Reanudan soldados entrega de enseres en algunos módulos de la ciudad

Entrega de enseres domésticos afuera del centro acuático El Rollo, en la Costera Foto: Argenis Salmerón

Aurora Harrison

El sábado y domingo en algunos módulos de la ciudad se retomó la entrega de enseres domésticos, incluidas las estufas que faltaban, por parte del gobierno federal a damnificados de Acapulco por el huracán Otis.
Mientras que en el parque Papagayo, vecinos señalaron que tienen más de una semana que el Ejército no entrega los paquetes de enseres.
En el módulo ubicado en la avenida Costera, afuera del parque acuático El Rollo, se entregaron más de 100 paquetes de enseres a las personas que llevaban formadas desde hace más de una semana y que no se iban para no perder su lugar en la fila.
Ayer domingo la entrega empezó poco después de las 7 de la mañana comentaron personas que siguen haciendo fila en espera de que llegue su turno para recibir sus paquetes de enseres.
Se entregaron más de 100 paquetes de enseres, y a las 10 de la mañana ya no había ningún camión del Ejército ni camionetas de mudanzas. Los únicos que estaban son personas que llevan más de una semana esperando que llegue su turno.
Los damnificados están en la banqueta esperando sentados en sillones, banquitos, sillas y se cubren del sol con sombrillas, cartones, bolsas de plástico negras o pedazos de tela amarradas de los postes. La fila empieza a unos metros de la entrada del parque acuático y se extiende hasta antes de llegar a la playa.
El viernes por la noche el Ejército informó que se reinicia el Plan DN-IIIE, que los puntos de entrega son: Ciudad Renacimiento, Emiliano Zapata, Costera y Caletilla; que la entrega sería por orden alfabético, para personas que sus apellidos empiecen con las letras de la A a la letra G.
Tras el anuncio de que se reinicia la entrega, muchos vecinos acudieron a formarse al módulo del parque Papagayo para hacer guardias. Ayer domingo por la mañana había varias decenas de personas formadas en espera de que se retome la entrega, y es que dijeron que ahí lleva más de una semana sin entregar enseres.
Vecinos de Zapotillo, Palma Sola Santa Cruz, y del Módulo Social Fovissste comentaron que llevan más de 10 días esperando respuesta de las autoridades responsables de la entrega de los paquetes de enseres domésticos.
Uno de ellos contó que formaron un grupo y es ahí como se comunican, además de ponerse de acuerdo en los días en que les toca guardia, porque a pesar de que lleva varios días sin que se entregue en dicho lugar, las personas están cuidando su espacio, para que cuando se retome la entrega ser de los primeros.
La señora Evelia dijo que están por grupos, los primeros que están en la fila, después los que van en medio y los que se encuentran hasta el final. ayer en el lugar donde había cajas de cartón, plástico blanco con los que hicieron una casita para cubrirse del sol y de esa forma es que se va apartado el espacio.
“No nos han dicho de cuándo se va a reiniciar la entrega en este punto, nos hemos dado cuenta de que en otros lugares han dado, pero son pocos y las personas se pelean porque no son suficientes, yo voy a esperar porque ya están más cerca”, dijo la damnificada.
Abundó que en los medios vio que en la colonia Emiliano Zapata fueron muy pocos los paquetes y las personas se estaban peleando, en Caleta también se entregaron pocos, “decían que no había estufas y que no estaba completo el paquete y que por eso no entregaban”.
La vecina dijo que las autoridades le dicen que se vayan a su casa y “que esperemos a que salga la colonia, pero se supone que somos rezagados y la colonia que nos toca ya salió, ya pasó, entonces no nos dan una solución”. Mencionó que algunos de sus compañeros han desistido de la entrega y los que se mantienen en espera se van turnando.
Ayer en el parque Papagayo la entrega de enseres domésticos se mantiene detenida por parte de los soldados del Ejército Mexicano y que desconocen para cuándo en ese punto se va a retomar, pero los damnificados dicen que van esperar que salga en lista.

Aumentan las filas por el retraso en la entrega de enseres domésticos, se quejan

Vecinos de la colonia Bocamar reclamaron que el atraso que hubo de la entrega de enseres domésticos ocasionó largas filas y quedarse a dormir tres noches afuera del parque acuático El Rollo.
Los damnificados por el huracán Otis, en su mayoría son rezagados o los que se censaron en la segunda etapa.
La fila de personas rodeó el centro acuático El Rollo y los vecinos se cubrieron del sol con sombrillas y pedazos de cartones.
La Sedena informó que no entregaron enseres domésticos el miércoles, jueves y viernes pasado en Acapulco y Coyuca de Benítez, debido a que la empresa proveedora tuvo un atraso y no había estufas para los paquetes y hasta el sábado se reanudó el reparto.
Las personas censadas por la Secretaría del Bienestar se quejaron que no aumentaron el número de los paquetes de enseres domésticos a entregar, a pesar que hubo un atraso.
El señor Alejandro Maganda Lara se quejó que tuvo que dormir tres noches en la calle para recibir sus enseres domésticos, debido al atraso que hubo.
“Nos tocó la mala suerte, porque se atrasaron en la entrega y se acumuló mucha gente de otras colonias”, manifestó.
Expresó: “fui de los primeros en censar y soy el último en recibir mis enseres, porque mi colonia apenas salió en la lista de los soldados”.
Comentó que no hubo órden en la entrega de enseres domésticos, porque aseguró que salieron varias listas de personas, pero los soldados respetaron la fila y repartieron fichas.
La señora Alejandra Pintos Piedra narró que durmió tres noches afuera del centro acuático El Rollo, “fue mucho tiempo, todo por el atraso de la entrega de enseres domésticos”.
“Se juntaron muchas colonias y hubo más demanda y entregaron poquitos paquetes de enseres en lugar de aumentar el número por el atraso”, criticó.
Declaró que ya casi no hay enseres domésticos, “así que me tengo que aguantar la asoleada, dormir en la calle y mal comida”.
Las sedes de entrega autorizada por el Ejército se van cerrando conforme pasa el tiempo, en la zona poniente ya no hay distribución a un costado de la tienda Chedraui ni en Balcones al Mar.
Los lugares establecidos son en la colonia Jardín Magos, Caletilla, plaza Patio, Ciudad Renacimiento y Emiliano Zapata, en Acapulco, y en Coyuca de Benítez en el mercado municipal.
El paquete de enseres domésticos contiene un refrigerador, una estufa, un colchón, una licuadora, un ventilador y un juego de sartenes.

