A casi dos años de su creación, fue desarticulado el FUSDEG; sólo mantiene un bloque de resistencia en Tierra Colorada

Antes de cumplir dos años de su presentación pública en el valle de El Ocotito, municipio de Chilpancingo, el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) fue básicamente desarticulado y sus representantes obligados a buscar refugio; ahora Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero es donde mantienen un bloque de resistencia ante el avasalle de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), grupo del que es una escisión.
La salida de la organización civil que brindaba seguridad y justicia en comunidades de Chilpancingo no fue tersa. Hubo confrontaciones verbales, a golpes y a balazos que dejaron nueve muertos relacionados con la confrontación con la UPOEG por el control del territorio, que incluye uno de los corredores de droga más importantes de Guerrero: la carretera federal Acapulco-Tierra Colorada.
Pero los enfrentamientos y asesinatos tienen su antecedente en 2015, después de la separación de varios grupos de la Policía Ciudadana de la UPOEG quienes conformaron el FUSDEG, debido a presuntos malos manejos y la falta de rendición de cuentas de los coordinadores provenientes de Costa Chica, sobre lo incautado a presuntos narcotraficantes a la llegada del grupo del dirigente Bruno Plácido Valerio al valle.
La UPOEG comenzó a operar en el valle de El Ocotito porque fue llamada por los vecinos para contrarrestar los asesinatos, secuestros, extorsiones y el cobro de piso.
Los registros periodísticos dan cuenta de 26 muertos del FUSDEG y dos de la UPOEG en 2015, pero el mayor número de víctimas ocurrió en el enfrentamiento de dos grupos del FUSDEG en Xolapa, municipio de Acapulco, con 16 muertos. Por ese evento, el FUSDEG se retiró del Acapulco rural y la UPOEG se volvió a posicionar en algunas comunidades del municipio porteño.

Ataques y enfrentamientos

En 2016 el FUSDEG perdió espacios en Petaquillas a partir del conflicto político de la elección de comisario que arrastraba de 2015, y en la comunidad El Ocotito, con el surgimiento de un grupo disidente de policías comunitarios en febrero que habrían sido expulsados en asamblea de la organización.
En medio de estos conflictos el 17 de abril fue asesinado Edilberto Santiago, hermano de un fundador del FUSDEG de Tierra Colorada, Romualdo Santiago. Sus familiares denunciaron que fue emboscado por integrantes de la UPOEG en el camino hacia la comunidad de San Juan del Reparo en el municipio Juan R. Escudero, donde era coordinador del grupo de la Policía Comunitaria.
El antecedente de este homicidio es la agresión del 30 de marzo de 2015 en el crucero de San Juan del Reparo, cuando los grupos se enfrentaron con un saldo de 12 muertos: 10 del FUSDEG y dos de la UPOEG.
El 16 de octubre fue asesinado a balazos el comandante del FUSDEG en Petaquillas, José Julio Alarcón Astudillo cuando iba a estacionar una Urvan de la ruta Chilpancingo-Petaquillas, donde trabajaba como chofer, a pleno día y en el centro de Chilpancingo.
El alcalde de la capital, Marco Antonio Leyva Mena atribuyó el homicidio al conflicto interno de Petaquillas por el control de la Comisaría, ya que la autoridad constitucional de la que dependen las policías comunitarias es el comisario, y el respaldo y legitimidad la otorgan las asambleas. Así que quien tiene al comisario tiene el mando de la Policía Comunitaria.
El 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero ocurrió otro ataque con un saldo de siete hombres muertos. De los hechos el secretario de Seguridad Pública del estado, Pedro Almazán Cervantes dijo que “ocurrió a las 4:30 de la madrugada a 2 kilómetros del poblado de Tlayolapa, en donde perdieron la vida al menos seis personas de esa organización y uno más del FUSDEG”.
Según Plácido Valerio los muertos de la UPOEG en Tlayolapa eran originarios de Ayutla y Tecoanapa, enviados a apoyar acciones de seguridad en el municipio de Chilpancingo, fueron atacados cuando regresaban a sus comunidades (en el cambio de guardia), iban por un camino distinto a la carretera federal donde generalmente hay un retén militar que impide el paso de grupos de civiles armados.
El comandante del FUSDEG de Tierra Colorada, Maximino Alejo aseguró que esa madrugada la UPOEG se alistaba a tomar por asalto la cabecera municipal de Juan R. Escudero, y el FUSDEG estaba listo para impedir su paso, así que los grupos de Costa Chica regresaron sus pasos y se dirigieron a Tlayolapa, pero la población también había sido alertada.
A partir de este evento y dada la tensión entre los grupos, el gobierno del estado anunció que más de 200 policías estatales distribuidos en 25 patrullas, dos autobuses antimotines y uno de línea, iban a patrullar el territorio entre El Ocotito y Tierra Colorada, para evitar otro enfrentamiento.
Según los reportes oficiales se aglutinaban en defensa y ofensiva 200 integrantes de la UPOEG distribuidos en las comunidades del valle de El Ocotito: Buena Vista de la Salud y San Juan del Reparo, 350 del FUSDEG en Mohoneras, Tierra Colorada y Las Palmas sobre la carretera federal. En los dos bloques “hombres armados portaban armas exclusivas del Ejército, Fuerza Aérea y Armada Nacional”.
No obstante el despliegue policiaco, el 24 de noviembre grupos armados de la UPOEG intentaron tomar la cabecera municipal de Tierra Colorada y se suscitaron cuatro nuevos enfrentamientos en las inmediaciones de la población. Reporteros y agentes de gobierno desarmados quedaron en medio del fuego cruzado.
Resultó muerto el policía del FUSDEG Jesús Eloíso Contreras de 22 años. Se presume que su cuerpo fue levantado por el grupo contrario, porque no lo encontraron sus compañeros y familiares. Lo que cuenta del hecho del deceso era una fotografía tomada por reporteros. Sin embargo las autoridades y ambas organizaciones en disputa lo consideran desaparecido.
Al siguiente día el secretario general de Gobierno, Florencio Salazar Adame se reunió con los representantes de la UPOEG y del FUSDEG, y anunció un acuerdo para solucionar “el evento” del 24 de noviembre en Tierra Colorada: el repliegue de la UPOEG hacia la comunidad de Xolapa, municipio de Acapulco, y del FUSDEG a su base en Tierra Colorada, que la zona quedaría en resguardo de la Policía Estatal y una tregua del 28 de noviembre de este año al 15 de enero de 2017, para no afectar el flujo de turistas, en las fechas decembrinas.
Para el 20 de diciembre el gobernador Héctor Astudillo anunció el reforzamiento de la seguridad en la zona, con cinco retenes más de policías estatales, así como la integración de una comisión paritaria para arreglar el conflicto y la búsqueda de dos desaparecidos.

