Se registran pleitos y acusaciones de clonar cupones en las filas para recibir despensas

Larga la fila de personas durante la entrega de despensas frente a la playa Angosta en Acapulco Foto: Jesús Trigo

Aurora Harrison y Argenis Salmerón

Cientos de ciudadanos se formaron este domingo y el sábado, en diferentes puntos de la ciudad, para obtener una despensa con productos de la canasta básica, que entrega el gobierno federal a los afectados por el huracán Otis.
En esos puntos hubo denuncias de clonación de cupones y pleitos en filas para obtener despensas.
El sábado, una ciudadana que hizo fila en Walmart Diamante dijo que cuatro mujeres fueron acusadas de clonar los cupones para canjearlos por despensas.
Este domingo, en la avenida Adolfo López Mateos, por playa La Angosta, las personas hacían fila y se inició una riña entre varias mujeres, debido a que se intentaron meter entre los primeros que ya estaban formados.
En un video que circula en redes sociales, se observa cómo las mujeres se agarran del cabello y se empujan, mientras que otras intentan separarlas, pero también terminan siendo golpeadas.
También en ese video se observa a efectivos de la Guardia Nacional que intervienen para separarlas, mientras que las personas que estaban formadas miraban el pleito.
El domingo, decenas de vecinos hicieron fila sobre avenida Ruiz Cortines y calle Baja California, de la colonia Progreso, frente a un local de comida rápida, para canjear el cupón 12, de los tres últimos de la cuponera que recibieron cuando se les dio el apoyo de limpieza.
El sábado a lo largo de la avenida Costera, a partir del parque de la Reina, los ciudadanos esperaron por más de cinco horas a la entrega de despensas.
Desde antes de las 8 de la mañana del sábado, los ciudadanos empezaron a llegar y esperaron por varias horas los camiones del Ejército, donde transportaban las despensas.
Los vecinos llegaron con bancos y sillas para sentarse mientras esperaban. Se cubrían del sol con sombrillas, porque fue hasta después del mediodía que comenzó el reparto de los paquetes, con la papeleta que les entregó la Secretaría de Bienestar.
La fila de personas llegó hasta el restaurante 100% Natural, y fue hasta después de las 3 de la tarde que terminó el reparto de las despensas.
En la fila había adultos y adultos mayores, algunos hacían comentarios de que las personas que todavía tienen sus cupones quieren que se los cambien y que por ello se van hasta la zona Diamante, para obtener una despensa con productos de la canasta básica.
El sábado hubo reparto de despensas en varios puntos de la ciudad, uno de ellos en la zona Diamante, por Walmart, donde también hubo una gran afluencia de personas que venían de Colosio, La Poza y Rinconada. Ahí, hubo un problema, pues “cuatro mujeres fueron exhibidas por llevar cupones falsos”, platicó la ciudadana María López Cruz.
Detalló que ella acudió a ese punto a las 8 de la mañana, para recibir la despensa, pero ya había una “fila enorme”, con personas de diferentes colonias y se formó cuando llegaron los soldados con las despensas.
Explicó que cuando empezaron a entregar las despensas, los soldados descubrieron que cuatro mujeres “habían clonado los cupones” y las sacaron de las fila. Muchas de las personas que estaban formadas pidieron que la sacaran y que no las dejaran entrar, porque había quienes sí necesitan las despensas.
En las tiendas también hay largas filas de clientes, que van a canjear las tarjetas de regalo que vienen en las despensas que entrega el Ejército.
Las tiendas de las cadenas Aurrerá y Chedraui tienen restringidas las compras, pues con las tarjetas de regalo sólo puedes cambiarlas por carnes, frutas y verduras.
En las tiendas Soriana se puede comprar cualquier producto, menos bebidas alcohólicas o cigarros.
Ahí, en la tiendas, no hay carnes en exhibición y se deben hacer filas de unos 20 minutos, por lo menos, para pedir un paquete. Además, se hace otra espera en las cajas donde se entregan las tarjetas, pues hay unas 30 personas esperando.
Debido a las restricciones de productos, hay desabasto en carnes, frutas y verduras; además de lácteos, galletas y cereales.
Las personas, antes de comprar, acuden al área servicio al cliente para consultar saldo y habilitar las tarjetas de regalo.
El horario en las tiendas está restringido desde el impacto del huracán Otis. Por ejemplo, en Chedraui es de 7 de la mañana a 9 de la noche, cuando antes era de 7 a 11 de la noche.

Sigue complicada la entrega de despensas; afectados hacen fila hasta por 12 horas

La larga fila de personas que esperaban ayer despensas en la Plaza Patio Foto: Daniel Velázquez

