Sin respuesta, la petición que entregó a comitiva de AMLO ni de la delegada del IMSS: Bolívar Rojas

Emiliano Tizapa Lucena

Chilpancingo

El hijo de la médica cirujano Adela Rivas Obé, Bolívar Darío Rojas Rivas denunció que a más de 20 días de entregar documentos a la comitiva del presidente Andrés Manuel López Obrador en su visita a Acapulco, y de dialogar con la delegada del IMSS en Guerrero, Josefina Estrada Martínez, ninguna autoridad federal o estatal lo ha vuelto a contactar para darle seguimiento a su denuncia.
Reiteró que su exigencia es que el IMSS reconozca y denuncie el robo de medicamento que su madre investigaba, motivo por el que fue asesinada en 2016.
Ayer, vía telefónica, Rojas Rivas afirmó que luego de que entregó a mediados de febrero en Palacio Nacional un documento para que el presidente conozca el caso de su madre, que fue asesinada porque investigaba el robo de medicamentos, mismo que entregó el 28 de marzo al convoy donde se trasladaba el mandatario federal en su visita en Acapulco, no lo han contactado, en este caso, “correspondería a la federación porque estoy haciendo la solicitud de audiencia con el presidente para poder señalarle todas las anormalidades”.
Tampoco ha vuelto a contactar a la delegada del IMSS de Guerrero, Josefina Estrada Martínez, quien ese mismo 28 de marzo le aseguró que estaba pendiente de sus declaraciones ante los medios de comunicación, “y que su interés era atender el caso de mi mamá y de escuchar sus exigencias”.
Precisó que su principal exigencia al IMSS es que no solamente reconozca el robo de medicamentos que ya está asentado en la carpeta de investigación por el homicidio de su madre, que negó en el 2016 el anterior delegado, y ahora es necesario saber “cuánto era lo que se estaba robando (el asesino de su madre), desde cuándo se estaba robando, qué medicamentos estaban robando, porque la investigación que se hace por el homicidio de mi mamá, y para poder denunciar el robo de medicamentos el único facultado para ello es el instituto”.
Expuso que es necesario que se investigue aún sobre el robo, porque no se sabe cuánto estaban robando el ahora sentenciado, y precisó que en la carpeta de investigación trasciende que el robo de medicamentos en un mes ascendía aproximadamente a más de 100 mil pesos.
“Es un aproximado de un solo mes de lo que descubrió mi mamá que se estaban robando, entonces la exigencia hacia el IMSS es el reconocimiento del robo, la investigación de cuánto estaba robando y la denuncia, porque es muy importante ya que la sentencia que tiene el ahora detenido solamente es por el homicidio calificado”, comentó.
Manifestó que es necesario porque así el procesado respondería por todas las agravantes que le corresponden, y reclamó que la actual delegada prometió no darles la espalda como lo hizo siempre el IMSS, “desde el primer momento en que mi mamá desaparece hasta ahora, el IMSS no solamente nos ha dado la espalda, sino que nos ha puesto el pie en esta búsqueda de justicia”.
Insistió en que la declaración que hizo en 2016 el entonces delegado del IMSS, José Luis Ávila Sánchez les perjudicó porque la defensa del asesino, Edgar Arturo Cuéllar Bravo, utilizó el argumento para decir que si no había un robo de medicamentos y el IMSS estaba diciendo que no, por lo tanto, mi mamá no estaba investigando un robo y no era la causa del homicidio.
De la investigación que inició la Fiscalía General de la República (FGR) en febrero contra Cuéllar Bravo, por el delito de desaparición, comentó que se dieron cuatro meses de investigación complementaria, pero de la primera audiencia que se celebró, el 14 de febrero, aún no le han entregado los videos.
Informó que el pasado miércoles 12 de abril acudió a la sede del poder Judicial en Acapulco, porque mediante un oficio solicitó que le entreguen una copia de los videos de audiencia, “me interesa saber esto porque evidentemente nosotros como víctimas indirectas, queremos que se le sentencie con todas las agravantes que cometió el asesino, no solamente que le arrebató la vida a mi mamá, sino por secuestro, la torturó, ultrajó su cuerpo con una piedra y también él estaba haciendo un robo de medicinas”.
Afirmó que en junio terminaría el plazo de investigación complementaria y vendrán los alegatos para saber si se le sentencia o no por desaparición.
Llamó a las autoridades del IMSS a que no sean apáticas e insensibles, a que atiendan el caso de su madre, “nosotros estamos exigiendo lo justo por el caso de mi mamá, no estoy exigiendo otra cosa que no esté ya dentro de la carpeta de investigación que elaboró la Fiscalía General del Estado, creo que hay posibilidad de llevar una Cuarta Transformación en Guerrero y se debe de iniciar como dice el presidente dando justicia, porque solamente con ella podemos encontrar la paz en el estado”.
Exigió a las autoridades correspondientes que lo reciban, atiendan y escuchen su solicitud y se proceda conforme a la ley, agregó que seguirá buscando la forma para que el IMSS proceda, porque solamente intenta lavarse las manos y eximirse de toda responsabilidad.