El territorio

La versión extraoficial más extendida de este conflicto es la búsqueda del control del territorio por su importancia en el trasiego de droga.
La banda de narcotraficantes Los Ardillos que tiene sede en Tlanicuilulco, municipio de Quechultenango, en la zona centro del estado y que disputa Chilapa a Los Rojos, habría buscado recuperar el paso obligado hacia Chilpancingo por Petaquillas. En tanto, el cártel de la Sierra (de nueva creación), habría buscado infiltrar a los grupos de El Ocotito (UPOEG) para tener el control en los pueblos del valle.
De finales de 2015 a agosto de 2016, hay registros de conflictos en Petaquillas y El Ocotito por el control de las comisarías municipales que llevó a enfrentamientos verbales, jaloneos, amagos con armas y detenidos de los grupos de la comunidad confrontados por el control de la Comisaría municipal, cuando el FUSDEG perdió las dos comisarías e intentó mantener la organización de seguridad en la zona.
El 15 de enero el Ayuntamiento emitió la convocatoria para la elección de comisario de Petaquillas, a fin de terminar un conflicto político de los dos grupos. El 18 de enero resultó electo Mario Flores, a quien el FUSDEG acusó de vínculos con la delincuencia, pero en agosto fue ratificado en una asamblea. En tanto operaron dos policías comunitarias, la del FUSDEG y la del comisario vinculado a la UPOEG.
La situación se complicó en octubre debido al asesinato del comandante del FUSDEG de Petaquillas en Chilpancingo, y el comisario Flores Castrejón reconoció que buscó asesoría de la UPOEG “para saber cómo resolver el conflicto y tener mayor seguridad en el pueblo”, dado que el grupo contrario quería detenerlo acusado del homicidio.
El 10 de septiembre hubo una confrontación verbal, golpes y amagos de rifles de asalto de ambos grupos porque los policías del comisario Mario Flores Castrejón desarmaron a policías comunitarios del FUSDEG, del incidente resultaron seis heridos y ocho retenidos. Continuó el diálogo con el Ayuntamiento y el repliegue total de la organización de seguridad. A la fecha la Policía Comunitaria de Petaquillas se deslindó de las dos organizaciones y mantiene retenes con hombres armados en su territorio.
En enero también hubo elecciones de comisario en El Ocotito que ganó el candidato contrario al FUSDEG, Audifred Benítez. En febrero la autoridad cobijó a un nuevo grupo de policías comunitarios separado del FUSDEG que se alió con algunos grupos de la UPOEG que seguían operando en el valle de forma discreta, sin la cobertura de los medios.
Recibieron apoyo los grupos de Ayutla y Tecoanapa y en octubre ocurrió el enfrentamiento de Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero, paso obligado para llegar de la Costa a la zona Centro. También había ocurrido la confrontación en Petaquillas, donde sólo hubo amagos y golpes y ante este ambiente tenso el comisario denunció amenazas, se declaró incompetente para solucionar el conflicto e informó que tendría que huir de la población.
Mientras, el coordinador de la policía del FUSDEG en El Ocotito, Salvador Alanís denunció una alianza de Plácido Valerio con el diputado local del PRD, Sebastián de la Rosa Peláez y el cartel del Sur para destruir a la organización.
Afirmó que José Deivid Barrientos, conocido como El Carioca, separado de las filas del FUSDEG con el comisario Audifred Benítez Visoso y el comisario de Petaquillas Mario Flores Castrejón, eran financiados por el diputado para poner a las comunidades del valle y del corredor de Acapulco a Tierra Colorada en su contra.
Para el 7 de noviembre policías de la UPOEG ocuparon la comandancia del FUSDEG en El Ocotito, aún con la vigilancia de patrullas de la Policía Estatal, mientras los integrantes de la organización se replegaron a Tierra Colorada. No hubo inventario de lo hallado en la comandancia porque no hubo autoridades municipales para dar constancia.
El alcalde de Chilpancingo reconoció que intervino porque juntas, las organizaciones suman más de 600 hombres armados y el Ayuntamiento sólo tiene 119 policías. Versiones de los vecinos señalaron que había un calabozo, droga y personas detenidas en el inmueble.
Los principales líderes del FUSDEG de El Ocotito huyeron con sus familias, otros pidieron refugio en Juan R. Escudero, el municipio donde mantiene presencia. Aunque algunos grupos se han manifestado en apoyo a la organización, otro sector se pronunció por el retiro de las dos organizaciones armadas.