Daniel Velázquez

La entrega de despensas a los damnificados por el huracán Otis en Acapulco sigue siendo un problema sin resolver para el gobierno federal, los vecinos de colonias de las zonas urbana, suburbana y rural pasan más de 12 horas en la fila para recibir la ayuda.
El gobierno federal, como parte del programa de atención a los damnificados por el huracán Otis entregó la primera quincena de diciembre una cuponera con 14 vales para canjear por canastas básicas, pero no estableció los centros de canje, los ciudadanos tienen que andar persiguiendo a los camiones de militares que de acuerdo con su humor deciden en qué colonia, a quiénes y por cuánto tiempo entregan las despensas y además las rasuran porque les quitan la tarjeta con dinero electrónico, señalan.
Una vecina, adulto mayor de la colonia Francisco Villa contó que ella sólo ha canjeado un vale de la cuponera porque los militares no suben a esa colonia, narró que el miércoles se enteraron que irían a la colonia a repartir despensas, los vecinos, ella incluida se formaron desde las 8 de la mañana, pero el camión con las despensas llegó hasta medio día y cuando llegó se formó otra fila y los militares le dieron preferencia a esa formación y no a quienes estaban formados desde las 8 de la mañana, cuando los vecinos reclamaron porqué se daba preferencia a la gente que recién había llegado, los militares suspendieron la entrega de despensas y se retiraron, “se fueron con las despensas y nos dejaron”.
La vecina acudió ayer a plaza Patio, pero no alcanzó despensa, había unas 70 personas formadas delante de ella, dijo que ella vive sola y se le dificulta venir tan lejos a canjear el cupón, por eso esperaba a los militares en su colonia, pero consideró injusto que vaya a terminar el periodo de entrega de despensas y ella no haya podía canjear uno de los 14 cupones.
Ayer en la fila de plaza Patio también había vecinos del poblado el Kilómetro 30, el Kilómetro 49 y El Arenal, todos vecinos de la zona rural del municipio y todos coincidieron en que a sus localidades no van a entregar despensas por lo que tienen que llegar a ese centro comercial para poder canjear los cupones.
A las 11 de la mañana, alrededor de la barda perimetral del centro comercial había dos filas, que juntas eran más de mil personas, bajo el sol, de pie, en espera de una despensa, era una fila de unos 2 kilómetros, desde el primer acceso del estacionamiento de la plaza comercial hasta la calle Océano Pacífico en Casas Ara.
Los testimonios de las personas coinciden en que llevan cuatro días, lunes, martes, miércoles y jueves intentando canjear un cupón sin poder lograrlo, porque sólo llega un tráiler que no es suficiente para la cantidad de personas formadas, los vecinos señalan que anteriormente llegaban tres o cuatro tráilers cargados con despensas, pero esta semana sólo ha ido uno diariamente y por eso no alcanzan, otro problema es por la gente que aparta espacios y los vende, las personas formadas contaron que en Casas Ara, donde están los últimos de la fila en la mañana van personas a ofrecer los espacios, en 50 o 100 pesos, “imagínese si aparta 100 espacios, cuanto se gana”.
La estrategia de madrugar para alcanzar una despensa ya no funcionó esta semana en plaza Patio, los vecinos de El Coloso, La Sabana, La Máquina, que llegaron a las 5 de la madrugada contaron que ya había mucha gente formada, algunos desde las 4 de tarde del miércoles, contaron que los que durmieron en la banqueta fueron los que alcanzaron despensa, los que llegaron en la madrugada ya no.
Por información conocida con anterioridad, cada tráiler transporta mil 500 despensas, este jueves sólo llegó un tráiler a plaza Patio, un lugar donde la Marina entrega despensas desde diciembre, por lo que sabe de antemano la cantidad de personas que se reúnen en el lugar. Una vecina de la colonia Paso Limonero dijo que ella acude a plaza Patio por la despensa porque ahí sí sale la tarjeta de regalo, porque las que reparten los soldados no tienen ese apoyo.
Una vecina contó que el miércoles sólo llegó un tráiler a las 9 de la mañana y a las 10 de la mañana los marinos acabaron de repartir las despensas y la gente se dispersó. Sin embargo, a la 1 de la tarde llegaron otros dos tráileres, pero ya no había gente formada por lo que se entregaron despensas a quienes pasaban por el lugar.
En la fila las personas no disimulan su molestia, es el caso de una señora que pidió al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que “no las haga pendejas”, que diga si va a entregar las despensas y los enseres para que no estén en el sol.
“López Obrador, no nos hagas pendejas, aquí nos estamos asoleando por la ayuda que nos das, es mucho, desde el lunes estamos haciendo cola y no nos dan, viene un tráiler nada más, aquí estamos esperando, unas dormimos aquí, otras a las 5 de la mañana (llegan) y nada, no alcanzamos, ya somos personas de la tercera edad y no tenemos que estar aquí nada mas haciéndonos pendejas, si quieres el voto cuenta con nosotros, pero también apóyanos, no nos hagas tontas, hay personas que no les han dado los enseres nada más porque no quieren”.
La entrega de despensas de manera oficial por un gobierno es una actividad inédita en Acapulco porque anteriormente las despensas que se repartían a ciudadanos afectados por desastres naturales eran las que regalaban los políticos, con raciones míseras, medios kilos de frijol, arroz, azúcar y todas las presentaciones mínimas de los productos básicos, como chiles en vinagre, sopa, atún, aceite.
Las que entrega el gobierno federal tiene alimento suficiente para una familia y además de los productos que incluye contiene una tarjeta con dinero electrónico con valor por 500 pesos que se puede canjear en tiendas de autoservicio, las personas formadas en la fila, dicen que están ahí porque la tarjeta “ayuda mucho”, pero tienen que esperar horas para recibir la ayuda.
Una de las vecinas formadas en la fila contó que los marinos le dijeron que han llegado pocas despensas porque había un bloqueo en Chilpancingo y no podían pasar los tráilers.

Enseres

En el estacionamiento de esta misma plaza comercial también se reparten enseres, en el lugar hay una larga lista de colonias a las que tienen en calidad de “rezagados”, “por aperturar” y “en entrega”. Ayer no hubo información de cuántos paquetes de enseres se entregaron en ese lugar, un militar dijo que esa información se debe solicitar por escrito en la Novena Región Militar.
La entrega de enseres concluyó a medio día y en el lugar se quedaron formados 133 personas bajo el rayo del sol en espera de ser los primeros de este viernes en recibir sus enseres, la mayoría de las personas formadas eran vecinos de la colonia del PRI-Coloso, con esa aclaración porque hay otra colonia del PRI que está por La Sabana y esa no está considerada todavía para la entrega.
En el lugar ya se habilitó un puesto de comida, anteriormente, en diciembre cuando recién empezó el reparto de enseres en esa zona, era una zona agreste, actualmente se vende agua, se rentan sanitarios y es constante el ir y venir de personas.
Las personas que se quedaron en la fila se protegen del sol con cartones, sombrillas, gorras, se sientan en la banqueta a esperar su turno.
El estacionamiento de plaza Patio era uno de los pocos lugares donde había orden en la entrega de los enseres, los “Servidores de la nación” entregaban fichas a los ciudadanos formados para que acudieran al otro día y no tuvieran que estar en el sol, pero ayer se constató que esa práctica ya no existe.
El número de colonias rezagadas es de 82, desde la Bonfil hasta Alta Loma La Esperanza, a los vecinos que vienen de alguna de esas colonias les dicen que pueden formarse para recibir sus enseres.
Las colonias en lista de entrega son tres: Ampliación La Máquina, Del PRI y Crucero de El Cayaco y están “por aperturar” 46 colonias.