El IMSS no denunció el robo que descubrió Adela Rivas, acusa hijo de la médica asesinada

Guillermo Rivera

El Sur / Ciudad de México

Hace un mes, familiares de la médica cirujana Adela Rivas Obé acudieron a Palacio Nacional con el propósito de exigir que se inicie un proceso por desaparición y que se investigue si hubo robo de medicamentos del IMSS, pues el descubrimiento de este hecho delictivo fue el motivo central del crimen.
Entre el 13 y 15 de febrero, Bolívar Darío Rojas Rivas, hijo de Adela Rivas, estuvo en Ciudad de México y acudió temprano a Palacio Nacional para buscar una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador, comentarle directamente las inconsistencias en la investigación judicial a nivel estatal y federal, y exigir justicia por la desaparición y asesinato de su madre, quien se percató del robo de medicamentos en farmacias del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guerrero, donde trabajó durante 25 años.
El cuerpo de la médica fue encontrado en la playa Majahua del municipio de Zihuatanejo el 11 de octubre de 2016, después de que se reportara su desaparición 23 días antes, el 22 de septiembre de ese año.
Entrevistado por El Sur mientras se manifestaba en la Ciudad de México, Bolívar Rojas denunció que el proceso ha sido lento, a tal grado de que apenas unos días antes la Fiscalía General de la República (FGR) informó a la familia de la víctima que había girado una orden de aprehensión contra el asesino, Edgar Arturo Cuéllar Bravo, quien cumple una condena de 38 años por homicidio calificado.
Rivas Obé tenía 52 años cuando fue privada de la vida tras haber sido desaparecida. Era directora de microzona del IMSS, donde también ejerció como médica cirujana. Tenía a su cargo la supervisión de clínicas de Zihuatanejo, Petatlán y La Unión. Vigilaba el abastecimiento de medicamentos y el funcionamiento de los equipos.
Su hijo Bolívar cuenta que en el expediente de la Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) está documentado que, como parte de sus labores en el IMSS, a Rivas Obé se le encomendó investigar un posible desabasto de medicamentos en la clínica 27 de Petacalco, ubicada en el municipio de La Unión. Ella descubrió que la persona responsable del abastecimiento era la misma que se hacía cargo de la farmacia, donde había un consumo no justificado de medicamentos.
“Mi mamá removió del cargo al encargado, y él la asesinó a ella, según la investigación”, enfatiza Rojas. “La fiscalía investigó que el encargado de farmacia estaba sustrayendo los medicamentos. El lo negó, aprovechando una declaración del entonces delegado estatal del IMSS, José Luis Ávila Sánchez, sobre que no había ese robo”.
Debido a la lentitud de la FGR y por estar involucrado el IMSS, sintetiza Bolívar, “es importante que el presidente conozca los detalles del caso”. Esas declaraciones públicas del IMSS, agrega, fueron usadas por la defensa del imputado cuando argumentó que si no había robo, tampoco homicidio por ese motivo.
“Sin embargo, la fiscalía de Guerrero determinó que él, al verse descubierto, intentó persuadir a mi mamá de que no lo denunciara. Mi mamá no aceptó y la asesinó”.
El inculpado no tiene sentencia por feminicidio ni por robo de medicamentos ni por desaparición. Solamente por homicidio.

