Encabeza Evelyn brigada de limpieza en la Costera; irá también a las colonias, dice

La gobernadora Evelyn Salgado Pineda en el arranque de la jornada de limpieza en la Costera Foto: El Sur

Jacob Morales Antonio

La gobernadora Evelyn Salgado Pineda, encabezó temprano en la mañana de ayer un operativo de limpieza con más de 500 trabajadores de diferentes dependencias, universitarios, vendedores y prestadores de servicios turísticos, para retirar basura y escombros en la avenida Costera.
En el primer acto público al que se invita a reporteros desde el impacto del huracán Otis hace 20 días, y al término de su discurso en las escaleras del Asta Bandera en playa Papagayo, Salgado Pineda dijo que siempre ha estado en Acapulco atendiendo la emergencia “en ningún momento he desaparecido, aquí estoy, aquí estuve, antes, durante y después del huracán”. Subrayó que estuvo transmitiendo desde Acapulco momentos antes del impacto del huracán, y señaló que se han difundido muchas noticias falsas pero que no puede andar desmintiendo cada una.
La gobernadora recordó que este miércoles estará de nuevo en Acapulco el presidente Andrés Manuel López Obrador.
También dijo que la recolección de la basura es “complicada pero no ha sido imposible” y que el operativo comienza en la Costera porque aquí se ubican buena parte de los negocios que significan el sustento de miles de acapulqueños, pero subrayó que las brigadas irán a todas las colonias de la ciudad.
En su discurso ante la multitud, la gobernadora expresó que el esfuerzo de la limpieza es de todos, “apoyando desde todas nuestras trincheras”, y agregó “que hoy más que secretarias y secretarios, son acapulqueños de corazón, que están apoyando y que dejan a un lado los cargos, para tener un solo encargo que es el de la reconstrucción de Acapulco”.
Siguió: “Hoy no existen cargo, hoy todas y todos somos un mismo corazón, somos un mismo equipo por Acapulco, incluida la gobernadora igual que todas y todos”. Anunció que en la actividad se unirían más de 50 camiones pesados y retroexcavadoras, así como unos 500 voluntarios y trabajadores del gobierno estatal.
Dijo que no sólo se va a limpiar la Costera, “Acapulco es mucho más que la Costera, tenemos muchas colonias que limpiar, así que todas estas brigadas que están divididas en diez grupos”, pero que este martes se ampliarán a 20, “vamos estar en la Progreso, Renacimiento, Zapata, hemos hecho ya labores de limpieza de remoción de escombros, hemos limpiado muchas avenidas”.
Agradeció a todos los estados de la República que han apoyado a Guerrero, e incluso ha llegado ayuda de otros países, “eso se agradece mucho, porque quiere decir, y esto habla del gran amor que le tienen a Acapulco. Esto habla de que aquí no hay colores, de que aquí no hay partidos, de que aquí no hay ningún tipo de ideología, aquí le vamos a entrar todas y todos sin importar el color, traemos bien puesta una sola camiseta, hoy nuestra camiseta dice bien fuerte Acapulco y vamos a luchar por Acapulco. La gobernadora no se va, la gobernadora aquí va a estar en Acapulco con todo el gabinete”.
Luego agradeció la presencia de su padre, el senador Félix Salgado Macedonio. “Por ahí decían reaparece; no, no reaparece, porque reaparece el que se va, nosotros nunca nos hemos ido, nosotros somos acapulqueños, mis hijos nacieron aquí, esta tierra me dio a mis hijos, aquí trabajé. Yo amo profundamente a esta tierra, yo amo Acapulco”.
Siguió: “No reaparece porque él vive aquí” en la colonia El Roble, y de inmediato los asistentes corearon el nombre del senador varias veces.
Finalmente la gobernadora dijo que el retiro de la basura será una labor titánica, pero que Acapulco está por encima de cualquier fenómeno natural, y volvió a decir que los desechos que se juntaron tras el impacto del huracán son los que se acumulan en dos años en la ciudad.
Terminó diciendo que las brigadas de inmediato recorrerían la Costera desde Caleta hasta la Base Naval, y que de ahí de manera simultánea algunos equipos estarían en algunas colonias.

