Planta de nuevo el titular de la CEAV a familiares de desaparecidos en Chilpancingo

 

Familiares de desaparecidos nuevamente fueron plantados por el representante de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Julio Hernández Barros, quien les aseguró que este lunes estaría atendiéndolos en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (Codehum), y que además estaría el fiscal general, Xavier Olea Peláez, representantes de la delegación de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), la Secretaría de Salud (Ssa) y el alcalde capitalino, Marco Antonio Leyva Mena.
A la 1 de la tarde estaba programada la reunión en la Codehum donde llegaron puntualmente los familiares, sin embargo unos representantes de la CEAV los esperaban para informarles que se canceló la reunión.
Una de las familiares, Margarita López reprochó el incumplimiento de Hernández Barros, a quien el 17 de noviembre confrontaron porque los hizo esperar una hora y media para atenderlos e incumplió los acuerdos que pactaron. Ese día se comprometió que se reuniría con ellos el 24 de noviembre. A dicho encuentro no asistió y tampoco fueron representantes de la CEAV, sólo acudieron médicos y psicólogos que atendieron a las familias.
Margarita López dijo que se enteraron por el presidente de la CEAV en el estado, José Luis Gallegos Peralta, que Hernández Barros dijo que no se presentaría a la reunión ni notificaría a las autoridades porque temía que los familiares los trataran mal, como dice lo trataron en noviembre cuando le reclamaron que los apoyos no les estaban llegando y además pidieron su destitución.
Sin embargo nadie les notificó que no irían pues cinco días antes dijo Margarita López que le habló a Hernández Barros para preguntarle si irían y lo único que les dijo fue que ninguna autoridad hasta ese momento le había confirmado su asistencia.
Resaltó que a los familiares les preocupa que se sigan llevando cadáveres al Cementerio Estatal Forense de los que tienen conocimiento que no se han hecho pruebas de ADN y que entre esos cadáveres pueden estar familiares de ellos.
Agregó que pese a que la Procuraduría General de la República (PGR) hizo pruebas de ADN a familiares no existen las pruebas de los cadáveres para hacer las confrontas.
Criticó que aunque la Fiscalía General del Estado (FGE) aseguró que ya se hicieron las pruebas de ADN a los 460 cuerpos que siguen sin identificarse en el estado, no se haya reunido con la PGR para comparar los resultados.
Sostuvo que se les hace extraño que hace dos meses les dijeron que no había reactivos para hacer la pruebas a los cadáveres y que ahora digan que ya tienen todas las pruebas de ADN.
Por lo tanto los familiares subrayaron que tienen “muchisísima” desconfianza de que todos los restos que se han llevado al cementerio forense ya tengan una cadena de custodia, que es donde lleva la fotografía, videos de donde se extrajo el cuerpo, la posición en la que estaba y la ropa que llevaban.

 

El presidente de la CEAV no llegó a una reunión y mandó a sus representantes, reclaman familiares

Familiares de personas desaparecidas y asesinadas en Guerrero reclamaron que el presidente de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Julio Hernández Barros no llegó a la reunión que tenían programada en la Comisión de Derechos Humanos de Guerrero (Codehum), y sólo envió a representantes y nuevamente llenaron formatos, sin que se materialicen los apoyos en su totalidad.