Robo por 100 mil
pesos mensuales

El 22 de septiembre de 2016 Rivas Obé se trasladó a Zihuatanejo. Al otro día tenía agendada una reunión en Acapulco para entregar los resultados de su investigación e informar que había removido a una persona de su puesto por anomalías.
Desde la mañana del 22, sin embargo, se perdió contacto con la médica. Desapareció. Al principio, indica Bolívar, se creyó que se trataba de un secuestro. “Bajo ese delito levantamos la denuncia (ante la Fiscalía de Guerrero), porque mi mamá no apareció durante 23 días”.
El 11 de octubre siguiente, en una playa de Zihuatanejo, “se halló el cadáver sin blusa, en la que tenía bordado su nombre y el del IMSS. (Le quitaron la prenda) con la intención de que no fuera reconocido el cuerpo. Le dejaron caer una piedra en el rostro y su cuerpo fue abandonado en una barranca para que no fuera encontrado”.
Al presunto responsable lo detuvieron un mes después de la desaparición, el 24 de octubre de 2016. “La Fiscalía estatal lo investigó: mi mamá lo retiró del cargo porque descubrió que había sustracción de medicamentos; por eso él cometió la acción de asesinarla”, relata Bolívar.
Un arete de Adela Rivas fue encontrado en la cajuela del vehículo del sujeto. En una oreja de ella estaba el otro. “Se presume que el cuerpo de mi mamá estuvo en esa cajuela. Primero la desapareció y no sabemos si hubo tortura. Por la saña al cometerse el asesinato, exigimos una investigación e imputación del delito de desaparición y el castigo correspondiente a esa persona”.
Durante su estancia en Ciudad de México, Bolívar manifestó estas inconsistencias y también que en 2016 la familia interpuso una denuncia en la entonces Procuraduría General de la República (PGR) por desaparición, además de la primera denuncia por secuestro que había hecho ante la Fiscalía estatal.
“En estos años hemos enfrentado los amparos de esta persona (el homicida). Tememos que por ese dinero mal habido pueda quedar en libertad, y que por la omisión del IMSS de no reconocer el robo pueda seguir alegando tal cosa, cuando la investigación de la Fiscalía de Guerrero arroja que sí lo hubo”, expresa.
Las indagaciones de la FGE, además, confirmaron que desde 2009 “él estaba sustrayendo alrededor de 100 mil pesos mensuales en medicamentos robados”.

Por la omisión del IMSS,
el lento actuar de la FGR

Apenas este febrero la FGR se comunicó con la familia para notificar que se pidió una orden de aprehensión contra el imputado por el delito de desaparición.
“Esto quiere decir –explica Bolívar Rojas– que si queda libre del proceso de homicidio debido a que él ha promovido amparos contra la sentencia, después tiene una orden de aprehensión por desaparición, pero apenas se giró hace algunos días”.
Lamenta, por otro lado, que transcurrieran más de seis años para que esto fuera posible. “La denuncia por desaparición se hizo en 2016. Que se haya tardado tanto (la orden de aprehensión) no va con la justicia pronta y expedita que ordena la Constitución”.
Es por ello que frente al Palacio Nacional se denunció el proceso lento del caso en la FGR. “Estuvimos en la Ciudad de México para indicar que no se ha dado respuesta pronta a la denuncia por la desaparición de mi mamá. Además, le preguntamos a la FGR sobre el robo de medicamentos que estaba haciendo esta persona, y que consta en la investigación de la Fiscalía de Guerrero. Lo que nos dijo es que no puede investigar el robo de medicamentos si el propio IMSS no denuncia”.
Bolívar menciona que una auditoría interna del IMSS concluyó que sí existía un “faltante de medicamento” en la clínica que Rivas investigaba, “pero que no podría ser considerado un robo”, según el propio Instituto.
Por un lado, acusa, “la FGR actúa de manera lenta”, y, por el otro, “el IMSS actúa de manera indolente, aunque mi mamá estuvo 25 años al pendiente de la institución, investigó el robo de medicinas y por eso fue asesinada”.
“Es por todo esto que exigimos que al imputado se le agregue el delito de desaparición, o en su caso el delito de feminicidio, porque el asesinato fue hecho con mucha saña, cuando se le arrebató la vida de esa manera. También pedimos que haya una investigación de robo de medicinas”.

