Sindicalizados del Ayuntamiento trabajan por turnos dos veces a la semana

Trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento trabajan por turnos dos veces a la semana, debido a los trabajos de rehabilitación de la sala de regidurías que fueron afectadas por el huracán Otis que impactó el pasado 25 de octubre.
Ayer en la explanada del Palacio Municipal que se ubican en el parque Papagayo, colocaron unas lonas y mesas donde los trabajadores adscritos a los regidores se encuentran atendiendo a la población que va a hacer gestiones de obras y de apoyos sociales.
En la sala A y B de los regidores, como se informó antes del periodo vacacional de Semana Santa, se empezaron a quitar los plafones y vidrios de los cubículos que se encontraban rotos.
En dichos lugares los trabajos no están terminados, quitaron la loseta del piso, el plafón dañado del techo, y también los vidrios que se rompieron.
En las salas de regidores A, había materiales de construcción, pega azulejos, plafón, también había trabajadores que se encontraban arreglando los daños.
En la sala de descanso, donde se plasmó el mural de los 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa detenidos-desaparecidos, ya se colocaron plafones con una capa de cemento.
Como se informó, los trabajos de rehabilitación de las salas empezaron después de cinco meses del impacto. Llevan casi un mes de labores de rehabilitación, pero siguen haciendo las labores de reconstrucción.
De acuerdo con trabajadores que ayer se encontraban en el Ayuntamiento, dos veces a la semana se presentan a trabajar, porque están haciendo rotación debido a que no tienen las condiciones adecuadas para estar todos presentes.
En las oficinas del Palacio Municipal los trabajadores además del polvo que se levanta por los trabajos de construcción, también tienen que soportar el ruido que se produce durante las maniobras de rehabilitación del inmueble.
Sin embargo, en las oficinas de la ex Zona Militar, donde está el área de Recursos Humanos, Ecología y la Coordinación de Protección Civil y Bomberos, ahí todavía no empiezan los trabajos de rehabilitación del inmueble, todavía hay ventanas rotas, techos que están cuarteados por los fuertes vientos. (Aurora Harrison).

 

Pide el director de Ecología al gobierno federal firmeza contra quienes provoquen incendios

Aurora Harrison

El director municipal de Ecología y Protección al Medio Ambiente, Jesús Castillo Aguirre, informó que no han tenido reporte de afectación ni decesos de animales tras los incendios forestales en el parque nacional El Veladero, y pidió a las autoridades federales actuar con firmeza contra quienes los provoquen.
Consultado el sábado, dijo que ya propuso a las autoridades estatal y federal un arranque de campaña de reforestación en las zonas afectadas, porque desde los primeros conatos de incendios trabajan junto al departamento de Vida Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para salvaguardar las más de 2 mil especies que habitan en el parque.
“No hemos encontrado animales muertos, ni hemos recibido reportes de que algún reptil, o algún mamífero que se haya observado en situación de muerte, no nos hemos encontrado con reportes de animales muertos”, dijo el funcionario municipal.
Sostuvo que el gobierno municipal ha promovido y costeado lonas pidiendo a la población que no provoque incendios, e incluso han organizado reuniones con comisarios para hablar de un programa de ordenamiento y se han hecho los exhortos “de lo contrario estuviera peor”.
“Es una reserva natural protegida que administra la Semarnat e impone sanciones penales la Profepa, lo que hacemos nosotros es reportar las incidencias a esas dependencias, como los conatos de incendios y las invasiones”, dijo el funcionario municipal.
Detalló que han tenido tres mesas de trabajo desde los primeros incendios forestales y se acordó trabajar en conjunto los tres órdenes de gobierno para atender las denuncias de comisarios y delegados que sepan de alguien que esté quemando basura y que no tienen cuidado.
“Le hemos pedido a las autoridades que deslinden responsabilidad y que actúe con firmeza contra quienes provoquen los incendios”, dijo, y adelantó que están coordinando acciones para reforestar en las áreas siniestradas por los incendios.
El funcionario explicó que todo mayo se buscará preparar la logística y recursos, así como la organización en las escuelas, dependencias para aplicar un programa de reforestación de esas áreas afectadas por los incendios.