La alimentación es crucial para llevar la paz a los pueblos azotados por la violencia, afirman

La seguridad alimentaria es un recurso indispensable para reconstruir el tejido social y ofrecer la paz en las comunidades donde la violencia se ha empoderado, esto fue lo expuesto en un taller hecho en la comunidad de Palo Gordo, municipio de Juan R Escudero (Tierra Colorada). Por la tarde de este jueves en Tierra Colorada, se hizo el primer Festival por la Paz en Guerrero y fue organizado por el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), ahí se impartieron talleres a las familias campesinas.
“La violencia encuentra un caldo de cultivo en las zonas pobres donde las personas no tienen mucho que perder y no hay un futuro para ellos”,  subrayó el participante del Frente Nacional para el Desarrollo Emiliano Zapata, Eric Castillo.
Bajo un árbol de tamarindo, Eric Castillo dijo que se ha constatado que la violencia es una constante en los municipios donde las familias son más pobres, y donde le gobierno no ha podido dar una seguridad económica a las familias.
Uno de los talleres organizados consistía en la capacitación para la producción de setas, así como cultivos de hortalizas de traspatio y animales de corral, que tenía el propósito de crear una estabilidad alimentaria.
Palo Gordo es una comunidad que se encuentra a escasos 10 minutos de la cabecera municipal de Juan R Escudero, la entrada está sobre la carretera federal México- Acapulco y cuenta con algunas calles pavimentadas.
La propuesta de la organización es dotar a las familias de escasos recursos de la seguridad alimentaria ya que al tener comida como primera demanda de estabilidad se evita que caigan en actividades relacionadas con algo ilícito.
El participante subrayó que para promover la paz en las comunidades con incidentes violentos se debe de promover la solución básica de la alimentación, por ello se les da las herramientas para producir sus propias hortalizas.
“Nosotros como organización trabajamos en 22 estados y lo que nos hemos dado cuenta es que en las comunidades pobres de Durango, Veracruz, Michoacán y Guerrero son las más violentas.
Reiteró que al intención de la organización junto con el FUSDEG es promover el desarrollo de las comunidades con mecanismos que den solución a seguridad, equidad de género y seguridad alimentaria.
“No se trata de sólo pedir que todo se serene y se vean las cosas con objetividad y coherencia, sino también sabiendo que las comunidades tienen muchas carencias, que las llevan a tomar decisiones y salidas desesperadas para solucionar su problema”, agregó.
Insistió en que no se trata de dictar leyes sino de “atacar de raíz” las carencias a las que se enfrentan diariamente los pobladores de cada comunidad, y la raíz de problema es la marginación y su pobreza.
Detalló que el proyecto diseñado para esta comunidad consiste en un primer paso la capacitación para atender el problema de la alimentación, la segunda es acercarlos a la cultura, no desde una postura de llevarle espectáculos, sino que ellos mismos generen esa cultura y la compartan en su comunidad.
El comisario de Palo Gordo, José Peñaloza Villa subrayó que ante la falta de atención por parte de las autoridades federales y estatales en proporcionar la paz necesaria para las comunidades que han sufrido de violencia por parte de los grupos del crimen organizado, “no queda de otra que generarla nosotros mismos”.
“El gobierno no se molesta o se preocupa por realmente dar paz, no nos acerca los proyectos productivos, no evita que los jóvenes caigan en manos de la delincuencia”, agregó.
Insistió en que ante la falta del apoyo del Estado, los pueblos han determinado adquirir nuevos conocimientos que les ayuden a combatir  los problemas de servicios yde  primera necesidad.
“Nos han orillado a que andemos armados para dar seguridad a nuestras familias, nos han provocado el hambre al no darnos proyectos que nos den más que lo que sembramos”, sostuvo.
Dijo que con el proyecto de talleres se está incitando a que la población genere sus propios recursos para sobrevivir sin depender de alguien.
También se organizó una pequeña celebración musical como parte del festival organizado, con el objetivo de promover y mejorar las condiciones de la población.

Se reúnen por cuarta ocasión el FUSDEG, la UPOEG y el gobierno; no informan acuerdos

Sin dar detalles el gobierno del estado dio a conocer que se cumplió con la cuarta reunión entre representantes de las organizaciones Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y la Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) para solucionar la confrontación surgida desde hace un mes entre ambas organizaciones.
Este viernes se hizo en Casa Guerrero la cuarta reunión privada entre las dos organizaciones y por segunda vez participó el gobernador, Héctor Astudillo Flores, acompañado por el secretario general de Gobierno, Florencio Salazar, y el subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la misma dependencia,  David Augusto Sotelo Rosas.
Una hora después de la hora acordada fueron recibidos en la puerta tres de Casa Guerrero los representantes de cada organización, en esta ocasión no asistió el líder de la UPOEG, Bruno Plácido.
En la tercera reunión se acordó por parte del gobierno del estado y de las dos organizaciones que no se darían declaraciones a los medios de comunicación, y sólo sería por medio de Comunicación Social del gobierno del estado.
En un boletín de prensa de seis párrafos se explicó que “se revisaron avances de los acuerdos relativos a la seguridad de esas comunidades donde ambos grupos cuentan con injerencia y acerca de los avances para la localización de personas reportadas como desaparecidas en últimas fechas”.
Las autoridades del estado tampoco informaron como van las investigaciones de los dos integrantes de FUSDEG que ya cumplieron más de 15 días de desaparecidos.
En el comunicado se informó que el gobernador Héctor Astudillo manifestó a los dos grupos su interés por continuar el diálogo con un ambiente de armonía en las comunidades de Tierra Colorada municipio de Juan R Escudero y Ocotito, municipio de Chilpancingo.
En el mismo encuentro se recordó que el compromiso por llegar a acuerdos que logren el regreso de la paz a sus comunidades, mientras que la Policía Estatal apoya reforzando con al menos cinco retenes de seguridad en el municipio de Juan R Escudero.
En la segunda reunión hecha el 28 de noviembre se anunció extender su tregua hasta el 15 de enero, la integración de una comisión paritaria para arreglar el conflicto y la búsqueda de dos desaparecidos.
El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamientos armados.