Pide hijo de Adela Rivas en Palacio Nacional atención del gobierno federal a su caso

El hijo de la doctora víctima de feminicidio en Zihuatanejo, Adela Rivas, Bolívar Darío Rojas Rivas se manifiesta este lunes frente a Palacio Nacional Foto: Juan Luis Altamirano

Juan Luis Altamirano Uruñuela

Ciudad de México

El hijo de la doctora víctima de feminicidio en Zihuatanejo, Adela Rivas, Bolívar Darío Rojas Rivas se presentó este lunes frente a Palacio Nacional con el objetivo de dar conocimiento al presidente Andrés Manuel López Obrador de la situación en la investigación del crimen contra su madre.
Rojas Rivas llegó a las 7 de la mañana de este lunes a Palacio Nacional buscando entablar un diálogo con el presidente o con funcionarios federales, porque dijo que el imputado sólo fue procesado por homicidio calificado y no por desaparición forzada.
En entrevista dijo que el objetivo de asistir a Palacio Nacional, es contar con atención personal del presidente López Obrador o de integrantes del gabinete federal sobre el caso de su mamá.
“Nuestra intención aquí es ser escuchados por personal del gabinete de gobierno, solicitamos una audiencia para poder platicar con ellos el caso de mi mamá”, agregó.
Expuso que piden que se investigue la desaparición de 23 días de Adela Rivas, además de que al señalado e imputado por el homicidio de su madre, también se le juzgue por desaparición forzada.
“El delito de desaparición forzada por el cual levantamos una denuncia ante la Procuraduría General de la República, no ha sido escuchado ese reclamo, esa denuncia en la cual nosotros exigimos que se le sentencie al detenido y sentenciado por el asesinato de mi mamá, que también se le culpe y se le juzgue por la desaparición de 23 días, por la que él fue responsable en contra de mi mamá”, dijo Bolívar.
Precisó que su madre desapareció el 22 de septiembre de 2016 y fue el 11 de octubre de ese mismo año cuando un cuerpo fue encontrado en un predio de la playa Majahua, en el municipio de Zihuatanejo.
Añadió que posteriormente se hicieron exámenes genéticos entre el cuerpo encontrado y él, y que el 19 de octubre se le informó que los restos pertenecían a su madre.
Comentó que la causa de muerte de Adela Rivas fue traumatismo craneoencefálico, mismo que fue provocado por un objeto contundente. Aclaró que después de dicha revelación, la Fiscalía General del Estado de Guerrero cambió la carpeta de investigación, pasando de ser secuestro a homicidio calificado.
Recordó que su madre investigaba un caso de robo de medicamentos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Dijo que la dependencia ha negado ese hurto y ha hecho caso omiso.
“Venimos aquí a exigir que el Instituto Mexicano del Seguro Social deje de darle la espalda a la familia, y responda ante el grave señalamiento que se le está haciendo de solapar un robo de medicamentos, que consta en la carpeta de investigación de la Fiscalía General del Estado de Guerrero y además, un robo de medicamentos que estaba investigando mi mamá”, expuso.
Rojas Rivas mencionó que el robo de medicamentos se daba en una de las clínicas que su madre tenía a su cargo, en el municipio de Zihuatanejo. Señaló que el homicida era el encargado de la farmacia de la clínica número 27 del IMSS, en el municipio de Petacalco.
Indicó que el Instituto nunca ha renocido el robo de medicamentos, por lo que al no darse esto el acusado ha podido promover amparos, afirmando que no existió el hurto y por tanto no se dio ningún homicidio.
“Desde el 2016 el imputado ha promovido amparos por la negativa del IMSS de reconocer el robo de medicamentos y eso lo usa para decir que si no hubo robo de medicamentos, por lo tanto no hubo un homicidio”, dijo Bolívar Darío.
Responsabilizó al poder Judicial de haber intentado “sabotear” la carpeta de investigación sobre el homicidio de su madre, reiterando que busca la atención del presidente López Obrador.
Momentos después de la llegada de Rojas Rivas acudió un contingente de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (ANUEE) con un mayor número de personas, por lo que Rojas decidió mantenerse hasta las 11 del día y dijo que hoy volvería.

Ya es un año en busca de justicia para la doctora asesinada Adela Rivas; su hijo relata el proceso

 

Familiares de la doctora del IMSS adscrita a la clínica de Petatlán, Adela Rivas Obé, toman evidencia con sus teléfonos celulares de las grabaciones de video cámaras de la Subdelegación administrativa del IMSS en Zihuatanejo, donde fue vista por última vez el jueves 22 de septiembre de 2016. La doctora pasó frente a la cámara con unos documentos en las manos .Foto: Brenda Escobar.

