Critican cese de funcionaria que atiende la violencia hacia mujeres

Las feministas María Luisa Garfias Marín y Marina Reyna Aguilar, denunciaron que persiste el autoritarismo en el gobierno estatal.
Opinaron respecto al cambio de funcionarias encargadas de la atención de la Alerta de Violencia de Género, y tras la denuncia de la directora Estatal para Prevenir la Violencia contra la Mujer de la Secretaría General de Gobierno, Yenedith Barrientos Santiago, de que fue obligada a renunciar a su cargo esta semana, después de que cambiaron la chapa de la puerta de su oficina, y la dejaron de convocar a reuniones de trabajo.
En consulta telefónica, Garfías Marín denunció que en la actual administración se reproducen formas de los gobiernos pasados.
“Cambiarle la chapa de su oficina, cuando ella merecía un trato digno como funcionaria, como mujer, como responsable de la Alerta de violencia en Guerrero, creo que es una acción violenta”.
Estimó que evidencia “una vez más que hay un abuso de poder hacia las mujeres, independiente de que sean funcionarias o no”.
Consideró que el gobierno estatal debería ser consecuente con la política que pregona la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, de convertir a Guerrero en un refugio para las mujeres, y que haya una disculpa para Barrientos Santiago.
Reyna Aguilar señaló que desde la administración anterior, las defensoras de derechos de las mujeres han criticando que haya cambios del persona coordinadora de la atención de las alertas, y enlace con la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim).
Recordó que en la administración hubo cuatro personas en esa posición por los cambios en el gabinete,  que significan retrocesos.
“Eso no abona en el avance que quisiéramos observar en el tema de cumplimiento de la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género, porque al interior, quien se coordina con todas las instancias que deben estar atendiendo la alerta”.
Señaló que los cambios que se observan en la Secretaría General de gobierno, desde la renuncia del extitular, Marcial Ludwig Reynoso Núñez, el nombramiento de una encargada, Anacleta López vega, que trae a su propia visión o desconocimiento de la Alerta, “porque no había estado ahí, o lo veían de lejos, pero no lo habían atendido como tal”.
Como peticionaria de la Alerta de violencia feminicida, expresó preocupación del seguimiento que va a atener el mecanismo.
“Desconozco a quién vayan a designar, pero no observo que haya personal con compromiso con el tema, solamente es una prioridad para el gobierno del estado, pero no para quienes están en la Secretaría general de gobierno”.
Adelantó que va a recurrir a otros instrumentos jurídicos para obligar al estado y a quien directamente tiene la responsabilidad a dar cumplimiento a la declaratoria.
Añadió que supo que el jueves hubo una reunión para revisar la segunda alerta de violencia de género por agravio comparado, y no sabe que van a hacer en la atención de la primera alerta. (Lourdes Chávez / Chilpancingo).

 

Contradice activista cifras oficiales; hay aumento de feminicidios, sostiene

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La peticionaria de la Alerta de Violencia de Género por violencia feminicida, Marina Reyna Aguilar, advirtió que los feminicidios en Guerrero aumentan, pese al discurso de gobierno de la reducción del delito.
En consulta sobre la estadística del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que reporta tres feminicidios en Guerrero durante el primer bimestre del año, y 28 muertes dolosas de mujeres -15 en enero y 18 en febrero-, ratificó vía telefónica que la violencia feminicida no se refleja en la estadística oficial porque no se aplican los protocolos del delito, dado que el personal no está capacitado para usarlo, aunque las instituciones digan lo contrario.
Señaló que, a través del monitoreo en la prensa de muertes dolosas de mujeres que realiza la Asociación Guerrerense contra la Violencia contra las mujeres (Agcvim), y que preside Reyna Aguilar, registraron 16 asesinatos en enero, 16 en febrero, y al 25 de marzo de este año se igualó la cifra de 16 muertes dolosas de mujeres. Un total de 48 en lo que va del año.
En 2023, indicó que en enero registraron 10 asesinatos, en febrero 12, y en marzo 9, y con estos datos, confirman que la violencia está incrementando.
“No estoy de acuerdo con lo que reporta el Secretario Ejecutivo, que reporta lo que la Fiscalía General del Estado clasifica como feminicidios, y no se refleja la realidad”.
Incluso, indicó que el Secretariado detalla dos feminicidios, uno en Cocula y otro San Marcos, y el segundo no fue identificado en el monitor de la Agcvim.
Ratificó que la incidencia delictiva no es real porque los agentes ministeriales en el estado no están preparados para aplicar el protocolo de investigación ministerial, policial y pericial con perspectiva de género para el delito de feminicidio, “aunque digan que sí, a nosotros no nos convence, por eso es su incidencia es muy baja”.
Lo anterior, dijo que se agrava con la crisis que existe en la FGE, por los cambios de autoridades, después de que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, removió a la fiscal Sandra Luz Valdovinos Salmerón. Incluso, señaló que algunos responsables de las fiscalías especializadas no regresaron a sus puestos cuando la ex fiscal solicitó un permiso y volvió al cargo, antes de la remoción.
La activista de derechos humanos, aclaró que ha podido continuar haciendo acompañamientos de víctimas con algunos contactos en las agencias del ministerio público, pero no puede avanzar si se necesita hablar que buscar funcionarios de mayor jerarquía, por ejemplo, en las fiscalías regionales, también se retiraron los cuadros militares que llegaron con la gestión de Valdovinos Salmerón.