 

Combaten bomberos y vecinos voluntarios el incendio en la colonia La Providencia

Aurora Harrison

Con picos, palos, rastrillos, machetes y bombas aspersoras bomberos y vecinos voluntarios realizan labores para tratar de sofocar el incendio forestal del parque nacional El Veladero, en la parte alta de la colonia La Providencia.
La colonia La Providencia se encuentra en la parte alta de la ciudad y se entra cerca de la Y griega, para llegar al área que se estaba quemando se sube un tramo en carro, después se camina por unas escaleras y después unas brechas que están llenas de piedras y árboles.
El sargento Juan Carlos Jaramillo tiene 22 años trabajando como bombero, ayer estaba con otros compañeros en labores en la parte alta de la colonia La Providencia, dijo que junto a sus compañeros usaron palas, picos porque es la única manera para sofocar las llamas.
“Son lugares peligrosos, feos y rocosos, se hizo una guardarraya y se atacó directamente al fuego para que no se extienda y ya quedó controlado en esta parte”, dijo el trabajador.
Abundó que en su experiencia “los incendios son provocados por la gente que no tiene cuidado al quemar la basura, ahorita este incendio ya está controlado en esta parte” y eso se debió al apoyo de las autoridades de los tres órdenes de gobierno y la población.
“Se complica un poco en las partes donde son rocosas, o zonas de El Veladero que no tienen acceso”, dijo el sargento Juan Carlos, que comentó que también estuvo apoyando en los trabajos para sofocar el incendio de la colonia Los Dragos.
Platicó que el viernes estuvo “todo el día” con labores para controlar el incendio en Los Dragos, empezó a las 8 de la mañana y terminó a las 7 de la noche, “pero todavía a esa hora seguimos checando la zona”.
“Estamos preparados para este tipo de incendios”, dijo, y es que mencionó que “cada año en temporada de sequía tenemos este tipo de incendios”.
Si usan el equipo para protegerse del fuego, respondió que ayer que vestía pantalón azul, playera azul y botas, “venimos así, porque es una zona que no puede venir con el equipo completo de penetración, con esto es un poco más liviano para subir a esta zona”.
“Las mascarillas las usamos para cuando son incendios de bodega, o casa, pero aquí no se necesita ese tipo, como está al aire libre el humo se lo lleva el viento”, dijo el trabajador que mencionó que con pala, rastrillo se hacen las guardarrayas y atacar directamente para que no se vaya extendiendo “se le echa tierra, cuando llevamos las bombas aspersoras le echamos agua y tierra”.
Aunque no precisó la cantidad de incendios que ha atendido en sus 22 años, dijo que “son muchísimos”, entre incendios forestales, incendios de bodegas, en comercios, casas.
El vecino de la colonia La Providencia, Jorge Demetrio, ayudó con las labores para sofocar el incendio, dijo que empezó por la colonia Primero de Mayo, “como allá siembran, se vino todo para acá, y nosotros tuvimos que subir a apoyar porque no hay nadie y tuvimos que subir a apagar con pura tierra”.
Recordó que él y otros vecinos subieron el viernes en la noche como a las 7 con palas, picos, y cubetas, “porque como hay pozas de agua, de ahí agarramos para tratar de apagarlo porque estuvo muy fuerte, se extendió bien rápido”.
“Nosotros estuvimos llamado a Protección Civil, pero subieron en la noche, pero ya no se quedaron porque estaba bien feo y tienen miedo, los estuvimos esperando, según dijeron que iban a llegar a las 7 de la mañana y no llegaron, llegaron tarde, nosotros nos subimos para apagarlo”. Dijo el vecino que él y otras 19 personas más se juntaron para sofocar el siniestro.

 

Exigen familiares, vecinos y organizaciones sociales la libertad del maestro Evodio Pérez

