En la Sierra estamos contra la falta de humanidad, y defendemos la vida y la legalidad, responde el obispo

 

El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, entrevistado este lunes . Foto: Jessica Torres Barrera

El obispo Salvador Rangel Mendoza declaró que en el problema de violencia en la Sierra, él no puede ser ni parcial ni imparcial, o estar a favor de un pueblo o de otro, “estamos en contra de la falta de humanidad de estas personas, estamos defendiendo los derechos humanos, defendiendo la vida y la legalidad”.
El prelado respondió así ayer al señalamiento del vocero del Frente Unido de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero, Salvador Alanís, quien lo acusó de asumir una postura parcial porque solamente se ha reunido con Isaac Navarrete Celis, líder del cártel del Sur de quien dijo que ha recibido prebendas, y reprochó que no se ha reunido con el otro grupo ni con ellos como Policía Comunitaria, por lo que dijo que no es verdad que el obispo busque una tregua.
“Yo no soy parcial ni imparcial, aquí se trata de derechos humanos, ellos han desplazado a personas y las han despojado de sus casas, de sus tierras, de sus animales, de sus pertenencias, y eso es un despojo, allanamiento de morada y de pueblo”, insistió en acusar a la Policía Comunitaria que está desde el 11 de noviembre a Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco).
Agregó que tampoco puede estar a favor de un pueblo o de otro, “estamos en contra de la falta de humanidad de estas personas, cómo se atreven a correr a señoras embarazadas, a niños cargando en brazos, a ancianos. No se trata estar de parte de un grupo o de otro, estamos defendiendo los derechos humanos, defendiendo la legalidad”, recalcó.
Dijo que cualquiera que quebrante la ley; la iglesia, el gobierno, cualquier grupo o institución, debe ser sancionado porque no se puede estar en contra de los derechos de los demás “y sobre todo al gran derecho a vivir en casa”.
Acusó que lo que hicieron los policías comunitarios “es un flagrante agravio contra la dignidad humana y contra la persona”.
El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, que abarca la zona de la Sierra, aseguró que sí ha buscado al otro grupo a través de segundas personas para platicar sobre una tregua para la paz, “que ellos mismos se informen en Tlacotepec”, les pidió.
Aseguró que dos veces quiso reunirse con el “jefe de Tlacotepec” pero que en una ocasión le dijeron que no estaba allí porque había presencia de soldados.
Añadió que en otra ocasión le mandó decir con otra persona “que por qué no llegábamos a algún arreglo y no he tenido respuesta”.
El obispo añadió que la Policía Comunitaria tampoco lo ha buscado o invitado a platicar, “o que me digan quién de ellos me ha invitado a que yo vaya, no ha habido nadie que me invite, yo estoy de acuerdo a hacer lo que sea por la paz”, expresó.
En cuanto al señalamiento de que se ha reunido con líderes del narcotráfico, admitió que “yo como me reúno con los de abajo, me reúno con los de arriba”, y rechazó que haya recibido prebendas del líder del Cartel del Sur, Isaac Navarrete, El señor de la I.
“Que me digan cuándo, dónde las he recibido y cuánto es el monto. Lo mismo de ellos no he recibido nada, no les he aceptado absolutamente nada, ni al grupo de arriba ni al grupo de abajo”, aseguró.
Con respecto a la petición de que el gobierno proceda en su contra por sus vínculos con narcotraficantes al reunirse con ellos, Salvador Rangel dijo que no puede proceder el gobierno porque está haciendo su labor pastoral, “no sé si esté penado en la ley o en la Constitución platicar o hablar con la gente”.
El martes, Salvador Alanís advirtió, asimismo, que si el gobierno no procede en contra del obispo por sus reuniones con un líder del narcotráfico, serán los comunitarios quienes lo van a detener y a someterlo a reeducación.
Al respecto dijo que “ellos pueden decir lo que gusten, lo que quieran” y luego se preguntó: “¿bajo qué pretexto me pueden detener?, ¿cuál es la acusación, o tienen el derecho a detenerme?, y luego declaró que la suya sería una detención arbitraria “y los penalizados serian ellos, no yo”.
Insistió: “¿Cómo me van a detener?, ¿me van a secuestrar?, ¿y luego a dónde me van a llevar?. Yo creo que son palabras demás”, expresó.

“Una grosería” acusar al gobernador y a él de proteger al crimen: edil de Chichicualco

El presidente municipal de Leonardo Bravo (Chichihualco), el priista Ismael Cástulo Guzmán, declaró ayer que es “una grosería” y una versión vieja el señalamiento en lonas con narcomensajes encontradas en varias partes de la Ciudad de México, en las que lo vinculan a él, al gobernador Héctor Astudillo Flores y a varios políticos de Guerrero con el Cartel del Sur.
Evadió contestar al señalamiento que hizo el gobernador en el sentido de que fue él quien acordó la ruta que tomaron los desplazados para regresar a sus comunidades el sábado cuando fueron atacados y obligados a regresar a Chichihualco. Declaró que no quiere entrar en contradicciones con el Astudillo porque “ya están avanzando las pláticas para resolver el conflicto”.
Este martes fueron colocadas mantas con un mensaje dirigido al presidente electo Andrés Manuel López Obrador y en las que acusan al gobernador Héctor Astudillo Flores de brindar protección a una supuesta red criminal que involucra a políticos y funcionarios estatales y jefes militares, entre ellos al alcalde Cástulo Guzmán.
Consultado ayer por teléfono el alcalde declaró que ese es un asunto “ya rebasado” y que es lo mismo que se ha venido difundiendo desde hace tiempo en redes sociales, “pero para hacer groserías, cualquiera”.
Informó que esas versiones circulan desde cuando comenzó su lucha por la paz en la Sierra.
Adelantó que si se llegara el caso de que lo citen a comparecer ante las autoridades, “yo voy a decir que no sé nada de nadie y los que anden haciendo eso Dios que los bendiga, ellos saben su rollo”.
En cuanto a las declaraciones que hizo el gobernador el 20 de noviembre, de que fue él quien decidió la ruta que tomaron los desplazados en su regreso a sus comunidades el sábado y que fueron atacados en el camino, el alcalde se negó a responder.