Se están rentando más camiones

En declaraciones, Salgado Pineda dijo que su gobierno está contratando más camiones para la recolección de los escombros y desechos y resaltó que ya se han liberado calles y avenidas, así como Puerto Marqués, e insistió en que las brigadas acudirán a todas las colonias “a partir de hoy”.
“Para los que comentan si solo será la Costera, la Costera significa el sustento y la forma de vida de muchos acapulqueños, de aquí vienen los ingresos, pero también nos vamos a las colonias” subrayó.
Precisó que este lunes comenzaron la limpieza en tres zonas de la Costera dividida en 10 puntos de entre 30 y 40 personas para realizar limpieza gruesa y fina, tanto en el área de playa como en la avenida.
Insistió en que se trabaja en un solo equipo desde el gobierno del estado, el municipio y el gobierno federal.
La gobernadora dijo que según los informes que le ha dado la Secretaría de Salud, no hay repuntes de casos de dengue, pero que hay labores de fumigación en las colonias, “no hay una crisis, no hay una urgencia grave en la cuestión del dengue, todo está de manera controlada”.

Hay funcionarios que no apoyan, dice Félix Salgado

En breves declaraciones, el senador Félix Salgado Macedonio señaló que hay funcionarios que no están haciendo nada, mientras que otros están apoyando en la entrega de despensas: “yo creo que no están haciendo su papel y que la gente que trabaja y que está luchando para que Acapulco vuelva a brillar debe de ser recompensada” y con un reconocimiento escrito.
A la actividad acudieron el secretario de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso, el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Raymundo Casarrubias Vázquez, el secretario de Protección Civil, Roberto Arroyo Matus, el secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, la presidenta del DIF, Liz Salgado Pineda, y el director general de la Promotora de Playas, Alfredo Lacunza de la Cruz.

Piden a restauranteros sumarse a las labores de limpieza

En breve reunión en el restaurante El Camarón de Jackie, con un grupo de diez restauranteros y prestadores de servicios turísticos, el director general de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros, pidió que se sumen a los trabajos y que saquen toda la basura y escombros en las fechas que se pactaran para que los camiones pasen a recogerlas.
El director comentó a los restauranteros que la estrategia es que puedan retirar toda la basura y que ya no se acumule, y no haya puntos de contaminación en la Costera, pero aun no se establecen los días y las horas de la recolección.

Piden voceadores ayuda para reconstruir sus puestos que fueron dañados y saqueados

Voceadores de Acapulco, pidieron ayuda para retirar escombros y poder levantar sus puestos afectados por el huracán Otis, y volver a trabajar Foto: Carlos Carbajal

Voceadores solicitaron apoyo a las autoridades para que les ayuden, porque sus puestos de revistas fueron dañados por el huracán Otis y también fueron saqueados.
Este lunes, en declaraciones que hicieron en la avenida Costera, cerca del puesto de revistas que se encuentra por el Edificio Inteligente, el propietario del lugar, Silverio Abarca, dijo: “Queremos empezar a trabajar, pero los puestos están destruidos”.
Agregó que “queremos que regresen a ver a la Unión de Voceadores, nosotros poco los molestamos, pero ahorita ha sido grave el asunto. Cuando menos que nos ayuden a levantar la basura, esa que hay mucha”, dijo el propietario del puesto de revistas.
El secretario de la Unión de Voceadores, Javier Lucio Castro Salmerón, declaró que son 115 puestos de revistas en todo el estado y en Acapulco los 70 puestos fueron “volteados, algunos despedazados, y lo principal es que nos saquearon toda la mercancía”.
“Lo que nosotros pedimos a los tres órdenes de gobierno es que nos apoyen y vean a los voceadores como ayudantes, pues con la catástrofe estamos la mayoría sin trabajar y únicamente tenemos seis puestos trabajando, que no fueron muy golpeados”, detalló.
Entre los que están funcionanado está el del centro, el que está frente a la clínica 9 del IMSS, ubicada en la avenida Cuauhtémoc.
Sostuvo que la mayoría de los puestos fueron saqueados, que se llevaron refrigeradores y hornos de microondas, por ello, la petición es “que nos den créditos y el apoyo económico para poder trabajar”. (Aurora Harrison).

 

No acumular despensas si ya hay forma de alimentarse, pide el arzobispo a acapulqueños

