Recorren simpatizantes del FUSDEG brechas de Tierra Colorada para evitar la entrada de la UPOEG

El municipio Juan R. Escudero está rodeado por la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) que tiene presencia en Tecoanapa, Acapulco y Chilpancingo, no obstante mujeres de la cabecera municipal aseguraron que no van a permitir que el grupo armado ingrese a sus tierras, en apoyo a la Policía Comunitaria del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), que opera en el municipio.
Ayer las mujeres recorrieron las parcelas y caminos cercanos al punto del último enfrentamiento de las dos organizaciones armadas, para buscar indicios de la presencia de los contrarios antes de ser sorprendidos, y encontraron huellas de botas tipo militar que estimaron, pueden ser de integrantes de la UPOEG.
Bajo la arboleda de una estas veredas denunciaron que el jueves en la última confrontación, la Policía Estatal abrió el paso a los hombres de la UPOEG hasta las inmediaciones de la cabecera municipal para que entraran a la población, como hicieron en El Ocotito, donde los grupos del FUSDEG ya fueron desplazados.
Afirmaron que en Tierra Colorada están dispuestas a morir luchando antes de permitir que la UPOEG “nos gobierne”. Recordaron que la UPOEG ya operó las acciones de seguridad y fueron despedidos del municipio.
En la comandancia el coordinador de la Policía Comunitaria del FUSDEG en Juan R Escudero, Maximino Alejo informó que grupos de la UPOEG ya se instalaron en el crucero de San Juan del Reparo, antes de Tecoanapa. En ese punto había una patrulla de la Policía Estatal desde el asesinato del hermano de uno de los fundadores del FUSDEG en Juan R Escudero, Romualdo Santiago Díaz (en abril de 2016), para evitar que algún grupo armado cruzara los límites. No obstante, ya hubo nuevas confrontaciones.
Al salir de Tierra Colorada hacia la capital por la carretera federal, se observó un policía estatal de guardia en la entrada de la población, y en el siguiente poblado y en Carrizal de la Vía policías de armados de la UPOEG sobre la vía de comunicación, frente al arco que marca la localidad perteneciente a Chilpancingo, así como en Mohoneras, Buena Vista y Acahuizotla.

Juan R. Escudero

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), el municipio sólo representa el .64 por ciento del territorio estatal, siete localidades concentran 73 por ciento de la población y colinda con municipios de tres diferentes regiones: al noreste con Mochitlán y Quechultenango, al noroeste Chilpancingo de la zona Centro, al oeste con Acapulco de Juárez, al sur con San Marcos y al sureste con Tecoanapa de la Costa Chica.
Su ubicación es estratégica porque es paso para las carreteras federal y de cuota México-Acapulco, y la desviación hacia Costa Chica que entronca con la carretera nacional Acapulco-Pinotepa Nacional.
La versión más extendida del conflicto entre los grupos armados es la disputa por el control de las vías de comunicación, que también representa un corredor de droga que se produce en la zona. El coordinador de la Policía Comunitaria del FUSDEG en Chilpancingo, Salvador Alanis, siempre sostuvo que la UPOEG quería disponer de este corredor y señaló al líder de esa organización, Bruno Plácido Valerio de tener vínculos con el crimen organizado.
Maximino Alejo de Juan R. Escudero denunció que la UPOEG se alió con un grupo delictivo de la sierra para desplazar al FUSDEG de Chilpancingo, en particular de El Ocotito.
Acusó al jefe de la Policía Ciudadana Deivid Barrientos, antes lugarteniente del FUSDEG en El Ocotito, de fracturar la estructura municipal, agruparse con la UPOEG en el valle de El Ocotito y aliarse con Plácido Valerio para derrotar a sus compañeros. En este marco, indicó que ocurrió la confrontación en Tlayolapa el 24 de octubre, con un saldo de siete muertos.
Recordó que la UPOEG cruzó los límites hacia Tierra Colorada, llevó grupos de policías ciudadanos de Costa Chica a una comunidad que se encuentra a 5 minutos de la cabecera municipal, rodeando los retenes de policías estatales del crucero de San Juan del reparo y de militares en Las Mesas.
En Tierra Colorada ya los esperaban parapetados los comunitarios del FUSDEG y los ciudadanos que los apoyan regresaron por el mismo camino que llegaron, a través de Michapa y La Estrella pero se desviaron en dirección a Xolapa, donde los comunitarios ya estaban alertados de su presencia.
El viernes ocurrió lo mismo. Señaló que la UPOEG quiso entrar armada al municipio pero los obligaron a retroceder, con una baja del FUSDEG.
Aclaró que los grupos de la Policía Ciudadana de la UPOEG de Ayutla les enviaron hace dos días un comunicado para aclarar que siguen organizados como UPOEG pero ya no responden a las ordenes de Plácido Valerio ni de su comandante Ernesto Gallardo. Lamentó que con engaños usen grupos de Tecoanapa para pelear por intereses que no son los del pueblo.
Por separado las mujeres denunciaron que el gobernador Héctor Astudillo protege a Plácido Valerio, así como el alcalde, si embargo aseguraron que no van a ceder ante los gobernantes, que nada han hecho por la seguridad de los ciudadanos.