Rechazan vínculos con la delincuencia

El martes, el vocero del Frente de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero Salvador Alanis, informó que los comisarios de cinco pueblos, entre estos el de Filo de Caballos, acordaron en una asamblea la permanencia de la Policía Comunitaria en la zona y que el comisario y los pobladores de Filo de Caballos acordaron que no regresen las 17 familias desplazadas de ese pueblo.
Al respecto el coordinador de los desplazados, Palacios Salgado, declaró vía telefónica que si tienen pruebas de que las 17 familias de Filo de Caballos son delincuentes, que presenten las denuncias para que haya un proceso legal en su contra por parte de las autoridades competentes.
Declaró que ellos (los policías comunitarios) no son autoridad para que los señalen: “aunque carguen un rifle y una playera que diga Policía Comunitaria, ellos no tienen autoridad para poner y señalar y encarcelar a la gente que ellos quieran”, expresó.
Añadió que los comisarios de cinco comunidades que supuestamente aprobaron la permanencia de la Comunitaria en Filo de Caballos están presionados, “si te pongo una pistola apuntándote a tu cabeza y te digo que voy a matar a todos tus hijos y a tu esposa, ¿qué harías?”.
Agregó que no se puede realizar una asamblea en la que no está la mayoría para que se aprueben los acuerdos, insistió en que no tiene lógica sus argumentos.
Demandó que si los comisarios no están presionados que les permitan salir a dar una conferencia de prensa a Chichihualco o a cualquier otra ciudad y hablen de la situación en que se encuentran ellos y los pobladores.
Dijo que por eso el sábado los comunitarios atacaron la caravana de los desplazados para que no llegaran y respaldaran a los comisarios y al resto de los pobladores que piden la salida de los comunitarios.
Rechazó que haya sido gente de Los Morros que apoya a los desplazados los que realizaron disparos para asustar a los desplazados y regresaran a Chichihualco.
“Nosotros que necesidad tenemos de hacer eso, si somos los que queremos regresar a nuestras casas, ¿crees que queremos estar sufriendo aquí, mientras nuestros animales, nuestras siembras y nuestros cultivos se está echando a perder porque ya vamos para quince días que no regresamos?.
Añadió que no tiene lógica que hayan sido partidarios de ellos los que dispararon para que se regresaran y no llegaran a sus pueblos.
El coordinador de los desplazados demandó a las autoridades competentes que pongan orden en esos pueblos y que se haga una investigación apegada a derecho para que se castigue a los realmente responsables de todos los hechos de violencia en la zona.
También insistió en que las autoridades estatales y federales intervengan para que salgan los comisarios de Filo de Caballos, Campo de Aviación, Puentecillas y El Ranchito a quienes los comunitarios tienen retenidos, para que den una conferencia de prensa y declaren abiertamente lo que están viviendo, pero que antes se ponga bajo resguardo a su familia que está a en riesgo.
Dijo que si realmente la Policía Comunitaria sabe quiénes son los delincuentes que están cometiendo los delitos en el corredor de Casa Verde a Filo de Caballos que pongan la denuncia correspondiente y que se actúe conforme a la legalidad, “y no solamente porque lo dice la gente que tiene interés del control de ese territorio”.
Palacios Salgado, declaró, además, que la ruta que tomó la caravana el sábado cuando regresaban a sus casas fue un acuerdo que tomaron en común los desplazados, las autoridades estatales encabezadas por el subsecretario de Gobierno para Asuntos Políticos, Martín Maldonado del Moral y los militares.
“Las autoridades saben perfectamente cómo se tomó la decisión, se reunieron los coordinadores de los desplazados con Martín Maldonado, la delegada de Gobierno en la zona Centro Norma Yolanda Armenta y el Ejército mexicano y determinaron la ruta a seguir”, aseguró.
Sin embargo dijo que el subsecretario Martín Maldonado se está prestando al juego de los policías comunitarios y que está dialogando con esa gente armada, “cuando el Gobierno no tiene por qué hacer ese tipo de negociaciones, tiene que dialogar con las autoridades correspondientes que son los comisarios y los presidentes municipales”.
Acusó que el sábado al regresarse el subsecretario Martín Maldonado, después de que fue atacada la caravana, al dejar indefensos a los desplazados, éstos no podían arriesgar sus hijos y mujeres y que por eso se regresaron a Chichihualco, “por eso tomamos esa decisión, y no fue el alcalde Ismael Cástulo el que tuvo que ver en la ruta que se determinó seguir ni el que nos pidió que regresáramos. Nos tuvimos que mover nosotros mismos como pudimos por la ruta que conocemos y que creímos que estaba segura porque ya la hemos subido muchas veces”. (Zacarias Cervantes / Chilpancingo).