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Familiares, vecinos, organismos de derechos humanos y organizaciones sociales exigieron este lunes al gobierno federal la libertad inmediata del profesor y dirigente social, Evodio Pérez Malpica, detenido el pasado 20 de febrero por participar en protestas para denunciar la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014, y fue trasladado a un penal de máxima seguridad de Durango.
En una conferencia de prensa, que se transmitió vía Facebook a la 1 de la tarde de este lunes, el director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, condenó la detención del profesor jubilado.
“Lamentamos que el gobierno manipule la ley para castigar a un luchador social, profesor jubilado, que su único delito fue dar clases a los indígenas de la Montaña y organizar a la sociedad para lograr beneficios sociales”, dijo el activista, quien recriminó que se criminalice la protesta social.
La hija del detenido, Leida Pérez, exigió a las autoridades competentes y al presidente Andrés Manuel López obrador que se libere de forma inmediata a su padre.
Dijo que Evodio Pérez siempre ha apoyado al ahora presidente, desde que inició sus campañas políticas, “es un hombre que cuando le piden un hombro o la mano, se las da sin condiciones. Pido que mi papá sea liberado lo más pronto posible”, exigió.
En la conferencia de prensa estuvieron también vecinos de la colonia Loma Bella, donde tiene su domicilio el detenido, así como representantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) a la que pertenece el detenido y dirigentes del Frente Popular de la Montaña (FPM) al que también pertenece y estudiantes de la normal de la Montaña.
En la conferencia de prensa se anunciaron acciones políticas y legales para lograr su libertad.
Barrera Hernández recordó que en 2014, el Movimiento Popular Guerrerense (MPG), que respaldó a los padres y madres de los 43 estudiantes desaparecidos, tomó el Palacio Municipal de Tlapa y acordó impedir que se realizaran eventos públicos.
Sin embargo, el entonces alcalde Victoriano Wences Real organizó un encuentro de premiación de periodistas en un centro social y el MPG acordó ir a ese lugar, para emplazar a la autoridad a que suspendiera el evento.
El caso es que la visita de los integrantes del movimiento terminó en una gresca y algunos periodistas interpusieron denuncias, por el delito de secuestro, y una de ellas originó la detención del maestro jubilado Evodio Pérez.
“Estamos hablando de que, a casi 10 años de esa denuncia, el compañero Evodio Pérez Malpica fue detenido acusado por esa acción del MPG”, explicó Barrera Hernández.
Dijo que el activista fue trasladado a un penal de máxima seguridad de Durango.
Leida Pérez, su hija, rechazó que su padre sea un secuestrador, “estamos orgullosos de él, no bajamos la cara cuando nos dicen que es secuestrador. Le vamos a echar ganas, vamos a defender a mi papá”.
Contó que el 20 de febrero, a las 2 de la tarde, estaba en su casa cuando le llamó su padre y le avisó que había sido detenido por policías ministeriales y que se lo llevaban a Puebla. “Me acusan de secuestro”, le dijo y colgó.
Explicó que después supo que los agentes que se lo llevaron, le gritaron por su nombre al llegar a su casa e iban vestidos con chalecos del partido Morena, “porque sabían que sólo de esa manera lo podían agarrar. Él es de ese partido y fue la forma en que lo engañaron”.
Contó que su padre, cuando oyó que le hablaron por su nombre, salió y platicó con ellos, que le aplicaron algo como una encuesta, le pidieron sus datos y cuando estuvieron seguros que era él lo detuvieron y se lo llevaron.
Agregó que ella y su hermano salieron de inmediato rumbo al penal del Altiplano, Estado de México, porque pensaron que para allá se lo llevaban, pero cuando aún no llegaban, le llamó y le avisó que se lo llevaban a Durango, “ya no me busquen, déjenme”, le dijo y colgó. Sin embargo, dijo que al día siguiente ella fue a buscarlo hasta allá, en donde, dos días después pudo platicar con él.
“Pido y exijo a las autoridades competentes y al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, su libertad inmediata”.
Reprochó que su padre siempre ha sido seguidor de López Obrador, “lo ha apoyado en los eventos que se hacen en Tlapa. En cuanto él puede apoyar, siempre ha sido un hombre que cuando le piden un hombro o la mano se las da”.
“Pido que mi papá sea liberado lo más pronto posible. En la casa lo esperamos, en su casa, sus nietos lo quieren como papá, en la casa es todo para nosotros, No vamos a permitir que siga la injusticia contra los luchadores sociales. Ya mataron Antonio Vivar, a Arnulfo Cerón y ahora detienen a mi padre”, denunció.
Honorio Morales Bonilla, de la delegación D-4-16 de los jubilados y pensionados de la CETEG, también exigió su libertad inmediata y cuestionó que por qué a un luchador social como él “se le reprime, se le tortura, se le desaparece y se le secuestra. Mientras que ex funcionarios acusados de corrupción y de fraudes de tantos millones, gozan de privilegios y se les dicta prisión domiciliaria”, declaró en referencia al ex director de Pemex, Emilio Lozoya.
El dirigente magisterial llamó a organizaciones sociales, indígenas, estudiantes, obreros y campesinos, a hacer una frente y a una sola voz, “para parar esta ola de represión en contra de los luchadores sociales”, así como para exigir la libertad inmediata e incondicional de Evodio Pérez.
Anunció que las organizaciones sociales y el magisterio se van a movilizar, además de las acciones legales que se realicen para exigir su libertad.
Uno de los dirigentes del FPM, Juan Sánchez Gaspar, declaró que Pérez Malpica es una persona de bien, “el compañero ha luchado desde años atrás, como docente, como delegado y como miembro activo de nuestra organización”.
“Como organizaciones sociales, reprobamos la represión de los gobiernos estatal y federal a todas aquellas personas que exigen sus derechos”.
Explicó que las acciones de 2014 fueron movimientos colectivos, que se realizaban de acuerdo con las bases del MPG y era una decisión de las bases, no de una sola persona o dirigente.
Blanca Rosa García Cruz, vecina de la colonia Loma Bella en Tlapa, donde tiene su casa el dirigente detenido, explicó que el maestro Pérez Malpica es un hombre muy respetado en esa colonia, “los vecinos lo siguen y lo respetan. Ha ayudado con las gestiones a muchas familias, instituciones y escuelas, sin recibir nada a cambio”.
Agregó: “Pedimos al presidente López Obrador que lo libere, no se merece estar ahí, en la cárcel, es una persona buena”.
Abel Barrera Hernández condenó su detención y lamentó que el gobierno “manipule la ley”, para castigar a un luchador social y profesor jubilado, “que su único delito fue dar clases a los indígenas de la Montaña y organizar a la gente, para lograr beneficios sociales para esta región”.
“No se puede continuar violando el derecho a la libertad de asociación, de reunión, de manifestarse para exigí sus derechos”.
Dijo que el profesor enfrenta un castigo desproporcionado por su activismo social. Es un maestro comprometido con la lucha social, “y su detención contradice a este gobierno, que dice no perseguir a los luchadores sociales”.
También exigió la libertad inmediata e incondicional del maestro Evodio Pérez, “demandamos que cese la persecución contra los luchadores sociales y que no se ensañen contra alguien que ha luchado por la educación de la Montaña. Exigimos el cese de la criminalización de la protesta social”, dijo.

 

El dinero de la reconstrucción se va a la parte turística y no a donde más se necesita, cuestionan

Ramón Gracida Gómez

La asociación Cooperación Comunitaria plantea una reconstrucción de los Bienes Comunales de Cacahuatepec participativa, que involucre a los vecinos y recupere la vivienda y la producción agrícola tradicionales.
En entrevista con El Sur, la coordinadora de la organización, Isadora Hastings, indicó que el dinero de la reconstrucción del municipio se va a la parte turística y no se dirigen fondos “a donde más se necesita”.
Cooperación Comunitaria nació en 2012 con el fin del rescate de la vivienda tradicional ante los desastres naturales identificando las causas de las vulnerabilidades. Participó en la reconstrucción en la región Montaña tras los fenómenos meteorológicos de Ingrid y Manuel de septiembre de 2013, y en Oaxaca tras los sismos de 2017.
Durante la asamblea de ayer del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la presa La Parota (Cecop) en Cacahuatepec, la coordinadora de Cooperación Comunitaria expuso los resultados del diagnóstico de las afectaciones en los Bienes Comunales de Cacahuatepec por el huracán Otis.
Isadora Hastings comentó después en la entrevista, que en las tres reconstrucciones que han participado han observado que “las ciudades más grandes jalan más la atención. ¿Por qué?, porque es como los lugares donde pueden llegar todas las organizaciones cómodamente, porque la prensa también se va a los lugares más grandes”.
Agregó que en los desastres socionaturales “siempre hay lugares de preferencia y claro, todo el dinero se va Acapulco turístico porque pues según esto, es lo que más genera, pero es una pena que no haya una política pública en donde se dirijan los fondos a donde más se necesita”.
Dijo que la reconstrucción que la asociación promueve es “participativa y la idea es trabajar mucho sobre el proceso, no sólo, ah, ya, terminó el objeto y ya me voy. No, el proceso que significa también reforzar los sistemas constructivos tradicionales, que es lo que trabajamos, no nos metemos con viviendas de materiales industrializados”.
La también arquitecta destacó la importancia del rescate de la “vivienda tradicional, recuperación de formas tradicionales de producir, de formas de relacionarse con los ecosistemas, que esas pérdidas también han ocasionado muchas vulnerabilidades”.
Comentó que el diagnóstico en los Bienes Comunales de Cacahuatepec empezó con un mapeo satelital de riesgos para identificar “las amenazas, las vulnerabilidades y que puedan ver en el territorio todo lo que está afectando”.
Luego vino el análisis de las causas del desastre para reflexionar los problemas del agua, la salud, el saneamiento, la vivienda y la producción agrícola, y después se llevaron a cabo los diagnósticos familiares.
Desde la primera entrega de ayuda en noviembre empezó el diagnóstico de las comunidades y hace un mes se efectuaron los mapeos y los diagnósticos en las localidades Rancho las Marías, Hilamos, Cacahuatepec, Apanhuac, Cruces de Cacahuatepec, El Cantón, Huamuchitos y Apalani, y en estas cuatro últimas van a empezar el trabajo “más integral”.
Expuso que este proyecto consiste en el acceso al agua y su saneamiento, y puso de ejemplo un espacio comunitario de Apalani donde las mujeres sacan agua de un pozo y donde va a intervenir Oxfam en la parte técnica y Cooperación Comunitaria con las usuarias, aunque sigue el diagnóstico.
Otra propuesta del proyecto es la instalación de baños secos porque “ante la inexistencia o la poca cantidad de agua, pues vendría no usar agua para el baño y si no tienen baños, además pues poder” construirlos.
Asimismo, la recuperación de la vivienda tradicional, “vemos que sí muchas están, sobre todo las de adobe, afectadas de los muros, entonces también está planteado una parte de reconstrucción de la vivienda reforzada tradicional, pero reforzada contra sismos y vientos”, ahondó.
También plantean el rescate de la milpa “orgánica con técnicas agroforestales para, uno, recuperar la milpa porque muchos ya tienen maizales, no tienen milpa, pero poderla recuperar con cultivos diversificados y con técnicas que requieren menos agua y que esa diversidad también las hace más resistente a plagas”.