En la FGE, que sea civil o militar, pero que sea sensible a los problemas de Guerrero

Del proceso de selección del titular de la FGE, opinó que lo importante no es que sea militar o civil de carrera, sino que sea sensible antes las particularidades de Guerrero, con población indígena, afromexicana, “que integre un equipo que trabaje con perspectiva de género, intercultural, interseccional, que combata las prácticas de corrupción, que vigilen mucho que no discriminen por ninguna razón a las usuarias que acuden a la agencias del MP, ya sea del fuero común o especializadas a denunciar”.
Subrayó, que no se ejerza violencia institucional, cuando conmina o anima a las víctimas a no presenten denuncias.
Para los casos de feminicidios, insistió en que se revise y evalúe la labor cotidiana del personal de la Fiscalía especializada en feminicidios que se dice que está capacitado para aplicar el protocolo de investigación del delito, y se fortalezca la labor cotidiana de las agencias del MP en cada región dice, con equipo humano preparado con insumos materiales que requiere para realizar sus funciones, y canalicen los asesinatos
“En virtud de que no hay una correspondencia entre los asesinatos de mujeres y el número de feminicidios reportados ante el Secretariado Ejecutivo”.

 

El Estado, sin mecanismos para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia: feminista

Lourdes Chávez

Chilpancingo

A pesar de la ocurrencia de asesinatos de mujeres en el estado y las cifras de oficiales de otras violencias, en Guerrero no hay mecanismos efectivos para garantizar a las mujeres y niñas una vida libre de violencia, denunció la feminista, Marina Reyna Aguilar.
La activista fue consultada sobre los hechos recientes como en  Copanatoyac, donde mujeres exigieron justicia por el asesinato de María Margarita Vargas Florentino, a manos de su esposo Luis Vargas, y de Dorit Olivera Jiménez, en la comunidad de La Caridad, en San Marcos, muerta a balazos por su pareja, Nereo, hecho que denunció la madre de la víctima, Irma Jiménez Morales.
Indicó que en el Monitor Violencia de Género y Feminicidios en el Estado de Guerrero, de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres, tiene registros ocho muertes violentas de mujeres con presunción de feminicidio, del 1 al 12 de diciembre.
Añadió que este mes, la estadística de violencias contra las mujeres suele incrementarse porque se concentran las familias en estas fechas y aumenta el consumo de alcohol.
No obstante que el Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública sólo da cuenta de diez víctimas del delito de feminicidio. Añadió que en la prensa escrita y digital, del 1 de enero al 12 de diciembre de 2023, suman 128 hechos con características que configurar el delito de feminicidio.
En Acapulco, donde suman 47 asesinatos de mujeres en lo que va del año, las autoridades tendrían que considerar que cuando los problemas familiares se presentan, la violencia se agudiza, como ocurre ahora por el impacto del huracán Otis.
Sin embargo, denunció que en Acapulco las agencias del ministerio público, así como las especializadas en violencia intrafamiliar y violencia sexual dejaron de dar atención a la ciudadanía porque todos sus esfuerzos están dirigidos a la búsqueda de personas desaparecidas durante el ciclón.
También dijo que las oficinas de la Fiscalía resultaron afectadas por las fuertes lluvias y vientos del huracán, en sus equipos de cómputo y en los expedientes de denuncias.
Por lo tanto, subrayó que tampoco hay condiciones para garantizar el acceso a la justicia a las víctimas, y muchas de ellas no tienen recursos para acudir a otros municipios a presentar sus denuncias en caso de ser necesario.
Asimismo, dijo que el municipio también dejó de lado la atención a las mujeres, “porque justo el día del impacto del huracán había una sesión que se suspendió, quién sabe hasta cuándo se vaya a retomar”.
Advirtió que las instituciones saben que hay cifras negras de la violencia que no se denuncian, y ahora ni siquiera hay condiciones para atender a la ciudadanía.
“Estamos hablando de todas las violencias que se pueden ejercer contra las mujeres, que se denuncian en las agencias especializada de violencia familiar, y de violencia sexual”.
De los casos documentados en diciembre indicó que son tres feminicidios en Acapulco, dos en Chilpancingo, uno en Alcozauca, otro en Conapanatoyac, y el más reciente, en Cruz Grande, cabecera municipal de Florencio Villareal, de una joven identificada como Alondra, de 19 años de edad, encontrada muerta en la vía pública el sábado 9.
Del caso de San Marcos, recordó que ocurrió a finales de noviembre, y trascendió a los medios en diciembre.
“Aquí, lo que hacemos es registrarlos de acuerdo con el protocolo que señala las características de feminicidio. No incluye muertes por accidente”.
No obstante, la estadística de feminicidios que reporta el Sistema de Seguridad Pública del Secretariado Ejecutivo Nacional es apenas de diez casos de enero a noviembre de 2023.
Opinó que la estadística oficial es muy baja porque en las agencias del ministerio público casi no abren carpetas de investigación por feminicidio, sólo por homicidios dolosos
Indicó que así clasificaron el asesinato de Dorit, en San Marcos, y se supo que luego sería reclasificado a feminicidio
Señaló las cifras de lesiones dolosas contra mujeres muy altas, y las autoridades tendrían que investigarlas con perspectiva de género para determinar si las víctimas son sobrevivientes de tentativa de feminicidio.
Sin embargo, las autoridades están rebasadas y no hacen este tipo de indagatorias.
Indicó que las cifras oficiales reportan 2 mil 171 homicidios dolosos de mujeres en 11 meses de este año, 694 feminicidios y las lesiones dolosas contra mujeres se disparan a 58 mil 990.
Asimismo, en el estado se reportan 107 homicidios dolosos de mujeres, diez feminicidios y mil 286 lesiones dolosas contra mujeres.
Con estos datos, señaló que Guerrero tiene la séptima posición en la ocurrencia de homicidio doloso de mujeres, el 24 en feminicidios, y el 16 en lesiones dolosas.