 

Piden vecinos de la sierra desplazados seguridad para regresar a sus pueblos

 

Desplazados por la violencia de los pueblos vecinos a Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), reclamaron ayer vía telefónica que los gobiernos federal y estatal les garanticen seguridad en sus comunidades para que puedan regresar sin riesgos.
Bernardo Cisneros, vecino de Carrizal, contó ayer que después del 5 de septiembre cuando irrumpieron civiles armados en La Laguna, municipio de Eduardo Neri (Zumpango) y atacaron las comunidades de Puentecillas, Carrizal y El Ranchito, siete familias salieron de Carrizal por temor a los ataques de los integrantes del grupo criminal.
Añadió que el fin de semana pasado otras familias abandonaron Carrizal y pueblos vecinos porque las agresiones continuaron en los días siguientes, principalmente en las madrugadas.
Contó que su casa quedó totalmente agujerada porque se encuentra en la orilla y por el lado donde llegan a atacar al pueblo los civiles armados, por eso abandonó su pueblo y su casa la misma noche del 5 de septiembre.
Informó que las familias que salieron en los días posteriores, (desconoce cuántas) viven hacinados en casas de sus familiares en Chilpancingo, otros en Chichihualco, la cabecera municipal y algunos se fueron a Cuernavaca, Morelos.
Denunció que lamentablemente los gobiernos federal y estatal los han dejado solos, pues solamente declaran a los medios de comunicación que hay presencia de militares y policías estatales y que está garantizada la seguridad en la sierra, pero es mentira.
Afirmó que las fuerzas federales y estatales suben solamente cuando ocurre un evento de violencia, levantan los cuerpos, hacen recorridos y vuelven a bajar de la zona.
Mientras tanto los integrantes de los grupos armados se repliegan mientras hay presencia policiaca y militar, pero que cuando se retiran vuelven a atacar a las poblaciones.
“Lamentablemente las familias que no tenemos nada que ver con estos grupos quedamos en medio de dos fuegos, y al final no nos queda otra alternativa que abandonar nuestros pueblos”, se quejó Bernardo, quien está a cargo de un grupo de siete familias que abandonaron Carrizal la noche del 5 de septiembre.
El vecino de Carrizal demandó que los gobierno federal y estatal les ayuden no solamente con la seguridad en sus pueblos para que puedan regresar, sino que mientras permanecen refugiados con sus familiares los apoyen con colchonetas y despensas para que puedan sobrevivir porque huyeron sin nada de sus pueblos.
Asimismo, ayer no había en la zona presencia de militares ni de policías estatales como lo ha venido informando el gobierno del estado y el vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia.

No luchan por la amapola y su trasiego, manifiestan pueblos de la “Sierra alta de Guerrero”

Mientras tanto en un pronunciamiento de los pueblos de la “Sierra alta de Guerrero”, aclararon este martes que la lucha no es contra los pueblos, “es a favor de los pueblos, no es por intereses personales, no es por plazas, no es por el control del acaparamiento de la amapola y su trasiego, como justifican los medios y el gobierno, es por justicia, por libertad, por el derecho a la vida, y por sobre todo por amor a nuestra gente, a nuestra tierra”.
Responsabilizaron a las instituciones y al gobierno “por el tan injusto abandono en el que nos han dejado, pues si no fuera por eso este conflicto no tendría razón de ser”.
Critican en su escrito que las autoridades “nos gobiernan pero no nos representan, tanto tiempo minimizando el problema y mientras tanto nuestros hijos no van a la escuela, no tenemos medicinas y doctores en los centros de salud, no tenemos abasto en la tiendas, no tenemos transporte”.
A los pueblos de la parte baja donde se han dado los enfrentamientos les piden “paciencia y comprensión por todo los inconvenientes que este conflicto ocasiona, esta lucha también es por ustedes, pues, muchos de ustedes son nuestros parientes y amigos, sabemos que también sufren la opresión que infringen contra ustedes y sus mujeres al obligarles a manifestarse para pedir ayuda al gobierno a favor del Cártel del Sur”.
Agregan: “sabemos que obligan a los hombres a armarse y a defenderlos y quien no acepta es despojado de sus pocos bienes y son expulsados de sus pueblos o asesinados. Esto ya muy pronto se va a terminar”.
Advierten que han tomado medidas drásticas, “pues el gobierno y los acosos de este grupo criminal no nos dejaron otra alternativa, o vivimos o morimos pero será peleando por el sagrado sostén que tenemos para con nuestras mujeres, ancianos y niños, y el respeto a sus derechos más elementales”, advierten.
En su manifiesto responsabilizan al Cártel del Sur de la violencia en estos pueblos, “se está librando una gran batalla entre la gente de los pueblos de la sierra en contra del llamado Cártel del Sur. Mucho se ha dicho y se ha opinando de este conflicto, pero como dice el dicho: sólo el indio sabe lo que trae en el morral”, dice el escrito.