Bloquean ahora los no censados por seis horas las avenidas Costera y Cuauhtémoc

El bloqueo que personas que aseguran que no fueron censadas realizaron en la avenida Costera junto al Asta Bandera para exigir los recursos para la reconstrucción de sus viviendas afectadas por el huracán Otis Foto: Carlos Carbajal

Argenis Salmerón

Vecinos de diferentes colonias que no fueron censados reactivaron el bloqueo, ahora por seis horas, en las avenidas Costera y Cuauhtémoc para denunciar que no acudieron representantes de la Secretaría del Bienestar federal para recibir la documentación como se había acordado el martes en la noche.
A la 1 de la tarde, unos 500 inconformes cerraron los dos sentidos de la vía turística, ahora en el Asta Bandera por incumplimiento de la Secretaría del Bienestar federal.
A las 5 de la tarde, los damnificados liberaron las vialidades, y nuevamente a las 7 de la noche bloquearon solamente la avenida Cuauhtémoc y a las 9 de noche se quitaron.
Antes, decenas de personas no censadas hicieron una fila y rodearon todo el parque Papagayo para entregar la documentación en la Secretaría del Bienestar.
Los manifestantes reclamaron que no se cumplió la minuta de acuerdos, que consistía en que ayer a las 12 del día los iban a atender los “Servidores de la Nación”, luego del bloqueo de 35 horas de manera interrumpida en la glorieta de La Diana .
Indicaron que las personas no censadas, luego de retirar el bloqueo de La Diana, se trasladaron afuera del parque Papagayo y durmieron en el lugar.
Exigieron la instalación de los módulos de la Secretaría del Bienestar para comenzar la recepción de documentos y después la verificación de los daños de las casas tras el impacto del huracán Otis.
Después, otro grupo bloqueó tres horas la avenida Cuauhtémoc, frente al parque Papagayo.
Unos 100 manifestantes cerraron los dos carriles de la avenida Cuauhtémoc, atrás de la estación Michoacán del Acabús.
Después en el Asta Bandera llegaron policías municipales para resguardar la zona y después agentes de la Guardia Nacional.
El cierre de las dos vialidades más importantes de Acapulco ocasionaron un caos vehícular en las demás avenidas importantes como la Ruiz Cortines y Constituyentes.
Otra vez las personas tuvieron que caminar para llegar a su destino y pagar doble pasaje, debido al bloqueo en la avenida Costera.
En declaraciones a reporteros, el vecino de la colonia Simón Bolívar, Eduardo Manzano, se quejó que los trabajadores de Bienestar federal los dejaron plantados en el parque Papagayo.
Añadió que fue un acuerdo del martes en la noche entre manifestantes y autoridades, “nos iban a atender hoy (ayer) al mediodía, pero no se cumplió la minuta”.
“Nos dejaron plantados y estando en el rayo del sol por más de cuatro horas, y algunos se quedaron a dormir desde el martes después de levantar el bloqueo en La Diana”, manifestó.
Sostuvo que hay muchas listas de personas no censadas y “los supuestos líderes lucran con la necesidad de las personas y la autoridad que les hacen caso, ¿no se supone que no tiene que haber intermediarios?”.
“Sabemos que vienen las campañas electorales y se chingan el dinero y a nosotros no nos dan nada”, reclamó.
Las autoridades del estado y municipio acudieron a atender a los manifestantes, pero los corrieron del lugar abucheando y gritando que querían a personal de Bienestar federal.
Incluso, los inconformes expresaron su rechazo a los policías y reporteros de medios de comunicación que estuvieron en el lugar, porque aseguraron que no les iban a resolver su demanda.
Después a las 5 de la tarde, los manifestantes se retiraron de la avenida Costera y Cuauhtémoc, luego de un acuerdo. El acuerdo consistió en que los agentes de la Guardia Nacional iban a recibir la documentación adentro del parque Papagayo.
Sin embargo, a las 7 de la noche nuevamente los damnificados cerraron los dos sentidos de la avenida Cuauhtémoc, atrás de la estación Michoacán del Acabús para denunciar que no alcanzaron a entregar la documentación para el posible censo.
Los damnificados retuvieron por unos minutos una camioneta de la Secretaría de Bienestar federal que salía del parque Papagayo.
A las 9 de la noche, los manifestantes liberaron la vialidad tras el acuerdo que los iban a atender hoy adentro del parque Papagayo.
Los mismo vecinos cerraron el lunes y martes la avenida Costera en La Diana por 35 horas de manera interrumpida para exigir el apoyo del gobierno federal tras el impacto del huracán Otis.