Exponen familiares casos de feminicidio en la presentación de libro de la Agcvim

 

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La Asociación guerrerense contra la violencia hacia las mujeres (Agcvim), reveló que localizaron restos de Karla Mariel, una de las primeras jóvenes reportadas como desaparecida en junio de 2018 en Chilpancingo, a través de la Alerta Alba, y que el presunto feminicida se encuentra en prisión cautelar.
Durante la presentación del libro Sobrevivientes y víctimas de feminicidio en Guerrero, la tarde-noche del martes en el Palacio de la cultura de Chilpancingo,
la académica universitaria Rosa María Gómez Saavedra, llamó a la acción, con esta publicación, comenzando con la exigencia de presentación de la niña María Fernanda, raptada por su papá el mismo día que con su pareja homosexual, asesinaron a Sendy, la mamá de María Fernanda, en Chichihualco, y desde hace tres años se desconoce su paradero. Es otro de los nueve casos documentados en el libro.
La presentadora y docente del Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano, reconoció el compromiso, la ética y la dedicación en la atención de las víctimas de la directora de la organización civil, Marina Reyna Aguilar, quien ha dado seguimiento a estos nueve casos de manera directa.
Destacó que la Iniciativa de Spotlight de ONU Mujeres para la eliminar todas las formas de violencia de mujeres y niñas, tenga un programa de fortalecimiento a las organizaciones como la Agcvim, que realizó, entre otras acciones dos libros, Nuestra Historia en Movimiento, sobre la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en el estado de Guerrero, y la memorias del feminicidios y víctimas indirectas de feminicidio.
Denunció que el eje transversal de los feminicidios documentados, es la violencia institucional que viven quienes acuden a las dependencias y no son atendidas, que trae como consecuencia la falta de justicia.
“Cómo van a dejar de sentir ese dolor los familiares si sienten que no son atendidos, por ello tenemos que generar nuevas formas de atención, de vigilar que funcionarios y funcionarias se apliquen en las políticas que les corresponden. Hoy debemos plantear una disculpa pública por los asesinatos que se han dado en el periodo de la alerta de violencia de género (2017)”.
Llamó a convertir este libro en una acción de transformación, para que la alerta de violencia feminicida, genere justicia, con presupuestos para las familias de las víctimas que fueron privadas de la vida.
En la presentación estuvieron tres víctimas indirectas, y una sobrevivientes de los testimonios. Norma Alcaráz Jiménez, dio voz a su hija, Danae, cuyo caso sólo fue registrado como homicidio, y como su mamá no estaba acreditada en el expediente víctima indirecta, hasta la intervención de Reyna Aguilar.
La enfermera Elsa García Jimenez, sobreviviente de feminicidio, huyó con su hijo cuando recuperó la conciencia después de que su agresor la dio por muerta.
Griselda Vazquez Ramirez dijo que su hermana Sendy nunca imaginó que moriría tan joven a manos de su ex esposo, Javier, con quien había vivido casi 20 años juntos y procrearon dos hijas. Se divorciaron cuando supo que era homosexual, y dividieron el terreno donde vivían, y se convirtieron en vecinos.
“Los vecinos dicen que esa noche escucharon ruidos y un golpe muy fuerte, como si alguien se hubiera caído; una vecina se asomó a la casa, pero vio todo oscuro y pensó que no había nadie. Javier y Roberto aprovecharon la oscuridad de la noche para torturarla, después de matarla hasta se dieron tiempo de borrar evidencias porque incluso lavaron el piso”. También se llevaron a María Fernanda.
Finalmente, María Carmen Rodríguez, habló de hermana de Karla Mariel, que describió como una mujer bonita, sociable, buena amiga, hermana y madre. Después del reporte de su desaparición, ya sospechaban del esposo le había hecho daño. “Como es posible que una persona que te dice amar, que eres el amor de su vida, es dificil pensar que te pueda quitar la vida, que así sucedió”.
Aclaró que este año supo que fue detenido en prision cautelar, despues del hallazgo de restos humanos de Karla Mariel, y un abogado les advirtió que puede ser liberados porque cuando pasa dos años, y no está sentenciado aún puede salir en libertad.