 

Encuentran una osamenta humana en Chilpancingo

La tarde de ayer fue encontrada una osamenta en un predio en la colonia Zimapa en el asentamiento San Juan al oriente de la capital.
Según fuentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) a la 1:37 de la tarde recibieron un reporte de que estaba un cuerpo cerca de la tienda Bodega Aurrerá en la colonia Galeana al norte de la ciudad.
Agentes de la Policía Municipal, estatal y ministeriales llegaron a la zona y les informaron que habían restos óseos en un predio en la mencionada colonia.
Según testigos, un hombre hacía limpieza en su predio y halló los restos óseos.
Trabajadores del Servicio Médico Forense (Semefo) recogieron los restos humanos, después fueron enviados para hacer las pruebas de ADN y ser identificados.
Las autoridades de la Fiscalía no precisaron  cuántos huesos recolectaron, además una perito se cayó al hacer las diligencias y fue atendida por paramédicos de Protección Civil (PC) estatal.

Vigilan Tierra Colorada 500 policías estatales tras el enfrentamiento entre el FUSDEG y la UPOEG

Unos 500 policías estatales resguardan las entradas y salidas de Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero, luego de que el jueves se enfrentaron a balazos policías comunitarios del Frente Unido para la Seguridad y Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y policías ciudadanos de la Unión de Pueblo y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), que dejó un hombre muerto.
En un recorrido en la cabecera municipal de Tierra Colorada en la entrada de la carretera federal Acapulco-México cerca del entronque de la Autopista del Sol estaban unos 30 policías estatales apostados en esta zona, los agentes hacían revisiones a los automovilistas que transitaban y les informaban que tuvieran precaución por los hechos que ocurrieron en el lugar.
Asimismo en otro punto en la salida de Tierra Colorada con dirección a Chilpancingo por la carretera federal había unos 10 uniformados que resguardan la zona para impedir que entren los policías ciudadanos de la UPOEG que tienen presencia en El Ocotito que está a unos 30 minutos de Tierra Colorada.   
Un policía estatal informó que unos 500 policías estatales de las regiones de Acapulco, Costa Grande, Tierra Caliente y Centro llegaron la noche del jueves y que se dispersaron en la cabecera municipal para evitar que entraran los policías ciudadanos de la UPOEG para evitar otro enfrentamiento armado.
“Llegamos el jueves en la noche para evitar que ocurra otra balacera y estamos regados en las entradas y salidas de Tierra Colorada para que no entren los policías ciudadanos de la UPOEG para evitar otra balacera y realizamos revisión a los automovilistas y darles información que estén atentos en caso de que paso un enfrentamiento”, declaró.
El jueves, el policía comunitario del FUSDEG, Jesús Eloíso Contreras de 22 años fue asesinado por policías ciudadanos de la UPOEG en uno de los cuatro enfrentamientos en Tierra Colorada.
 El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en las comunidades Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamientos armados como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R Escudero, que dejó siete hombres muertos.
El FUSDEG ya fue desplazado de Petaquillas, El Ocotito y Xaltianguis pero tiene presencia en Tierra Colorada.

Condena la Codehum el ataque a periodistas en Tierra Colorada

La Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) reprobó los hechos de violencia en Tierra Colorada entre el FUSDEG y la UPOEG, y condenó el ataque a balazos a periodistas que quedaron en el fuego cruzado.
En un comunicado la Codehum señala que “son inconcebibles las expresiones de violencia entre el FUSDEG y la UPOEG, dos grupos que surgieron con la noble intención de brindar seguridad a la ciudadanía. La lucha que sostienen ambas agrupaciones armadas por el control de los territorios ha dejado a la población indefensa y en medio de dos fuegos cruzados”.
El presidente del organismo, Ramón Navarrete Magdaleno mantuvo comunicación permanente antes, durante y después del ataque contra los reporteros, asegura en el escrito.
Detalla que desde el primer momento, de su área de Comunicación Social Alondra García estuvo de manera permanente con los reporteros, los estuvo monitoreando.
Posteriormente el segundo visitador general, Fernando Esteban Ramírez se trasladó al lugar, sin embargo no pudo a donde se encontraban los reporteros, y sólo llegó a la comunidad de Garrapatas, a unos 40 minutos de recorrido, precisó Comunicación Social de la Codehum.
“La labor informativa realizada por los periodistas en la zona de riesgo resulta invaluable para conocer el contexto real del conflicto. Por ello, esta comisión exhorta a los tres niveles de gobierno a garantizar las condiciones de seguridad”, dice en el escrito. (Beatriz García / Chilpancingo).