 

Los Jefes y el Cártel del Sur serían los responsables de la violencia en la capital, dice el vocero

Los ataques a las Urvan y a bases del servicio de transporte público, así como los asesinatos de mujeres en Chilpancingo podrían estar relacionados con los grupos criminales Los Jefes (una escisión de Los Rojos) y al Cártel del Sur que operan en la capital, declaró el vocero en materia de seguridad del gobierno del estado, Roberto Álvarez Heredia.
El funcionario declaró después de la ceremonia de abanderamiento y pase de revista del nuevo Grupo de Operaciones Especiales Jaguar, que la Fiscalía General del Estado (FGE) se encarga de las investigaciones.
Antes, informó que a las 2 de la madrugada de este martes la Secretaría de Seguridad Pública Estatal recibió un reporte a través del número de emergencias 911 del hallazgo de un taxi con una persona golpeada en el interior, pero cuando llegaron los policías encontraron a tres mujeres, dos muertas y otra herida.
Álvarez Heredia expresó que no se descarta que en estos asesinatos estén detrás los mismos grupos delictivos que en las últimas semanas han atacado en Chilpancingo, “atacando directamente a usuarios del servicio público colectivo y vamos a estar informando de acuerdo con los avances que la Fiscalía tenga”.
Aclaró que no se puede confirmar nada, “hay que esperar que la Fiscalía avance en las investigaciones”.
En respuesta a la pregunta de un reportero, Álvarez Heredia declaró que los grupos que “están en actividades delictivas” en Chilpancingo son el Cártel del Sur y Los Jefes, “que anteriormente les llamaban Los Rojos”.
Insistió en que el gobierno del estado no descarta que ambos grupos estén detrás tanto del ataque a las Urvan y bases del servicio de transporte público como al de las mujeres asesinadas en los últimos días en la capital.
De las hermanas Gudelia y Joela Adame García, quienes están desaparecidas desde el viernes, informó que los familiares ya se pusieron en contacto con la FGE, pero que “en estos temas somos muy prudentes al emitir cualquier tipo de información para no poner en riesgo a las personas que están involucradas”.

 

Chilpancingo: morir en domingo y sin saber porqué

Morir en domingo y sin saber porqué, es parte de lo cotidiano en la capital del estado de Guerrero, donde ayer un grupo armado atacó la base de transporte público Chilpancingo-Chichihualco y dejó tres muertos y tres heridos.
A las 7:30 de la mañana en la base de las Urvan que van a Chichihualco, pasajeros abordaban una de las camionetas para viajar a esa localidad, cuando un vehículo paró su marcha y descendieron “dos sujetos que dispararon contra la gente”, mencionó uno de los testigos presenciales que salió ileso del ataque.
En la agresión murieron Abraham Isidro de 75 años y María Rosario de 40 años, ambos quedaron dentro de la unidad número 22.
Abraham quedó prácticamente sentado en uno de los asientos delanteros, en una de las fotos del peritaje se observa que llevaba una bolsa de nylon azul y blanco y sobre el asiento quedó un sombrero de palma de los que usan los campesinos de esa región de la sierra de Guerrero.
María Rosario quedó recostada en el asiento posterior, vestía una chamarra de mezclilla y una blusa rosa, era la madre de uno de los heridos de nombre Aarón, adolescente de 13 años que se encuentra hospitalizado por dos impactos, uno en el brazo y otro en la pierna derecha. Un testigo reveló que la mujer cubrió de los disparos a Aarón y a su otro hijo de 6 años.
A las 7:45 de la mañana llegaron efectivos de la Policía del Estado y el Ejército Mexicano para acordonar el área y esperar las ambulancias de Cruz Roja y Protección Civil que realizaron el traslado de los heridos: Elías de 80 años (quién murió en el Hospital General), con disparos en el brazo, pierna y tobillo; Beatriz Adriana de 35 años, con una lesión por esquirlas de arma de fuego en el cuello y el joven Aaron.
En el lugar quedó herida la esposa de Abraham por un rozón en la espalda y que esperó que se realizaran las diligencias y el levantamiento del cuerpo de su esposo, ellos venían de la Ciudad de México y abordaron la Urvan 22 para dirigirse a su casa en Chichihualco.
El sitio Chilpancingo- Chichihualco se encuentra ubicado en la avenida Insurgentes de esta capital, exactamente frente al mercado central Baltazar R. Leyva Mancilla. Tiene una puerta de salida del lado de la colonia Electricistas que comunica con el bulevar Vicente Guerrero; en ese lado es donde ocurrió el ataque.
A las 8:30 de la mañana llegaron los peritos de la Fiscalía General del Estado para levantar información y realizar las diligencias de los dos muertos.
En la calle del lado de la colonia Electricistas donde ocurrió el ataque, los peritos levantaron 50 casquillos 7.62 mm para cuerno de chivo.
Cerca de las 10 de la mañana trabajadores de Semefo levantaron los cuerpos de Abraham y María del Rosario.
El viernes por la tarde fueron quemadas dos Urvan de transporte público del sitio Chilpancingo-Chilapa y ejecutados dos choferes. Los testigos señalaron que “fueron bajados por hombres armados” y una de las Combis fue incendiada con una granada.
Las autoridades estatales han señalado que se están realizando las investigaciones “para dar con los responsables”.
En la zona centro del estado desde hace meses los grupos del crimen organizado Los Rojos y el Cartel del Sur, se encuentran en guerra por el control del territorio. Fuentes de inteligencia identifican las operaciones del grupo de los Rojos en Chilapa y del Cártel del Sur en Chichihualco.