 

Advierte Marina Reyna un incremento este año en el número de feminicidios

 

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La directora de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres, Marina Reyna Aguilar, denunció el alza de feminicidios este año, particularmente de adolescentes, respecto al pasado, de acuerdo con registros documentados a través de medios de comunicación.
En consulta telefónica, indicó que, en el primer trimestre del año, con el Monitor de Violencia de Género y Feminicidios en el estado de Guerrero de la organización, han documentado 32 muertes de mujeres con presunción de feminicidio; el año pasado fueron 23.
En lo que va de este abril, el cuarto mes, van 13 feminicidios o muertes de mujeres al menos con alguna de las características del delito. El año pasado el mes cerró en 14.
En lo que va año, informó que suman 45 asesinatos de mujeres en Guerrero, los cuales deberían ser clasificados como feminicidios por la Fiscalía del estado.
Pero aclaró que estos hechos apenas son los que trascienden a la prensa impresa y medios digitales, porque en recorridos en las regiones campo han conocido de otros eventos que no son visibilizados, y quizá tampoco son del conocimiento de la Fiscalía.
Señaló uno de este mismo mes, que conoció a través de funcionarios del ayuntamiento de Zitlala: Victoria, de 28 años de edad, que dejó cuatro niños huérfanos en la localidad de Topiltepec. De acuerdo con un familiar, murió a causa de una caída, pero en la revisión del cuerpo fuentes cercanas señalaron que tenía moretones, y no está siendo investigado. Precisó que el asunto llegó al DIF municipal por la orfandad de los menores de edad.
La defensora de los derechos de las mujeres, cuestionó que Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), sólo tiene registros de tres feminicidios en Guerrero en el primer trimestre del año.
La lectura de esta cifra oficial frente a los datos de la prensa, y la información que obtienen en los municipios más alejados, es que las autoridades de los diferentes niveles de gobierno no están aplicando los protocolos de atención a la violencia de género y feminicida, “aunque digan lo contrario”, subrayó.
De este monitoreo a medios de comunicación, indicó que en 15 municipios hay registros de asesinatos de mujeres este año: 12 en Acapulco, el mayor número; nueve en Chilpancingo, siete en Iguala, tres en Zihuatanejo, dos en Chilapa, en Huitzuco y en Buena Vista Cuellar, y uno en Apaxtla, Atoyac, Cochoapa el Grande, Ajuchitlán, José Joaquín de Herrera, Petatlán, San Luis Acatlán, Taxco.
Consideró que trascienden y tienen más impacto los hechos donde hay mayor acceso a los medios de comunicación, el ejemplo son los tres crímenes recientes, de la alumna del Colegio de Bachilleres, Eyna Vanesa, en Acapulco, de la maestra Marlén en Chilpancingo, de una mujer joven adulta en Tierra Colorada.
Además, señaló algunos medios regionales que reportan otros casos con menos impacto. Por ejemplo, el feminicidio de Bonifacia, de 26 años de edad en la localidad de Ayahuatempan, del municipio José Joaquín de Herrera. Ella era mamá de un niño de ocho años de edad, y el 18 de abril, la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) solicitó a la Fiscalía del estado, apoyo para la aplicación de protocolos de búsqueda por el reporte de su desaparición. El 19, encontraron su cuerpo en un punto cercano a la laguna. indicó que el informe señala como sospechoso a un pretendiente de la joven, que luego huyó del pueblo.
Como éste, detalló que en enero se tienen registraron 11 casos, en febrero 12, en marzo nueve, y 13 en lo que va de abril.
En 2022, fueron 11 registros en enero, igual que ahora; cinco en febrero, siete en marzo, y 14 en abril.
Aguilar llamó la atención a que en muchos casos hay reportes de desapariciones de mujeres y adolescentes que luego son encontradas sin vida. “Estamos viendo que son de municipios más visibles. Posiblemente haya otros casos en municipios donde no son tan visibles”.
Asimismo, señaló que un síntoma de la normalización de la violencia feminicida en mujeres que se observa en la sociedad como en las instituciones, es el silencio, a pesar de que las autoridades están obligadas a reaccionar para ir frenando esta situación,
De los cuerpos de mujeres abandonados en barrancas o en basureros, de Acapulco y Tierra Colorada, señaló que transmiten un mensaje a la sociedad de los agresores, sobre valor que dan a las mujeres, y al que abona la impunidad, “porque sienten que pueden seguirlos cometiendo y no va a pasar nada, (los crímenes) sólo pasan a la estadística”.