Daniel Velázquez

El arzobispo Leopoldo González González llamó a no acumular despensas y para que quiénes tengan forma de conseguir alimento, permitan que otras personas, que no tienen esa posibilidad, puedan acceder a esos bienes.
En su mensaje de este domingo, el arzobispo habló sobre el proceso de reconstrucción de la ciudad y se refirió a la entrega de despensas, la basura, las emociones y de restaurar la buena imagen de Acapulco, para que los saqueos no sean la imagen del municipio, sino la hospitalidad.
Monseñor también pidió hacer oración por las familias que perdieron un ser querido y por quienes que no encuentran a sus familiares.
A 20 días del impacto del huracán Otis, el arzobispo agradeció a las instituciones y particulares que se han solidarizado con Acapulco, “gracias a personas e instituciones que han ofrecido comedores y despensas”, y les pidió mantener es ayuda.
Invitó a los ciudadanos a “fortalecer la buena imagen de nuestra ciudad, los robos y saqueos no pueden seguir lo que a muchas personas les viene a su mente al mencionar Acapulco. La imagen de Acapulco, que entre todos hemos de construir, sea la de una ciudad hospitalaria, en la cual cada uno de nosotros la hacemos mas segura. Las personas y las cosas de los demás, la belleza del entorno que grande es, nuestra hospitalidad, siga siendo también muy grande”.
A los vecinos les convocó a tomar conciencia, “si ya podemos recuperar el alimento por nosotros mismos dejemos esa ayuda para los demás. No acumular, es un bien que nos comparte una institución, para satisfacer nuestra necesidad de agua y alimento”.
También habló de la basura en la ciudad, la cual dijo es representa “riesgo de enfermedad” y convocó a todos a hacer algo para evitar la descomposición de la basura a la calle.
Otro de los aspectos que el arzobispo consideró se debe atender es la salud mental, pues las personas han estado en “estrés prolongado”, y eso afecta la paz interior y las relaciones en el hogar, que se vuelven cada vez mas ríspidas, por lo que pidió estar atentos a los cambios de ánimo y darse momentos de pacificación.
Convocó a escuchar a las personas afectadas por el huracán, “todo el tiempo que necesite”, estrechar las manos del interlocutor, poner la mano en el hombro como una manera de consuelo y comprensión.

La atención para su hemodiálisis es inadecuada, se quejan pacientes renales

Derechohabientes con enfermedades renales del IMSS, se quejaron de la inadecuada atención que reciben en la clínica privada de hemodiálisis Santa Lucía, subrogada por el instituto, donde tienen que esperar en la calle, entre el polvo y la basura que hay.
La clínica, ubicada en la esquina de la calle Vasco Núñez de Balboa y Sebastián Vizcaíno, tuvo fuertes afectaciones en su fachada, de donde se rompieron los vidrios de las ventanas y desde la calle se aprecian los consultorios. Se observó a trabajadores retirando escombros.
En la calle, unas 40 personas, entre familiares y pacientes que necesitan una hemodiálisis, esperan entre el polvo, la basura y los escombros que dejó el impacto del huracán Otis.
La señora Azalia de la Rosa de los Santos, procedente de la colonia Generación 2000, llevó a su esposo a recibir el tratamiento a la clínica privada Karin, ubicada en la avenida Santa Cruz, que quedó destrozada y sin poder dar el servicio.
Dijo que luego del impacto del huracán y los daños que provocó en la ciudad, durante una semana su esposo no recibió el tratamiento que le corresponde, debido a que en el hospital Vicente Guerrero el servicio está saturado.
Pero dijo que en la clínica privada la demanda es bastante, que la gente llega desde las 2 de la madrugada para pasar primero al nosocomio, que cuenta con 28 aparatos, “está oscuro aquí (en la calle), porque no hay energía eléctrica”.
La mujer denunció que a pesar de estar formada, a la clínica llega gente no está en la fila y entra para recibir el tratamiento, sin respetar su turno, pues llegaron antes y esperan su pase.
Además, dijo que sólo le están dando dos horas de tratamiento a los pacientes subrogados, cuando el tratamiento habitual es de tres horas.
Comentó que en otras clínicas, como Papagayo, el servicio pasó de costar mil 200 a 2 mil 500 pesos, lo que se le hace injusto, porque la necesidad es bastante y más por la actual emergencia. (Jacob Morales Antonio).

 

Paciencia, pide Servicios Públicos a los acapulqueños por la recolección de basura

Grandes cantidades de basura se encuentran sobre la avenida Cuauhtémoc, cerca de la colonia Garita, donde vecinos han exigido la recolección que se suspendió desde el paso del huracán Otis Foto: Carlos Carbajal