Intenta la UPOEG entrar a Tierra Colorada, se enfrenta al FUSDEG y mata a un comunitario

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El policía comunitario del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), Jesús Eloíso Contreras de 22 años fue asesinado por policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en uno de los cuatro enfrentamientos de ayer en Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero.
El FUSDEG y la UPOEG se disputan desde octubre el corredor de Chilpancingo a Acapulco en las comunidades Petaquillas, El Ocotito, Tierra Colorada y Xaltianguis, lo que ha provocado movilizaciones y enfrentamiento armados como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero, que dejó siete hombres muertos.
El FUSDEG ya fue desplazado de Petaquillas y El Ocotito pero tiene presencia en Tierra Colorada, a donde ayer intentó irrumpir la UPOEG con armas de grueso calibre.

En Plan de Lima, la primera
balacera

Según fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, a las 9:10 de la mañana reportaron un enfrentamiento entre los dos grupos en la comunidad de Plan de Lima, Tierra Colorada, sin embargo policías comunitarios informaron que fueron balazos al aire porque había tensión, ya que la UPOEG pretendía entrar a la cabecera municipal.
Ante la amenaza de irrupción de la Policía Ciudadana a Tierra Colorada, unos 100 policías comunitarios se desplegaron entre los cerros en las entradas y salidas a Acapulco y Chilpancingo para resguardar la cabecera municipal.
Después de las 11:40 de la mañana ocurrió un enfrentamiento armado en la entrada del entronque de Tierra Colorada y la Autopista del Sol, que duró más de una hora y media.
Un grupo de unos 10 policías comunitarios estaban dispersos en la loma de un cerro cerca del restaurante El Mexicano para contener al otro grupo, los comunitarios se refugiaron entre piedras y matorrales.
Mientras que unos 10 policías ciudadanos de la UPOEG a bordo de tres camionetas estaban en la entrada de la carretera federal México-Acapulco con dirección a la comunidad Papagayo.
Durante una hora y media se escucharon detonaciones de armas de fuego y cuatro patrullas de la Policía Federal de Caminos impidieron el paso de los automovilistas, particulares y del transporte público para que las personas no quedaran entre el fuego cruzado. Además había un helicóptero del gobierno estatal sobrevolando el lugar.
Cuando ocurrió este enfrentamiento armado, a las 12 del día, vecinos y promotores del FUSDEG bloquearon la carretera federal México-Acapulco frente a su comandancia en la colonia San José para impedir la entrada de la UPOEG, además sonaron las campanas de la Iglesia para que alertar a los vecinos.
En el bloqueo los pobladores impidieron el paso a los automovilistas como forma de presión para que las autoridades de los gobiernos del estado y federal intervinieran en el conflicto de los grupos de civiles armados.
Después de la 1:30 de la tarde terminó el segundo enfrentamiento, no se reportaron heridos ni muertos. Los policías comunitarios del FUSDEG se replegaron y cuidaron los límites de Tierra Colorada pero poco a poco los integrantes de la UPOEG se acercaron a la cabecera municipal.
A las 3:50 de la tarde comenzó otra balacera cerca de donde ocurrió el segundo enfrentamiento, más cerca a Tierra Colorada, donde fue asesinado el policía comunitario del FUSDEG Jesús Eloíso Contreras de 22 años, su cuerpo quedó tendido boca abajo en la carretera federal México-Acapulco cerca del entronque de Tierra Colorada.
Los policías ciudadanos de la UPOEG recogieron el cuerpo de la víctima y hasta las 12 de la noche se desconocía en dónde estaba.
El tercer enfrentamiento duró más de 20 minutos cuando los policías ciudadanos estaban más cerca de la cabecera municipal, en este hecho no había policías federales, estatales, ministeriales ni militares para resguardar la zona.