Se pospone para hoy la reunión del FUSDEG y UPOEG con el gobernador

La reunión programada para este viernes entre los grupos del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y La Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) se pospuso debido a la agenda del gobernador, Héctor Astudillo Flores.
Este viernes se haría la tercera reunión entre las dos organizaciones para definir el método por el cual se decidirá que tipo de seguridad se le brindaría a los pobladores de Tierra Colorada, municipio de Juan R Escudero.
Integrantes de las dos organizaciones fueron notificados de la suspensión del encuentro el jueves por la noche, la reunión se reprogramó para este sábado a las 11 de la mañana en Casa Guerrero, con el gobernador Astudillo Flores.

Forman brigadas de vigilancia colonos de Tierra Colorada; no quieren al FUSDEG ni a la UPOEG

Vecinos de las colonias Lázaro Cárdenas y Ruffo Figueroa de Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero, conformaron brigadas de vigilancia vecinales tras la violencia provocada por grupos de autodefensa.
A las 7 de la noche en ambas colonias los vecinos se reunieron para acordar la instalación de puestos de vigilancia en las entradas principales de cada lugar.
En la Lázaro Cárdenas cerraron las calles que rodean la colonia para dejar sólo el acceso principal de la avenida Xochimilco, para tener una mejor vigilancia y evitar el ingreso de personas ajenas.
Un representante de la colonia informó que lo que buscan es crear seguridad, sin el respaldo de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) ni del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) que están en constantes enfrentamientos.
Mediante una llamada detalló que las brigadas conformadas en la noche de este jueves, se acordó que no se armarían, ya que no buscan una confrontación, sino de manera pacífica detener la violencia.
“Nosotros a partir de hoy vamos a tomar la seguridad de nuestra colonia, nosotros nos deslindamos de ambas organizaciones, no queremos ni UPOEG ni FUSDEG, lo que queremos es nuestra propia seguridad”, agregó.
Detalló que en la colonia Lázaro Cárdenas viven 150 personas, que es de familias de migrantes y la mayoría vive en los Estados Unidos.
“150 personas están abalando la conformación de las brigadas de seguridad para la colonia”, puntualizó.
Detalló que se acordó que en las noches se cerrarán las calles secundarias de las colonias, para que la única vía de circulación sea la calle principal en caso de una emergencia.
Recordó que la decisión de conformar estas brigadas surgió ante la violencia provocada por las dos organizaciones, y que están cansados de los enfrentamientos y las muertes.
“Aquí no queremos armamento, no somos personas armadas, queremos puros civiles, somos una sociedad civil, somos personas pacíficas”, dijo y agregó que la idea de este movimiento es la prevención de los delitos.
Mencionó que antes de conformar estas brigadas se le planteó a los representantes de la Policía Estatal, pero no estaban en la base a donde les iban a entregar el documento.
“Notificamos al Mando Único del gobierno estatal, les llevamos el documento pero no estaba el jefe en turno y no nos recibieron el documento, pero les avisamos que nos haríamos cargo de nuestra seguridad”, relató.
La colonia Ruffo Figueroa se ubica frente a la Lázaro Cárdenas y está dividida por la carretera federal México-Acapulco, en esta colonia también hay brigadas de vigilancia en la entrada y durante la noche.

Acuerdan FUSDEG y UPOEG con el gobierno extender su tregua hasta el 15 de enero y arreglar el conflicto