 

Denuncian vecinos de El Coloso que están invadiendo un estacionamiento para poner puestos

Vecinos de la etapa 15 de la unidad habitacional El Coloso acudieron al Ayuntamiento para denunciar que el área de estacionamiento la están invadiendo personas colocando puestos de venta de diversos productos y piden que los quiten para que puedan guardar sus carros.
Una comisión de una decena de personas llegó al Ayuntamiento con documentos que traen y que ya han enviado a las autoridades pidiendo su intervención, porque ya colocaron rejas en el área de estacionamiento y les perjudica porque los están dejando sin espacio para que los demás puedan estacionar su carro.
“Ahorita están haciendo como tipo locales y si se pone uno, después ya no será estacionamiento sino un mercado, entonces eso es lo que venimos a pedir que por favor nos apoyen y que los vayan a retirar con los inspectores de Vía Pública”, señaló la señora Ofelia Cruz.
Sostuvo que desde hace más de un mes otra vez iniciaron con el enrejado en el área del estacionamiento y “nos urge que vayan porque están invadiendo y están vendiendo pedazos de estacionamiento para que se puedan instalar, porque lo están viendo como negocio”.
Recordó que esta queja ya la habían externado a la Dirección de Asuntos Vecinales, pero que no les hicieron caso, por esa razón es que acudieron al Ayuntamiento para pedir a la presidenta, Abelina López Rodríguez, que mande a las autoridades correspondientes para que se puedan retirar esas rejas y el estacionamiento se pueda utilizar porque es un espacio para todos. (Aurora Harrison).

 

Prevalece la desinformación sobre la entrega de enseres del gobierno federal

Personas hacen fila por varias horas en los módulos de Bienestar del Zócalo para censarse o rectificar sus datos para recibir los apoyos por afectaciones del huracán Otis Foto: Carlos Carbajal

Daniel Velázquez

El 14 de febrero fue el día que un grupo de vecinos eligieron para ir a formarse en la fila para recibir los enseres que reparte el gobierno federal a los damnificados por el huracán Otis, son los últimos de la fila, integran el bloque 76, son 35 personas.
En tanto, este 14 de febrero será la última noche que duerman a la interperie un grupo de vecinos que está hasta adelante en la fila, llevan ocho días formados, llegaron el jueves 8 de febrero.
A 113 días del paso del huracán Otis, la desinformación sigue siendo la constante en los apoyos que entrega el gobierno federal, las personas no saben cuándo van a recibir sus enseres ni cuándo concluirá el reparto, lo único que saben es lo que platican con sus vecinos.
La fila para recibir enseres está integrada por unas mil personas, es aproximadamente un kilómetro desde la calle Juan Álvarez hasta la calle Océano Pacífico después de la tienda Neto de Casas Ara, de acuerdo con los vecinos ahí se unen las dos filas, la que se forma en las mañanas para recibir despensas y de quienes van a recibir enseres.
Los vecinos permenecen en la fila bajo el rayo del sol, se cubren con cartones, sábanas, sombrillas y toldos, algunos han instalado campamentos improvisados donde permanecen en grupos. Los vecinos permenecen en la formación porque si pierden el lugar alguien más lo puede vender o meter a una persona que no hizo la fila.
Las personas formadas están en condiciones lastimosas a la vista y están resignadas a permanecer ahí, porque les han dicho que el 29 de febrero es el último día para recibir enseres por lo que hacen la fila con la intención de no perder el beneficio que da el gobierno federal.
El paquete de enseres por el que esperan consiste en un refrigerador, una estufa, un ventilador, una licuadora, un colchón y un juego de sartenes.
Recorrer la fila de las personas que esperan a los militares para recibir sus enseres, provoca diversas emociones, hay basura en torno a ellos lo que muestra lo insalubre que es el lugar, hay vehículos con colchonetas, lo que evidencia que ahí se quedan a dormir, la gente busca protegerse del sol en la escasa sombra que proporciona la vegetación que sobrevivió al huracán y las construcciones cercanas; tienen sillas, sillones, bancos para sentarse.
Uno de los vecinos formados en la fila contó que el lunes no hubo entrega de enseres en el estacionamiento de plaza comercial Patio, la fila no avanzó ni un paso, pero los vecinos permanecieron en su sitio, el martes y miércoles sólo entregaron 200 paquetes, un vecino contó que sólo avanzaron 5 metros lo que dijo se debe a las personas que se meten en la fila.
En plaza Patio reparten enseres a un centenar de colonias, cada semana se agrega una colonia nueva y aunque no se haya concludido con la anterior se envia a la lista de rezagados, la lista de colonias que están en espera de recibir este miércoles no estaba disponible en los postes del acceso al estacionamiento, como sí estaban hasta el pasado domingo. La gente llega a preguntar qué colonia puede presentarse a recibir los enseres y quienes les dan la información son los vecinos formados en la fila.
Ayer a las 2 de la tarde llegó una vecina de la unidad habitacional Tulipanes, ubicada frente la planta refresquera de Coca Cola, fue a preguntar si podía formarse, contó que sus vecinos de Tunzingo ya están recibiendo los enseres por lo que fue a preguntar, pero como no encontró ninguna autoridad los vecinos le dijeron que se formara.
En la formación hay vecinos de El Coloso, Llano Largo, Tres Palos, Santa Lucía, La Máquina, San Agustín, Parotas, Los Manantiales y José López Portillo.
Sobre la carretera Cayaco-Puerto Marqués, siguen las personas haciedo fila para recibir las depensas que esperan alcanzar hoy.
Una vecina contó que su mamá, Consuelo Arellano López, fue censada con el folio 8860698 y no ha recibido la ayuda del gobierno federal ni el apoyo de limpieza, los vales de despensa ni el cintillo para los enseres, sólo tiene el cintillo dorado de que fue censada, contó que ya le escribió por la red social Facebook a la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, y al delegado, Iván Hernández Díaz, a quienes invitó a que fueran a constatar los daños en su vivienda y leyeron los mensajes, pero no ha recibido respuesta, sólo le dijeron que es una incidencia y que debe esperar a que le llamen.

 

Tardan vecinos de la Garita hasta ocho horas en la fila para recibir una despensa

Argenis Salmerón

Vecinos de la colonia Del Valle, colindante con la Garita, se quejaron que tardaron de seis a ocho horas formados para recibir una despensa y que la mayoría de los vecinos tienen la mayoría de los cupones, porque aseguraron que los soldados no acuden a repartir.
La fila de personas estuvo en la calle África, que conecta de la avenida Cuauhtémoc a la avenida Farallón.
En la línea la mayoría eran mujeres, adultas mayores o amas de casa, formadas en 300 metros aproximadamente.
Las mujeres se cubrían del sol con paraguas, cartón y bolsa de mano, y algunas sentadas en silla de plástico portátiles.
En declaraciones a El Sur, la vecina Gladys Morales Villalobos dijo que tardó en recibir una despensa de seis a ocho horas formada.
Criticó que esta semana los soldados piden cupones del 1 a 11, dos por una despensa y el 12, que es el último a cambio de una despensa.
Manifestó que solamente ha cambiado seis cupones de 12, “es que trabajo y no tengo tiempo para hacer fila por tanto tiempo”.
Reclamó que hay personas que otras colonias y vienen a recoger las despensas, “se bajan de sus carros o se llaman por teléfono”.
Recalco: “aquí también se apartan lugares o se meten a la fila cinco personas, por eso en ocasiones no alcanzan los de las colonias asignadas”.
Declaró que “hay personas que se suben en sillas de ruedas, sin ocuparla para pasar primero por la despensa, una vez descubrimos eso, hasta donde ha llegado la gente”.
“Todavía no voy por mis enseres domésticos, en los trabajos no dan permiso para eso, voy a ver cómo le hago o al final que me descuenten el día”, comentó.
Una despensa contiene un kilogramo de azúcar, arroz, frijol, jabón de tocador, sopa, atún, sardinas, papel sanitario, harina de maíz, pan blanco, medio casillero de huevo, un litro de aceite y la tarjeta de regalo.