 

El 27 de mayo se sabrá si se suspende la construcción del cuartel de la GN en el Papagayo

Grupo Reforma / Agencia Reforma

Acapulco

Ciudadanos que iniciaron una demanda de amparo contra la construcción de un cuartel de la Guardia Nacional en el parque Papagayo, obtuvieron una suspensión provisional por parte del Juzgado Tercero de Distrito con sede en este puerto turístico.
“En la audiencia de hoy (lunes) se prorrogó para este martes 16 de abril para que la Sedena entregue la documentación requerida, pero en tanto sigue suspendida la obra”, dijo el presidente de la asociación Soy tu Brother, Ramiro Solorio Almazán.
La audiencia constitucional se hará el próximo 27 de mayo y se va a decidir si se otorga la suspensión definitiva sobre la queja contra la construcción del cuartel militar.
Este lunes, empleados de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) entraron al parque Papagayo para hacer una inspección de los daños ambientales de la flora y fauna que han provocado los trabajos de construcción que ha hecho la Guardia Nacional.
“En Profepa me dijeron que el informe de la inspección que realizaron nos lo van a entregar el próximo jueves”, aseguró Ramiro Solorio.
Hasta antes de que fuera suspendida la obra del cuartel la Sedena, la institución ya había hecho trabajos en un área de más de 600 metros cuadrados en el Papagayo, el cual en 1979 fue declarado por el gobierno estatal como una reserva ecológica, recreativa y turística.
“La Guardia Nacional pretende construir un cuartel en un área de más de una hectárea, pero vamos a dar la lucha para que se frene esa obra en el parque Papagayo que por el huracán Otis tuvo serias afectaciones ambientales”, añadió Solorio Almazán.
“El gobierno en vez de restaurar ambientalmente este pulmón más lo está dañando con un cuartel como otros más que se están construyendo en Acapulco para supuestamente mejorar la seguridad”.
La suspensión provisional de la obra la otorgó a los demandantes del amparo el pasado 8 de abril de este 2024, quienes desde meses antes habían efectuado protestas en el reconocido parque en Acapulco.
Después del huracán Otis, el gobierno federal anunció que para mejorar las condiciones de seguridad en este puerto se van a construir 20 cuarteles de la Guardia Nacional en distintos puntos de este puerto.

 

Reanudan soldados entrega de enseres en algunos módulos de la ciudad

Entrega de enseres domésticos afuera del centro acuático El Rollo, en la Costera Foto: Argenis Salmerón

Aurora Harrison

El sábado y domingo en algunos módulos de la ciudad se retomó la entrega de enseres domésticos, incluidas las estufas que faltaban, por parte del gobierno federal a damnificados de Acapulco por el huracán Otis.
Mientras que en el parque Papagayo, vecinos señalaron que tienen más de una semana que el Ejército no entrega los paquetes de enseres.
En el módulo ubicado en la avenida Costera, afuera del parque acuático El Rollo, se entregaron más de 100 paquetes de enseres a las personas que llevaban formadas desde hace más de una semana y que no se iban para no perder su lugar en la fila.
Ayer domingo la entrega empezó poco después de las 7 de la mañana comentaron personas que siguen haciendo fila en espera de que llegue su turno para recibir sus paquetes de enseres.
Se entregaron más de 100 paquetes de enseres, y a las 10 de la mañana ya no había ningún camión del Ejército ni camionetas de mudanzas. Los únicos que estaban son personas que llevan más de una semana esperando que llegue su turno.
Los damnificados están en la banqueta esperando sentados en sillones, banquitos, sillas y se cubren del sol con sombrillas, cartones, bolsas de plástico negras o pedazos de tela amarradas de los postes. La fila empieza a unos metros de la entrada del parque acuático y se extiende hasta antes de llegar a la playa.
El viernes por la noche el Ejército informó que se reinicia el Plan DN-IIIE, que los puntos de entrega son: Ciudad Renacimiento, Emiliano Zapata, Costera y Caletilla; que la entrega sería por orden alfabético, para personas que sus apellidos empiecen con las letras de la A a la letra G.
Tras el anuncio de que se reinicia la entrega, muchos vecinos acudieron a formarse al módulo del parque Papagayo para hacer guardias. Ayer domingo por la mañana había varias decenas de personas formadas en espera de que se retome la entrega, y es que dijeron que ahí lleva más de una semana sin entregar enseres.
Vecinos de Zapotillo, Palma Sola Santa Cruz, y del Módulo Social Fovissste comentaron que llevan más de 10 días esperando respuesta de las autoridades responsables de la entrega de los paquetes de enseres domésticos.
Uno de ellos contó que formaron un grupo y es ahí como se comunican, además de ponerse de acuerdo en los días en que les toca guardia, porque a pesar de que lleva varios días sin que se entregue en dicho lugar, las personas están cuidando su espacio, para que cuando se retome la entrega ser de los primeros.
La señora Evelia dijo que están por grupos, los primeros que están en la fila, después los que van en medio y los que se encuentran hasta el final. ayer en el lugar donde había cajas de cartón, plástico blanco con los que hicieron una casita para cubrirse del sol y de esa forma es que se va apartado el espacio.
“No nos han dicho de cuándo se va a reiniciar la entrega en este punto, nos hemos dado cuenta de que en otros lugares han dado, pero son pocos y las personas se pelean porque no son suficientes, yo voy a esperar porque ya están más cerca”, dijo la damnificada.
Abundó que en los medios vio que en la colonia Emiliano Zapata fueron muy pocos los paquetes y las personas se estaban peleando, en Caleta también se entregaron pocos, “decían que no había estufas y que no estaba completo el paquete y que por eso no entregaban”.
La vecina dijo que las autoridades le dicen que se vayan a su casa y “que esperemos a que salga la colonia, pero se supone que somos rezagados y la colonia que nos toca ya salió, ya pasó, entonces no nos dan una solución”. Mencionó que algunos de sus compañeros han desistido de la entrega y los que se mantienen en espera se van turnando.
Ayer en el parque Papagayo la entrega de enseres domésticos se mantiene detenida por parte de los soldados del Ejército Mexicano y que desconocen para cuándo en ese punto se va a retomar, pero los damnificados dicen que van esperar que salga en lista.