 

En patrullas clonadas desaparecieron a un joven de Chilpancingo, difunde un grupo criminal

En Chilpancingo operaban desde hace dos meses tres patrullas clonadas, una de ellas es la que fue baleada la noche del lunes en la carretera a Chichihualco, en la salida de la ciudad donde fueron asesinados dos “falsos” policías, según un video subido a las redes sociales en el que integrantes del Cártel del Sur interrogan a un supuesto policía que declara que fueron Los Rojos o Los Jefes, los que levantaron a Efraín Patrón Ramos, desaparecido desde el 29 de diciembre.
El video fue subido junto con una nota de El Sur relacionada con la denuncia de Natividad Patrón, hermana de Efraín Patrón, en la que se queja de la inacción de la Fiscalía General del Estado (FGE) para localizar a Efraín, quien el 29 de enero cumplió un mes desaparecido, sin que la Fiscalía haya informado a los familiares avances de la investigación.
El video fue subido a un día de que una patrulla de la Policía Municipal clonada fue tiroteada a la salida de la capital, rumbo a Chichihualco, en donde murieron dos “falsos” policías.
En la imagen aparece un hombre vestido con uniforme de policía, sometido supuestamente por integrantes del Cártel del Sur, y en la parte superior a manera de título: “Cartel difunde video donde hace confesar a uno de los policías pirata en Chilpancingo”.
El interrogatorio es el siguiente:
-¿Cómo te llamas?
-(Inaudible)
-¿De dónde eres originario?
-De Chilapa.
-¿Para quién trabajas?
-Pal Japo.
-¿Qué hacían con la patrulla de la Policía Municipal?
-Patrullamos a muerte, la muerte.
-De los jóvenes que se llevaron, ¿quién se los levantó?
-Nosotros.
-¿Pa donde se los llevaron?
-(Inaudible)
-¿Qué hicieron con ellos?
-Los matamos.
-¿Cuando vieron que estaba caliente, que hicieron con ellos?
-Los fuimos a cazar.
-¿El chavo referido Patrón, en dónde se lo levantaron?
-La alameda.
-¿A qué horas?
-Como 3 de la mañana
-¿Cuando patrullan (inaudible) patrullan en la noche?
-Sí, en la madrugada.
-¿Cuantas patrullas existen clonadas en la capital?
-Tres patrullamos.
-¿Cuando se les puso el pedo caliente, qué hicieron con la patrulla (en la) que hicieron su desmadre?.
-Fuimos a dejarla a la colonia (inaudible).
-¿De los chavos levantados para donde se los llevaron, los enterraron o qué hicieron con ellos?.
-Nos los dieron en látigo.
-Cuando hicieron su desmadre ¿a dónde fueron a encontrar la patrulla de la Policía Municipal?.
-En la colonia (inaudible).
-Qué color es el portón?
-Negro
-Qué color es la casa?
-Blanca
-¿Desde cuándo están operando en Chilpancingo con policías falsos?
-Como dos meses.
-¿Tú perteneces al grupo de Los Rojos junto con El Japo?.
-Con El Japo trabajo
-Unas lonas que aparecieron para aparentar en la capital, ¿quién las puso y quién les dio la orden?
-El Japo, y yo las puse
Al video se anexa un texto que refiere que los “falsos” policías municipales que circulan en tres patrullas clonadas trabajan para Los Rojos o Los Jefes.
Del 23 al 31 de diciembre desaparecieron en la capital siete jóvenes, algunos de ellos fueron levantados por policías municipales según videos que entregó el empresario Pioquinto Damián Huato a la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
De los siete, dos de ellos, Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Eduardo Catalán, Cabrera fueron ejecutados y hallados casi a la medianoche del 3 de enero, tres más fueron encontrados torturados pero con vida la mañana de ese mismo día en un terreno baldío a un costado del Palacio de Gobierno, y dos más, Efraín Patrón y Abel Aguilar siguen desaparecidos.
A más de un mes sólo un policía municipal ha sido vinculado a proceso por homicidio de Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Eduardo Catalán.

 

 

Media hora de balacera en Chichihualco en la que murió un policía federal y quedaron dos heridos