Denuncian vecinos de la Garita que las despensas no traen la tarjeta de regalo

Vecinos de la colonia Garita denunciaron que las cajas de despensas que entregan los soldados a damnificados del huracán Otis estaban abiertas y no traían la tarjeta de regalo.
Reclamaron que tenían que entregar a los soldados dos cupones por una caja de despensa.
La entrega de despensas fue en la calle Chilpancingo, atrás del colegio privado Zumárraga, en la colonia Garita.
Una despensa contiene un kilogramo de azúcar, arroz, frijol, jabón de tocador, sopa, atún, sardinas, papel sanitario, harina de maíz, pan blanco, medio casillero de huevo, un litro de aceite y la tarjeta de regalo.
Una vecina, que no dio su nombre, dijo que las despensas venían abiertas y no tenían tarjetas de regalo de las tiendas Aurrerá, Chedraui o Soriana.
Criticó que los soldados pidieron dos cupones del 1 al 11, cual sea el orden, y daban a cambio una caja de despensa.
Añadió que solamente el cupón número 12, era cambio por una despensa, “ya no hay orden, solamente quieren terminar y ya”.
Se quejó que los vecinos “esperan más las tarjetas de regalo para complementar la despensa, pero no venía en el cartón abierto”.
“No se vale, el presidente dijo que nadie se iba a quedar con el apoyo, y los soldados abusan de su misión encomendada”, denunció.
El domingo pasado, vecinos de diferentes lugares se quejaron que los puntos de entrega de despensa disminuyeron, y los soldados no acuden a las colonias, sino a puntos más concurridos como el Parque de la Reina, avenida Ejido en la terminal de autobuses, en la UDA en la colonia Progreso, el Zócalo y plaza Patio. (Argenis Salmerón).

 

Bloqueos y quejas por reparto de enseres y despensas

En protesta porque el Ejército cambió sin aviso el lugar de entrega de los electrodomésticos del parque Papagayo a la plaza de Toros de Caletilla, damnificados de Otis bloquearon la avenida Costera el sábado, molestos además porque tenían hasta seis días esperando. Y ayer, cientos se aglomeraron en el Zócalo de Acapulco (imagen) preguntando por los recursos para la reconstrucción de sus viviendas que no les han entregado y por el resultado del segundo censo Foto: Carlos Carbajal

Bloquean vecinos de Barrios Históricos las avenidas Cuauhtémoc y Costera por los enseres

La Sedena cambia el lugar de entrega hasta la plaza de Toros, en la zona de Caletilla. Ayer se vuelven a formar afuera del parque Papagayo y les dicen que esperen a que su nombre aparezca en listas que se difundirán en redes

Aurora Harrison

Vecinos de Barrios Históricos bloquearon el sábado en dos momentos, cada uno por más de tres horas, las avenidas Cuauhtémoc y Costera, frente al parque Papagayo para exigir la entrega de los enseres domésticos, que el gobierno federal da a las personas censadas afectadas por el huracán Otis, porque dijeron que llevaban seis días formados.
El primer bloqueo fue de 10:30 de la mañana a una 1:30 de la tarde de manera simultánea en la avenida Cuauhtémoc y Costera; el segundo bloqueo fue de 6:30 de la tarde a 10 de la noche y sólo fue en la Costera y eso se debió a que hicieron falta 150 que les dijeran el día que tendrían que recoger sus enseres.
Ayer domingo en el parque Papagayo por la mañana y hasta poco antes del mediodía había unas 150 personas formadas esperando ficha para recibir sus enseres. El sábado y domingo no se entregaron enseres en la sede del parque Papagayo.
Unos 100 vecinos de los Barrios Históricos hicieron el primer bloqueo a las 10:30 de la mañana del sábado en la avenida Cuauhtémoc y simultáneamente en la Costera, eso ocasionó un fuerte congestionamiento vial y que los automovilistas se bajaran de sus carros y pidieran a los inconformes que se quitaran o que su bloqueo fuera intermitente.
Una de las vecinas dijo que la inconformidad es porque la Secretaría de la Defensa Nacional cambió el lugar de entrega de los enseres, del parque Papagayo hasta la plaza de Toros, en la zona de Caletilla, en la zona Tradicional de Acapulco.
“Tenemos seis días y noches durmiendo aquí, y el viernes por la noche el Ejército pasó y dijo que se cancelaba la sede en el parque Pa-pagayo y que nos fuéramos a nuestras casas porque habría un evento de la gobernadora, pero no es justo que después de seis días que estamos en el rayo del sol salgan a decirnos que se cambia la sede”, dijo.
Abundó que el Ejército tuvo la responsabilidad de la logística, porque pensaron que los Barrios Históricos era una sola colonia y “ellos tuvieron la culpa al no especificar las colonias que de verdad eran, porque pusieron la colonia Centro y Barrios Históricos y somos muchos barrios, queremos una solución, llevamos seis días”.
“La Secretaría de Bienestar debe de estar dando la cara y poniendo orden en la entrega para que no suceda esto, y que el Ejército sea más accesible y no sea tan grosero”, dijo.
En la avenida Costera los inconformes colocaron láminas, tabicones, cajas de madera para que los vehículos no pudieran pasar, eso causó molestia entre los conductores que se bajaron e intercambiaron palabras con los inconformes; incluso un adulto mayor que traía unas muletas se tiró al piso para que los taxistas no pudieran pasar.
Mientras que en el bloqueo que estaba en la avenida Cuauhtémoc los inconformes usaron unas cartulinas y fueron atendidos por efectivos de la Guardia Nacional. Fue poco antes de las 12 del día que llegó el director de Gobernación, Ramón Montiel Mejía; el delegado de Gobernación del estado, Osiel Morales Nava, y un coronel del Ejército a dialogar con los manifestantes y ahí estuvieron por más de una hora.
El coronel del Ejército estuvo fuertemente resguardado por soldados y policías de la Guardia Nacional, que después del diálogo y aceptar el acuerdo recorrió la fila para constatar la organización de las personas y que recibieran algún registro previo para conservar tal orden y así les entregasen los enseres en días posteriores.
Se quitaron después de 1 de la tarde del sábado, a casi tres horas de bloqueo, tras acordar que se les entregaría una ficha para que recojan los enseres por lo menos a las que llevaban hasta seis días formados, les serán entregados en el parque Papagayo.
El segundo bloqueo fue poco antes de las 7 de la noche del sábado en la avenida Costera y se debió a que nada más atendieron a 150 personas, que a esas se les iban a dar los enseres sin que tuvieran que hacer fila, pero que eran más los que estaban formados, incluyendo los adultos mayores que estaban en una fila diferente.
Sólo bloquearon la avenida Costera en ambos sentidos, lo que causo congestionamiento y aunque las autoridades dialogaban con ellos y les daban propuestas de solución, los vecinos estuvieron hasta las 10 de la noche bloqueando la vialidad.
Ayer domingo unas 150 personas amanecieron haciendo fila afuera del parque Papagayo en espera de que les dieran la ficha y el día en que tenían que regresar para recibir sus enseres. Fue el caso de Jaqueline Padilla, que dijo que ella tiene siete días con el de ayer domingo “en vela para recibir el apoyo del gobierno”.
Recordó que el sábado se bloqueó en dos ocasiones porque el Ejército hizo un “desorden” al avisar que ya le correspondía a los damnificados de la colonia Centro, pero después que “siempre no, y eso nos desconcertó por eso es que se bloqueó, porque nadie daba solución y nosotros pedíamos y no nos daban”.
“Hubo un pequeño mal entendido de que algunos sí empezaron a abusar y que no querían estar esperando y empezaron a vender sus lugares y ahí es donde se hizo la complicación, los oficiales decidieron retirarse”, dijo la damnificada.
Al lugar llegó un coronel del Ejército quien les pidió a los que estaban formados los nombres de las zonas en donde vivían, cuántos eran y que esperaran a que en las redes sociales saliera su colonia y que les iban a dar prioridad, que no se quedaran a dormir porque no sabían cuando se iba a habilitar el parque para la entrega de enseres.