A tres meses de Otis, condominios abandonados, negocios cerrados, largas filas y alerta por el dengue

La solitaria playa Revolcadero y condominios de la zona Diamante donde no se ven trabajos de remodelación. El director de la Promotora Turística, José Luis González de la Vega, dijo a El Sur que el 86 por ciento de los departamentos tuvieron daños mayores por el huracán del 25 de octubre pasado. Ayer dueños de pequeños negocios bloquearon la Costera para exigir que los consideren en el plan de créditos del gobierno federal y la alcaldesa Abelina López presentó un plan integral contra el dengue y llamó a los acapulqueños a descacharrizar Foto: El Sur

A tres meses de Otis, aún no inicia la reconstrucción de inmuebles en Diamante

Algunos condominios de la zona Diamante muestran aún los daños causados por Otis Foto: El Sur

Sí se lleva a cabo el retiro de escombros y basura en hoteles y condominios. El director de Protur José Luis González de la Vega informa que de 7 mil 859 departamentos y cuartos, 6 mil 555, el 83 por ciento, presentaron daños mayores, y mil 304, el 17 por ciento, menores

 

Jacob Morales Antonio

A tres meses del impacto del huracán Otis, continúan los trabajos de retiro de escombros y basura en los condominios y hoteles de la zona Diamante, pero no inician la reconstrucción de los inmuebles que fueron desnudados por los vientos de más de 300 kilómetros por hora.
Entrevistado en sus oficinas, el director de la Promotora Turística (Protur), José Luis González de la Vega Otero, informó que de 7 mil 859 departamentos y cuartos de hotel, 6 mil 555, el 83 por ciento, presentaron daños mayores, y mil 304, el 17 por ciento, daños menores, información que recopiló a una semana del impacto del fenómeno. Entre estos están 53 pequeños, medianos y grandes hoteles.
Es mediodía y en la avenida Costera Las Palmas, el ruido que provoca el viento al chocar con algunas palmeras y árboles que siguen de pie, interrumpe el silencio abrumador de la vía con los edificios más exclusivos de Acapulco y donde algunos departamentos superan el precio de 20 millones de pesos.
En las laterales de la avenida, frente a las entradas de los condominios, hay automóviles y motocicletas estacionados, todos son trabajadores que continúan con las labores de limpieza de los pisos de los edificios, que a tres meses del devastador impacto algunos siguen con el mismo rostro del amanecer del miércoles 25 de octubre.
Partiendo del centro comercial La Isla Shopping Village, hacia el hotel Pierre Mundo Imperial, los edificios desde la avenida se ven solos y abandonados, pero en el interior hay trabajadores haciendo labores de limpieza. En todos hay guardias de seguridad privados vigilando, y quienes no dan información ni permiten el acceso a los inmuebles.
En el complejo de tres edificios de departamentos La Isla Residences, las habitaciones de la parte alta y las terrazas fueron las más afectadas, enfrente el complejo de Villa Son Vida, aparentemente no hubo daños en los edificios de cinco niveles.
En la misma área están las residenciales Capri, Azur, Ocean One, y el edificio Mare. Ahí uno de los guardias de seguridad indicó que los trabajos de reconstrucción en el inmueble no han comenzado, que sólo hay trabajadores haciendo labores de limpieza en las 107 habitaciones de los 20 pisos del edificio que tiene una forma ovalada, y según información disponible de la venta de los departamentos cada uno tenía un valor de entre 15 a 18 millones de pesos.
Unos metros adelante está el condominio Las Olas, cada uno de los departamentos de la torre tenían un costo aproximado de 12 millones de pesos, los últimos departamento fueron los más afectados y desde lo lejos aún se ven los condensadores de los aires acondicionados apenas sostenidos por las mangueras y cableado eléctrico.

En seguida está el edificio Palmeira, y el exclusivo condominio Maralago con 174 departamentos con un precio a partir de los 12 millones de pesos. Desde el acceso está abandonado, pero en la caseta de vigilancia hay guardias de seguridad.
Según los propios trabajadores, desde el impacto del huracán Otis muy pocos han sido los propietarios de los departamentos que han ido a ver cómo quedaron, porque la mayoría fue enterado por la administración de cómo quedaron las habitaciones donde no quedó nada, porque en algunos todo salió volando y sólo quedaron las paredes.
Costa Ventura y la recién construida Maralia, son otros de los complejos en donde las habitaciones quedaron huecas, con las estructuras expuestas, sin tablarocas, ventanas, ni techos de las terrazas. Velera fue otro de los edificios donde se pueden ver las habitaciones como si estuvieran en obra negra.
Otros edificios que quedaron con severos daños son del complejo de condominios del Mayan Palace, Amarinthos, Torre Playa Diamante, Veranda, Villas Solar, y el edificio Marena, cuyo edificio quedó totalmente sin tablaroca, ventanas, y pareciera que está en plena construcción, con la sola estructura a la vista, al igual que Costa Bambú, y Playa Mar Residencial.
Luego siguen los hoteles del Mundo Imperial, Princess y su torre Perla, y el hotel Pierre, donde sí se observaron trabajos de reconstrucción, y donde tampoco hay acceso. Las albercas de todos los edificios están vacías sin agua y desde los accesos a la playa se aprecian sin el vivo color azul, y se han tornado con un color azul cenizo.

