsable de la ConCatedral de esta ciudad, en sustitución del sacerdote Tomás Martínez Rivera.
Dio posesión a Tomás Martínez como nuevo párroco de Santa Prisca y San Sebastián en Taxco, y a Benito Cuenca Mayo como párroco de la Catedral de Chilpancingo.
Rangel Mendoza cubrió al obispo José de Jesús González que el 31 de diciembre fue reportado con problemas de salud en las vías respiratorias.
Así lo confirmó el obispo emérito Salvador Rangel: “Se está recuperando afortunadamente, ya tenía las tres vacunas, sólo que lo pescó el Covid y estará por lo menos con siete días de inactividad. Ojalá que pronto se recupere”.
“Por eso me pidió que yo viniera a suplirlo y dar posición a estos tres párrocos”.
En un balance de la labor de la iglesia católica en Chilapa insistió en que se ganó mucho en 2022. “Un poco distinto que en años anteriores donde había inseguridad, violencia, ahorita el plato está servido y hay que seguir adelante”.
Dijo que el padre Tomás Martínez estabilizó e hizo e hizo una gran labor en la catedral de Chilapa después del fallecimiento del sacerdote Javier Casarrubias Carballido en 2017.
La tarea del sacerdote Antonio Salgado en Chilapa, dijo, será la de evangelizar a “ateos, a los que piensan diferente, a los que tienen ciertas preferencias sexuales y a los indígenas”.
Se le pidió su opinión del año de administración del gobierno federal y estatal en 2022.
“Cualquier gpbierno, entre mas cerca este de la gente puede hacer su trabajo, y lo que ha dicho Lopez Obrador de no mentir, tiene muchos engañosy mentiras. Ojalá que el propio gobierno se vaya purificando”.
“¿Qué obra se nota que hay en Guerrero? Posiblemente el narcotráfico paró un poquito porque la amapola no funcionó, ya no la están sembrando, pero ahora están produciendo cocaína”, reveló.
Acerca de la irrupción de la policía comunitaria de Tlacotepec a Teloloapan fijó: “Yo diría a los de Tlacotepec, hay un dicho muy cierto: el que mucho abarca poco aprieta y entre ellos entre mas se vayan disgregando van a tener más efectividad.
“Que se concretaran a su territorios, tratar que haya paz y seguridad y sobre todo que no hagan fechorías, que esa parte de la sierra este tranquila y este en paz”, concluyó.

Podrían salir los cuatro detenidos por la desaparición de Vicente Suástegui, advierten familiares

Familiares de Vicente Suástegui Muñoz, quien cumplió este lunes un año y cuatro meses de haber desaparecido, denunciaron que no hay avances de las indagatorias y que los cuatro detenidos podrían salir libres.
Por la tarde, la esposa de Suástegui Muñoz, Samantha Colón Morales, acudió a la celebración de una misa, así como a un acto de exigencia de justicia y presentación con vida del joven Jonathan Guadalupe Romero Gil, frente a playa Tlacopanocha.
En declaraciones, Colón Morales recordó que su esposo cumplió 16 meses de desaparecido. Indicó que la exigencia a la Fiscalía es que ejecute una orden de aprehensión pendiente, porque esta persona es, según uno de los cuatro detenidos, quien tuvo el último contacto con Vicente.
La esposa del también integrante del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Presa La parota (Cecop) informó que se han mantenido las búsquedas. El 19 de septiembre visitaron un corralón de autos en Metlapil, pero no localizaron nada; luego fueron a la comunidad El Bejuco y ahora está pendiente ir a la comunidad San Antonio, para el 10 de diciembre.
Por su parte, el hermano de Vicente, Marco Antonio Suástegui Muñoz, recriminó que “hasta la fecha no sabemos a ciencia cierta qué es lo que pasó. No hay un resultados favorables para dar con su paradero”.
Agregó que “lo lamentable es que la fiscal (Sandra Luz Valdovinos Diego) no ha me dado audiencia, ni acceso a la investigación y las cuatro personas que están detenidas, van a poder salir libres en caso de que no encuentren responsabilidades y esto agrava la situación”. (Jacob Morales Antonio).

 

A dos años sigue sin aclararse el asesinato de un ex precandidato del PRD en Chilapa

Luis Daniel Nava

Chilapa

El asesinato de Antonio Hernández Godínez, precandidato del PRD a la alcaldía de Chilapa, cumplió dos años sin ninguna información acerca de una investigación.
Este viernes fue recordado con una misa.
El aspirante mejor perfilado y con mayor preferencia ciudadana (y que estuvo a punto de ganar la elección en 2018), fue atacado con disparos de arma de fuego la tarde del miércoles 25 de noviembre de 2020 en su oficina, dentro de su negocio de materiales de construcción y que también fungía para hacer reuniones con simpatizantes.
Por la mañana había acudido junto a su equipo a la capital del estado para obtener su carta de no antecedentes penales.
Al siguiente día la Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE), a cargo de Jorge Zuriel de los Santos, informó en un boletín de prensa que las diligencias no se habían podido realizar por la nula colaboración de parte de los familiares de las víctimas con los policías ministeriales y peritos que acudieron al lugar de los hechos. “Ni se ha tenido a la vista indicio alguno que permita avanzar en la investigación de este lamentable hecho”, informó.
Este viernes se cumplieron dos años y la dependencia, ahora a cargo de Sandra Luz Valdovinos, no ha comunicado nada del caso.
El crimen se sumó a la lista de al menos nueve precandidatos, precandidatas, candidatos y candidatas ocurridos desde 2015 en Chilapa y Zitlala, entre ellos los de Antonia Jaimes, del PRD; Dulce Anayeli Rebaja, del PRI y Bertha Silva, de Morena. Todos sin avances en las investigaciones.
El proyecto de gobierno del perredista Antonio Hernández, que competiría por tercera ocasión a la presidencia municipal, contemplaba el manejo transparente de recursos públicos, la construcción de un pozo profundo para atender el desabasto de agua potable en la ciudad y la instalación de una universidad con la carrera de Ingeniería Agrónoma.
Dos semanas antes del homicidio, Antonio Hernández Godínez, se pronunció en contra de una alianza con el PRI para la elección del Ayuntamiento, incluso amagó con encabezar una candidatura ciudadana.
“Este camino ha sido largo y complicado, lo que me ha impulsado más a seguir trabajando por nuestra gente. Y a lo largo de este recorrido, me he dado cuenta de una cosa, si me preguntan ¿De qué lado estás? Con toda certeza, voy a decir, del lado de la gente, del pueblo. Su amigo, Toño ¡El Plan!”, expuso en un desplegado el 11 de noviembre de 2020.