Reporteros y agentes de gobierno quedan en el fuego cruzado

Un grupo de 15 reporteros y agentes de gobierno infiltrados en el gremio quedaron atrapados en el fuego cruzado durante unos 20 minutos, cuando ocurrió el cuarto enfrentamiento entre los dos grupos, más cerca de la cabecera municipal.
Los comunicadores escucharon un balazo cerca del lugar donde se refugiaban en la orilla de la carretera federal México- Acapulco, se tiraron al suelo pecho a tierra a un lado de una camioneta para protegerse de las balas. Fue a las 4:10 de la tarde cuando comenzó este último enfrentamiento armado entre la UPOEG y el FUSDEG.
Los comunicadores que estaban tendidos en el suelo y junto a una camioneta blanca para refugiarse de las balas gritaban, “amigos nos vamos a mover, somos prensa no disparen, por favor confirmen”, “estamos en un fuego cruzado” y “la prensa se va mover”.
Algunos transmitieron en vivo mediante la red social Facebook. Después de 20 minutos, en un lapso de un minuto no se escucharon disparos y los reporteros corrieron unos 200 metros a refugiarse a sus vehículos para dirigirse a una zona más segura cerca de la cabecera municipal.
Cuando los trabajadores de los diferentes medios de comunicación llegaron a sus vehículos se escucharon otros balazos, parecía una agresión directa pero no se pudo determinar qué grupo era el que les disparaba.
Ahí el vehículo del agente de gobierno, al parecer de la Secretaría de Seguridad Pública, Miguel Rodríguez quien se presenta como fotógrafo de Expresión Popular, recibió dos impactos de bala en el medallón y dos en el techo del i10 Dodge Hyundai gris.

El bloqueo y la marcha de vecinos de Tierra Colorada

Unos 150 vecinos de Tierra Colorada bloquearon de manera intermitente la carretera federal México–Acapulco frente a la base comunitaria del FUSDEG en la colonia San José desde el mediodía, cuando se enteraron que había muerto uno de los policías comunitarios y que la UPOEG intentaba entrar a la cabecera municipal.
A las 4:30 de la tarde marcharon vecinos y otro grupo a bordo de un autobús fue a la entrada del crucero de la Autopista del Sol, donde ocurrió una de las balaceras, ahí bloquearon de manera intermitente y rescataron a un policía comunitario que estaba escondido en la loma de un cerro.
Después llegaron a donde estaba el cuerpo del comunitario caído pero el cadáver ya no se encontraba, “los policías de la UPOEG se llevaron el cuerpo del compañero que murió defendiendo su pueblo”, declaró un testigo.
Ante el nulo apoyo de los gobiernos municipal, estatal y federal y de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) los pobladores avanzaron otros 500 metros, y a las 6 de la tarde bloquearon un carril a la Autopista del Sol.
Los manifestantes estaban a unos 200 metros de 50 policías ciudadanos de la UPOEG en la carretera federal que se dirige a Acapulco.
Uno de los inconformes pidió “somos pueblo y si no hay condiciones nos vamos a armar, nosotros queremos paz y tranquilidad, la Policía Ciudadana que se vaya a Chilpancingo y a Acapulco para hacer limpieza”.
Comentó que están satisfechos con el FUSDEG, “estamos bien con los comunitarios, no queremos a Bruno Plácido Valerio (el dirigente de la UPOEG), para brindar seguridad que se vaya a otros lugares”.
Después de 8 horas de enfrentamientos armados entre la UPOEG y el FUSDEG llegaron unos 70 policías estatales al bloqueo para intervenir en el conflicto y resguardar la zona.
Llegó el subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría General de Gobierno, José Martín Maldonado del Moral y se reunió con los vecinos de Tierra Colorada que se manifestaron.
Una vecina que se reservó su nombre informó que los acuerdos fueron que hoy se reunirán integrantes del FUSDEG y la UPOEG en Palacio de Gobierno, además que los policías estatales pedirán a los policías ciudadanos de la UPOEG que se replieguen a Xolapa en Acapulco, y no invadan el territorio de Tierra Colorada donde opera el FUSDEG, para evitar otra confrontación.
A las 7:30 de la noche los inconformes se retiraron del bloqueo en la entrada de la Autopista del Sol en Tierra Colorada y se restableció la circulación vial, sin embargo los comunitarios del FUSDEG se quedaron desplegados en la cabecera municipal para evitar la entrada de la UPOEG.
La Policía Ciudadana de la UPOEG avanza poco a poco al territorio donde opera el FUSDEG, el 7 de noviembre policías ciudadanos y pobladores de El Ocotito tomaron la base de esa organización y ésta se replegó a Tierra Colorada.
Hace seis días policías ciudadanos de la UPOEG instalaron un retén en la salida de Xaltianguis hacia Tierra Colorada.
El lunes pobladores, comisarios municipales y autoridades agrarias de la comunidad de Xaltianguis y poblados cercanos, en una asamblea acordaron dejar las filas del FUSDEG y regresaron a la UPOEG.

No hay reportes de muertos en el enfrentamiento de Tierra Colorada, dice el vocero

El gobierno del estado mediante el vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia informó que no se tiene confirmada la muerte de un integrante del FUSDEG en el enfrentamiento.
Álvarez Heredia dijo que la única información sobre los hechos es que hubo un enfrentamiento y que no hay una postura del gobierno al respecto.