Las inversiones siguen firmes y se aceleran

González de la Vega Otero dijo que uno de los acuerdos con los representantes de las empresas que operan los condominios y hoteles, fue no despedir a trabajadores y que éstos hicieran los trabajos de limpieza de los edificios.
Recordó que entre los grupos más grandes de inversión que hay en la zona Diamante están el Grupo Mundo Imperial con tres edificios con mil 926 habitaciones, Grupo Vidanta tiene seis edificios con mil 526 habitaciones, Grupo Península tiene ocho edificios con 998 habitaciones, Grupo Gicsa siete edificios con 546 edificios, y hay otros siete edificios con mil 547 habitaciones.
Informó que el hotel de gran turismo Banyan Tree Cabo Marqués tuvo afectaciones en sus 74 habitaciones y para marzo espera que estén disponibles 45 de sus villas, y grupo Vidanta tuvo daños en el 100 por ciento de sus instalaciones, y para Semana Santa esperan tener 400 de las mil 44 habitaciones, y el resto para el fin de año.
En el caso de Mundo Imperial, en 17 días tendrán 700 habitaciones disponibles en los hoteles Palacio y Pierre Mundo Imperial, además de que estará lista la Torre Perla del hotel Princess para hospedar a los deportistas del Abierto Mexicano de Tenis que se jugará en la Arena GNP, donde hay trabajos a marchas forzadas.
El director dijo que a pesar de la situación que atraviesa Acapulco, las inversiones siguen firmes y no se han ido, e incluso se han acelerado, y destacó que Grupo Península pretende ampliar su oferta de habitaciones con un nuevo desarrollo hacia la zona de Barra Vieja, según lo informado el representante del corporativo, Alejandro Báez Meza.
González de la Vega Otero informó que se están dando facilidades a los condominios y fraccionamientos para su reconexión al drenaje de la zona Diamante, debido a que no hay descargas de aguas residuales, porque los edificios están deshabitados. “no tienen gente y no hay flujo que procesar en la planta de tratamiento”.
Para los trabajos de limpieza de la zona dijo que se contrataron a los viveristas, así como a trabajadores y vendedores de playa, para limpiar de escombros y basura la Costera Las Palmas, a quienes se les pagó 350 pesos por ocho horas de trabajo, además se colocó el alumbrado público, pero queda pendiente una parte que va hacia el aeropuerto.
Dijo que la preocupación de los inversionistas en un inicio y la solicitud que hicieron a las autoridades del estado fue garantizar el restablecimiento lo antes posible de la energía eléctrica, el alumbrado público y tener agua potable.
Respecto a los nuevos lineamientos de construcción, indicó que cada edificio y hotel debe adecuarlo luego de la experiencia que se tuvo con con el impacto del huracán Otis, pero afirmó que “no vi ningún reparo en eso, en los costos”, por parte de los grupos a cargo de los inmuebles y complejos.
El director de Protur destacó también que se han gestionado 11 obras y acciones entre techados de canchas, la reconstrucción de mercados y parques en diferentes colonias y comunidades que conforman la zona Diamante.
Destacó que una fundación donó para la comunidad de La Pista en el ejido de San Andrés El Podrido la construcción de 29 casas, y que son los propios pobladores los que están haciendo los trabajos por medio de equipo y la capacitación que ya se les dio. Indicó que uno de los ejidatarios donó media hectárea de tierra para la construcción de las viviendas.
También expresó que el nuevo polo turístico y de desarrollo de la Riviera San Marcos o Acapulco Sur no se va a retrasar; incluso el impacto y la devastación que provocó el huracán Otis, han acelerado los trabajos para la construcción de los complejos habitacionales y hoteles.

Sigue complicada la entrega de despensas; afectados hacen fila hasta por 12 horas

Daniel Velázquez

La entrega de despensas a los damnificados por el huracán Otis en Acapulco sigue siendo un problema sin resolver para el gobierno federal, los vecinos de colonias de las zonas urbana, suburbana y rural pasan más de 12 horas en la fila para recibir la ayuda.
El gobierno federal, como parte del programa de atención a los damnificados por el huracán Otis entregó la primera quincena de diciembre una cuponera con 14 vales para canjear por canastas básicas, pero no estableció los centros de canje, los ciudadanos tienen que andar persiguiendo a los camiones de militares que de acuerdo con su humor deciden en qué colonia, a quiénes y por cuánto tiempo entregan las despensas y además las rasuran porque les quitan la tarjeta con dinero electrónico, señalan.
Una vecina, adulto mayor de la colonia Francisco Villa contó que ella sólo ha canjeado un vale de la cuponera porque los militares no suben a esa colonia, narró que el miércoles se enteraron que irían a la colonia a repartir despensas, los vecinos, ella incluida se formaron desde las 8 de la mañana, pero el camión con las despensas llegó hasta medio día y cuando llegó se formó otra fila y los militares le dieron preferencia a esa formación y no a quienes estaban formados desde las 8 de la mañana, cuando los vecinos reclamaron porqué se daba preferencia a la gente que recién había llegado, los militares suspendieron la entrega de despensas y se retiraron, “se fueron con las despensas y nos dejaron”.
La vecina acudió ayer a plaza Patio, pero no alcanzó despensa, había unas 70 personas formadas delante de ella, dijo que ella vive sola y se le dificulta venir tan lejos a canjear el cupón, por eso esperaba a los militares en su colonia, pero consideró injusto que vaya a terminar el periodo de entrega de despensas y ella no haya podía canjear uno de los 14 cupones.
Ayer en la fila de plaza Patio también había vecinos del poblado el Kilómetro 30, el Kilómetro 49 y El Arenal, todos vecinos de la zona rural del municipio y todos coincidieron en que a sus localidades no van a entregar despensas por lo que tienen que llegar a ese centro comercial para poder canjear los cupones.
A las 11 de la mañana, alrededor de la barda perimetral del centro comercial había dos filas, que juntas eran más de mil personas, bajo el sol, de pie, en espera de una despensa, era una fila de unos 2 kilómetros, desde el primer acceso del estacionamiento de la plaza comercial hasta la calle Océano Pacífico en Casas Ara.
Los testimonios de las personas coinciden en que llevan cuatro días, lunes, martes, miércoles y jueves intentando canjear un cupón sin poder lograrlo, porque sólo llega un tráiler que no es suficiente para la cantidad de personas formadas, los vecinos señalan que anteriormente llegaban tres o cuatro tráilers cargados con despensas, pero esta semana sólo ha ido uno diariamente y por eso no alcanzan, otro problema es por la gente que aparta espacios y los vende, las personas formadas contaron que en Casas Ara, donde están los últimos de la fila en la mañana van personas a ofrecer los espacios, en 50 o 100 pesos, “imagínese si aparta 100 espacios, cuanto se gana”.
La estrategia de madrugar para alcanzar una despensa ya no funcionó esta semana en plaza Patio, los vecinos de El Coloso, La Sabana, La Máquina, que llegaron a las 5 de la madrugada contaron que ya había mucha gente formada, algunos desde las 4 de tarde del miércoles, contaron que los que durmieron en la banqueta fueron los que alcanzaron despensa, los que llegaron en la madrugada ya no.
Por información conocida con anterioridad, cada tráiler transporta mil 500 despensas, este jueves sólo llegó un tráiler a plaza Patio, un lugar donde la Marina entrega despensas desde diciembre, por lo que sabe de antemano la cantidad de personas que se reúnen en el lugar. Una vecina de la colonia Paso Limonero dijo que ella acude a plaza Patio por la despensa porque ahí sí sale la tarjeta de regalo, porque las que reparten los soldados no tienen ese apoyo.
Una vecina contó que el miércoles sólo llegó un tráiler a las 9 de la mañana y a las 10 de la mañana los marinos acabaron de repartir las despensas y la gente se dispersó. Sin embargo, a la 1 de la tarde llegaron otros dos tráileres, pero ya no había gente formada por lo que se entregaron despensas a quienes pasaban por el lugar.
En la fila las personas no disimulan su molestia, es el caso de una señora que pidió al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que “no las haga pendejas”, que diga si va a entregar las despensas y los enseres para que no estén en el sol.
“López Obrador, no nos hagas pendejas, aquí nos estamos asoleando por la ayuda que nos das, es mucho, desde el lunes estamos haciendo cola y no nos dan, viene un tráiler nada más, aquí estamos esperando, unas dormimos aquí, otras a las 5 de la mañana (llegan) y nada, no alcanzamos, ya somos personas de la tercera edad y no tenemos que estar aquí nada mas haciéndonos pendejas, si quieres el voto cuenta con nosotros, pero también apóyanos, no nos hagas tontas, hay personas que no les han dado los enseres nada más porque no quieren”.
La entrega de despensas de manera oficial por un gobierno es una actividad inédita en Acapulco porque anteriormente las despensas que se repartían a ciudadanos afectados por desastres naturales eran las que regalaban los políticos, con raciones míseras, medios kilos de frijol, arroz, azúcar y todas las presentaciones mínimas de los productos básicos, como chiles en vinagre, sopa, atún, aceite.
Las que entrega el gobierno federal tiene alimento suficiente para una familia y además de los productos que incluye contiene una tarjeta con dinero electrónico con valor por 500 pesos que se puede canjear en tiendas de autoservicio, las personas formadas en la fila, dicen que están ahí porque la tarjeta “ayuda mucho”, pero tienen que esperar horas para recibir la ayuda.
Una de las vecinas formadas en la fila contó que los marinos le dijeron que han llegado pocas despensas porque había un bloqueo en Chilpancingo y no podían pasar los tráilers.