En la segunda reunión con el gobierno del estado, el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) acordaron extender su tregua hasta el 15 de enero, la integración de una comisión paritaria para arreglar el conflicto y la búsqueda de dos desaparecidos.
La mañana de este lunes hubo una reunión de 7 horas en Casa Guerrero encabezada por el secretario general de Gobierno, Florencio Salazar Adame, en la que se abordaron tres temas y se acordó una segunda reunión para el próximo viernes en la que se fijaran las bases para determinar qué grupo de seguridad operará en el municipio de Juan R. Escudero, cuya cabecera es Tierra Colorada.
En un boletín de prensa el gobierno del Estado dice que como parte de la tregua se advirtió a las dos organizaciones que si sus militantes son sorprendidos portando armas, la Policía Estatal los desarmará.
El jueves pasado los dos grupos se enfrentaron a balazos en la comunidad de Plan de Lima, Tierra Colorada, ante la intención de la UPOEG de entrar a la cabecera municipal.
El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamientos armados, como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero, que dejó siete muertos.
El FUSDEG ya fue desplazado de Petaquillas y El Ocotito pero tiene presencia en Tierra Colorada, a donde el jueves intentó entrar la UPOEG con armas de grueso calibre.
El sábado el FUSDEG se declaró en alerta máxima ante la amenaza de la irrupción de la Policía Ciudadana de la UPOEG.
Ayer en la reunión también participaron el alcalde perredista de Juan R. Escudero, Leonel Leyva Muñoz, el presidente de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) Ramón Navarrete Magdaleno, el subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría General de Gobierno, José Martín Maldonado del Moral, y el subsecretario de Gobierno para Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos, David Augusto Sotelo Rosas.
A las 10:35 de la mañana ingresó el líder de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio a quien le notificó media hora antes el cambio de la sede de la reunión, por lo que se traslado del Auditorio Sentimientos de la Nación a Casa Guerrero.
Media hora después ingresaron por la puerta tres de la residencia oficial 20 delegados y el comisario del municipio de Tierra Colorada.
Para las 11:50 de la mañana llegó a la misma puerta el integrante del FUSDEG, Salvador Catalán Barragán a quien le impidieron el paso 20 minutos, lo que provocó su enojo y advirtió que se retiraría del lugar provocando que se rompiera el diálogo.
Tras varias llamadas salió el subsecretario de Asuntos Políticos, quien reconoció a los integrantes del FUSDEG y autorizó el ingreso.
Tras 5 horas de reunión salió el vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia quien informó sobre la minuta de acuerdos entre los dos grupos.
Dijo que uno de los acuerdos es que la tregua entre los dos grupos se extiende hasta el 15 de enero debido a las fiestas decembrinas, así como la integración de la comisión para estudiar la inseguridad en la zona y evitar la confrontación.
Se habló de la desaparición de Inocencio Sánchez Ramírez de 60 años originario de Tlayolapa, quien no oye y no ve bien, y del policía comunitario Jesús Eloíso Contreras quien resultó herido de bala en el enfrentamiento armado el jueves, y se encuentra desaparecido.
Después de 7 horas el líder de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio dijo que no habrá ningún roce porque tiene “una disciplina del respeto” y que espera que el FUSDEG cumpla.
Insistió en que su organización no tiene intenciones de desplazar al FUSDEG, y subrayó que hay un conflicto en el que se perdió la esencia comunitaria, y que se cometieron abusos.
“Hay que revisar de ambos lados y el principio comunitario tiene que ver con asambleas municipales, por eso uno de los puntos de hoy es que se tiene que ir con el consenso de asamblea comunitaria de cada una de las comunidades, para que las policías tengan legitimidad y el consenso de los pueblos, no es un pleito al que nos aferremos, hay gente desde hace dos años en Tierra Colorada que quieren ingresar a sus comunidades y no se les permite”, describió.
Mencionó que se le ha señalado como jefe del grupo criminal Cártel del Sur, pidió que se le investigue y que se reconozca que desde hace años el gobierno federal generó esos conflictos, por lo que hoy hay comunidades que están pagando las consecuencias.
“En su momento tendrán que comparecer para aclarar esa situación, son muchos los desplazados qué hay de San Juan el Reparo, Chacalapa, esa parte. Como promotores de este proyecto comunitario desde hace veinte años tenemos bien claro el objetivo que es trabajar mediante asambleas con las comunidades, lógico que al caminar se encuentra uno con muchos intereses tanto políticos como de delincuentes, entonces empezamos a afectar y se nos empieza a señalar”, dijo.
Agregó que él no puede decir si es bueno o malo, ya que eso le corresponde a las autoridades investigar, ya que es “fácil acusarnos de estar metidos en la maña”, pero tiene derecho a ser investigado.
“He recibido bastantes amenazas, pero lo que buscamos es que si tenemos vínculos con la delincuencia que nos investiguen y no permitamos que llegue otra delincuencia, estoy abierto a que se me investigue”, insistió.
Por su parte la integrante del FUSDEG, Ruth Delgado Bahena explicó que se integró una comisión de cinco personas por cada grupo, las cuales estarán encargadas de establecer las bases para una consulta que defina qué método de seguridad se aplicará en Juan R. Escudero, se planteó que la reunión se celebrará el próximo viernes.
“Que se someta a escrutinio a nuestra organización para ver si tenemos el respaldo de la población”, pidió.
Indicó que la comisión definirá si se hace una consulta o no, ya que enfatizó que se trata de saber qué sistema de seguridad es el adecuado para el municipio, para salvaguardar la integridad de la población.
Comentó que el punto que abrió la mesa de diálogo fue la solicitud con vida de sus dos compañeros desaparecidos, así que la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Codehum le darán seguimiento al tema.
“Ellos lo niegan rotundamente, dicen que no los tienen y además la Fiscalía dice que no tiene ningún dato, que han hecho investigaciones y que no tienen ningún dato de la desaparición”, relató.
Insistió en que a pesar de establecer una tregua la organización no se siente segura, ya que el conflicto no se acaba hasta que se concluya la mesa de diálogo.
“Tenemos que platicar, resolver nuestras diferencias y tengamos claro que la prioridad es el bienestar de la comunidad, no de una u otra organización”, detalló.
Agregó que en esta segunda reunión los integrantes de la UPOEG se mostraron más mesurados, aunque la realidad demuestra que esa organización tiene rodeado al municipio.
Detalló que en la reunión se hablo también sobre la incursión de un grupo de la UPOEG durante el sábado por la tarde lo que provocó la alerta por parte de los pobladores del FUSDEG, “negaron que ellos hayan querido incursionar en Tierra Colorada”.
En un boletín de prensa el gobierno del estado confirmó los acuerdos revelados por los integrantes de las dos organizaciones, además de la permanencia de los filtros de la Policía Estatal en el crucero de Tierra Colorada, Los Arcos, el crucero de Michapa y Plan de los Vela en la localidad de La Palma.

 

Recorren simpatizantes del FUSDEG brechas de Tierra Colorada para evitar la entrada de la UPOEG

El municipio Juan R. Escudero está rodeado por la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) que tiene presencia en Tecoanapa, Acapulco y Chilpancingo, no obstante mujeres de la cabecera municipal aseguraron que no van a permitir que el grupo armado ingrese a sus tierras, en apoyo a la Policía Comunitaria del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), que opera en el municipio.
Ayer las mujeres recorrieron las parcelas y caminos cercanos al punto del último enfrentamiento de las dos organizaciones armadas, para buscar indicios de la presencia de los contrarios antes de ser sorprendidos, y encontraron huellas de botas tipo militar que estimaron, pueden ser de integrantes de la UPOEG.
Bajo la arboleda de una estas veredas denunciaron que el jueves en la última confrontación, la Policía Estatal abrió el paso a los hombres de la UPOEG hasta las inmediaciones de la cabecera municipal para que entraran a la población, como hicieron en El Ocotito, donde los grupos del FUSDEG ya fueron desplazados.
Afirmaron que en Tierra Colorada están dispuestas a morir luchando antes de permitir que la UPOEG “nos gobierne”. Recordaron que la UPOEG ya operó las acciones de seguridad y fueron despedidos del municipio.
En la comandancia el coordinador de la Policía Comunitaria del FUSDEG en Juan R Escudero, Maximino Alejo informó que grupos de la UPOEG ya se instalaron en el crucero de San Juan del Reparo, antes de Tecoanapa. En ese punto había una patrulla de la Policía Estatal desde el asesinato del hermano de uno de los fundadores del FUSDEG en Juan R Escudero, Romualdo Santiago Díaz (en abril de 2016), para evitar que algún grupo armado cruzara los límites. No obstante, ya hubo nuevas confrontaciones.
Al salir de Tierra Colorada hacia la capital por la carretera federal, se observó un policía estatal de guardia en la entrada de la población, y en el siguiente poblado y en Carrizal de la Vía policías de armados de la UPOEG sobre la vía de comunicación, frente al arco que marca la localidad perteneciente a Chilpancingo, así como en Mohoneras, Buena Vista y Acahuizotla.

