Hay 16 centros de salud cerrados ante la violencia; cinco en San Miguel Totolapan y cinco en Zitlala: SNTSA

 

La secretaria general de la sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), Beatriz Vélez Núñez, declaró este lunes que 16 centros de salud se encuentran cerrados ante el temor de los trabajadores a la violencia, sobre todo en los municipios de San Miguel Totolapan y Zitlala.
Por otra parte, aseguró que la escasez de material, equipo y medicamentos que han denunciado trabajadores de algunos centros hospitalarios, como del Hospital General Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo, ya se está resolviendo, y argumentó que el retraso de la entrega obedece al proceso de descentralización del Seguro Popular.
La dirigente sindical fue consultada la mañana de este lunes después del acto en el que el gobernador, Héctor Astudillo Flores, y el presidente municipal de Chilpancingo, el priista Marco Antonio Leyva Mena, dieron inicio a la construcción del parque lineal Río Huacapa.
Con respecto a la denuncia de trabajadores del Hospital General de Acapulco en el sentido de que están siendo cambiados a centros de trabajo de lugares de alta incidencia delictiva a manera de castigo, la dirigencia sindical aseguró que “no hay ningún castigo, sólo estamos cambiando 240 trabajadores en todo el estado”.
Aseguró que en Acapulco sólo son 22 trabajadores, de los cuales sólo hay cuatro del hospital de Renacimiento que se oponen al cambio ante los riesgos, “pero, por Dios, en Guerrero hay riesgos en donde sea”, dijo.
Añadió que éstos eran trabajadores de contrato que, al obtener su base se convirtieron en trabajadores de nuevo ingreso, y que están siendo enviados a los centros donde hay otros de sus compañeros que tienen más de 25 años y que necesitan reconcentrarse, “es un acto de justicia laboral”, aseguró.
La dirigente sindical informó que en el estado hay trabajadores que están solicitando su cambio por situaciones de violencia, específicamente en la Tierra Caliente y en Zitlala.
Vélez Núñez informó que, de ellos, cinco son del municipio de San Miguel Totolapan, un número igual en Zitlala y el resto en otros lugares de la entidad.
Agregó que en esos lugares también tienen solicitudes de los trabajadores que piden su cambio de adscripción, porque argumentan que han sido extorsionados o amenazados.
Destacó que, por estas causas, de 42 solicitudes ya solamente hay cinco que faltan de cambiar a otras sedes.
La dirigente sindical declaró que no procede la petición de los trabajadores que piden que no sean atendidos los heridos de bala en los centros hospitalarios civiles, y que sean trasladados a los hospitales militares, “a nosotros nos toca atender a toda la población civil”, dijo y agregó que en todo caso se requiere hacer cambios a los códigos Penal y Civil.
Informó que lo que la dirigencia sindical está solicitando es que se instalen las medidas de seguridad necesarias, entre éstas, cámaras de vigilancia en los centros hospitalarios.

Esta cubierto el 85% de la necesidad de medicamentos en el estado, dice la dirigente sindical

Sobre la falta de material, equipo, medicamentos y especialistas que han denunciado en los hospitales de Chilpancingo y Acapulco, la dirigente sindical aseguró que ya se está atendiendo y que con el secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, han tenido reuniones con los trabajadores para aclararles la situación.
En el caso del Hospital General Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo, informó que se reunieron con trabajadores el viernes pasado.
Explicó que la Secretaría de Salud tenía algunos problemas con los recursos del Seguro Popular, a causa de “ciertos candados que trae ahora (el programa)”, pero aseguró que ayer ya estaba disponible el 85 por ciento de los medicamentos en las unidades de salud, “y el almacén también ya está lleno de medicamentos, y ya está permanente la distribución”, aseguró.
Explicó que el problema fue que, ahora el 40 por ciento de los recursos del Seguro Popular está destinado a la compra de medicamentos, y es el Seguro Popular el responsable de hacer la compra y la licitación de los fármacos porque se convirtió en el proveedor de la Secretaría de Salud.
Añadió que esto es a raíz de una descentralización del Seguro Popular, que se convirtió en un Organismo Público Descentralizado (OPD), “y esa parte administrativa fue lo que retuvo un poquito”.
La secretaria del SNTSA dijo que, sin embargo, en ninguna parte del país está al 100 por ciento la dotación de medicamentos, y que en Guerrero están en un 85 por ciento surtidos los centros hospitalarios.
Informó que en el caso del Hospital General Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo, solamente hacen falta algunos medicamentos para pacientes que padecen algunas, “enfermedades raras, que no son permanentes y que si (los medicamentos) se tienen en muchas cantidades se caducan y ahorita lo que se está viendo es que esto no ocurra y que exista la cantidad solamente suficientes para atender esos padecimientos”.
En cuanto a los especialistas que también hacen falta, dijo que se abrió una convocatoria para la contratación, sobre todo de anestesiólogos, “ya tenemos los contratos, el problema es que no tenemos a las personas”, dijo.