El 17 de noviembre los familiares también acudieron a la Codehum y ese día confrontaron a Hernández Barros porque incumplió con acuerdos que habían pactado.
Los familiares provienen de diferentes partes del estado y son parientes de víctimas que fueron desaparecidas en la capital.
Este jueves nuevamente acordaron reunirse con el presidente de la CEAV, además acudirían psicólogos, asesores jurídicos, médicos y les tramitarían el Seguro Popular, además de que hablarían sobre los adeudos de pasajes, gastos médicos, un ataúd y útiles escolares.
Los familiares mostraron su molestia ante la delegada de la  CEAV, Elvia Edith Villanueva Vázquez, porque Hernández Barros no acudió y que nuevamente llenarían los formatos para tramitar los apoyos que ya deberían darles.
La familiar Margarita López Pérez reprochó que hay personas que tienen que hacer viajes largos y no les reembolsan el pasaje, también que hay algunos que necesitan medicamento de insulina para la hipertensión arterial, también una señora que requiere urgentemente una resonancia magnética porque al parecer tiene una arteria taponeada.
Dijo que le llamó al presidente de CEAV para preguntarle por qué no había venido y le respondió que porque nunca acordó que iría, sin embargo su gente estaba ahí.
Villanueva Vázquez les dijo a los familiares que los estarían atendiendo tres psicólogos, que había médicos y que quienes requerían una atención médica en particular se harían los oficios. También que estaba una trabajadora social para recibir la documentación para tramitar su Seguro Popular.
Pese a su molestia los familiares cedieron a hacer los trámites, rellenar formatos, atenderse con los médicos y psicólogos.
López Pérez recordó que ha habido varias ocasiones que rellenan formatos, entregan documentos pero los apoyos no se materializan, que incluso ha habido ocasiones que han firmado papeles y formatos en blanco que desconocen para qué son utilizados.
Un señor expuso que en cuanto a la atención médica urgente que deben recibir está asentada en la Ley de Víctimas que dice “la gravedad del daño sufrido en las víctimas será el eje que determinará prioridad en su asistencia” . Agregó que en caso de que el sistema de Salud no cubra el servicio tendrán que  recurrir a atención especial con el fondo de emergencia.
Margarita López indicó que el fondo de emergencia es de 2 mil millones de pesos que es dinero que se está gastando para viajes Hernández Barros.
Sostuvo que pese a que el presidente de CEAV se jacte de haber indemnizado a la gente que ha sufrido violaciones a los derechos humanos los familiares que agrupan no han recibido nada.
Además abundó que en Chilpancingo hay un repunte de violencia, que siguen  las ejecuciones y desapariciones,  y que en Acapulco están tratando de taparla porque es un lugar turístico.
“Hoy llegó una persona que tiene dos días con un familiar desaparecido,  entonces son casos recientes que se pudieran resolver de manera muy fácil pero no lo están haciendo. Guerrero está en un estado de emergencia  porque no están poniendo la atención de que debía poner para la búsqueda y localización de las personas”, expuso López Pérez.

Reprochan familiares de desaparecidos al presidente de la Comisión de Víctimas que no cumple acuerdos