Disparan policías del FUSDEG a una camioneta en Tierra Colorada; retienen a los tripulantes

Policías Comunitarios del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) dispararon contra una camioneta en Tierra Colorada y detuvieron a sus tripulantes.
Vecinos de la colonia San José de ese poblado, que es la cabecera municipal de Juan R. Escudero, informaron de una fuerte balacera a las 9 de la noche.
Fuentes del FUSDEG confirmaron que hubo disparos, relataron que frente a su base que se encuentra a un costado de la carretera federal el chofer de una camioneta se negó a detenerse para una revisión, y le dispararon.
El vehículo se detuvo y los policías comunitarios retuvieron a los tripulantes, pero no se informó cuántos eran.

Niegan FUSDEG y UPOEG que utilicen armas de alto poder ante la amenaza de desarme

 

 

El Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) aseguraron que portan armas de bajo calibre y legales, ante la advertencia de un posible desarme a quienes utilicen armas de uso exclusivo del Ejército.
El miércoles el director regional de delegaciones de la Secretaría de Gobernación Juan Salgado Brito advirtió que puede darse un desarme de las policías comunitarias en el estado, si usan armas exclusivas del Ejército o si salen de sus territorios.
Al respecto la promotora de desarrollo comunitario del FUSDEG, Ruth Delgado señaló que la organización no tiene ningún inconveniente en que la Secretaría de Gobernación (Segob) tenga entre sus planes el desarme.
“Nos amparamos en la Ley 701, porque dice que esa ley es para pueblos originarios. Nos adjudicamos y es una cuestión de identidad, no es una cuestión de que alguien va a venir y decir ustedes son esto, pertenecen a esta etnia, no pertenecen a esta otra, entonces eso no lo determina nadie, lo determinamos nosotros, los pueblos. No tenemos ningún inconveniente en que ellos hagan lo que tengan que hacer”.
Agregó que también hay acuerdos a nivel internacional que defienden y amparan a la organización y a todas las policías comunitarias que operan en el estado.
Resaltó que con las armas de alto poder no tienen inconveniente, además que si el estado o Gobernación les garantiza la seguridad se replegarán sin necesidad de que haya un desarme con violencia y sangre.
La promotora subrayó, “nosotros aceptamos el desarme, aceptamos replegarnos pero que primero pudieran  quitarle todas las armas de alto poder que traen  los grupos delincuenciales que operan a nuestro alrededor, si hacen eso, felices nosotros”.
Aseguró que las armas que utiliza FUSDEG no son las exclusivas de las fuerzas armadas.
Indicó que las autoridades han aceptado que hay ingobernabilidad en Guerrero porque el narcotráfico ha sobrepasado los límites, y que entonces en este contexto es entendible que el pueblo haya tomado la decisión de defender la vida.
“Es absurdo que venga (Gobernación) a decir que habrá un desarme cuando no están garantizando nada, al contrario, con esto están provocando que en otras zonas también se levanten las autodefensas, también se levante la gente armada y ahí sí ya no con armas de bajo calibre”, sostuvo Ruth.
Consultado telefónicamente el líder de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio respecto del anuncio de Salgado Brito recalcó que esa organización trabaja mediante asambleas en coordinación con los municipios.
Refirió que mientras la UPOEG esté cumpliendo con el objetivo de dar seguridad a la población con base en un protocolo de legitimidad ante la asamblea comunitaria, no hay ningún problema.
Sostuvo que “el señor Juan está hablando que aquellos que utilizan el nombre de policía comunitaria no están cumpliendo el objetivo de policía comunitaria, ellos hablan de ese tipo de grupos”.
–¿Se refiere al FUSDEG?
–No sé a quién se refieran ellos pero están hablando de gente que se posicionan como policía ciudadano o comunitario, pero que no están cumpliendo el objetivo de cuidar a los pueblos, pero se escudan en la membresía de policía comunitario o policía ciudadano, de eso están hablando ellos.
Aseguró que su organización no tiene conflicto porque hay un respaldo de la población y cumplen su objetivo de dar seguridad.
–¿Qué tipo de armas utiliza UPOEG?
–La básica, las que son permitidas por  la ley.