Muere el fundador de la OCSS y ex preso político Benigno Guzmán; trasladan su cuerpo hoy a Tepetixtla

Uno de los fundadores de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), Benigno Guzmán Martínez murió este martes en Acapulco a los 66 años de cáncer de pulmón.
El luchador social falleció en su casa, según informaron sus familiares; su cuerpo fue velado en la funeraria Siglo XXI, ubicada en la avenida Ruiz Cortines y hoy será trasladado a Tepetixtla, donde lo sepultarán.
Benigno Guzmán fue uno de los campesinos que se reunieron el 14 de enero de 1994 para conformar la OCSS, para que las autoridades atendieran sus demandas de fertilizante para producir maíz, despensas, materiales para vivienda, respeto a los derechos humanos de los campesinos que constantemente violaban las policías y el Ejército y la presentación de los desaparecidos durante la guerra sucia contra la guerrilla de Lucio Cabañas.
Benigno Guzmán falleció de cáncer de pulmón en su casa, luego de que su familia lo sacó del hospital general, donde fue internado días antes, y donde les dieron el pase para que lo trasladaran al Hospital de Cancerología, al que ya no ingresó.
Sus familiares informaron que hace tres años le detectaron cáncer de estómago, el cual controló, sin embargo hizo metástasis en el pulmón, el último año se fue debilitando, y desde noviembre del año pasado su condición empeoró.
El luchador social originario de Otatlán, municipio de San Miguel Totolapan, fue perseguido en el gobierno de Rubén Figueroa Alcocer porque denunció desde el primer momento la masacre de Aguas Blancas, que ocurrió el 28 de junio de 1995, cuando fueron asesinados 17 campesinos y 23 más resultaron heridos, hecho por el que Figueroa Alcocer fue obligado a separarse del cargo al año siguiente.
Guzmán Martínez fue preso político acusado de diversos delitos que el gobierno le fabricó, con motivo de las movilizaciones de la OCSS, principalmente en Coyuca de Benítez. Fue detenido en enero de 1997 en la ciudad de México, donde se había refugiado para evitar la persecución de Figueroa, y encarcelado por los delitos de sedición, motín y daños al Ayuntamiento de Coyuca de Benítez, por los que fue sentenciado a 13 años de prisión y enviado en 1999 al penal de máxima seguridad de Puente Grande, en Jalisco, de donde salió libre el 8 de marzo del 2001.
El luchador social fue acusado bloquear el Ayuntamiento de Coyuca de Benítez en 1995 para exigir fertilizante y obras para las comunidades de la sierra de Coyuca de Benítez. También fue señalado por la Secretaría de Gobernación como uno de los principales integrantes del Ejercito Popular Revolucionario (EPR).
A un mes de salir del penal, Benigno Guzmán denunció la existencia de un grupo paramilitar en la sierra de Coyuca de Benítez, que se hacía pasar por una facción del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI) y que lo amenazó; hecho del cual responsabilizó al entonces alcalde perredista, Rafael Ariza Bibiano.
En diciembre del 2010, nuevamente, Benigno Guzmán fue detenido por policías ministeriales, acusado de ataque a las vías de comunicación, según la denuncia presentada por el entonces alcalde, Merced Valdovinos Diego. Fue puesto en libertad el mismo día porque la orden ya había sido cumplida.
Entre sus últimas actividades, participó en reuniones de la Asamblea Nacional Popular en Ayotzinapa tras la desaparición de los 43 normalistas el 26 y 27 de septiembre del 2014; integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) recordaron que llegó a visitarlos en algunas ocasiones al plantón que mantuvieron cuatro meses en el Ayuntamiento de Acapulco.
El dirigente del Frente de Organizaciones Democráticas del Estado de Guerrero (FODEG), Bertoldo Martínez Cruz, compañero de lucha y preso a la par que Benigno Guzmán, lo calificó como alguien muy serio, respetuoso, duro con el Estado, y consideró su muerte como una gran pérdida para la lucha social.
Martínez Cruz recordó que entre los objetivos de la fundación de la OCSS estuvo la búsqueda de insumos para los campesinos y detener la tala de árboles. Con la masacre de Aguas Blancas, Benigno Guzmán Martínez fue uno de los que principalmente denunciaron el hecho, lo que generó una persecución en su contra.
Martínez Cruz recordó a otros compañeros de lucha que también fueron presos en esa época, entre ellos, Pedro Nava Rodríguez, que recientemente falleció.
En su fundación la OCSS estuvo encabezada por Benigno Guzmán y Marino Sánchez Flores, de Tepetixtla, en la sierra de Coyuca de Benítez, y por Hilario Mesino en Atoyac. La organización estaba integrada por campesinos pobres de los municipios de Coyuca de Benítez, Atoyac, La Unión, Coahuayutla, Zihuatanejo, Petatlán y Benito Juárez (San Jerónimo).
Desde su creación, los miembros de la OCSS, así como sus familiares, han sido víctimas de graves violaciones del gobierno a sus derechos humanos, porque se caracterizó por dar una lucha frontal contra la impunidad y la represión, lo que llevó a Benigno Guzmán a desconfiar de toda institución, incluso las de salud, y a vivir con el constante temor de ser asesinado por el Estado.
El cuerpo de Benigno Guzmán fue velado anoche en una de las capillas de la funeraria Siglo XXI en Acapulco, sus familiares determinaron que a las 7 de la mañana de hoy sería trasladado a Tepetixtla, en Coyuca de Benítez.
A las 9 de la noche sus familiares estaban a la espera de saber si los integrantes de la organización, familiares y conocidos querían velarlo un día más allá o lo sepultarían hoy. De ser así, el sepelio está programado para las 11 del día, luego de despedir el cuerpo en su casa.
Por la noche, al funeral asistieron Bertoldo Martínez; Raymundo Sánchez Taboada del Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad (Ccti) e integrantes del MPG.