Enseres

En el estacionamiento de esta misma plaza comercial también se reparten enseres, en el lugar hay una larga lista de colonias a las que tienen en calidad de “rezagados”, “por aperturar” y “en entrega”. Ayer no hubo información de cuántos paquetes de enseres se entregaron en ese lugar, un militar dijo que esa información se debe solicitar por escrito en la Novena Región Militar.
La entrega de enseres concluyó a medio día y en el lugar se quedaron formados 133 personas bajo el rayo del sol en espera de ser los primeros de este viernes en recibir sus enseres, la mayoría de las personas formadas eran vecinos de la colonia del PRI-Coloso, con esa aclaración porque hay otra colonia del PRI que está por La Sabana y esa no está considerada todavía para la entrega.
En el lugar ya se habilitó un puesto de comida, anteriormente, en diciembre cuando recién empezó el reparto de enseres en esa zona, era una zona agreste, actualmente se vende agua, se rentan sanitarios y es constante el ir y venir de personas.
Las personas que se quedaron en la fila se protegen del sol con cartones, sombrillas, gorras, se sientan en la banqueta a esperar su turno.
El estacionamiento de plaza Patio era uno de los pocos lugares donde había orden en la entrega de los enseres, los “Servidores de la nación” entregaban fichas a los ciudadanos formados para que acudieran al otro día y no tuvieran que estar en el sol, pero ayer se constató que esa práctica ya no existe.
El número de colonias rezagadas es de 82, desde la Bonfil hasta Alta Loma La Esperanza, a los vecinos que vienen de alguna de esas colonias les dicen que pueden formarse para recibir sus enseres.
Las colonias en lista de entrega son tres: Ampliación La Máquina, Del PRI y Crucero de El Cayaco y están “por aperturar” 46 colonias.

 

Más de 2 mil personas hacen fila en la plaza Patio para recibir las despensas

Karina Contreras

Más de 2 mil personas hicieron fila en la plaza Patio para recibir las despensas del apoyo que está dando el gobierno federal a los afectados por el huracán Otis y varios de los entrevistados reconocieron que van más por las tarjetas que traen para poder comprar productos en las tiendas de autoservicio.
Incluso una de las señoras dijo que estaba juntando para comprar una televisión que le costaba 4 mil pesos y nada más le faltaban mil pesos. Manifestó que perdió todo en su vivienda y esas tarjetas le han ido ayudando porque primero compró su horno y ahora quería comprar una televisión. Dijo que recibió ya sus enseres domésticos y que en esos no tardó mucho en la fila.
Manifestó que ella no fue a saquear tiendas porque tiene valores que le ha estado inculcando a sus hijos, pues manifestó que cómo en el futuro los iba a poder reprender si como madre le está enseñando a robar y añadió: “Que caiga un rayo y se abra la tierra si miento”.
La señora manifestó que es vendedora ambulante en las playas, pero que no hay turistas por lo que no va a trabajar y manifestó que ni los “chilangos” quieren venir a Acapulco. Comentó que llegó a las 4 de la mañana para poder alcanzar una despensa, pero ya le ha tocado días que no alcanza y mostró su repelente para que no se le acerque “ni un pinche mosco”. Una joven mostró su bloqueador para aguantar las largas jornadas a pie, a veces en la sombra y otras en el sol, y la vendedora le dijo “es marca Otis”( en referencias a los productos que fueron robados de las tiendas durante la rapiña) a lo que la joven le contestó: “No, me costó 400 pesos”.
Los vecinos provenientes de las colonias 1 de Mayo, El Coloso y los poblados de La Sabana y Llano largo canjearon este miércoles el cupón número 10 del apoyo federal. Los beneficiarios se formaron un día antes para recibir la canasta básica, aunque algunos reconocieron que su interés es por las tarjetas con las que pueden comprar en las tiendas de autoservicio otras cosas, pues las despensas traen cosas enlatadas.
La larga fila rodeó el centro comercial, mientras los vecinos intentaban cubrirse del sol con sombrillas, gorras y pedazos de cartón de las mismas despensas que dejan los beneficiados, pues muchos llevan sus bolsas para llevárselas. En el lugar había socorristas de la Cruz Roja, así como vendedores ofreciendo electrolitos, chilate frío, aguas y refrescos para atenuar el intenso sol de las 10 de la mañana. Los vecinos tienen que aguantar por varias horas el sol, estar entre basura y absorver polvo que levanta el aire, muy pocos portan cubrebocas, para recibir la caja de despensa que este miércoles estaba entegrando la Marina.