Media hora de balacera terminó la noche del martes con la tranquilidad de los habitantes de Chichihualco, cabecera del municipio de Leonardo Bravo, en donde policías federales fueron atacados por integrantes de un grupo de la delincuencia organizada y de allí devino un enfrentamiento que dejó un agente muerto, dos heridos y una camioneta particular incendiada.
La violencia que se desató en este pueblo repercutió en la capital, en donde esa misma noche cinco vehículos fueron incendiados en diferentes puntos.
Según el vocero en materia de seguridad del gobierno del estado, Roberto Álvarez Heredia, con estos hechos la delincuencia organizada pretendió establecer un “distractor” para el Ejército y las fuerzas federales y estatales que se trasladaban a reforzar a los policías federales atacados en Chichihualco.
A pesar de estos hechos, el alcalde panista de Leonardo Bravo, Alfredo Alarcón Rodríguez, entrevistado en su despacho de la Presidencia Municipal, concibió a Chichihualco como un pueblo “tranquilo” y dijo que la balacera del martes es un hecho “aislado”, pero su opinión contrasta con la de los vecinos donde ocurrió el enfrentamiento, que declararon que en los últimos meses han visto la presencia de hombres armados que los intranquilizan y que la violencia del martes ya la veían venir.
El enfrentamiento ocurrió aproximadamente a las 8 y media de la noche en la colonia Amacochtli, en la entrada del pueblo, a un costado del mercado municipal y a un kilómetro y medio del Zócalo, donde se encuentra el Palacio Municipal.
Según los vecinos los primeros disparos se escucharon en la tienda Súper Mini Depósito en donde minutos antes habían visto a los policías federales, por lo que suponen que los atacantes llegaron allí a agredirlos. Después ya nadie supo lo que pasó, todos los ciudadanos consultados dijeron que se refugiaron en sus casas y que sólo escucharon la nutrida balacera que se extendió por calles vecinas y duró casi media hora.
La mañana de ayer, uno de los vecinos mostró el lugar donde quedó el policía federal abatido, frente a la tienda donde comenzó la balacera. Sin embargo dijo que todos pensaron que se lo trajeron a Chilpancingo vivo porque fue trasladado en una ambulancia.
La fachada del Mini Depósito tenía varios impactos de bala y todavía había algunos casquillos percutidos tirados en el pavimento. Asimismo, a unos 15 metros, orillada en una calle, aún se encontraba una camioneta Nissan doble cabina totalmente incendiada.
En la zona aún había ayer varias patrullas de la Policía Federal y de la Fuerza Estatal con elementos resguardando el sitio, mientras que decenas de agentes en 10 patrullas realizaban recorridos por toda la cabecera municipal y al medio día se vio sobrevolar la población un helicóptero del Ejército mexicano.
En la entrada al pueblo, en donde están las primeras casas, policías federales a bordo de tres patrullas instalaron un filtro y revisaban los vehículos que salían. Otro filtro se instaló en la salida de Chilpancingo por la desviación a esa cabecera municipal, mientras que por la carretera se vio transitar varias patrullas de policías federales y estatales.
“La verdad estuvo feo, yo, escuchando los primeros balazos me metí a mi casa con mi familia a escondernos y ya no volvimos a salir hasta después de que se oyó que había terminado todo”, dijo un comerciante ubicado a la orilla de la calle principal.
Explicó que por las prisas olvidó cerrar su negocio y que cuando casi a media noche salió vio a policías federales que andaban adentro, supone que buscando a quienes les dispararon a sus compañeros.
Otro vecino contó que escuchó que la balacera tardó como media hora y que los policías federales recibieron refuerzos aproximadamente una hora después. Dijo que también vio que llegaron militares y policías estatales.
Un comerciante del mercado municipal informó que a esa hora él ya había cerrado su local y se encontraba en su casa que se encuentra al otro extremo de la población, pero que desde allá oyó los balazos y que pudo escuchar con nitidez dos explosiones, “la primera creo que fue un granadazo y la segunda debió haber sido la explosión del motor de la camioneta que quemaron”, dijo.
Agregó que este miércoles por la mañana algunos vecinos le contaron que la balacera se escuchó en la colonia Amacochtli, pero también en La Piedra, que se encuentra también junto al mercado y a la gasolinera.
El pánico se percibió todavía ayer en la gente no sólo de estas dos colonias, sino en toda la población. Sus calles estuvieron solitarias, vacías, y sólo en el centro se vio a los comerciantes y a algunos vecinos realizar sus actividades aparentemente con la normalidad.
Por su parte, el presidente municipal Alarcón Rodríguez declaró que la violencia que ocurrió la noche del martes en esta cabecera municipal es porque el municipio no es ajeno al problema de la violencia que se vive en el estado y en el país.
Aseguró que desde que se escucharon los primeros balazos se mantuvo atento en su oficina del Palacio Municipal y que estuvo informando constantemente a Gobernación del estado y al gobierno federal de los acontecimientos. Explicó que la situación se tranquilizó “ya a altas horas de la noche”.
Destacó que en el municipio contó de inmediato con el apoyo de las fuerzas federales, como el Ejército, Policía Federal y Estatal que se encuentran todavía resguardando el pueblo.
“Como ven ustedes, ahorita ya reina la tranquilidad, todo mundo trabaja con normalidad hasta la gente que se va al campo, y si no hay clases es porque ya hay vacaciones en las escuelas y como ven, nuestro Ayuntamiento está trabajando con toda normalidad”, declaró.
Informó que el director de Seguridad del municipio le reportó que los resultados del enfrentamiento fueron dos heridos y un deceso. En cuanto al grupo atacante, dijo que lo único que le reportaron es que fueron civiles armados. “Yo no les puedo decir otra cosa porque aquí ha estado tranquilo mi pueblo”, insistió.
Alfredo Alarcón Rodríguez aseguró que en los dos años que lleva la administración no había habido problemas, “hoy nos extrañó que sucediera ayer ese incidente, pero ustedes lo pueden constatar, vean que sigue estando tranquilo”.
Para el alcalde panista, el enfrentamiento es un hecho aislado en este municipio, “ustedes saben, las noticias de inmediato corren cuando un lugar está constantemente en conflicto, pero aquí no se había suscitado nada de esto”, insistió.
Pero un comerciante contó que desde hace varias semanas están viendo gente desconocida y armada en el pueblo, lo que ha intranquilizado a los vecinos. Incluso dijo que la violencia que detonó la noche del martes ya se veía venir, y anunció que los comerciantes pedirán la presencia permanente de las fuerzas federales y estatales.
Asimismo, apenas el 1º de julio, en la comunidad de Iyotla, a media hora de la cabecera municipal, elementos del Ejército y la Policía Estatal, decomisaron 10 vehículos de lujo, uno de ellos blindado, cuatro fusiles de asalto, dos lanzagranadas, dos granadas, aproximadamente mil cartuchos útiles de diferentes calibres. Asimismo 40 playeras con el logotipo de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y unos 200 gramos de mariguana.
En abril pasado, agentes federales detuvieron también entre Iyotla y Carrizal de Bravo a cuatro hombres en posesión de mariguana, cargadores y cartuchos de uso exclusivo de las fuerzas armadas, y de una cachorra de jaguar.
Oficialmente ninguna autoridad ha informado a qué grupo o cartel pertenecen los que participaron en el enfrentamiento con los federales la noche del martes. El vocero Álvarez Heredia dijo que las investigaciones están a cargo de la PGR, que integró la carpeta de investigación.
Sin embargo, fuentes policiacas aseguraron que fueron sicarios del Cartel del Sur que encabeza en la sierra Isaac Navarrete Celis, conocido como El Señor de la I.