A un año del asesinato de la doctora asesinada, Adela Rivas Obé, su hijo Bolívar Darío Rojas Rivas informó que la primera audiencia que estaba programada para el 7 de agosto fue pospuesta porque los testigos de la defensa no habían sido notificados, y el tribunal integrado por los jueces María Luisa Nava Gregorio, Sergio Guzmán Chávez y Edgardo Mendoza Falcón quien funge como presidente del jurado, difirieron la audiencia para el 11 de septiembre, a pesar de que los testigos de las víctimas sí estaban.
Posteriormente, el 11 de septiembre sí se celebró la audiencia pero únicamente se desahogaron las declaraciones de testigos del lado de la víctima, el primero fue del propio Bolívar, hijo mayor de la doctora Adela Rivas Obé, quien detalló que su mamá el 21 de septiembre de 2016 le mandó un mensaje informándole que había terminado muy tarde de trabajar porque acudió a la clínica del IMSS en Petacalco, porque estaba investigando una pérdida de medicamentos en la farmacia de esa clínica.
El hijo de la víctima agregó que su mamá le dijo que el jueves 22 de septiembre de 2016 llegaría a Acapulco porque tendría una reunión de trabajo el viernes 23 de septiembre en ese puerto.
Sin embargo, la doctora no llegó al puerto y se preocuparon él y sus familiares, pero esperaron a que llegara el viernes 23 de septiembre después de la reunión pero no sucedió, relató.
Agregó que el sábado 24 de septiembre de 2016 él, su papá y otros familiares acudieron a buscar a la doctora a Petatlán, donde tenía su base, y desde donde ella dirigía las demás clínicas que tenía a su cargo que eran las de Petatlán, Papanoa, La Unión y Petacalco. Al llegar ahí platicaron con la señora Ada Peñaloza quien le vendía comida a su mamá, ella les dijo que la doctora había pasado a desayunar temprano con ella y que en días anteriores le había comentado que andaba investigando un robo de medicamentos en la farmacia de Petacalco, por eso estaba supervisando la clínica de ese lugar.
Después los familiares se trasladaron a la ciudad de Zihuatanejo y en la clínica 8 del IMSS de dicho lugar observaron en los videos de las cámaras de seguridad que la doctora Adela Rivas Obé llegó a las instalaciones a las 12:03 del día, y salió a las 12:38 aproximadamente. En ese momento se ve a su mamá con vida por última vez. Ese mismo día presentaron la denuncia en la Fiscalía Especializada Contra el Secuestro en Acapulco.
Agregó que entre finales de septiembre y principios de octubre de ese año la jefa inmediata de su mamá, María Teresa Díaz le dijo que ella le había ordenado checar un “faltante” de medicamentos en la clínica, y le proporcionó los nombres de los administradores de las tres clínicas que su mamá tenía a su cargo, en esa lista iba el nombre y teléfono de Édgar Arturo, el acusado de su asesinato.
Añadió que el 11 de octubre de 2016 se halló un cuerpo de una mujer en la playa La Majahua en Zihuatanejo, y acudieron a identificarlo pero debido al estado en que estaba no lo reconocieron. Entonces le tomaron muestras de ADN a él y a su tía Angelina Rivas y el 17 de ese mes la Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó que los restos correspondían a la doctora Adela Rivas Obé.
Continuó: el 23 de octubre del 2016 les informaron que fue detenido el encargado de la clínica de Petacalco, Edgar Arturo, como presunto homicida de la doctora.
Dijo que estaba seguro que Edgar Arturo es el culpable porque un arete de su mamá fue hallado junto a sus restos y el otro estaba en la cajuela del imputado. Además un testigo vio cuando Edgar Arturo estaba quemando unas pertenencias de su mamá el 23 de septiembre, un día después de la desaparición de la doctora, y de acuerdo con los datos de telefonía celular, las coordenadas del asesino indican que estuvo cerca de la clínica número 8 del IMSS de Zihuatanejo el 22 de septiembre del 2016 en la hora que su mamá se encontraba en ese lugar, y que además que ese mismo día ambos equipos celulares se quedan sin señal justo en el camino que conduce a playa La Majahua, en Zihuatanejo.
De la audiencia de ayer Bolívar Dario comentó que se vertieron los alegatos de clausura, donde la familia de la doctora solicitó a los jueces encargados del caso que hagan justicia a casi dos años de su asesinato el 22 de septiembre de 2016.
Indicó que a dos días que se cumplan dos años del asesinato de su mamá los familiares piden a los jueces que hagan valer el estado de Derecho.
Dijo que “no se puede hacer historia sin hacer justicia, pero tampoco se puede hacer justicia sin hacer historia, a casi dos años de la partida de mi mamá queremos pedir a los jueces que hagan historia haciendo justicia, haciendo justicia a nuestra familia, y también a las demás familias que han sido afectadas por la inseguridad en el estado”.
“Se debe hacer justicia también por las familias que han sido agredidas por feminicidas, familias a quienes les han arrebatado hermanas, esposas e hijas, esas familias que también están buscando aún a sus seres queridos, se debe hacer justicia para que nos devuelvan la paz y la tranquilidad, les pedimos a los jueces que no dejen libre a un feminicida porque Guerrero necesita paz”, agregó.
Indicó que los jueces han escuchado las versiones de ambas partes y la defensa del imputado únicamente se dedicó a desacreditar la investigación del robo de medicamentos que su mamá hacía, pero en ningún momento presentó alguna prueba que refutara la investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE).
“No se presentó alguna prueba que indicara que el inculpado fuera inocente, al contrario, la defensa presentó a testigos del IMSS quienes sólo defendieron a la institución pero nunca señalaron de ninguna manera que el detenido fuera inocente”, expuso.
Agregó que “nosotros no buscamos aclarar si hubo un robo de medicamentos en el IMSS, lo único que queremos es justicia por el asesinato de mi mamá y ya se dieron a conocer pruebas contundentes indicando la culpabilidad del detenido”.
Dijo que el tribunal para resolver el caso está integrado por los jueces María Luisa Nava Gregorio, Sergio Guzmán Chávez y Edgardo Mendoza Falcón quien funge como presidente.
Reiteró que los tres jueces han actuado de manera profesional, imparcial y con apego a la ley. “Les pidió que en base a las pruebas presentadas y con respeto a la ley dicten sentencia en contra del asesino de mi mamá”.
Agradeció a los agentes e investigadores de la Fiscalía Especializada Contra el Secuestro que testificaron en el juicio y expresó un agradecimiento especial a los ministerios públicos que están en la defensa jurídica del caso.