 

Se organizan mujeres de la comunidad de El Salto para acceder a las despensas

Jacob Morales Antonio

Flor Valente Flores, es vecina de la comunidad de El Salto, en la zona rural de Acapulco, y desde hace 10 semanas junto a un grupo de 12 vecinas sale de madrugada de su comunidad al estacionamiento de la plaza comercial Las Palmas en el bulevar de Las Naciones para recibir una despensa.
Este miércoles la mujer llegó a las 4 de la madrugada, y junto a sus vecinas fueron las últimas en recibir una caja con productos no perecederos que entregan los marinos. Otras 400 personas formadas ya no alcanzaron, y se tuvieron que retirar.
A diario el estacionamiento está atiborrado de damnificados, sobre todo mujeres, que acuden a canjear uno de los 12 cupones que se entregaron durante el pago del apoyo de 8 mil pesos para la limpieza que entregó el gobierno federal.
Pero también hay quienes se quejaron porque algunas personas han sacado provecho a la necesidad y la falta de tiempo de otros de acudir a formarse y esperar bajo los intensos rayos del sol, y acaparan los espacios en las filas, mismos que ofrecen en redes sociales de Facebook o incluso en grupos de WhatsApp por 100 pesos, lo que impide que algunos damnificados que acuden pueda recibir una caja.
Pasan de las 12 del día, el sol quema, luego de horas de espera Flor se apura a subir a la batea de una camioneta con su caja de despensas y media docena de huevos, entre sus vecinas se ayudan a colocar las cajas en la camioneta.
Antes de subir, cuenta que desde hace 10 semanas acude al estacionamiento del centro comercial porque a la comunidad no han ido los militares a entregar las despensas, y cada semana ha cambiado un cupón de los 12 que le dieron cuando fue por su ayuda para limpieza.
Cada semana se pone de acuerdo con sus vecinas y eligen el día que van a salir de la comunidad ubicada a una media hora del lugar donde les dan las despensas, salen entre las 3 y las 3:30 de la madrugada. Ayer regresaron a sus casas a las 12 del día, pese al cansancio y la fatiga de estar formadas bajo los rayos del sol, las mujeres sonríen y se ven felices.
Flor dice que casi en todas las despensas que ha recibido ha encontrado una tarjeta de regalo que tiene entre 500 y 600 pesos, misma que han usado para comprar verduras, y frutas en los supermercados, porque en su comunidad las parcelas quedaron anegadas y las hortalizas se perdieron, además de que los árboles frutales siguen recuperándose y no hay nada.
En los supermercados también ha comprado detergente y otros productos que no son de primera necesidad, pero que son de uso diario en su casa que se quedó sin el techo de lámina, mismo que ahora será de concreto porque no quiere volver a pasar el mismo miedo por el viento que provocó el huracán Otis.
En el pueblo no hay trabajo, pero dice que entre todos los vecinos ante la falta de peones y albañiles se están apoyando en el proceso de reconstrucción de sus casas, incluso ella acude a ayudar a preparar la mezcla del cemento, la grava y la arena.
La mujer de 32 años dice que aún le quedan dos cupones, que canjeará en las próximas dos semanas en el mismo estacionamiento, “nos es de mucha ayuda, por eso venimos, yo tengo tres hijos”.

Vendedora de artesanías sin despensa ni productos para vender

A 92 días del impacto del huracán Otis, hay quienes siguen sin poder recuperarse, es el caso de la vendedora de artesanías Arnulfa Vargas, proveniente de la colonia La Guadalupana, ubicada en la parte alta de Puerto Marqués.
Ella llegó a formarse a las 2 de la mañana en una de las filas del estacionamiento de la plaza Las Palmas. Pero explicó que su fila no avanzó pese a estar desde muy temprano, porque los marinos le dieron preferencia a las personas que iban llegando por la mañana. Lo anterior debido a la venta de los espacios en la formación.
La mujer, quien es madre soltera, antes de Otis se dedicaba a vender artesanías en un local que tenía en el parque Papagayo, y que fue saqueado. Dice que fue censada en su casa, pero a pesar de haber recibido el apoyo de la limpieza y la despensa, no apareció en el padrón de beneficiarios para el programa de reconstrucción, lo que reportó y está a la espera de que le marquen o vayan a su casa a verificar los daños.
“Yo no he recibido el apoyo, me censaron pero mi CURP dice que no está apto para recibir el apoyo, y hasta ahora no me han dado una solución, y sólo me hicieron una incidencia”, expresó.
La mujer dijo que espera que el Banco del Bienestar le otorgue un préstamo por 25 mil pesos del crédito a la palabra, para volver a surtir su local y regresar a trabajar. Ayer luego de casi 10 horas de estar esperando y faltando unas 100 personas para recibir su despensa, las cajas se terminaron y ella se tuvo que retirar y volverá hoy.