Los vehículos quemados en Chilpancingo

El vocero Álvarez Heredia informó que esos hechos de violencia repercutieron en la capital en donde en el transcurso de esa misma noche cinco vehículos fueron incendiados en diferentes puntos. Dijo que con estos hechos los delincuentes pretendieron poner un “distractor” para las fuerzas federales y estatales que iban en apoyo de los agentes atacados en Chichihualco.
El vocero declaró que los cinco vehículos fueron incendiados por sujetos armados y que estas acciones estuvieron dirigidas por células delictivas que operan en la capital.
“Simultáneamente en el servicio de emergencias 911 se empezaron a recibir llamadas que alertaban de vehículos incendiados y disparos por armas de fuego en varios lugares, a manera de distractores”, dijo el funcionario.
En el transcurso de la noche fue incendiado un vehículo particular placas HCB5159, en la calle Álvaro Obregón de la colonia Ignacio Manuel Altamirano. También fue incendiado un vehículo Nissan tipo Tsuru del servicio público con número económico 267, placas 1084FFL, sobre el Bulevar Vicente Guerrero frente a la colonia Lázaro Cárdenas.
Otro vehículo incendiado fue un Nissan tipo Sentra, número económico 780 del servicio público. El taxi llevaba varios días estacionado y chocado en el Bulevar Vicente Guerrero, cerca del entronque a Chichihualco.
También le prendieron fuego a una camioneta de redilas en la colonia San Juan, ubicada frente a la terminal de autobuses. De la camioneta no se conocieron mayores características.
Otro vehículo fue un marca Nissan tipo Tsuru, del servicio público, número económico 436, en la colonia Omiltemi. En ninguno de los lugares donde se hallaron los vehículos hubo personas asesinadas, confirmó Álvarez Heredia.

Son “grilla” las acusaciones del FUSDEG, dice Bruno Plácido y no responde a los señalamientos

El promotor de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio llamó a que las autoridades lo investiguen ante las acusaciones que hizo en su contra el coordinador del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), Salvador Alanís Trujillo con respecto a su presunta alianza con el Cártel del Sur y Los Ardillos para controlar el corredor de Petaquillas a Xaltianguis.
Consultado vía telefónica, el dirigente de la UPOEG dijo que las acusaciones del coordinador del FUSDEG son “grilla”, y no quiso responder a los señalamientos en su contra, pues dijo que él está trabajando por la seguridad y el desarrollo de los pueblos donde tiene presencia la UPOEG, y que contestar a los señalamientos que le hacen es “perder el tiempo”.
En la última entrega que se publicó ayer en éstas páginas sobre la toma del control del grupo criminal de Los Ardillos en Petaquillas, que es la puerta a la capital del estado, y la división del FUSDEG y la UPOEG que trajo como consecuencia el desplazamiento del Frente del corredor Petaquillas-Xaltianguis, con excepción de Tierra Colorada, Salvador Alanís acusó al dirigente de la UPOEG de tener vínculos con el grupo criminal del Cártel del Sur y Los Ardillos.
Alanís Trujillo dijo en la entrevista para El Sur que la Policía Ciudadana de la UPOEG fue un engaño y que ya traía acuerdos con gente de cárteles “que iban a meter un cártel para sacar a otro” en ese corredor; además de que recibió de Juan Jaleaco Guevara, el líder del Cártel del Sur, 4 millones de pesos para que llevara 300 gentes, “entonces Bruno ahí es donde entra a la sierra y le hace el paro a Juan Jaleaco para sacar (de la Sierra) a los de la A (Ángel Arellano Villalobos); entonces, desde 2014 ellos pactaron ese acuerdo, y sí, empiezan a avanzar y a sacar a todos los que ya habían entrado del lado contrario”, aseguró Alanís Trujillo.
“No tengo nada que contestar contra alguien que sólo se basa en sospechas y no es la primera vez que dice cosas, por eso yo no tengo nada que decir de este tipo”, dijo al respecto Plácido Valerio.
Declaró que él trae un objetivo concreto, organizar a la población para la seguridad “y lo que se diga, que si soy narco, que si estoy vinculado, que lo compruebe ante la PGR (Procuraduría General de la República), ante quien él quiera, porque ya no podemos caer en una declaración de medios”, respondió enfadado.
Y se quejó: “ustedes también tienen que ser un instrumento para difundir cosas más positivas en las condiciones como está Guerrero, porque unos estamos viendo la forma de cómo resolver los problemas de tanto muerto que hay, y los medios hablando de estas cosas”.
–Pero en los hechos, ustedes, la UPOEG, tienen el control en el corredor Ocotito Xaltianguis, –insistió el reportero.
–No, no es control, allí estamos buscando alternativas a los conflictos. Pero yo no puedo contestarle a él, porque voy a perder mucho tiempo cuando los problemas están y rebasan todos los límites, y hay que ponerles atención. Entre todos tenemos que ver cómo hacerle.
Después, dijo que, “caer en la contestación nomás por contestar, es amarrar navajas sin fundamento”.
–No se trata de amarrar navajas, te buscamos porque es una acusación grave en tu contra.
–Sí, pero no puedo dar una contestación a este tipo, pues.
–¿Entonces, todo que quede así?
–No, sí, que él diga lo que quiera y que las autoridades nos investiguen, que hagan lo que tengan que hacer. Ya estamos cansados de tanta grilla y de esas cosas. No hay tiempo para la grilla, hay que ser más propositivos.