Karina Contreras

La cordinadora general de Servicios Públicos municipales, Otilia Hinojosa Loza, hizo un llamado a los ciudadanos para tener paciencia y entender que el impacto del huracán Otis no tiene precedentes y por ello hay toneladas de basura todavía en las calles.
Dijo que se tiene el cálculo de que hay alrededor de 660 mil toneladas de basura generadas por el impacto de Otis, para lo cual se requieren unos 500 camiones de siete metros cúbicos, para atender la contingencia.
Añadió que ya la alcaldesa Abelina López Rodríguez pidió que con sus 80 unidades, 40 propiedad del Ayuntamiento y el resto prestadas y rentadas, la recolección de 20 mil toneladas.
Indicó que hay basura en la calle como “si hubiéramos dejados dos años de trabajar. Son 660 mil toneladas aproximadamente las que tenemos expuestas. Eso es lo que tenemos ahorita, esa es la dimensión, nada más, para que tengamos una idea de lo que generó Otis. Agreguen además lo que se genera día a día. Si no se diera esto se vería el avance, porque todos los días estamos trabajando”.
Dijo que entiende la desesperación de los ciudadanos, la molestia, pero “la afectación que tuvo Acapulco es de una magnitud que no tiene antecedentes, que es única en el mundo. Un huracán de categoría 5 que pega en Acapulco y destruye todo no tiene precedentes en el mundo”.
Por ello, pidió que se entienda que es un tema más grande de lo que cualquiera pueda pensar y visualizar.
“Entendemos que nos podamos desesperar, pero también tenemos que entender que tenemos que esperar un poquito más para que podamos ir avanzando. Que la presidenta Abelina (López) reciba más apoyo para poder levantarlo”.
En declaraciones, la funcionaria municipal reconoció que las 80 unidades que gestiona “no tienen el alcance que quisiéramos y que lleguen a todas las colonias”. Dijo que están enfocados en despejar las vialidades principales, “lo que nos cuesta mucho trabajo, porque apenas las limpiamos y al día siguiente están igual o peor”.
Señaló que este viernes estaban trabajando en la Costera, “del lado de los hoteles y comercios, que ya están tratando de funcionar”.
Dijo que en la avenida Cuauhtémoc, del tramo que va de la Garita a la Vía Rápida, ya estaba limpio. Agregó que dan hasta tres vueltas en la Ruiz Cortines y la gente sigue tirando basura.
Sobre cuándo empezarán a retirar la basura de las colonias, Hinojosa Losa dijo que están esperando que lleguen las 500 unidades de apoyo que pidió la alcaldesa, para que se dediquen únicamente a los troncos y basura, para que las unidades propias del Ayuntamiento empiecen a hacer sus rutas.
Ante las denuncias del cobro de trabajadores de Saneamiento Básico para llevarse la basura, la funcionaria pidió a los ciudadanos no darles nada, porque no tienen porque cobrar por el servicio de recolección.
Pidió a las personas anotar el número de unidad y la hora, porque con eso sabrán qué operador lleva la unidad y se puedan tomar las medidas.
Sobre el relleno sanitario, dijo que tiene muy buena capacidad y que ya se está elaborando el proyecto para generar una nueva celda, que pueda ir recibiendo todos los residuos.
Sobre los puntos de concentración de basura, Hinojosa Losa dijo que se han dispuesto para la separación de la basura y explicó que el de la Costera es para madera, y el predio del empresario Lloyd Walton, ubicado en la Cuauhtémoc, es de transferencia para la lámina y basura verde, pero se tiene vigilancia para que no se tire ningún desecho orgánico, que es el que descompone y genera los malos olores.
Añadió la funcionaria que se está buscando un espacio para lo que es el material de construcción y ver un lugar dónde tirarlo, porque el relleno sanitario es para pura basura orgánica y residuos domiciliarios.
Se le preguntó cuándo se terminará de recoger toda la basura y respondió que no puede dar un tiempo, porque “primero necesitamos tener todo el equipo para poder proyectar y decir en tantos días o meses se va terminar de sanear”.
Dijo que si consiguen las 500 unidades que están pidiendo para recolectar, la basura se retirará en unos 45 días, “un tiempo récord, siempre y cuando tengamos esas 500 unidades. Mientras no las tengamos, el plazo se nos va ir alargando y los tiempos también nos van a ir apremiando”.
Insistió en que están trabajando todos los días, las 24 horas, que en el día limpian vialidades y en las noche se atiende hospitales, mercados y donde se hacen los puntos negros, pero “es algo que no se percibe, no se alcanza a ver”.

 

Serios problemas de movilidad en colonias de clase media por la obstrucción de calles

La calle La Suiza del fraccionamiento Las Playas tapada por postes caídos Foto: Ramón Gracida