Aumentan las filas por el retraso en la entrega de enseres domésticos, se quejan

Vecinos de la colonia Bocamar reclamaron que el atraso que hubo de la entrega de enseres domésticos ocasionó largas filas y quedarse a dormir tres noches afuera del parque acuático El Rollo.
Los damnificados por el huracán Otis, en su mayoría son rezagados o los que se censaron en la segunda etapa.
La fila de personas rodeó el centro acuático El Rollo y los vecinos se cubrieron del sol con sombrillas y pedazos de cartones.
La Sedena informó que no entregaron enseres domésticos el miércoles, jueves y viernes pasado en Acapulco y Coyuca de Benítez, debido a que la empresa proveedora tuvo un atraso y no había estufas para los paquetes y hasta el sábado se reanudó el reparto.
Las personas censadas por la Secretaría del Bienestar se quejaron que no aumentaron el número de los paquetes de enseres domésticos a entregar, a pesar que hubo un atraso.
El señor Alejandro Maganda Lara se quejó que tuvo que dormir tres noches en la calle para recibir sus enseres domésticos, debido al atraso que hubo.
“Nos tocó la mala suerte, porque se atrasaron en la entrega y se acumuló mucha gente de otras colonias”, manifestó.
Expresó: “fui de los primeros en censar y soy el último en recibir mis enseres, porque mi colonia apenas salió en la lista de los soldados”.
Comentó que no hubo órden en la entrega de enseres domésticos, porque aseguró que salieron varias listas de personas, pero los soldados respetaron la fila y repartieron fichas.
La señora Alejandra Pintos Piedra narró que durmió tres noches afuera del centro acuático El Rollo, “fue mucho tiempo, todo por el atraso de la entrega de enseres domésticos”.
“Se juntaron muchas colonias y hubo más demanda y entregaron poquitos paquetes de enseres en lugar de aumentar el número por el atraso”, criticó.
Declaró que ya casi no hay enseres domésticos, “así que me tengo que aguantar la asoleada, dormir en la calle y mal comida”.
Las sedes de entrega autorizada por el Ejército se van cerrando conforme pasa el tiempo, en la zona poniente ya no hay distribución a un costado de la tienda Chedraui ni en Balcones al Mar.
Los lugares establecidos son en la colonia Jardín Magos, Caletilla, plaza Patio, Ciudad Renacimiento y Emiliano Zapata, en Acapulco, y en Coyuca de Benítez en el mercado municipal.
El paquete de enseres domésticos contiene un refrigerador, una estufa, un colchón, una licuadora, un ventilador y un juego de sartenes.

 

Permanecen activos los incendios en el parque El Veladero pese a los esfuerzos por sofocarlos

El incendio cerca de la zona residencial de Pichilingue ha dañado unas 65 hectáreas Foto: Carlos Carbajal