Preguntan en el Zócalo por la falta de pago de la reconstrucción y el resultado del segundo censo

Argenis Salmerón

Ayer hubo largas filas de personas en la explanada del Zócalo, en el módulo de la Secretaría del Bienestar federal, para preguntar por la falta de pago de la reconstrucción y el resultado del segundo censo de las viviendas afectadas por el huracán Otis.
En los módulos de la Secretaría del Bienestar federal había desorden con las filas y personas con dudas del pago y resultados del segundo censo.
En pleno rayo del sol, las personas se cubrieron con sombrillas y cartones y la mayoría llevaba una carpeta con diferentes documentos.
En la fila iban los que les llamaron del segundo censo para pagarles y los que fueron censados en la primera etapa, pero que no podían cobrar.
Otros para informarse del resultado del segundo censo. Según los damnificados, tenían formados de cinco a seis horas.
Se quejaron que no había organización por parte de los “Servidores de la Nación” y módulos específicos para los diferentes casos.
La señora de la colonia Centro, Agustina Gómez Lázaro, dijo que no ha podido cobrar ningún pago, “porque según los ‘Servidores de la Nación’, no están mis datos”, y “yo tengo cintillo, ya comprobé con fotos y fueron a verificar”.
“No entiendo el problema, todo está en orden, lo que pasó fue que no me capturaron mis datos desde un principio, porque no encuentro la lógica”, reclamó.
Sostuvo que ya se gastó lo que no tiene de dinero, “me quedé sin empleo por el huracán Otis, y no he recibido mi apoyo federal, siendo que fui damnificada por el huracán Otis”.
La señora de la colonia La Mira, Carolina Miranda Sánchez, manifestó que fue a preguntar del resultado del segundo censo.
“Yo llame a la línea del Bienestar, también entregue documentación y me fueron a verificar, y como hay personas que ya les dieron el dinero, vine a preguntar”, puntualizó.
Reconoció que después de dos días del huracán Otis se fue de Acapulco por “mis dos niños, no había luz, ni comida”.
“Se me pasó el primer censo, pero me registré cuando el presidente dijo que nadie se iba quedar con la ayuda y por eso estoy aquí formada para pedir información”, destacó.
Argumentó que tuvo pérdidas en su casa como su techo y sus enseres domésticos, “me quedé con mis paredes de ladrillo y como pudimos nos protegimos de los vientos”.

 

Genera la entrega de despensas en plaza
Patio oportunidades para el autoempleo

Comerciantes informales recorren las filas o se establecen en un sitio para ofrecer sus alimentos y mercancías. De manera muy discreta se ubican también quienes apartan espacios para obtener un ingreso adicional