Ramón Gracida Gómez

Los vecinos del fraccionamiento Las Playas, en la zona de Caleta, aún tienen dificultades de movilidad por la basura acumulada, así como por los enormes troncos y los postes caídos que bloquean las calles, después de dos semanas del huracán Otis.
Condominios y hoteles de la zona continúan siendo despejados de los vidrios, que explotaron por los fuertes vientos que se vivieron en la zona, una de las más afectadas por la cantidad de muertes que se concentran ahí y los daños materiales en las residencias que pueblan estos cerros.
En un recorrido por esta zona del municipio, se pudo constatar el lento cambio en las condiciones que prevalecen desde el impacto del huracán Otis, sobre todo, por los enormes árboles y postes de luz caídos que tapan totalmente las calles. Los automovilistas aún siguen preguntando a los vecinos por dónde sí se puede pasar.
En la avenida La Suiza, cuyo inicio desde la avenida Costera, tiene de referencia la estatua de Tin Tan, prevalece la interrupción constante de la movilidad automovilística. Pasando la bifurcación con la calle Coyuca, un enorme tronco está atravesado en la avenida La Suiza.
“Déjelos trabajar, joven, apenas llegaron”, salió una vecina, ya acostumbrada a dar indicaciones a los automovilistas de que no se puede avanzar más allá de cierto punto de la avenida La Suiza, que se estrecha aún más por la cantidad de basura acumulada.
Una calle más abajo está el condominio La Suiza, un complejo habitacional de varios edificios, que quedaron deteriorados tras el paso del huracán de categoría 5. Se pueden ver huecos en los departamentos, porque las grandes ventanas quedaron hechas trizas.
No se puede avanzar más por la desviación de un poste que está caído, sólo hay un poco más de dos metros de espacio para el cruce de los coches. El chofer de una pipa de gas se veía indeciso de pasar o no, porque más adelante otro poste y otros árboles están tirados, de tal forma que da la impresión de que no hay paso. Al fondo se ve una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) estacionada en medio de la calle.
En Tambuco, los automovilistas tienen que preguntarle a los vecinos que los miran desde las banquetas si se puede pasar o hasta qué punto llega la calle, para doblar antes y bajar a la playa Caleta.
En la avenida Gran Vía Tropical, que recorre el punto extremo de la bahía, frente a la isla La Roqueta, se percibe la misma situación de aislamiento, en una zona que de por sí parece abandonada por los viejos edificios que se construyeron en décadas pasadas.
Los vidrios de las ventanas de las pequeñas casas y los departamentos están en el piso. Los vecinos lograron apenas liberar algunas calles de las ramas y las palmeras, que cayeron por los fuertes vientos.
Un pequeño cerro, de unos cuatro metros de altura, tapa todo un carril en un punto de la avenida Gran Vía Tropical, cerca del hotel Alba Suites, que tiene su letrero en la cima del edificio derruido a la mitad. Los grandes jardines se ven intactos, pero en el muelle, un yate quedó encima de la estructura, claramente dañado.
Por la misma avenida, que da una vuelta entera a la zona, se desemboca a los juzgados de Caleta y más adelante al hotel Acamar, en el que se repite la escena de habitaciones al descubierto, por las ventanas que quedaron rotas.

 

Promueven vecinos y comerciantes la reactivación en calles cerca de la Costera

Óscar Ricardo Muñoz Cano

Mientras los trabajos de limpieza sobre la avenida Costera van avanzando, en calles secundarias apenas a un lado, como la Cristóbal Colón, cerca de Galerías Acapulco, la situación es distinta: grandes montones de escombros y basura, así como el abandono, aún son la regla.
No obstante, y de la mano de los propios vecinos y comerciantes aledaños, en los últimos días la situación pretende mejorar.
Durante un recorrido este viernes al mediodía, se pudo observar que entre las calles Wilfrido Ruiz Massieu y Doctor Ignacio Chávez, la Cristóbal Colón luce con poca gente, con decenas de negocios cerrados y casas solas, pero con algunos atisbos de la búsqueda de la normalidad.
Así, desde la calle Ignacio Chávez, que hace esquina con avenida Universidad, a partir de la CFE, negocios como lavandería Speed Wash o una estética ya ofrecen sus servicios.
Más delante, pasados los escombros de lo que fue la cancha de futbol rápido de la Universidad Americana, empleados del afamado restaurante Buzo’s ya iniciaron la limpieza del lugar, asegurando que pretenden abrir lo más pronto posible.
“Estuvo cabrón lo que pasó”, dijo uno de ellos, “pero pues ya hay que trabajar, si no, no hay para comer”.
A continuación, hospederías como Suites Vicky ya limpiaron su frente, al igual que el hotel Tulipán, aunque continúan arrojando escombros a la calle.
En una esquina, mientras la tienda de impermeabilizantes ya trabaja, personal del súper Neto inició con los trabajos de limpieza y aunque rechazaron dar declaraciones, adelantaron que están a la espera de que les informen para cuándo van a abrir, indicando que en su caso no hubo tantos destrozos.
Una cerrajería, un negocio de copias fotostáticas, donde en ambos casos sus encargados celebraron que no hubo saqueos, y la popular lonchería La Tiendita ya están de regreso.
Ahí, media decena de comensales ya degustaban alimentos calientes tras el huracán.
A la par, en el edificio amarillo contiguo, en el que se encuentran despachos y consultorios, estaba sin actividad mientras que el edificio gris, enfrente, el laboratorio clínico y un consultorio de oftalmología ya estaban abiertos y ofreciendo servicio.
Un grupo de vecinos, de un negocio cercano señalaron, que la gente del antiguo Edificio Trébol, ya en esquina con Ruiz Massieu, y donde hay consultorios de médicos especializados, contrató un camión para que sacara su escombro, lamentando que el Ayuntamiento aún no haya podido traerles equipo para avanzar con la limpieza de las calles.
Mientras, la papelería La Crayola ya cambió de giro y ahora vende tacos de cochinita, y el auto lavado El Manguito ya abrió sus puertas para trabajar, negándose a comentar sobre cómo es que ya tiene agua.
En las calles cercanas, Segunda de Cristóbal Colón, Tercera de Cristóbal Colón y las demás, el movimiento es mayor, a pesar de los escombros y la insalubridad; prácticamente la actividad comercial ha regresado en medio de la basura que se acumula desde el impacto del huracán.
Ahí, desde la tortillería, la barbería, la ferretería y hasta el puesto de reparación celulares, que están en el callejón que dirige a la gente hasta la avenida Cuauhtémoc, están abiertos, al igual que el popular callejón del antojo, donde varios negocios ya abrieron y hasta están buscando meseras, cocineros y repartidores. Tal es el caso de La Sazón de Alina.
Más atrás, en otra de las cerradas, se encuentran los Laboratorios Medimagen que ya está en operación. Éste ya opera de 8 de la mañana a 2 y media de la tarde, ofreciendo promociones especiales debido al huracán.