Argenis Salmerón

Los dos incendios forestales en Acapulco siguen activos en el parque nacional El Veladero, uno lleva seis días y el otro cuatro.
El que lleva seis días se ubica en la parte alta de la colonia Los Dragos; el fuego seguía, a pesar de los trabajos de sofocación de las autoridades de los tres órdenes de gobierno.
La Secretaría de Protección Civil del estado informó que hay 65 hectáreas dañadas en Los Dragos y 45 en el poblado de Carabalí.
Las llamas estaban a unos 150 metros de la avenida Escénica y el fraccionamiento Pichilingue, pero hubo vigilancia de las autoridades. La circulación de vehículos por la vialidad es de manera normal.
El humo blanco del incendio forestal se pudo ver de la avenida Escénica, Puerto Marqués y zona Diamante de Acapulco.
En la parte alta de la avenida Escénica hay abundante vegetación destruida y seca por el impacto del huracán Otis, de ahí la intensidad del fuego.
Bomberos regaron agua con pipas arriba de la avenida Escénica para evitar que el fuego se extienda a los vehículos y residencias de lujo, principalmente del fraccionamiento Pichilingue.
Sin embargo no hay riesgo para las residencias del fraccionamiento Pichilingue, porque están los cuatro carriles de la avenida Escénica y las casas están 300 metros adelante.
La avenida Escénica conecta la avenida Costera con la zona Diamante, y el bulevar de Las Naciones.
El helicóptero de la Marina continúa contribuyendo con los trabajos de sofocación en la parte alta de la colonia Los Dragos.
De acuerdo con las autoridades, hay 350 brigadistas en las maniobras de sofocación de los incendios forestales.
Por otra parte, en la colonia La Providencia y el poblado de Carabalí, el fuego se mantiene en el cerro desde hace cuatro días, pero se mantiene lejos de las viviendas.
El fuego se extendió a las colonias La Providencia, Quebradora y Vista Hermosa, ubicadas en la parte alta de la ciudad.
Se supo que la última casa está a más de medio kilómetro del incendio y del mismo modo hay vigilancia de los bomberos para que el fuego no llegue a las casas.
El encargado de despacho de la dirección de Bomberos del municipio, Raúl Noyola Rocha, informó ayer en la mañana que los trabajos de sofocación en Los Dragos van a un 85 por ciento y en La Providencia y Carabalí un 70 por ciento.
Añadió que los fuertes vientos complican el trabajo de las autoridades de los tres órdenes de gobierno y que seguirán las labores hasta apagar el fuego en su totalidad.
En declaraciones a reporteros, el subsecretario de Protección Civil estatal, Ricardo Ramírez Ibarra, informó que ayer seguían los dos incendios activos en Acapulco, uno localizado en la colonia Los Dragos y otro, en la zona de Carabalí, los cuales se encuentran controlados al 95 y 90 por ciento, respectivamente.

Forman fila ocho días vecinos de la colonia Progreso para recibir enseres

Cientos de vecinos de la colonia Progreso esperan en una tumultuosa fila que les sean entregado su paquete de enseres Foto: Aurora Harrison

Aurora Harrison

Vecinos de la colonia Progreso afectados por el huracán Otis estuvieron ocho días formados cerca de la malla ciclónica del parque Papagayo, durmieron en sillas y hasta ayer recibieron sus enseres domésticos por parte de la Secretaría de Bienestar.
Comentaron que durante el tiempo de espera se dieron cuenta que había personas que cobraban por apartar los lugares y que por esa razón es que tardaron para recibir el apoyo del gobierno, porque metían a otras personas a las filas.
Ayer había dos filas, una de los que ya tenían una ficha y que estaban esperando para que se les entregaran los enseres y los otros que tenían que esperar otro día. La fila estaba más organizada y es que había rumores de que ya no iban a entregar en el parque, pero es una versión que no estaba confirmada sólo “rumores” que se escucharon.
Los soldados ahora metieron los camiones al área de estacionamiento y las camionetas de mudanzas y los carros esperan sobre la calle Andrés de Urdaneta, de manera que ese tramo de vialidad está cerrado a la circulación de vehículos. También había botes de basura saturados debido a la cantidad de desechos de comida que las personas que hacen fila tiran.
La señora Rebeca es vecina de la colonia Progreso y estaba formada en la fila de los que ya iban a recibir el apoyo. Recordó que con el huracán que impactó el 25 de octubre su vivienda resultó afectada, como la mayoría de los inmuebles en la ciudad; ayer, luego de ocho días que pasó desvelándose y mal comiendo, recibió sus enseres domésticos.
Sentada en una silla plegable, la señora Rebeca recordó que estuvo “ocho días aquí y hubo bastantes personas que estuvieron cobrando, empezaron a meter gente, hasta que los mismos que estábamos formados empezamos a sacar y la misma gente de la fila que se fue organizando”, porque dijo “había personas que gritaban y eran muy déspotas”.
“A los militares los tuvieron que cambiar, porque la fila no avanzaba, los cambiaron, porque a las 3 de la tarde se acaba la entrega de enseres, y ahorita no, ahorita siguen entregando hasta muy tarde, y ahorita personalmente pasan el jefe (de los militares) para preguntar si avanzaba la fila, porque gracias a él es que avanzó”, dijo.
Mencionó que había versiones entre las personas de la fila que los “militares estaban vinculados con los que apartaban lugares”, porque después de que llegaron nuevos soldados y agentes de la Guardia Nacional hubo más movimiento y la fila empezó a avanzar.
“Nos venimos en equipo con otros vecinos y gracias a eso es que la pasamos divertidos, porque estar aquí fue un infierno, los primeros días ya no aguantábamos, hasta que tuvimos que hacer relajo… que de campamento, de picnic para soportar el sol, el hambre, y sin baños porque si no tomas agua los intestinos apretados, el estrés porque ya eran siete días y nos fuimos a bañar cuando dieron las fichas”, declaró.
Abundó que los soldados dieron fichas y “ya estamos a nada de que nos entreguen nuestros enseres, desde el domingo pasado llegué y era de esperarse porque había mucha gente, aparte la fila era larga porque venían de colonias, de María de la O, Santa Cruz, porque decían que también llevaban varios días en la UDA y no salían y todo esto estuvo mal organizado, porque no lo hicieron por letra, así como nos dieron el dinero para reconstrucción así nos hubieran llamado para darnos los enseres”.
Otra vecina también afectada, la señora Martha, dijo que ella también lleva ocho días ahí esperando la entrega de sus enseres, que al igual que la señora Rebeca estos días de espera los ha sabido sobrellevar porque con sus vecinos están platicando, se comparten comida que les llevan sus hijos, y se intercambian para hacerse guardia y poder ir al sanitario.