Estará en prisión durante la reposición del proceso legal el presunto asesino de la doctora Rivas

Un juez determinó que el presunto responsable del asesinato de la doctora Adela Rivas Obé, directora de micro zona de clínicas del IMSS en Petatlán, Zihuatanejo y La Unión, Edgar Arturo Cuéllar Bravo deberá continuar el procedimiento legal en prisión.
Consultado vía telefónica el hijo de la víctima, Bolívar Darío Rojas Rivas informó que este jueves inició la audiencia donde se determinaría si el inculpado llevaría su proceso legal en libertad o dentro de la cárcel.
Dijo que la audiencia inició a las 12 del día y terminó a las 6 de la tarde, fue por la reposición del proceso que mandató un amparo que otorgó un juez federal, “el amparo ordenaba reponer todo el procedimiento de la doctora y se dictaminó que se iba a reiniciar el proceso”.
Rojas Rivas  indicó que los familiares recibieron “mucho apoyo” de la Fiscalía General del Estado (FGE), que mandaron a peritos y agentes especializados y se logró la vinculación a proceso, por lo que se dieron cuatro meses para una investigación complementaria.
Este jueves en la audiencia se iba a determinar si el inculpado enfrentaría su proceso en libertad o en prisión preventiva, el juez solucionó a favor de la familia de la doctora y se dictaminó que sería en prisión preventiva en contra de Cuéllar Bravo.
“La atención de la Fiscalía dio los resultados positivos, le hago un llamado al fiscal Javier Olea y al gobernador Héctor Astudillo que sigan apoyando”.
Manifestó que la familia estará pendiente del caso hasta que se haga justicia, “para que un criminal no llegue más de nuevo a la calle, que no quede libre para que no cometa más asesinatos de mujeres”. (María Avilez Rodríguez / Chilpancingo).