 

El parque Papagayo está devastado en sus casi 220 mil metros cuadrados luego de Otis

Afectaciones que dejó dentro del parque Papagayo el paso del huracán Otis Foto: Carlos Carbajal

Óscar Ricardo Muñoz Cano

Debido al impacto del huracán Otis sobre el puerto de Acapulco, el parque Papagayo quedó devastado, a tal grado que es posible mirar de extremo a extremo el lugar y sus casi 220 mil metros cuadrados de superficie.
Este jueves por la tardem y en un breve recorrido, se observó que cientos de árboles, palmeras y arbustos fueron arrancados del suelo por la violencia del huracán, dejando una superficie totalmente llana, plagada de escombros y basura.
Aun así, se puede ver desde la avenida Costera a la avenida Cuauhtémoc, el otro extremo, donde La Piñata continúa milagrosamente en pie.
Del mismo modo, es posible ver los restos del galeón sobre el ahora fangoso lago, así como el cerro que albergó al restaurante El Nido, desaparecido por la fuerza del huracán y, a su alrededor, todavía es posible ver algunas iguanas y hasta aves buscando comida entre los escombros.
Adiós a los árboles frondosos, las flores coloridas y los animales que el parque tuvo. Adiós al otrora llamado “pulmón verde” de Acapulco.
Además, a esta destrucción se suman las toneladas de escombro que se depositan en sus calles aledañas, Juan Sebastián El Cano y Manuel Gómez Morín, donde están sus oficinas y que sí está abierta a la circulación.
De hecho, es por esta calle por donde se entra y sale gente para laborar en las tareas de limpieza del parque, ya que el resto de los accesos al parque están cerrados.
De manera aislada se pudieron ver algunas cuadrillas de trabajadores, unos limpiando del lado de Cuauhtémoc y los más del lado precisamente de Gómez Morín.
Antes, por la mañana y hasta la tarde, se pudo observar cómo una grúa retiraba escombros metálicos de donde estuvo el roller, sobre la avenida Costera.
No obstante, el gobierno estatal a través de diversos comunicados informó que desde hace algunos días se trabaja en la limpieza del lugar.
No fue posible hablar con su director, Abel Luvio Villanueva, quien a decir del guardia de la entrada en Gómez Morín, no se encontraba en el lugar, pero aseguró que las oficinas del parque están funcionado, al igual que las oficinas del ISSSPEG, cuyo personal, añadió, no acudió este jueves a trabajar pero que montará guardias más adelante.
También fue posible observar a algunos concesionarios que ya iniciaron la limpieza de sus restaurantes, ubicados sobre ese mismo lado del lugar.
El parque, cuyo nombre oficial es Ignacio Manuel Altamirano, recién fue objeto de una millonaria remodelación.
Fue en 2019 que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la remodelación del parque en el que, finalmente, se invertirían 460 millones de pesos, 40 por ciento gobierno del estado y 60 por ciento gobierno federal.
En octubre de 2021 el presidente entregó la obra.