Siguen transporte irregular y largas filas por los enseres

Ayer se observaron aglomeraciones en las paradas del Acabús y damnificados por el huracán Otis estuvieron ocho días formados cerca del parque Papagayo donde durmieron para recibir los electrodomésticos que reparte el gobierno federal. En Renacimiento (en la imagen) hubo fricciones con vecinos de otras colonias y muchos se quedaron formados y con las manos vacías. Ayer también, la gobernadora Evelyn Salgado anunció la puesta en marcha de un plan de reforestación en la ciudad y en Coyuca de Benítez Foto: Jacob Morales

Forman fila ocho días vecinos de la
colonia Progreso para recibir enseres

La gente se organiza e impide que haya personas que cobran por apartar lugar

Aurora Harrison

Vecinos de la colonia Progreso afectados por el huracán Otis estuvieron ocho días formados cerca de la malla ciclónica del parque Papagayo, durmieron en sillas y hasta ayer recibieron sus enseres domésticos por parte de la Secretaría de Bienestar.
Comentaron que durante el tiempo de espera se dieron cuenta que había personas que cobraban por apartar los lugares y que por esa razón es que tardaron para recibir el apoyo del gobierno, porque metían a otras personas a las filas.
Ayer había dos filas, una de los que ya tenían una ficha y que estaban esperando para que se les entregaran los enseres y los otros que tenían que esperar otro día. La fila estaba más organizada y es que había rumores de que ya no iban a entregar en el parque, pero es una versión que no estaba confirmada sólo “rumores” que se escucharon.
Los soldados ahora metieron los camiones al área de estacionamiento y las camionetas de mudanzas y los carros esperan sobre la calle Andrés de Urdaneta, de manera que ese tramo de vialidad está cerrado a la circulación de vehículos. También había botes de basura saturados debido a la cantidad de desechos de comida que las personas que hacen fila tiran.
La señora Rebeca es vecina de la colonia Progreso y estaba formada en la fila de los que ya iban a recibir el apoyo. Recordó que con el huracán que impactó el 25 de octubre su vivienda resultó afectada, como la mayoría de los inmuebles en la ciudad; ayer, luego de ocho días que pasó desvelándose y mal comiendo, recibió sus enseres domésticos.
Sentada en una silla plegable, la señora Rebeca recordó que estuvo “ocho días aquí y hubo bastantes personas que estuvieron cobrando, empezaron a meter gente, hasta que los mismos que estábamos formados empezamos a sacar y la misma gente de la fila que se fue organizando”, porque dijo “había personas que gritaban y eran muy déspotas”.
“A los militares los tuvieron que cambiar, porque la fila no avanzaba, los cambiaron, porque a las 3 de la tarde se acaba la entrega de enseres, y ahorita no, ahorita siguen entregando hasta muy tarde, y ahorita personalmente pasan el jefe (de los militares) para preguntar si avanzaba la fila, porque gracias a él es que avanzó”, dijo.
Mencionó que había versiones entre las personas de la fila que los “militares estaban vinculados con los que apartaban lugares”, porque después de que llegaron nuevos soldados y agentes de la Guardia Nacional hubo más movimiento y la fila empezó a avanzar.
“Nos venimos en equipo con otros vecinos y gracias a eso es que la pasamos divertidos, porque estar aquí fue un infierno, los primeros días ya no aguantábamos, hasta que tuvimos que hacer relajo… que de campamento, de picnic para soportar el sol, el hambre, y sin baños porque si no tomas agua los intestinos apretados, el estrés porque ya eran siete días y nos fuimos a bañar cuando dieron las fichas”, declaró.
Abundó que los soldados dieron fichas y “ya estamos a nada de que nos entreguen nuestros enseres, desde el domingo pasado llegué y era de esperarse porque había mucha gente, aparte la fila era larga porque venían de colonias, de María de la O, Santa Cruz, porque decían que también llevaban varios días en la UDA y no salían y todo esto estuvo mal organizado, porque no lo hicieron por letra, así como nos dieron el dinero para reconstrucción así nos hubieran llamado para darnos los enseres”.
Otra vecina también afectada, la señora Martha, dijo que ella también lleva ocho días ahí esperando la entrega de sus enseres, que al igual que la señora Rebeca estos días de espera los ha sabido sobrellevar porque con sus vecinos están platicando, se comparten comida que les llevan sus hijos, y se intercambian para hacerse guardia y poder ir al sanitario.