Juan R. Escudero

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), el municipio sólo representa el .64 por ciento del territorio estatal, siete localidades concentran 73 por ciento de la población y colinda con municipios de tres diferentes regiones: al noreste con Mochitlán y Quechultenango, al noroeste Chilpancingo de la zona Centro, al oeste con Acapulco de Juárez, al sur con San Marcos y al sureste con Tecoanapa de la Costa Chica.
Su ubicación es estratégica porque es paso para las carreteras federal y de cuota México-Acapulco, y la desviación hacia Costa Chica que entronca con la carretera nacional Acapulco-Pinotepa Nacional.
La versión más extendida del conflicto entre los grupos armados es la disputa por el control de las vías de comunicación, que también representa un corredor de droga que se produce en la zona. El coordinador de la Policía Comunitaria del FUSDEG en Chilpancingo, Salvador Alanis, siempre sostuvo que la UPOEG quería disponer de este corredor y señaló al líder de esa organización, Bruno Plácido Valerio de tener vínculos con el crimen organizado.
Maximino Alejo de Juan R. Escudero denunció que la UPOEG se alió con un grupo delictivo de la sierra para desplazar al FUSDEG de Chilpancingo, en particular de El Ocotito.
Acusó al jefe de la Policía Ciudadana Deivid Barrientos, antes lugarteniente del FUSDEG en El Ocotito, de fracturar la estructura municipal, agruparse con la UPOEG en el valle de El Ocotito y aliarse con Plácido Valerio para derrotar a sus compañeros. En este marco, indicó que ocurrió la confrontación en Tlayolapa el 24 de octubre, con un saldo de siete muertos.
Recordó que la UPOEG cruzó los límites hacia Tierra Colorada, llevó grupos de policías ciudadanos de Costa Chica a una comunidad que se encuentra a 5 minutos de la cabecera municipal, rodeando los retenes de policías estatales del crucero de San Juan del reparo y de militares en Las Mesas.
En Tierra Colorada ya los esperaban parapetados los comunitarios del FUSDEG y los ciudadanos que los apoyan regresaron por el mismo camino que llegaron, a través de Michapa y La Estrella pero se desviaron en dirección a Xolapa, donde los comunitarios ya estaban alertados de su presencia.
El viernes ocurrió lo mismo. Señaló que la UPOEG quiso entrar armada al municipio pero los obligaron a retroceder, con una baja del FUSDEG.
Aclaró que los grupos de la Policía Ciudadana de la UPOEG de Ayutla les enviaron hace dos días un comunicado para aclarar que siguen organizados como UPOEG pero ya no responden a las ordenes de Plácido Valerio ni de su comandante Ernesto Gallardo. Lamentó que con engaños usen grupos de Tecoanapa para pelear por intereses que no son los del pueblo.
Por separado las mujeres denunciaron que el gobernador Héctor Astudillo protege a Plácido Valerio, así como el alcalde, si embargo aseguraron que no van a ceder ante los gobernantes, que nada han hecho por la seguridad de los ciudadanos.

 

Vigilan Tierra Colorada 500 policías estatales tras el enfrentamiento entre el FUSDEG y la UPOEG

Unos 500 policías estatales resguardan las entradas y salidas de Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero, luego de que el jueves se enfrentaron a balazos policías comunitarios del Frente Unido para la Seguridad y Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y policías ciudadanos de la Unión de Pueblo y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), que dejó un hombre muerto.
En un recorrido en la cabecera municipal de Tierra Colorada en la entrada de la carretera federal Acapulco-México cerca del entronque de la Autopista del Sol estaban unos 30 policías estatales apostados en esta zona, los agentes hacían revisiones a los automovilistas que transitaban y les informaban que tuvieran precaución por los hechos que ocurrieron en el lugar.
Asimismo en otro punto en la salida de Tierra Colorada con dirección a Chilpancingo por la carretera federal había unos 10 uniformados que resguardan la zona para impedir que entren los policías ciudadanos de la UPOEG que tienen presencia en El Ocotito que está a unos 30 minutos de Tierra Colorada.   
Un policía estatal informó que unos 500 policías estatales de las regiones de Acapulco, Costa Grande, Tierra Caliente y Centro llegaron la noche del jueves y que se dispersaron en la cabecera municipal para evitar que entraran los policías ciudadanos de la UPOEG para evitar otro enfrentamiento armado.
“Llegamos el jueves en la noche para evitar que ocurra otra balacera y estamos regados en las entradas y salidas de Tierra Colorada para que no entren los policías ciudadanos de la UPOEG para evitar otra balacera y realizamos revisión a los automovilistas y darles información que estén atentos en caso de que paso un enfrentamiento”, declaró.
El jueves, el policía comunitario del FUSDEG, Jesús Eloíso Contreras de 22 años fue asesinado por policías ciudadanos de la UPOEG en uno de los cuatro enfrentamientos en Tierra Colorada.
 El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en las comunidades Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamientos armados como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R Escudero, que dejó siete hombres muertos.
El FUSDEG ya fue desplazado de Petaquillas, El Ocotito y Xaltianguis pero tiene presencia en Tierra Colorada.