Urge que el gobierno federal intervenga en el retiro de basura tras Otis: Klimek

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El especialista en medioambiente, Octavio Klimek Alcaráz, opinó ayer que los tres órdenes de gobierno deben asumir como un asunto de alta prioridad el problema de la basura, mucha de la cual que sigue en las calles de Acapulco a raíz de la devastación provocada por el huracán Otis.
“Si se sigue manteniendo la basura en las calles y no se le da un tratamiento adecuado, se va a generar un grave problema de salud pública”, advirtió el ex delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) federal, y ex titular de la Procuraduría de Protección Ecológica del Estado de Guerrero (Propeg).
Indicó que de por sí el talón de Aquiles que tiene Acapulco es el manejo integral de los residuos, pues nunca se ha logrado hacer la separación, como en muchas otras ciudades.
“El problema es que solamente tiene un sitio de disposición final que es el de Texca y en este momento ya debe estar saturado, simplemente para entrar al relleno a depositar camionadas de basura hay que formarse y estar en la fila”.
Por otra parte, declaró que no se sabe si esté funcionando la báscula, para que se calculen las toneladas que se están retirando de la ciudad.
Resaltó que actualmente por la devastación que ocasionó Otis, se están manejando residuos especiales, “es decir, hay mucha basura de carácter casera, doméstica, con residuos de la construcción y de todo lo que se quedó tirado de distintos materiales”.
Alertó: “El problema es que se está volviendo un desastre en términos de salud pública porque ahí están todo tipo de residuos”.
Declaró que no podría precisar exactamente hasta dónde está la gravedad del problema, pero implica que tiene que haber una coordinación interinstitucional y no le dejen solamente el problema al gobierno del municipio para recoger la basura, sino que debe haber una real coordinación entre el gobierno federal, estatal y municipal.
Para el especialista ojala se esté aprovechando por lo menos alguna parte de lo que puede ser reciclable, como son los metales.
“Si no, la desesperación de muchos camioneros que necesitan sacar estos residuos de alguna área determinada va a empezar; además, este problema va a ser durante meses, porque se va a estar haciendo la reconstrucción de muchas zonas y se van a tener que depositar todos esos materiales”.
Frente al cúmulo de basura, dijo que tampoco se sabe hasta cuándo va a tener vida útil el sitio de Texca, o hasta donde lo van a poder ampliar sin generar problemas serios adversos al ambiente por los lixiviados y las emisiones mismas de la atmosfera, “porque se tiene que tener controlado para que no se te queme el sitio”.

Preocupa tiradero a diestra y siniestra

Explicó que la preocupación que comparte mucha gente es que empiecen a depositar la basura a diestra y siniestra en cualquier sitio que se vea abandonado, “es decir que la basura se descargue de manera ilegal en cualquier sitio, por ejemplo que se hagan rellenos en zonas de inundación y que quieran aprovechar y digan: aquí vamos a rellenar y los residuos vayan a dar hasta algún manto”.
Añadió que también sería un riesgo que vayan a tirar a los acantilados que hay en algunos sitios de Acapulco, pues recuerda que “hay esa mala costumbre de tirar al mar a través de los acantilados”.
“Todo eso se tiene que prever, debe haber una vigilancia extraordinaria. La Guardia Nacional que entiendo está a cargo de la vigilancia de Acapulco debe estar atenta a que no suceda que empiecen a disponer de sitios inadecuados, por eso digo que debe haber la máxima coordinación posible, porque estamos hablando de miles de toneladas de residuos”.
Aclaró que no es experto en epidemiología, pero que la historia de enfermedades infecciosas ha sido siempre por problemas de insalubridad. E insistió que ese es el riesgo si la basura sigue por mucho más tiempo en las calles. “Tú no puedes tener sitios insalubres cerca de viviendas”.
Insisto que el caso se tiene que tomar con la mayor seriedad, y que más allá de que en este momento se le esté proporcionando ayuda a la población y tratando de recuperar servicios básicos como la electricidad y el agua, “yo siento que se tiene que poner la mayor atención al problema de la basura”.
En su opinión deben de llegar más camiones para recoger la basura de las calles y de las colonias donde están las máximas densidades poblacionales.