 

No son censados vecinos de San Marcos por no estar incluidos en la declaración de desastre

Por la razón “política” de ser parte del municipio de la Costa Chica y no de Acapulco los discriminan, aunque hayan sufrido severas pérdidas, señalan

 

Ramón Gracida Gómez

Paredes de viviendas de adobe partidas a la mitad, techos de lámina que no han sido reparados por falta de dinero y milpas completas de maíz perdidas son algunos de los estragos ocasionados por el huracán Otis en diez comunidades de San Marcos colindantes con Acapulco, que no fueron censadas.
Damnificados criticaron que no fueron tomados en cuenta por una razón “política” de ser parte del municipio de la Costa Chica que no fue incluido en la declaración de desastre, a pesar de vivir las mismas consecuencias que los habitantes de Acapulco y Coyuca de Benítez.
Pidieron la visita del delegado federal Iván Hernández, porque los funcionarios con los que se han reunido sólo “están jugando” con ellos, les piden pruebas de sus daños y no cumplen los acuerdos que firman. Advirtieron de un nuevo bloqueo en la carretera federal de la Costa Chica este lunes si no son atendidos.
El Sur hizo un recorrido este sábado en algunas de estas comunidades afectadas por el meteoro del 25 de octubre, con la ayuda de representantes de los poblados que han organizado la toma de los pozos de agua y los bloqueos de la carretera federal, el último apenas el viernes pasado.
Fueron más de cuatro horas de recorrido por distintas viviendas dañadas y que aún no han sido reparadas porque los propietarios, muchos adultos mayores, no tienen los recursos económicos para comprar ni siquiera láminas de 900 pesos porque viven de su pensión que da la federación.
Ningún funcionario o servidor de la Nación ha acudido a revisar las afectaciones, por lo que es mucha la necesidad de los pobladores consultados de mostrar todos los daños que tienen, todo lo que perdieron, todo lo que no han podido recuperar a casi tres meses del paso del huracán.
La visita empezó a las 12:30 de la tarde en El Tejoruco, la comunidad de Florencio Villareal en la que se encuentra la intersección entre la carretera hacia la Costa Chica que se prolonga desde Barra Vieja, y la carretera hacia la misma región desde el crucero de El Cayaco, en la zona suburbana de Acapulco.
Para sobrevivir las primeras semanas después de la catástrofe, Alberta Morales García y su hija Isabel Gaspar, vecinas de esta localidad, pedían agua y comida a los automovilistas porque la Marina y el Ejército sólo entregaron despensas en su localidad dos veces y tenían que ir hasta Lomas de Chapultepec por ellas.
“A lucha salimos” de la casa, recordó Alberta dentro de su vivienda que parece deshabitada porque se echaron a perder varias pertenencias, pero que no quiere dejar porque ahí crió a sus nueve hijos. Vende pollos al menudeo, pero su principal fuente de ingreso es la pensión de adulto mayor.
La casa de Alberta está cerca de la escuela primaria rural estatal Benito Juárez, cuyo techo resultó afectado y los niños de primero a sexto toman clases en la cancha techada que se encuentra a un costado; para poder entrar a ver los daños durante el recorrido, la comisaria municipal, Yazmín Navarrete Guerrero, tuvo que insistir con los agentes de la Guardia Nacional que pernoctan en los salones desde finales de diciembre.
Es una comunidad de campesinos, indicó el comisario suplente, Ezequiel Flores Hernández, y hay una dependencia económica de la milpa que siembra, tres hectáreas en promedio por productor, porque venden una mitad y consumen la otra mitad; casi todos perdieron todo por Otis.
Acompañado de representantes de otras comunidades, el vecino de Tejoruco, Álvaro Arcos, contó que los damnificados de San Marcos decidieron protestar por primera vez el 11 de noviembre porque los “Servidores de la Nación” les dijeron que no acudirían a sus casas porque pertenecían a San Marcos, municipio que no fue incluido en la declaración de desastre.
Para los damnificados, es una cuestión “política” porque sí pertenecen oficialmente al municipio de la Costa Chica, pero tuvieron los mismos daños materiales que los vecinos de Acapulco porque sus comunidades colindan con este municipio.
Luego tomaron los pozos de agua que están dentro del Ejido de La Barrera, no de Lomas de Chapultepec, enfatizó el campesino, del 18 al 20 de diciembre, con lo que lograron la primera reunión en las oficinas de la Promotora Turística (Protur) en el bulevar de Las Naciones.