Familiares de personas desaparecidas en Chilpancingo confrontaron al presidente del Comisión Especial de Atención a Víctimas (CEAV), Julio Hernández Barros, porque los hizo esperar una hora y media para atenderlos e incumplió los acuerdos que pactaron.
Demandaron acciones, no promesas y señalaron las deficiencias de la delegación federal que se encuentra en Acapulco.
El funcionario quiso defender su posición en varios ocasiones, pero durante la interpelación los familiares se dijeron revictimizados y Hernández Barros se vio obligado a guardar silencio.
El funcionario se encontraría a la 1 de la tarde con unas 200 personas de diferentes regiones y estados cuyos familiares fueron desaparecidos en la capital. También esperaban al gobernador Héctor Astudillo Flores para presentarle demandas en las instalaciones de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum).
Una de las peticiones es que todas las averiguaciones de personas desaparecidas sean atraídas por la Procuraduría General de la República (PGR), ya que en la Fiscalía General del Estado (FGE) están archivadas, sin avances, y en los casos en los que hay avances es por el trabajo de los propios familiares, aseguraron.
Además Hernández Barros aclaró que sus casos deben llegar a la PGR para poder integrar a los familiares al padrón de víctimas y puedan acceder a los programas del CEAV, de lo contrario está impedido legalmente brindarles apoyos. Las víctimas aclararon que muchos acudieron primero a la PGR, pero de allá los mandaron a la FGE.
La reunión comenzó después de las 2 de la tarde, a la 1 se supo que el funcionario se trasladaba de Chilapa donde tuvo otra reunión con otros familiares de personas desaparecidas. No hubo una explicación clara sobre la ausencia del gobernador y el presidente de la CEAV se comprometió a citar para el 19 de diciembre al gobierno del estado, a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), a la de Desarrollo Social (Sedesol), a la de Salud (Ssa), así como a la Fiscalía y al Tribunal Superior de Justicia, como lo solicitaron las víctimas.
También hicieron una agenda para la atención de personas que denunciaron la falta de apoyo, por ejemplo el caso de una mujer de Xochipala, la primera en llegar a las reuniones semanales y que tiene a su cargo dos familias, la de su hijo desaparecido hace dos años y de otro desplazado de su comunidad porque se atrevió a buscar a su hermano.
Aseguraron que no recibe dinero ni para los pasajes, que para recibir el reembolso del costo de un traslado es necesario esperar todo el día en la ventanilla de atención, y que existen adeudos de hasta ocho meses a muchas familias.
Si no hay disposición de recursos, “¿dónde está el dinero del fondo emergente?”, cuestionaron, y aclararon que sólo bajo presión se han conseguido algunos apoyos como insulina y atención médica.
La madre y activista Margarita López recriminó que tienen familiares de desaparecidos hospitalizados, y entre las víctimas reúnen dinero para solventar los gastos que no asume la CEAV.
Recordó que en Iguala cuando se anunció la Ciudad Víctima se acordó con los presidentes de las comisiones de Atención a Víctimas federal y estatal la reunión con el gobernador el 9 de noviembre, que se pospuso para esta fecha.
Cuando el presidente de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, Jorge Luis Gallegos Peralta respondió a los reclamos que un familiar lo dejó plantado el día que iban a gestionar la asistencia del gobernador, la señora Guadalupe Rodríguez, madre de un desaparecido, aclaró “si a reclamos vamos, nosotros tenemos más que decirle, tenemos años pidiendo justicia, pidiendo que busquen a nuestros hijos, ¡ya basta!, ya no jueguen, para eso les pagamos, porque ustedes están cobrando un sueldo bien remunerado. Ya queremos que se ponga a trabajar”, gritó indignada y su voz se le quebró por un instante.
Luego se dirigió a Hernández Barros, que en julio del año pasado se reunió con este mismo grupo de familiares y les ofreció garantías para ejercer sus derechos como víctimas en una ventanilla única en Acapulco: “escúcheme, y por ahí vamos a empezar, a que nos escuche, que nos oigan cuál es nuestro dolor, nuestra rabia, que entiendan que estamos sufriendo. Nos mataron en vida, eso no entienden porque no tienen sensibilidad, porque no han sufrido el dolor que tenemos, ya basta de preguntar por qué faltamos, llevamos años pidiendo que nos atiendan, tenemos hijos desparecidos y mujeres que no tienen qué darle de comer a esos niños, tenemos niños que dejaron de estudiar, ya basta que vengan a prometer, queremos que se vaya, antes de que firme una minuta para que las investigaciones salgan del estado y se agilicen, porque ahí están archivadas (en la FGE), nos han dado mil vueltas, !ya estamos hartos”.
Recordó que parte de este grupo de desaparecidos en Chilpancingo hizo una huelga de hambre en la ciudad de México el 20 de julio y Hernández Barros, siendo comisionado del CEAV no se acercó a escucharlos, “si de veras se va a poner a trabajar queremos resultados y pruebas, entonces lo vamos a enaltecer, pero no ahora porque no nos han dado el trato que necesitamos. Somos víctimas y nos han revictimizado porque llevamos años esperando justicia, esperando saber en dónde están nuestro hijos, los queremos con vida, ya no queremos promesas”.