Condena la Codehum el ataque a periodistas en Tierra Colorada

La Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) reprobó los hechos de violencia en Tierra Colorada entre el FUSDEG y la UPOEG, y condenó el ataque a balazos a periodistas que quedaron en el fuego cruzado.
En un comunicado la Codehum señala que “son inconcebibles las expresiones de violencia entre el FUSDEG y la UPOEG, dos grupos que surgieron con la noble intención de brindar seguridad a la ciudadanía. La lucha que sostienen ambas agrupaciones armadas por el control de los territorios ha dejado a la población indefensa y en medio de dos fuegos cruzados”.
El presidente del organismo, Ramón Navarrete Magdaleno mantuvo comunicación permanente antes, durante y después del ataque contra los reporteros, asegura en el escrito.
Detalla que desde el primer momento, de su área de Comunicación Social Alondra García estuvo de manera permanente con los reporteros, los estuvo monitoreando.
Posteriormente el segundo visitador general, Fernando Esteban Ramírez se trasladó al lugar, sin embargo no pudo a donde se encontraban los reporteros, y sólo llegó a la comunidad de Garrapatas, a unos 40 minutos de recorrido, precisó Comunicación Social de la Codehum.
“La labor informativa realizada por los periodistas en la zona de riesgo resulta invaluable para conocer el contexto real del conflicto. Por ello, esta comisión exhorta a los tres niveles de gobierno a garantizar las condiciones de seguridad”, dice en el escrito. (Beatriz García / Chilpancingo).

Intenta la UPOEG entrar a Tierra Colorada, se enfrenta al FUSDEG y mata a un comunitario

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El policía comunitario del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), Jesús Eloíso Contreras de 22 años fue asesinado por policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en uno de los cuatro enfrentamientos de ayer en Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero.
El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en las comunidades Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamiento armados como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero, que dejó siete hombres muertos.
El FUSDEG ya fue desplazado de Petaquillas y El Ocotito pero tiene presencia en Tierra Colorada, a donde ayer intentó irrumpir la UPOEG con armas de grueso calibre.

En Plan de Lima, la primera
balacera

Según fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, a las 9:10 de la mañana reportaron un enfrentamiento entre los dos grupos en la comunidad de Plan de Lima, Tierra Colorada, sin embargo policías comunitarios informaron que fueron balazos al aire porque había tensión, ya que la UPOEG pretendía entrar a la cabecera municipal.
Ante la amenaza de irrupción de la Policía Ciudadana a Tierra Colorada, unos 100 policías comunitarios se desplegaron entre los cerros en las entradas y salidas a Acapulco y Chilpancingo para resguardar la cabecera municipal.
Después de las 11:40 de la mañana ocurrió un enfrentamiento armado en la entrada del entronque de Tierra Colorada y la Autopista del Sol, que duró más de una hora y media.
Un grupo de unos 10 policías comunitarios estaban dispersos en la loma de un cerro cerca del restaurante El Mexicano para contener al otro grupo, los comunitarios se refugiaron entre piedras y matorrales.
Mientras que unos 10 policías ciudadanos de la UPOEG a bordo de tres camionetas estaban en la entrada de la carretera federal México-Acapulco con dirección a la comunidad Papagayo.
Durante una hora y media se escucharon detonaciones de armas de fuego y cuatro patrullas de la Policía Federal de Caminos impidieron el paso de los automovilistas, particulares y del transporte público para que las personas no quedaran entre el fuego cruzado. Además había un helicóptero del gobierno estatal sobrevolando el lugar.
Cuando ocurrió este enfrentamiento armado, a las 12 del día, vecinos y promotores del FUSDEG bloquearon la carretera federal México-Acapulco frente a su comandancia en la colonia San José para impedir la entrada de la UPOEG, además sonaron las campanas de la Iglesia para que alertar a los vecinos.
En el bloqueo los pobladores impidieron el paso a los automovilistas como forma de presión para que las autoridades de los gobiernos del estado y federal intervinieran en el conflicto de los grupos de civiles armados.
Después de la 1:30 de la tarde terminó el segundo enfrentamiento, no se reportaron heridos ni muertos. Los policías comunitarios del FUSDEG se replegaron y cuidaron los límites de Tierra Colorada pero poco a poco los integrantes de la UPOEG se acercaron a la cabecera municipal.
A las 3:50 de la tarde comenzó otra balacera cerca de donde ocurrió el segundo enfrentamiento, más cerca a Tierra Colorada, donde fue asesinado el policía comunitario del FUSDEG Jesús Eloíso Contreras de 22 años, su cuerpo quedó tendido boca abajo en la carretera federal México-Acapulco cerca del entronque de Tierra Colorada.
Los policías ciudadanos de la UPOEG recogieron el cuerpo de la víctima y hasta las 12 de la noche se desconocía en dónde estaba.
El tercer enfrentamiento duró más de 20 minutos cuando los policías ciudadanos estaban más cerca de la cabecera municipal, en este hecho no había policías federales, estatales, ministeriales ni militares para resguardar la zona.

Reporteros y agentes de gobierno quedan en el fuego cruzado

Un grupo de 15 reporteros y agentes de gobierno infiltrados en el gremio quedaron atrapados en el fuego cruzado durante unos 20 minutos, cuando ocurrió el cuarto enfrentamiento entre los dos grupos, más cerca de la cabecera municipal.
Los comunicadores escucharon un balazo cerca del lugar donde se refugiaban en la orilla de la carretera federal México- Acapulco, se tiraron al suelo pecho a tierra a un lado de una camioneta para protegerse de las balas. Fue a las 4:10 de la tarde cuando comenzó este último enfrentamiento armado entre la UPOEG y el FUSDEG.
Los comunicadores que estaban tendidos en el suelo y junto a una camioneta blanca para refugiarse de las balas gritaban, “amigos nos vamos a mover, somos prensa no disparen, por favor confirmen”, “estamos en un fuego cruzado” y “la prensa se va mover”.
Algunos transmitieron en vivo mediante la red social Facebook. Después de 20 minutos, en un lapso de un minuto no se escucharon disparos y los reporteros corrieron unos 200 metros a refugiarse a sus vehículos para dirigirse a una zona más segura cerca de la cabecera municipal.
Cuando los trabajadores de los diferentes medios de comunicación llegaron a sus vehículos se escucharon otros balazos, parecía una agresión directa pero no se pudo determinar qué grupo era el que les disparaba.
Ahí el vehículo del agente de gobierno, al parecer de la Secretaría de Seguridad Pública, Miguel Rodríguez quien se presenta como fotógrafo de Expresión Popular, recibió dos impactos de bala en el medallón y dos en el techo del i10 Dodge Hyundai gris.