En el encuentro participaron el delegado federal de Gobernación en Guerrero, Juan Carlos Barrios Curtis; el representante de la Secretaría de Gobernación del estado, Lucio García Villalba; el delegado de la misma dependencia estatal, Osiel Morales Nava, y otro funcionario del estado del que no saben su nombre.
Los representantes de los gobiernos federal y estatal, ambos morenistas, les pidieron “pruebas” de los daños que tenían, además de que el alcalde de San Marcos, el perredista Tomás Hernández Palma, mandara un oficio al estado.
Hernández Palma les contestó en la misma reunión que ya había enviado el documento y señaló al secretario de Protección Civil, Roberto Arroyo Matus, de no hacer avanzar la solicitud, de acuerdo con la versión de los pobladores presentes.
Ante la falta de resultados, las comunidades se organizaron por su cuenta y son alrededor de mil habitantes de Medanitos, Perros de Agua, Llano de la Puerta, San Juan Grande, San Juan Guatemala, Las Minas, Tamarindillo, Lomitas de Papagayo, Barrera, El Tejoruco, Cacao y Palmitas.
El 3 de enero tuvo lugar una reunión más, donde estuvieron presentes la subdelegada federal de Gobernación en Guerrero, Edith Mariel Panches Giles, los funcionarios García Villalba y Morales Nava, y otro representante de Gobernación estatal, Rafael Montalván Astudillo.
Acordaron que el miércoles 17 de enero tendrían una respuesta con la condición de que ya no se manifestaran; un día antes, Álvaro Arcos habló con García Villalba para que le diera la hora en que tendrían la respuesta, pero el funcionario la pospuso durante el transcurso del día.
El jueves se manifestaron otra vez los damnificados porque lo acordado fue “una mentira, están jugando con nosotros o qué quieren que hagamos nosotros”, les dijeron a los representantes del estado, García Villalba y Morales Nava, quienes se comprometieron mediante un convenio firmado a que el viernes acudiría el delegado federal, Iván Hernández.
Los damnificados de San Marcos ubican a Iván Hernández como el único que les puede dar un respuesta, porque es el “único autorizado del gobierno federal y está más cerquita de López Obrador” y de la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel.
Pero no llegó el delegado el viernes y entre 600 y 800 pobladores bloquearon la carretera federal hasta las 7 de noche, sólo liberaron la vía porque “nos sentíamos mal nosotros porque había mucha gente enferma con hemodiálisis, mucho niño con tos, la cola se hizo grandísima”, dijo Álvaro Arcos.
Entre el crucero de El Tejoruco y el puente de Lomas de Chapultepec se ubica la localidad de La Barrera, de apenas unas 30 viviendas, varias de ellas fungen también como tiendas de artesanías. Una de ellas es de Luz Divina Hernández Espíritu, quien estimó en 50 mil pesos la pérdida de mercancía mientras mostraba el cuarto en el que se encontraba el 25 de octubre y fue arrasado también por el huracán.
Ahora sólo tiene un colchón, la base de la cama y unas enormes láminas colgando, y contó que le ofrecieron en Acapulco el paquete de enseres domésticos en 5 mil pesos. A un costado vive su hija Juana, quien enseñó el tiradero de pertenencias que ocasionó Otis; y al lado vive otra hija de Luz, en total son siete personas que viven en tres casas contiguas, todas afectadas.
Sus vecinos son Eleuterio Colón, de 71 años, y su esposa Cruz Cortés Muñoz, de 57 años, quienes huyeron de su cuarto cuando se les empezó a meter el agua y se refugiaron en su cocina, donde ahora duermen porque una pared de adobe de su recámara se partió a la mitad y está a punto de colapsar.
“Parece burla”, se quejó el comisario de San Juan Guatemala, Gonzalo Guatemala Luna, de la falta de respuesta por parte del gobierno, que les pide “pruebas, pruebas”, pero no les ha ayudado, aunque se las muestran.
Un último ejemplo: la casa de María Pérez se inundó por un cuerpo de agua cercano que creció con la lluvia, la señora de 67 años y su nieta fueron rescatadas por sus vecinos y todo se le echó a perder, incluyendo su máquina de coser de la que se mantiene.
Una brecha de tierra debajo del puente de Lomas de Chapultepec es el camino que conduce a San Juan Guatemala y antes se cruza la localidad de Lomitas de Papagayo; ambas comunidades están a 50 minutos en automóvil de su cabecera municipal de San Marcos y solamente a dos minutos del territorio que ya empieza a ser Acapulco.