Cuestionan exámenes de ADN a 400 cuerpos

La principal preocupación de los familiares fue la “confronta de los resultados de ADN de 450 cuerpos en posesión del Servicio Médico Forense (Semefo) que serán llevados a un panteón ministerial, porque Margarita López aclaró que es difícil de creer que se hayan concluido los análisis en tres meses, ya que los familiares de este grupo han esperado hasta ocho años por esta información.
El caso ilustrativo, que también fue motivo de reclamo, fue el de la señora Bellanira Chino Ocampo, que el mes pasado recibió los restos de su hija después de diez meses descubiertos en una fosa clandestina en las inmediaciones de Chilpancingo.
Aclaró que no tiene certeza de que los huesos pertenezcan a la niña de 15 años desaparecida en marzo de 2015, porque antes de recibirlos personal de Semefo “andaba buscando los huesos de mi hija en tantas bolsas”.
La mujer reclamó que nunca pidió dinero, que durante nueve meses sola buscó a su hija. Al final solo pidió al CEAV un ataúd y un terreno para colocar los restos. El caso fue presentado a la prensa el 25 de octubre.
Ahora se sabe que no recibió el ataúd y que el cuerpo fue depositado en una tumba rentada durante seis años, que pagaron sus compañeros del colectivo de familiares de desaparecidos.
Al comienzo de la reunión un padre de familia demandó la salida de Hernández Barros de la CEAV, porque no conoce la Ley de Víctimas, el funcionario se defendió diciendo que él la elaboró, y también fue cuestionado por atribuirse el documento. Al final pidió a los inconformes un mes para que las personas evalúen su gestión. Insistió en que tiene “escasamente un mes” como presidente de la Comisión.

Exigen de nuevo familiares de desaparecidos en Chilapa a la CEAV que atienda sus casos

El vocero de los familiares de desaparecidos de la ciudad de Chilapa, José Díaz Navarro exigió que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) atienda realmente sus necesidades, pues desde su llegada sólo da atención psicológica y apoyo para trasporte.
Los familiares se han quejado de que han transcurrido siete meses y los apoyos ofrecidos a las familias por la CEAV se ha limitado a atención psicológica y apoyo para transporte, por un monto de 100 pesos para las familias de la cabecera municipal y de 160 para las de las comunidades.
No es la primera vez que los familiares reclaman esta situación, en agosto denunciaron la ineficiencia de las dependencias responsables de antender los casos de sus desaparecidos.
Recalcaron a la CEAV que el dinero que les dan para transporte los miércoles, “no sirve para nada, ya que estamos viajando todos los días a Chilapa, y existe un desgaste económico para las familias”. Pese a estas denuncias públicas, la Comisión siguió dando sólo estos apoyos.
Díaz Navarro manifestó que la última vez que vino la CEAV a Chilapa fue el 16 diciembre, cuando les comunicó que ese sería el último día que acudirían a brindarles la atención psicológica y el apoyo para el transporte. El vocero dijo que están en espera del presupuesto del siguiente año para poderlos seguir apoyando y reprochó que la CEAV cada año reciba presupuesto para atender a las víctimas y no lo hagan.
El 22 de diciembre asesinaron al padre de tres desaparecidos entre el 9 y el 14 de mayo de 2015, Bernardo Carreto, que también formaba parte del comité de familiares de desaparecidos Siempre Vivos AC. Sin embargo, la CEAV tampoco se acercó a los familiares para brindarles apoyo.
La primera vez que el titular de la CEAV, Julio Hernández Barros, se reunió con familiares de desaparecidos en Chilapa, aseguró que coordinarían acciones de atención que están inscritas en la Ley General de Víctimas y que les darían atención psicológica y médica, y que ingresarán al Registro Nacional de Víctimas para tener derecho al fondo de reparación al término de la investigación.
Asimismo, les dijo que serían beneficiados con programas sociales de la Sedesol, proyectos productivos, que gestionarían becas ante la Secretaria de Educación Pública (SEP) y darían acompañamiento jurídico, todo de manera gratuita.
Desde hace siete meses familiares de desaparecidos se unieron para exigir la presentación de sus parientes, desde que en mayo ingresaron civiles armados de comunidades del sur de Chilapa y se reportó la desaparición de 16 vecinos.
Desde entonces, no tienen respuesta del paradero de sus familiares y tampoco han recibido los apoyos que han exigido a distintas dependencias.