El FUSDEG lo torturó e involucró a la UPOEG en su autosecuestro, se retracta Castro Jaimes

El vecino de Tierra Colorada, la cabecera municipal de Juan R. Escudero, Facundo Castro Jaimes interpuso una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) contra el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), aseguró que mientras estuvo detenido fue torturado y amenazado de muerte por tres comandantes de esa agrupación.
Se retractó de su declaración de este martes ante los medios de comunicación cuando fue liberado por el FUSDEG, cuando aseguró que no sufrió ningún tipo de agresión y que integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) lo obligaron a autosecuestrarse para poder irrumpir en Tierra Colorada.
Ayer en conferencia de prensa en la plaza de la Libertad de Expresión en Chilpancingo, Castro Jaimes informó que fue detenido porque él y un grupo de vecinos de la colonia Ruffo Figueroa en Tierra Colorada, se organizaban para formar una Policía Rural para protegerse de la violencia en la zona, lo que causó inconformidad en el FUSDEG.
Precisó que esa organización lo ha detenido en dos ocasiones, primero el 10 de septiembre y otra el 23 de octubre. Fue liberado este martes 8 de noviembre.
“La segunda vez que estuve detenido por los del FUSDEG me torturaron, me ponían una bolsa con chile, me daban patadas y puñetazos, me dijeron que mi libertad sería si yo le echaba la culpa a Medardo Nava y a Israel Espinosa (ambos simpatizantes de la UPOEG) de convencerme para cometer un autosecuestro”, indicó.
Acusó a Caritino Hernández Dorantes, José Dolores Juárez Tolentino y Rogelio Gerardo Cortés de torturarlo y amenazarlo de muerte, motivo por el que tuvo que decir que no fue golpeado.
Aseguró que su primer declaración el miércoles fue “bajo tortura, porque que si no me retractaba no me iban a dejar libre, además me iban a matar. Tengo temor de que me maten, incluso tuve que salirme junto con mi familia de Tierra Colorada”.
Castro Jaimes comentó que ante las amenazas y la tortura interpuso una denuncia en la Fiscalía para que investigue y detenga a los integrantes del FUSDEG, “tuve que involucrar a los de la UPOEG en algo que no hicieron”. Pidió que todo se desmienta y que “salga la verdad a la luz”.

El enfrentamiento en Tlayolapa fue por un autosecuestro de la UPOEG, dice la supuesta víctima


El Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) liberó a un hombre que tuvo detenido 10 días en Tierra Colorada acusado de autosecuestro para implicarlos, lo que generó la incursión de la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en Tlayolapa que dejó a siete hombres muertos.
Ayer al mediodía a la base del FUSDEG en Tierra Colorada llegaron los familiares de Facundo Castro Jiménez para recibirlo, después de una revisión de visitadores de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum).
Facundo Castro reconoció ante el presidente de la Codehum Ramón Navarrete Magdaleno, que fue “animado” por integrantes de la Policía Ciudadana de la UPOEG para fingir su secuestro, responsabilizar al FUSDEG, y así justificar la irrupción.
Después de una plática privada al interior de la base, en el patio del área donde tienen a los detenidos se reunieron representantes del FUSDEG, de la Codehum, el detenido y su familia, ahí Facundo Castro reconoció que durante su encierro no fue maltratado físicamente y fue alimentado, también se disculpó por “hacerles caso” a quienes lo alentaron a fingir el rapto.
El detenido pidió también al comandante del FUSDEG que no lo dejaran solo y preguntó si podía recurrir a ellos “por cualquier cosa”, por temor a represalias de las personas con las que estaba organizado.
La respuesta fue que estarían al pendiente de lo que necesitara pero también acordaron que retiraría la denuncia que presentó ante la Fiscalía General del Estado por secuestro, en contra de un policía comunitario.
La Codehum acudió al lugar después de que el FUSDEG pidió su presencia como testigo de que el detenido no fue agredido y que tenía buen estado de salud, para eso el presidente del organismo ofreció trasladarlo a Chilpancingo para ser examinado por un médico, pero la familia y Facundo Castro se negaron porque consideraron que no era necesario.
Pedro Vázquez Ramos, uno de los asistente a la reunión lamentó que Facundo se haya dejado engañar por integrantes de la UPOEG “como muchos otros”, porque dijo que la intención era “someternos”, y negó las versiones de que a los detenidos los torturan.
“Mientras haya personas como don Facundo que se presten a ese juego vamos a estar en riesgo”, lamentó.
Un consejero municipal del FUSDEG detalló que el detenido confesó que lo convencieron de cometer el autosecuestro Israel Hernández de la colonia Rufo Figueroa y Medardo Nava García que vive en San Marcos, ambos simpatizantes de la UPOEG.
El comandante Maximino Alejo comentó que el detenido confesó que la intención era afectar al FUSDEG para justificar la entrada de la UPOEG al municipio, y consecuencia “se vino lo de Tlayolapa, el enfrentamiento a balazos donde hubo muertos”.
Al lugar llegaron familiares del campesino Inocencio Sánchez Ramírez de 65 años, quien sufre de presión alta y tiene miopía, fue privado de su libertad por integrantes de la UPOEG durante la irrupción en Tlayolapa.
Los familiares estaban preocupados porque en un primer contacto con integrantes de la UPOEG confirmaron que tenían detenido al señor, pero en una segunda comunicación les informaron que ya lo habían buscado pero que no sabían de él.
Durante la reunión Maximino Alejo habló por teléfono con “una persona” que tiene comunicación con un consejero de la UPOEG en Los Sauces, Tecoanapa, quien le informó que el señor Inocencio sí está en esa comunidad detenido, que está bien de salud y que están planeando su liberación.