Sobrevive gracias a las despensas, dice una agradecida madre soltera desempleada

Argenis Salmerón

“Tengo que esperar la canasta básica, porque me quede sin trabajo por el huracán Otis, todo es ayuda para sobrevivir”, manifestó la vecina de la colonia Venustiano Carranza, Juana Valdez Benítez, que estuvo cinco horas formada para recibir la despensa que entrega el Ejército.
La vecina de 50 años, que tiene viviendo 15 en la colonia Venustiano Carranza, y trabajaba en la tienda Sears.
La despensa contiene en el cartón, un pan blanco, aceite, arroz, frijoles, leche, atún, harina de maíz en polvo, jabón de tocador, bolsa de sopa, papel sanitario, más la tarjeta de regalo.
La ayuda tiene adentro tarjetas de regalo de Soriana por 502 pesos, la tienda Aurrerá 656 pesos y Chedraui 538 pesos, que se pueden cambiar por productos, menos alcohol, cigarros ni recargas telefónicas.
Valdez Benítez se quejó que los efectivos del Ejército no acuden cada semana para entregar la despensa, que contiene una tarjeta de regalo de las tiendas Soriana, Aurrerá y Chedraui.
Comentó que apenas van cuatro cupones canjeados con los soldados, “viene casi dos a tres semanas a entregar la canasta básica”.
“La tarjeta de regalo es el complemento de la despensa, ya sea para comprar detergente, agua embotellada, frutas y carnes frías”, puntualizó.
Indicó que ha ido a otras colonias aledañas para cambiar el cupón por despensa, “el chiste es terminar rápido la cuponera y tener el extra que son las tarjetas de regalo”.
La vecina contó que “fue algo impresionante el huracán Otis, me voló todo el techo y cayó un árbol encima de la casa”.
Añadió que su casa está construida de paredes de tabicón y láminas galvanizadas, además el sanitario de concreto, “ahí nos metimos para resguardarnos; perdí todo lo material porque el agua se metió”.
“Yo todavía no he podido ir a recoger mis enseres domésticos, es un desgaste y por fuerza te tienes que quedar a dormir en el lugar”, declaró.
Indicó que se quedó sin trabajo por el huracán Otis, “yo trabajaba en la tienda departamental Sears y como hubo daño y rapiña, nos notificaron que los empleados estamos de finiquito de manera indefinida”.
“Ahorita la verdad ando sobreviviendo por la ayuda del gobierno, y después de cambiar mi cuponera y traer mis enseres, voy a tener que buscar trabajo, porque soy madre soltera con dos hijos”, subrayó.
Informó que con la ayuda de apoyo económico para la reconstrucción de viviendas que otorgó el presidente Andrés Manuel López Obrador, “hice mi limpieza afuera y adentro de mi casa y le puse nuevo techado a mi casa”.

Se quejan vecinos del Centro que soldados retiran tarjetas de regalo de despensas

Camiontas cargadas de enseres en el parque Papagayo, al lado de la avenida Cuauhtemoc en Acapulco Foto: Jesus Trigo

Argenis Salmerón

Ayer hubo larga fila de personas para recibir la despensa que reparte los efectivos del Ejército atrás de la Catedral de Acapulco, lo que provocó que automovilistas se bajaran para adquirir los productos de la canasta básica.
Los damnificados de la colonia Centro, denunciaron que los soldados abren las cajas de las despensas para quitar la tarjeta de regalo, que se puede cambiar en las tiendas Soriana, Aurrerá o Chedraui.
La despensa contiene en el cartón un pan blanco, aceite, arroz, frijoles, leche, atún, harina de maíz en polvo, jabón de tocador, bolsa de sopa, papel sanitario, más la tarjeta de regalo.
Soldados en dos camiones entregaron ayer las despensas en la calle Quebrada de la colonia Centro.
Los automovilistas se bajaron y preguntaron por el cupón de canje y sí tenía tarjeta la despensa, porque aseguraron que los soldados se las quitan.
La fila de personas se formó del Ayuntamiento hasta la Escuela Primaria Ignacio Manuel Altamirano, unos 500 metros lineales.
El tráfico vehicular fue lento durante la entrega de las despensas, que se cambian por los cupones que entregó el gobierno federal.
La vecina de la colonia Centro, Alejandra Muñoz Sánchez, dijo que desde que bloquearon la Costera para exigir la despensa, “ahora cada semana vienen a entregar”.
Sin embargo se quejó que los soldados entregan las cajas de despensa abiertas, “obviamente no tenía tarjeta, simplemente se las quitan, no sé con qué intención”.
Declaró que la despensa y la tarjeta de regalo, “es el complemento, por ejemplo con los 502 pesos compró detergente, carne y agua embotellada”.
“Las personas de otras colonias que van en carro se bajan y aprovechan para canjear el cupón, no hay un orden en la entrega”, puntualizó.
Expuso que los vecinos se avisan por llamada o mensaje cuando llegan las despensas, “yo me tarde dos horas formada”.
Pero dijo que hay vecinos de otras colonias que se forman desde temprano y tardan medio día formados, “les dicen los caza despensas”.
La vecina de la colonia Hogar Moderno, Laura Guinto Salas, dijo que “me tocó la suerte, iba pasando, me formé y me tocó la despensa, pero sin tarjeta de regalo”.
“Yo tengo la mayoría de la cuponera, porque trabajo y no tengo tiempo para andar detrás de las despensas”, acotó.
Señaló que los soldados le quitan las tarjetas de regalo a las despensas, “yo soy cajera de Aurrerá y los soldados compran con tarjeta de regalo”.
El 6 de enero pasado vecinos de la colonia Centro, bloquearon la avenida Costera frente al Zócalo para exigir despensas.

Esperan hasta cinco horas las despensas en Marbella por el atractivo de la tarjeta de regalo

Argenis Salmerón

Hasta cinco horas esperaron los vecinos del fraccionamiento Marbella para recibir la despensa con la tarjeta de regalo para canjearlo en las tiendas Soriana, que entrega el Ejército.
Incluso vecinos de otras colonias se bajaron de su automóvil para recoger la despensa, todo por la tarjeta de tarjeta de 502 pesos.
La fila de personas se ubicó afuera del fraccionamiento, a un costado de la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo.
La despensa viene en una caja de cartón y contiene pan, medio casillero de huevo, un kilogramo de arroz, azúcar y frijol, dos bolsas de harina de maíz en polvo, un litro de aceite, dos atunes y cuatro rollos de papel higiénico. Y tarjeta de regalo.
La señora Carmen Gatica Pérez, expresó que es una “odisea” obtener la despensa, porque aseguró que no hay lugar en específico de entrega ni horario y “a veces no viene como lo publican en las redes sociales, en páginas oficiales”.
Se quejó que tuvo que esperar cinco horas en la fila y “en una ocasión los soldados se fueron porque algunas personas se gritaron por pelar el lugar en la fila”.
Contó que tres cupones de la talonera ha cambiado, “es muy poca, porque no viene para acá o porque yo trabajo y no me entero”.
Añadió que dos despensa tenían la tarjeta de regalo y una no, pero “desde que empezaron a exhibir en las redes, ya aparecen las tarjetas de regalo”.
“La verdad las personas van por la despensa, pero sobre todo por la tarjeta de regalo, porque completas tu despensa de la semana, todo puedes comprar en Soriana, excepto alcohol y cigarros”, puntualizó.
Manifestó que hay “caza” despensas, porque dijo que “hay personas que no son del fraccionamiento y se forman para tener la canasta básica; todo por la tarjeta de regalo”.
El señor Gonzalo Cárdenas Vázquez, expresó que “es un viacrusis” recibir la despensa que entrega el Ejército, “cinco horas formados”.
“Eso no es todo, hay peleas entre los vecinos y los habitantes de otras colonias por el espacio para ser uno de los primeros en recibir”, manifestó.
Declaró que una vez los soldados al ver la discusión de los vecinos se retiraron y no entregaron las despensas, “dejan a los vecinos sin el beneficio y hasta los siguen en sus carros a los camiones del Ejército”.