Cancela el alcalde de Iguala una audiencia pública con el comité Los Otros desaparecidos

Integrantes del comité de familiares de víctimas de desaparición forzada Los Otros Desaparecidos de Iguala entregaron la tarde de ayer un pliego petitorio al alcalde priista Esteban Albarrán Mendoza, en el que le solicitaron apoyos para familiares de más de 400 víctimas de desaparición, así como una reunión con ellos en la iglesia de San Gerardo.
Para las 2:40 de la tarde de ayer se tenía programada una audiencia entre integrantes del comité de Los Otros Desaparecidos y el alcalde Albarrán Mendoza, entre las audiencias públicas que éste ofreció ayer en el auditorio del Palacio municipal, pero la reunión fue cancelada y reprogramada para otra fecha que no se precisó.
Se supo que, después de las audiencias públicas, el priista Esteban Albarrán se reuniría en privado en la sala de presidencia con el comisionado de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Julio Hernández Barros, encuentro del que no se conoció más información.
A pesar de la cancelación de la audiencia con el alcalde, dos integrantes del comité de Los Otros Desaparecidos se acercaron al edil y le entregaron el pliego de peticiones, el cual firmó de recibido.
Dijeron al alcalde que el grupo de los otros desaparecidos no busca una audiencia en privado, sino que verbalmente y por escrito le pidieron reunirse en la parroquia de San Gerardo con todos los familiares de víctimas de desaparición forzada, que los conozca y escuche sus necesidades en la asamblea del próximo martes 17 de noviembre.
Esteban Albarrán asumió el compromiso, aunque no se programó alguna fecha para el encuentro.
En el pliego de peticiones, los familiares de desaparecidos le dan a conocer al alcalde una breve reseña desde la integración del comité en noviembre de 2014, después de los ataques a los normalistas de Ayotzinapa, hasta la fecha, periodo en el que han logrado el registro de 400 víctimas de desaparición forzada y la recuperación de 104 cuerpos en fosas clandestinas al poniente de esta ciudad en coordinación con la Procuraduría General de la República (PGR), “puesto que la desconfianza en las autoridades municipales y estatales es mucha”, dice el documento.
Le dicen que una de las prioridades es la seguridad, al ser un grupo muy vulnerable, “es el motivo por el cual nos gustaría que usted conociera a los integrantes del comité, para que pueda tener un panorama de los problemas que rodean a la ciudad de Iguala”.
Entre las peticiones le solicitan al alcalde dos vehículos para transportarse los domingos de día de búsqueda de fosas y desayunos para la comisión de 20 o 30 familiares que sube a las búsquedas ese día, así como becas para los hijos de los desaparecidos, créditos a la palabra para emprender negocios familiares ante la precaria situación en que quedaron las familias, empleos para los familiares en las áreas y departamentos del Ayuntamiento de acuerdo a sus perfiles, incorporar a las familias a los diferentes programas sociales que manejan los tres órdenes de gobierno y acceder a proyectos productivos.
Asimismo, piden apoyos para trámites que las familias requieren en el Registro Civil, descuentos y condonaciones en el pago de servicios públicos, entrega de despensas a las familias integrantes del comité, ser considerados en programas de empleo temporal, apoyos para gastos de servicios funerarios cuando alguna familia lo requiera y contar con su presencia en algunas de las reuniones de cada martes en la parroquia de San Gerardo.
Todas son peticiones que también se plantearon al alcalde interino Silviano Mendiola Pérez, pero que ninguna fue atendida.