Los Ardillos vigilan Petaquillas

Al comandante del FUSDEG Maximino Alejo se le preguntó por la situación de Petaquillas donde fue retirado el retén que tenían en la entrada al pueblo, y comentó que “la policía del FUSDEG de la nada desapareció”, pero dijo que desconoce los motivos.
Sin embargo “al parecer al pueblo lo vigilan Los Ardillos, un grupo delictivo que está por el Circuito Azul, parece ser que ellos vigilan de noche el pueblo porque ya no hay ninguna policía ciudadana”, dijo en referencia al grupo criminal que opera en Quechultenango, tiene su bastión en Tlanicuilulco y es encabezado por familiares del ex diputado local del PRD, Bernardo Ortega Jiménez.
El comandante dijo desconocer detalles de la situación en Petaquillas pero apuntó que lo que conocen es que ya están Los Ardillos buscando entrar a la comunidad pegada a Chilpancingo.

Buscará acercarse a simpatizantes del FUSDEG, dice la UPOEG tras la toma de El Ocotito

Durante el segundo día de ocupación de El Ocotito, municipio de Chilpancingo, de policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) llegaron al pueblo 19 patrullas de la Fuerza Estatal y decenas de uniformados se pusieron cerca de la carretera.
La Policía Estatal llegó y se colocó en la entrada del pueblo rumbo a Juan R. Escudero (Tierra Colorada), municipio hacia donde se replegó el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG).
Mientras que la UPOEG informó que buscará un acercamiento con los vecinos que simpatizan con el FUSDEG.
En tres entradas del pueblo hay retenes de la Policía Ciudadana de la UPOEG: en la que va hacia Chilpancingo y una que lleva a la Autopista del Sol y la parte serrana, mientras que la salida hacia Tierra Colorada está fuertemente reforzada con 19 patrullas de la Fuerza Estatal y decenas de policías.
En un recorrido por la población se vio a una de las patrullas circular por la calle principal de la comunidad, mientras las otras 18 permanecían en la entrada.
En el pueblo aparentemente continúan las actividades normalmente, el pequeño mercado estaba activo y todos los negocios abiertos.
Consultado el la noche el comisario Gil Ramírez Cortes (desconocido por el Ayuntamiento de Chilpancingo) afirmó que “la gente está contenta y recuperando la confianza, la pesadilla terminó para nosotros”.
Comentó que en la tarde tuvieron una asamblea en la Comisaría y los acuerdos con la UPOEG fueron “reestructurar y levantar el pueblo en todos los aspectos, porque fue muy lastimado por estos compañeros”, y enviar el mensaje a los ciudadanos de que tienen la capacidad de darles seguridad “con paz”.
Otro de los acuerdos fue que buscarían a los vecinos de la población que estaban con el FUSDEG, “porque fueron engañados” y si quieren acercarse a la UPOEG los aceptarán.
En la reunión estuvieron unas 70 personas entre consejeros y asesores de la Comisaría, quienes acordaron difundir los acuerdos entre la población.
Dijo que hasta ayer en la noche ninguna autoridad del estado ni del municipio los ha buscado para conocer la situación en la comunidad, que únicamente llegaron las patrullas.

Ocupan policías de la UPOEG El Ocotito y entran a la base comunitaria del FUSDEG, que se repliega a Tierra Colorada