Daniel Velázquez

El reparto de despensas en el estacionamiento de plaza Patio es una oportunidad para el autoempleo, decenas de comerciantes informales recorren las filas o se ubican en un sitio para ofrecer sus mercancías y también un ingreso adicional para quienes apartan espacios.
Al menos unas 35 personas ofrecen diferentes productos a quienes esperan por días una despensa del gobierno federal, sus ventas dependen de la afluencia y de la permanencia de las personas formadas en la fila.
Los lugares en la formación para recibir una despensa también son una mercancía, se venden en 100 pesos, pero la garantía depende del ofertante y que las despensas que entreguen, algunos cobran al llegar y otros cuando se recibe la despensa.
Las ventas comienzan desde la madrugada, a las 5 de la mañana empiezan a ofrecer a las personas formadas en la fila cafe y té en 15 pesos, atole de avena en 20 pesos y chocolate en 25 pesos más una pieza de pan en 8 pesos o un bolillo en 7 pesos.
Conforme va amaneciendo, el menú se amplia, llegan vendedoras de yogurt hecho en casa, gelatinas, churros y hotcakes, cada producto se vende en 20 pesos.
Después se incorporan los vendedores de volovanes a 25 pesos, cocas de 10 y 15 pesos, y agua de 10 y 20 pesos y electrolitos en 25 pesos.
Después llegan las vendedoras de elotes, tamales y tacos, van en triciclos o en carritos de supermercados con sus mercancías o se aposentan en la banqueta con una mesa, los alimentos que venden y bancos. También llega la vendedora de botanas, pistaches y golosinas.
Sobre la banqueta, en torno al estacionamiento de plaza Patio están dispersos ocho puestos improvisados de venta de tacos de canasta, la orden se vende en 45 pesos, las gorditas de manteca a diez pesos la pieza, las picadas a 50 la orden, los tacos de guisado en 50, relleno ofrece sus tortas en 35 pesos, tamales en 25 pesos.
La mayoría de las vendedoras son mujeres, los hombres sólo venden bolillo, refrescos, volovanes, gelatinas, cremas de Maizena, chips para teléfonos celulares.
Las mujeres venden todo lo que es posible ofrecer de alimentos, pescadillas, bolillos rellenos con guisado, mole o salpicón, recorren la fila de extremo a extremo mientras ofrecen la orden en 45 pesos, quienes venden chilate en 20 pesos, el agua de sabor en 15, las paletas de hielo en 12 pesos, los algodones de azúcar en 30 pesos.
También hay músicos que recorren la fila entonando canciones y a cambio reciben propina.
Los venta de espacios en la fila es discreta, se pacta por teléfono, en la red de mensajería instantanea de WhatsApp con al menos un día de anticipación o vía telefónica, nadie lo grita pero es un secreto que todos saben, las personas que compran espacios llegan despues de las 6 de la mañana, y se nota su apariencia lucen muy diferentes a quienes pasaron la noche en la banqueta.
Las despensas que entrega la Marina en plaza Patio nunca alcanzan, las filas son incalculables, de unos dos kilómetros más las personas que permanecen aglutinadas en grupos de 30 o más ciudadanos. En un monitoreo hecho del 8 al 11 de febrero se constató que las personas que tenían por costumbre madrugar, llegaban a las 4 o 5 de la mañana ya no alcanzaban despensas porque mucha gente se aglutina en la fila y los de atrás nunca avanzan, eso sucedió miércoles, jueves, viernes y sábado, la única fila que avanzaba era la de adultos mayores pero la fila de los menores de 60 años permaneció estancada, sólo avanzó cuando se terminaban las despensas y la gente se iba.
Otro factor que influye en que la fila no avance es que entre semana la Marina reparte uno, dos o tres tráilers, el viernes 9 de febrero, de acuerdo con el testimonio de una vecina, sólo repartieron 480 despensas, sostuvo que ella las contó, “la fila no avanzó ni un paso”, sólo se entregron a los que estaban aglutinados en la puerta, los marinos terminaron en media hora y se retiraron. Ese día hubo reclamos de la gente, del porque entregaron tan poquitas, la misma vecina contó que un marino le dijo “¿todavía tienen hambre? tantas despensas que les hemos dado”.
El sábado llegaron tres tráilers, el domingo llegaron cinco tráilers, estos dos días, se pudo observar que “ir a las despensas” se ha vuelto parte de la actividad dominguera de los acapulqueños de la zona suburbana del municipio, llegan familias enteras a ocupar los espacios que un familiar apartó durante toda la semana, llegan mujeres con bebés en brazos o con menores, y los dos adultos se forman para canjear dos vales porque entre semana esa actividad se ha vuelto imposible. Los marinos estuvieron recibiendo los cupones 10, 11 y 12.
Este domingo los marinos modificaron la estrategia de reparto de despensas, metieron a personas formadas al final de la fila, que son las que nunca alcanzan y mantuvieron en suspenso a quienes se apuestan sobre la reja del estacionamiento y que son quienes apartan espacios, estos estuvieron pasando en grupos de cinco o diez personas, para conseguirlo primer despejaron el acceso principal al área de entrega de despensas y luego realizaron su plan, con lo que se formaron tres filas para la entrega de despensas.
En plaza Patio también está una cuarta fila, la que atiende sólo a familiares de soldados y marinos, trabajadores del gobierno federal y de la plaza comercial, ellos se forman dentro del estacionamiento de la plaza sin aglomeraciones y ahí reciben las depensas.

Entrega Bienestar unos 650 créditos a la palabra a clavadistas y prestadores de servicios

Aurora Harrison

Unos 650 créditos a la palabra fueron entregados ayer a clavadistas y prestadores de servicios que fueron afectados por el huracán Otis, por parte de Financiera para el Bienestar, con un aproximado de 16 millones 300 mil pesos, informó la directora Rocío Mejía Flores.
Ayer en el Centro de Convenciones junto a la secretaria de Fomento y Desarrollo Económico, Teodora Ramírez Vega y el secretario de Turismo del estado, Santos Ramírez Cuevas, la funcionaria dijo que los beneficiarios recibieron dicho apoyo.
En su mensaje dijo que en las sucursales de Telecom que están en Ciudad Renacimiento, Centro y en Xaltianguis podrán acudir para recibir el apoyo que se les está entregando, este crédito a la palabra con tasa de interés cero porque no van a pagar intereses.
“La idea es reactivar el negocio y en septiembre empezar a pagar los 834 pesos por 30 meses”, dijo la funcionaria federal que indicó que a partir del viernes en las sucursales van a poder cobrar el apoyo.
Dijo que son montos de 25 mil pesos como anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador, que “se les está dando seis meses de gracia, en ese tiempo no van a pagar hasta septiembre”.
Entre los que recibieron el apoyo son 31 clavadistas y 623 prestadores de servicios, como guías de turistas, camaristas, tolderos, restauranteros y el martes se va a continuar con hoteles, restaurantes para luego seguir con los comerciantes de plazas de artesanías y otros giros que nos han solicitado el apoyo.
“Calculamos unas 15 mil personas que cuando se acabe el monto de los 500 millones de pesos en ese momento terminamos”, dijo la funcionaria federal que esto seguirá hasta que se termine de entregar el apoyo a los micro y pequeños negocios.
Explicó que sí se está apoyando a hoteles pequeños que pueden tener hasta 50 trabajadores y “nos han pedido hasta 100, 200 y 300 mil pesos” para que inviertan en la rehabilitación de sus negocios o para comprar equipo que se le dañó con el huracán.
“Los hoteles y restaurantes lo han estado invirtiendo en equipo, más sillas, más mesas o en el horno que se les echó a perder y es que es importante que utilicen este recurso para su negocio y le vamos a dar seguimiento con la secretaría”, declaró la funcionaria.
Recordó que los créditos a la palabra ya no se habían entregada desde que pasó la pandemia de Covid-19, y lo que se daba eran las Tandas para el Bienestar y ahora se les llama créditos solidarios o créditos productivos que van a las personas que tuvieron una tanda y que cubrieron el 100 por ciento y pagaron.
“En todo el país estamos colocando unos 40 mil créditos en todo el país, que ya ahorita estamos aquí trabajando en todos los demás estados para que puedan cobrar”, dijo.
En su intervención el secretario de Turismo, Santos Ramírez Cuevas, dijo que Acapulco tiene una carrera contra el tiempo en la recuperación de las habitaciones de hotel, pues dijo que era un destino de 19 mil cuartos y eso permitía una gran movilidad de turistas.
“Hoy tenemos 6 mil 500 habitaciones y para Semana Santa espera estar en 7 mil 500 u 8 mil habitaciones para tener lo mínimo”, dijo el funcionario que mencionó que también se trabaja en la conectividad aérea.