 

Reciben despensas vecinos de colonias del Centro tras bloquear la Costera el sábado

Larga fila de personas que esperan su turno para recibir una despensa por militares en la calle La Quebrada en el Zocalo de Acapulco Foto: Jesús Trigo

Aurora Harrison

Vecinos de diferentes colonias de los Barrios Históricos, Centro, Quebrada y Las Playas bloquearon el sábado tres horas los dos sentidos de la avenida Costera, frente al Zócalo, para exigir a las autoridades despensas, fue hasta ayer domingo que el Ejército les entregó los paquetes, por lo que se hicieron dos largas filas de personas.
A las 10 de la mañana del sábado unas 100 personas comenzaron el bloqueo en el sentido hacia Caleta, después de media hora decidieron bloquear de manera total la avenida Costera, se retiraron a la una de la tarde del sábado al acordar con un coronel del Ejército la entrega de los paquetes con productos de la canasta básica para ayer domingo.
La mañana de ayer los damnificados que bloquearon se empezaron a formar en la calle Quebrada, atrás de la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad, en el Zócalo, en espera de recibir la despensa que buscaban desde el viernes en la tarde.
Una vez en el lugar llegaron personas que no habían protestado e hicieron otra fila para recibir el apoyo con los productos de la canasta básica, lo que provocó que los que bloquearon pidieron que se les entregará primero a ellos, pues argumentaron que ellos ya tenían días esperando para poder cambiar el cupón de su talón del censo.
Llegaron dos camiones, cada uno con 300 despensas, y dos carros oficiales con soldados para cuidar, empezaron a repartir después de las 10 de la mañana y las personas formadas tenían que llevar su cupón con el número 9, para que les hicieran entrega del apoyo con los productos de la canasta básica.
Ayer en las dos filas que se hicieron para recibir la despensa había personas de diferentes colonias, no nada más de los Barrios Históricos y es que muchas de las personas llevaban la cuponera con la mayoría de los cupones.

El bloqueo

De la protesta que se llevó a cabo el sábado, la mayoría adultos mayores, personas con discapacidad y jóvenes, señalaron que las autoridades semana con semana entregan despensas ahí en el Zócalo, pero que ese día les dijeron que no iban a dar por la muerte de los tres “Servidores de la Nación”.
Explicaron que la única alternativa que les daban para cambiar el cupón número 9 era que se fueran hasta la zona Diamante, en esa zona están entregando los paquetes con los productos de la canasta básica sin importar de que colonia son los damnificados.
Uno de los inconformes, Antonio Durán Pita, dijo que la inconformidad es porque desde el viernes por la tarde se encontraban haciendo fila para recibir la despensa. “Nos incumplieron y es como si no valoraran el tiempo de las personas, no estamos aquí en la sombra, estamos en el rayo del sol y que no vengan, que nada más cancelen de la nada”.
Los inconformes mostraron las planillas casi completas con dos o tres cupones cortados, y ya va la semana 9, que los “Servidores de la Nación” les dicen que vayan hasta Diamante a canjear sus cupones que allá dan a las personas sin importar de que colonia son.
“Dos mil personas esperando hasta la iglesia, personas como yo que estoy desde las 5 de la tarde, quizá por acompañar pero aquí estamos y es lo mismo que cancelen nada más porque si, ese es el problema. El anterior sábado recibimos, pero igual desde acampar un día antes y vienen cuando quieren, a la hora que se les ocurre”, declaró el quejoso.
Al bloqueo llegó el director de Gobernación Municipal, Ramón Montiel, y el coronel del Ejército, Bernardo Cortés, quienes pidieron a los vecinos que permitieran el paso a los automovilistas y que el domingo les entregarían los paquetes con productos de la canasta básica, después de dialogar por varios minutos y llegar al acuerdo se quitaron.
Se hizo una lista con los nombres de las personas que estuvieron desde temprano esperando a que les hicieran la entrega semanal de la despensa.

 

No atiende el gobierno a afectados por Max en Tecpan a tres meses del desastre, denuncian

Los afectados por la tormenta tropical Max del municipio de Tecpan de Galeana debido al desbordamiento del río de Tecpan que causó daños estructurales en la infraestructura carretera, viviendas, escuelas y sectores productivos ante la pérdida de cosechas así como ganado, lamentaron que a pesar de la Declaratoria de Emergencia, no hay respuesta de la autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Las familias afectadas señalan que a casi tres meses de este desastre, siguen sufriendo las consecuencias pues hay escasez de agua y las viviendas no son seguras para habitar porque la inundación les causó daños.
Ante la falta de respuesta organizaron un comité que buscará agotar las vías legales para poder ser atendidos.
Lamentaron que la reconstrucción sólo quedó en discurso. Los afectados de la cabecera municipal de las calle Luis Pasteur y Apolonio Castillo acusan que no han sido censados hasta la fecha aún cuando varias viviendas están inhabitables.
Precisan que los apoyos que recibieron fue de desayunos y agua de plantas potabilizadoraa móviles.
Indicaron que las despensas que repartió el gobierno del estado, muchos no las recibieron y mencionaron que la mayoría de los apoyos fue de ciudadanos que llevaron ropa y víveres.
Exigieron ser atendidos y anunciaron que el 7 de enero se reunirá el comité ciudadano con afectados de comunidades y los sectores productivos para analizar si se movilizan a principios del próximo mes. (Francisco Magaña / Atoyac)