Bloquean vecinos la carretera a Filo Mayor; protestan por el asesinato de las autoridades

La muerte de autoridades comunitarias de Polixtepec, comunidad de la sierra de Leonardo Bravo, evidenció un conflicto entre comunidades que venden la planta de amapola a dos grupos de narcotraficantes en la misma zona.
La Unión de Comisarios por la Paz y el Desarrollo del Estado de Guerrero denunció que en una emboscada fueron asesinados el comisario y el secretario municipal de Polixtepec, Joaquín Romero Ríos y Víctor González Luna, cuando se dirigía a comprar gasolina en garrafones a la comunidad de Campo de Aviación en una camioneta particular, el jueves por la tarde.
En protesta, vecinos de distintas localidades bloquearon ayer durante seis horas la carretera a Filo Mayor, en el poblado de Campo de Aviación, a poca distancia de Filo de Caballos y a una hora de la capital. Responsabilizaron del ataque a los hermanos Ángel y Efraín Villalobos Arrellano, originarios de la misma localidad, Polixtepec.
Los acusaron también de robos y secuestros en los pueblos, y señalaron al gobierno de ser su protector porque los hermanos llegaron con más de 70 sicarios a los pueblos hace tres semanas, y en la 35 Zona Militar no hicieron nada para detenerlos.
Por separado, en una llamada a la redacción de El Sur una mujer que se identificó como familiar de los fallecidos, aseguró que los homicidios fueron perpetrados por vecinos de Filo de Caballos que trabajan con el Cartel del Sur, que controla la plaza de Chilpancingo.
Reconoció que Polixtepec es el único pueblo que vende la planta a un grupo distinto del que se los compra a las demás localidades; añadió que todos en los pueblos “viven del ganado y de la planta; y quienes digan que no, están mintiendo”.
La Sierra, ahora octava región económica del estado, por años ha sido estigmatizada a causa de la producción de estupefacientes.
Ayer por la mañana, la Unión de Comisarios por la Paz y el Desarrollo del Estado de Guerrero denunció el homicidio de las autoridades de Polixtepec, y advirtió que es una amenaza para los 40 comisarios de los pueblos que participan en la organización.
Bloquearon de las 9 de la mañana a las 3 de la tarde el paso de la carretera de Filo Mayor, rumbo al municipio de Tlacotepec, para exigir a los tres órdenes de gobierno, garantías de seguridad para las autoridades y los pobladores. Advirtieron que hoy continuarán el bloqueo, si las autoridades no atienden el conflicto.
Recordaron que la organización surgió hace dos años por distintos hechos de violencia, y los homicidios del comisario y su secretario ponen de nuevo en alerta al movimiento. Entonces, se integraron al proyecto de la Policía Rural que impulsó el exgobernador, Ángel Aguirre Rivero, para regular a las policías comunitarias.
Informaron que la Unión de Comisarios por la Paz y el Desarrollo del Estado de Guerrero incluye a 40 pueblos de la sierra, de los cuales 22 tiene Policía Estatal Rural y 18 sólo policías comunitarios.
En este marco, se han reunido con distintas autoridades de gobierno para hablar sobre inseguridad, empleo y proyectos productivos para las familias.
Sin embargo, a pesar de las constancias de acuerdos, reprocharon la inoperancia de las autoridades, “ya que este lamentable suceso fue perpetrado a unos metros de una base del Ejército”.
La emboscada a las autoridades comunitarias ocurrió en una carretera de curvas rastreada, sin pavimentar, entre la localidad de Polixtepec y Puentecillas, una desviación de la carretera de Filo Mayor, en Filo de Caballos.
Los comisarios aseguraron que continuarán en el plantón en Campo de Aviación hasta que las autoridades los escuchen y garanticen su seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
Al anochecer, en la redacción se recibió una llamada de una mujer que se identificó como familiar del comisario, para negar la acusación contra los hermanos Villalobos Arrellano.
Aclaró que cuando ocurrió la emboscada contra el comisario y el secretario, hablaron a la Fiscalía General del Estado para que levantara los cuerpos e hiciera la investigación, y les dieron un teléfono del poblado de Filo de Caballos, que es de una casa particular.
Insistieron ante las autoridades en Chilpancingo, y en la noche, los mismos familiares se llevaron los cuerpos.