El bloqueo y la marcha de vecinos de Tierra Colorada

Unos 150 vecinos de Tierra Colorada bloquearon de manera intermitente la carretera federal México–Acapulco frente a la base comunitaria del FUSDEG en la colonia San José desde el mediodía, cuando se enteraron que había muerto uno de los policías comunitarios y que la UPOEG intentaba entrar a la cabecera municipal.
A las 4:30 de la tarde marcharon vecinos y otro grupo a bordo de un autobús fue a la entrada del crucero de la Autopista del Sol, donde ocurrió una de las balaceras, ahí bloquearon de manera intermitente y rescataron a un policía comunitario que estaba escondido en la loma de un cerro.
Después llegaron a donde estaba el cuerpo del comunitario caído pero el cadáver ya no se encontraba, “los policías de la UPOEG se llevaron el cuerpo del compañero que murió defendiendo su pueblo”, declaró un testigo.
Ante el nulo apoyo de los gobiernos municipal, estatal y federal y de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) los pobladores avanzaron otros 500 metros, y a las 6 de la tarde bloquearon un carril a la Autopista del Sol.
Los manifestantes estaban a unos 200 metros de 50 policías ciudadanos de la UPOEG en la carretera federal que se dirige a Acapulco.
Uno de los inconformes pidió “somos pueblo y si no hay condiciones nos vamos a armar, nosotros queremos paz y tranquilidad, la Policía Ciudadana que se vaya a Chilpancingo y a Acapulco para hacer limpieza”.
Comentó que están satisfechos con el FUSDEG, “estamos bien con los comunitarios, no queremos a Bruno Plácido Valerio (el dirigente de la UPOEG), para brindar seguridad que se vaya a otros lugares”.
Después de 8 horas de enfrentamientos armados entre la UPOEG y el FUSDEG llegaron unos 70 policías estatales al bloqueo para intervenir en el conflicto y resguardar la zona.
Llegó el subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría General de Gobierno, José Martín Maldonado del Moral y se reunió con los vecinos de Tierra Colorada que se manifestaron.
Una vecina que se reservó su nombre informó que los acuerdos fueron que hoy se reunirán integrantes del FUSDEG y la UPOEG en Palacio de Gobierno, además que los policías estatales pedirán a los policías ciudadanos de la UPOEG que se replieguen a Xolapa en Acapulco, y no invadan el territorio de Tierra Colorada donde opera el FUSDEG, para evitar otra confrontación.
A las 7:30 de la noche los inconformes se retiraron del bloqueo en la entrada de la Autopista del Sol en Tierra Colorada y se restableció la circulación vial, sin embargo los comunitarios del FUSDEG se quedaron desplegados en la cabecera municipal para evitar la entrada de la UPOEG.
La Policía Ciudadana de la UPOEG avanza poco a poco al territorio donde opera el FUSDEG, el 7 de noviembre policías ciudadanos y pobladores de El Ocotito tomaron la base de esa organización y ésta se replegó a Tierra Colorada.
Hace seis días policías ciudadanos de la UPOEG instalaron un retén en la salida de Xaltianguis hacia Tierra Colorada.
El lunes pobladores, comisarios municipales y autoridades agrarias de la comunidad de Xaltianguis y poblados cercanos, en una asamblea acordaron dejar las filas del FUSDEG y regresaron a la UPOEG.

No hay reportes de muertos en el enfrentamiento de Tierra Colorada, dice el vocero

El gobierno del estado mediante el vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia informó que no se tiene confirmada la muerte de un integrante del FUSDEG en el enfrentamiento.
Álvarez Heredia dijo que la única información sobre los hechos es que hubo un enfrentamiento y que no hay una postura del gobierno al respecto.

Suman 32 cuerpos y nueve cabezas humanas halladas en 20 fosas en un cerro de Zitlala;?termina la búsqueda

Después de tres días de excavaciones ayer finalizaron las diligencias en el cerro Tenanchitla, en Zitlala, donde peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) y trabajadores del Servicio Médico Forense (Semefo) hallaron 20 fosas clandestinas y en total exhumaron 32 cuerpos y nueve cabezas humanas.
El lunes la Fiscalía informó del hallazgo de cuatro cabezas humanas dentro de una hielera y 16 fosas clandestinas, una Suburban negra, un Tsuru blanco y una motocicleta Italika cerca del cerro Tenanchitla en este municipio.
Ayer el vocero de seguridad, Roberto Álvarez informó que el conteo final arrojó 20 fosas clandestinas y “sólo en 17” encontraron restos humanos, se recuperaron 32 cuerpos y nueve cabezas.
En un comunicado dice que fueron trasladados a Chilpancingo para las diligencias y su identificación y aunque las excavaciones terminaron, elementos del Ejército continuarán en la zona en busca de indicios para determinar si existen más fosas clandestinas en esa zona”.
“Hasta el momento ningún cuerpo ha sido identificado y no hay detenidos como probables responsables”, dice el vocero.
La FGE inició la carpeta de investigación 120401902200196211116 por homicidio en contra de quien resulte responsable.
El martes, las Bases de Operaciones Mixtas (BOM) de Chilapa que integran policías municipales, estatales, ministeriales y militares acudieron a esa zona al sureste y a dos horas de la cabecera municipal de Zitlala, para hacer las excavaciones y exhumar los cuerpos.
En la primera excavación exhumaron siete cuerpos, en la segunda otros cinco y ayer 20 más.