Especialistas deben encontrar solución a depósitos

También dijo que ya debería haber un equipo multidisciplinario viendo la posibilidad de encontrar más sitios distribuidos estratégicamente en donde se pueda depositar toda la basura para que este problema se subsane en los próximos días.
“El problema de la basura debe ser una prioridad para las autoridades. Debe haber una sección integral atendiéndolo”, propuso.
Añadió que se debe aprovechar lo que se pueda, “hay cosas que pueden reducir el volumen de entrada o de acopio, pero para eso se necesitan brigadas de reciclaje, para reducir los volúmenes, si no, ¿dónde se va a meter tanto residuo”.?
A pregunta expresa, el especialista rebasó con mucho a los gobiernos municipal y estatal y que debe entrarle el gobierno federal.
“Han sido rebasadas por todos lados las autoridades, fue un desastre en el que no tenían las competencias para atender, o no estaban preparadas, pues sí, hay un rebase absoluto”.
Reiteró que para atender el problema con más prontitud tiene que entrar el gobierno federal; “insisto, tienen buenos ingenieros militares, geólogos, gente que le sabe a la gestión y manejo de los residuos, se necesita realmente esto y eso solamente se puede hacer con la intervención de los tres órdenes de gobierno”.
Klimek Alcaráz, quien tiene maestría en Ciencias Forestales y doctorado en Recursos Silvícolas, alertó de otro problema, la destrucción de la vegetación en el entorno de Acapulco.
“Otra preocupación es la pérdida de la diversidad biológica en el entorno de Acapulco, desde el parque Papagayo, el Veladero, Laguna Negra, por donde se quiera ver. Todos los reportes que tengo es de que el huracán destruyó totalmente la vegetación”.
Declaró que se requiere que para el próximo año ya se tenga después del estiaje un programa de reforestación “en serio”, y realizar una serie de medidas de restauración.
“Se necesita gente, ahí hay un asunto de gran rentabilidad no solamente ecológica, se deben de organizar brigadas con la gente que necesita de alguna forma tener empleo para ir buscando medidas para que, en lo posible hacer guardarrayas y preparamos para el estiaje, habida cuenta de que cada día el clima es más caluroso, y seguramente, todo indica que el próximo año vamos a tener un estiaje mucho más fuerte que este, pues ya se señala que este octubre fue el mes más caliente que se ha tenido en la historia”.
Indicó que se tiene que prever todo eso, “imagínate que en abril si viniera el Tianguis turístico y se estuviera quemando medio Parque de El Veladero; necesitamos hacer todas las previsiones”.
Klimek Alcaráz añadió que para ello se necesita presupuesto extraordinario que se contraten brigadas y se pongan a hacer las labores para ir empezando a restaurar la zona “y prever que no se nos queme por incendios forestales”.
Concluyó: “Necesitamos dejar en claro que no solamente hay una tragedia humana, sino también una tragedia de la diversidad biológica”.

 

Cierran vecinos calles céntricas como protesta porque no se recoge la basura

Una calle cerrada con láminas galvanizadas en la colonia Aguas Blancas en protesta porque se mantienen los montones de basura Foto: Argenis Salmerón

Argenis Salmerón

Este jueves, vecinos de tres colonias céntricas cerraron sus calles con montones de basura, debido a la falta de recolección de basura, luego del impacto del huracán Otis.
Las calles cerradas son la Del Mercado, Mal Paso y Río Bravo, una de ellas bloqueada con láminas galvanizadas.
En la calle Del Mercado, en la colonia Hogar Moderno, los montones de basura se ubican en la calle atrás del estacionamiento y talleres de la Estrella Blanca en la terminal de Ejido.
La “montaña” de basura mide más de un metro de altura y abarca unos 100 metros lineales.
Incluso, hay una pancarta pegada en el poste en la que se lee: “Vecinos, favor de depositar la basura hasta el fondo”.
Los desechos, en su mayoría dentro de bolsas de plástico, son ramas de árboles, tinacos quebrados, lámina galvanizadas y cartón, que en su mayoría está arrojada en la banqueta y la vialidad.
La vialidad mencionada tiene dos carriles de concreto y para circular, los automóviles apenas tienen la mitad de uno.
Mientras que el peatón no tiene lugar para caminar y se arriesga a caminar por el arroyo vehicular, con riesgo de ser atropellado.
La calle Del Mercado está funcionando como vía alterna, para evitar el tráfico de la calzada Pie de la Cuesta y la avenida Ejido, que también tienen basura.
Los vecinos dijeron que desde el impacto del huracán Otis no ha ido el carretón de basura de la Dirección de Saneamiento Básico.
Coincidieron en que la basura aumentó de manera considerable, porque los automóvilistas que pasan por el lugar arrojan sus desechos a la vialidad.
Otra de las calles cerradas es la Río Bravo, en la colonia Carabalí, cerca de un contenedor de basura, a metros de la transitada avenida Ejido.
Ahí el paso es casi imposible, porque se concentran toneladas de basura, en un tramo de 200 metros, aunado a que los trabajadores de la CFE ocupan el espacio libre para restablecer el servicio.
También está cerrada con lámina galvanizadas por aculamiento de basura la calle Mal Paso, en la colonia Aguas Blancas, a modo de protesta.
La calle Mal Paso conecta con la avenida Ejido, a un costado de la terminal de autobuses Estrella Blanca.