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Policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y pobladores de El Ocotito tomaron la mañana de este lunes la base comunitaria del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), luego de que este grupo se replegó a Tierra Colorada en la madrugada, en la disputa del territorio de las dos organizaciones.
El hecho ocurrió a las 11:50 de la mañana luego de que el domingo la UPOEG entró a la zona pero estuvo separada de integrantes del FUSDEG por un retén de policías estatales, para evitar más enfrentamientos como el ocurrido el 24 de octubre en Tlayolapa, Juan R. Escudero, que dejó a siete hombres muertos.
Por su parte el alcalde priista de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena dijo que por el conflicto de El Ocotito sólo puede intervenir mediante el diálogo, porque entre la UPOEG y el FUSDEG conforman más de 600 hombres armados y el municipio sólo cuenta con 119 policías municipales.
Los pobladores de la comunidad y policías ciudadanos de la organización no entraron a las dos casas que ocupaban los policías comunitarios como comandancia, porque no acudieron funcionarios del municipio ni del gobierno del estado a hacer un inventario.
Unos 100 policías ciudadanos de la UPOEG llegaron en camionetas y automóviles a la base del FUSDEG de El Ocotito ubicada en la salida de la población en la colindancia con la comunidad Mohoneras, en la carretera federal México-Acapulco. Se les vio con armas de grueso calibre como AR-15 y AK-47.
Un vecino de El Ocotito comentó que desde hace tres años policías comunitarios del FUSDEG tenían presencia en ese lugar tras separarse de la UPOEG.
A pesar de que había un retén de la Policía Estatal con cinco patrullas y más de ocho policías estatales cerca de la Comisaría municipal, entraron policías ciudadanos y pobladores sin violencia a tomar el control de la base de la comunitaria.
Este conflicto por la disputa del territorio de Xaltianguis en Acapulco, Tierra Colorada en el municipio Juan R. Escudero y El Ocotito y Petaquillas en Chilpancingo, ha causado movilizaciones y enfrentamientos armados entre los dos grupos.
Los policías ciudadanos hicieron recorridos en camionetas y a pie para buscar a policías comunitarios, y evitar un ataque armado o confrontación.
En un recorrido en las dos casas que ocupaban los comunitarios como base había mujeres haciendo comida, y la otra vivienda estaba cerrada pero debajo de unas escaleras se encontraron bombas molotov. Al retirarse los comunitarios la madrugada de ayer los 20 retenidos que tenían escaparon, entre ellos un comandante de Petaquillas que fue torturado a golpes, “le echaron clarasol en la narices y fue atendido por Protección Civil municipal”, según una fuente de la UPOEG.
Una vecina de El Ocotito que vive cerca de la base del FUSDEG relató que en una de las casas hay un calabozo donde metían a los detenidos, los torturaban y sólo les daban de comer una tortilla, “mientras que en otro cuarto tenían a mujeres a quienes violaban”.
Por su parte el vecino Santiago García Chalma relató que el 20 de junio su hijo, dos yernos y su nieto fueron detenidos de manera irregular por los policías comunitarios, quienes los acusaron de secuestro y fueron entregados a la Fiscalía General del Estado (FGE), y ahora están recluidos en la cárcel en Chilpancingo.
García Chalma pidió la intervención del gobierno del estado para atender sus demandas pero no ha tenido respuesta, “sufrieron maltratos por parte de los comunitarios a pesar de que son inocentes, fueron trasladados a la cárcel de Chilpancingo, presentamos una denuncia en la Fiscalía que a la fecha no hemos tenido solución, los verdaderos secuestradores están libres”.

Pidió acompañamiento del Ayuntamiento y del gobierno del estado pero no le hicieron caso, dice Gil Ramírez

Por su parte en conferencia de prensa, el comisario interino desconocido por el Cabildo de Chilpancingo, Gil Ramírez Cortés se quejó de que el Ayuntamiento de Chilpancingo y el gobierno del estado no acudieron a la base comunitaria del FUSDEG para hacer un inventario de la comandancia “de manera general tomar el inmueble”.
Comentó que la Policía Ciudadana de la UPOEG tomó el control de la comunidad con retenes “para que continúe la paz y seguridad” en la zona.
“Me comuniqué con trabajadores del Ayuntamiento, no me contestaron y después le llamé al director de Gobernación de la Secretaría General de Gobierno, Jesús Vargas Vargas, dijo que enviaría a trabajadores del gobierno del estado para ingresar a las dos casas de la base del FUSDEG, pero que después de consultar a sus jefes no tenía la facultad de venir para realizar un inventario, lo cual no ocurrió”, se quejó.
Agregó que pedirá a un agente del Ministerio Público de la Fiscalía del estado o del gobierno federal que investigue las violaciones a derechos humanos de los policías comunitarios.
En Chilpancingo en la plaza Primer Congreso de Anáhuac el alcalde Leyva Mena manifestó que ha llamado al diálogo a las partes en conflicto, incluso el viernes platicó con el dirigente de la UPOEG Bruno Plácido Valerio para decirle el grado de conflicto en la zona, “es importante que entre los dos grupos armados se utilice el diálogo”.
Aseveró que emplazó a Bruno Plácido a que se construyan criterios de la portación de armas y la capacitación en derechos humanos de sus simpatizantes, y que aceptó.
Se le preguntó si cree que es suficiente el diálogo y respondió, “no tengo otra manera, el municipio tiene 119 policías, la fuerza armada del FUSDEG representa por si sola 150 hombres, los de la UPOEG tienen lo doble o triple, es decir que estamos hablando de un total de 450 a 600 personas armadas, las cuales no están reguladas, por eso a través del diálogo tratamos que entiendan”.
El acalde advirtió que si en estos momentos entra otra fuerza armada a la zona las cosas se pueden agravar, “por eso se deberá de ir acompañado con el diálogo permanente”.