 

Pernoctan en casas de campaña dentro del parque Papagayo agentes de la Guardia Nacional

Ramón Gracida Gómez

Agentes de la Guardia Nacional pernoctan en casas de campaña dentro del parque Papagayo, donde el gobierno federal pretende construir uno de los 38 cuarteles de esta corporación policiaca en Acapulco.
En un recorrido de El Sur este viernes, se aprecian desde la banqueta de la avenida Juan Sebastián Elcano, porque no hay acceso al parque, varias casas de campaña instaladas en uno de los corredores de las oficinas.
A un costado se encuentran unos tendederos informales donde estaban colgados los uniformes de los agentes de la Guardia Nacional, alrededor sólo hay troncos partidos y en general una estructura muy dañada por el huracán Otis.
Durante la conferencia matutina del 10 de enero, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, informó que ya se cuenta con 21 predios listos en Acapulco y Coyuca de Benítez para iniciar la construcción de los cuarteles de la Guardia Nacional, que albergarán a 10 mil integrantes.
En la lista de los predios indicados para la construcción de los cuarteles se encuentra el parque Papagayo, también destacan el Centro de Convenciones y la Casa de la Cultura de Acapulco; la inclusión de este último ha generado rechazo entre los artistas locales.
El Sur publicó este viernes que los agentes duermen en la Galería Ixcateopan y en la Sala Infantil, cocinan en donde era el taller de dibujo y pintura, y piden identificaciones a los trabajadores para entrar, quienes señalan que, en los hechos, ya es un cuartel.
En la edición de este martes se publicó en estas páginas la postura de una de las principales promotoras del parque Papagayo como un área verde de Acapulco, la maestra Blanca Villalba, quien señaló que los cuarteles de la Guardia Nacional no deben ser construidos en espacios de uso comunitario y de esparcimiento como lo es el parque Papagayo.
Recordó que la lucha por el parque inició en diciembre de 1991, cuando una parte de éste iba a ser vendido a un ex propietario de terrenos que conforman el área verde, y personalidades protestaron, aunque “realmente la ciudadanía fue la que nos fortaleció, participó, 5 mil, 8 mil, en las marchas y en los escritos que se firmaron”.
En la edición del jueves, la ambientalista y co directora del Jardín Botánico de Acapulco, Kay Mendieta, declaró que para la construcción de paz se necesitan espacios públicos “de calidad” y no con más armas, soldados ni cuarteles.
Durante el recorrido de ayer en el parque Papagayo, que también es utilizado para la entrega de los enseres domésticos, en unos cuantos minutos entraron y salieron varias camionetas de la Guardia Nacional, dos agentes de esta corporación se encuentran de forma permanente en la entrada de la avenida Juan Sebastián Elcano.
Un trabajador del parque Papagayo abría y cerraba el portón verde constantemente, y también entraron a las instalaciones en automóvil trabajadores de la Secretaría del Bienestar.

 

Se escapa un tigre de un parque cercano a Coyuca de Benítez, alertan

Un tigre se escapó de su jaula del parque Paraíso de Manglares el lunes por la tarde en el poblado El Bordonal, en Coyuca de Benítez, y hasta ayer por la noche no había sido capturado.
En breves declaraciones por teléfono a las 8 de la noche, el alcalde de Coyuca de Benítez, Javier Escobar, precisó que no hay oficialmente un toque de queda en el municipio pero “en todo caso, hay una información que se está diciendo a la gente que tenga precaución.
Según el informe de la autoridades, el lunes a las 5 de la tarde el tigre se escapó de su jaula que estaba en el parque Paraíso de los Manglares. ubicado en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo.
Se informó que fue el dueño del parque, Guadalupe Uribe quien informó del escape del felino.
En declaraciones por teléfono, el director de Protección Civil de Coyuca, Víctor Manuel Heredia de los Santos, confirmó que el tigre se escapó el lunes, pero fue apenas el martes cuando le notificaron de lo sucedido.
Informó que hasta anoche el animal que está en peligro de extinción no había sido capturado, por lo que enviaron “circulares a los comisarios y delegados que están alrededor del poblado El Bordonal para que informen a los pobladores que deben tomar sus precauciones”.
Heredia de los Santos indicó que el martes acudieron trabajadores de Profepa y ayer policías estatales ecológicos quienes comenzaron con la búsqueda del felino en colaboración con la Policía del Estado.