 

Alerta activista del riesgo de omisión de feminicidios en el registro del SESNSP

La representante de la Asociación Guerrerense contra la Violencia contra las Mujeres, Marina Reyna Aguilar, en la conferencia en el Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Foto: Carlos Carbajal

Daniel Velázquez

La representante de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres, Marina Reyna Aguilar, alertó del riesgo de que intencionalmente se omitan cifras de feminicidios en los registros oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), para simular la disminución de casos en el estado.
Reyna Aguilar estuvo ayer en el Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano (IIEPA-IMA), de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), como invitada para cerrar el ciclo de actividades organizadas por esa institución para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
Ante unos 40 alumnos impartió la conferencia Organizaciones civiles de mujeres y la atención a las violencias contra las mujeres, donde informó que en las registros del go-bierno federal en el primer bimestre de 2023 en la entidad hay “cero” fe-minicidios, pero la realidad es otra.
Precisó que las cifras oficiales disponibles se publican con un mes de rezago y las disponibles hasta ayer solo corresponden a enero, las cuales muestran que a nivel nacional han ocurrido 68 feminicidios, pero en Guerrero ninguno. Homicidios dolosos en Guerrero van nueve, culposos seis, lesiones dolosas 136 y lesiones culposas 41. “Las que no se denuncian son más que las que se denuncian, veamos esta realidad de la violencia contra las mujeres, las niñas y adolescentes”, señaló.
En contraste, los registros de la Asociación son que en la entidad ocurrieron 11 muertes dolosas con presunción de feminicidio, de las cuales cuatro ocurrieron en Acapulco, una en Chilapa, una en Huitzuco, una en Ajuchitlán, dos en Buenavista, una en Taxco y una en Zihuatanejo. Los datos son por los registros en medios y por los familiares de las víctimas.
En febrero, el registro que tienen es que hubo 12 muertes dolosas con presunción de feminicidio: cuatro en Acapulco, una en Atoyac, una en Chilapa, una en Chilpancingo, cuatro en Iguala y una en Zihuatanejo. En lo que va de marzo han registrado tres, una en Acapulco, una en Chilpancingo y una en Zihuatanejo.
Consultada, al final de la conferencia sobre la diferencia de cifras entre el gobierno federal y el registro de la Asociación, Reyna Aguilar dijo que “no están haciendo estas diligencias de investigación con una perspectiva de género, bajo un protocolo de investigar todos los casos de muertes de mujeres con presunción de feminicidio”.
Agregó que hasta en los boletines de la Fiscalía General del Estado sobre muertes violentas de mujeres se dice que se va a investigar bajo el protocolo de feminicidio, “pero en realidad no lo están clasificando”.
“A la Fiscalía le conviene que no aparezcan feminicidios porque si hacemos una comparativa de cuantos hubo el año pasado y vemos las cifras actuales y va a la baja pero vemos que eso no es real”.
–¿Estas omisiones podrían ser intencionales para conseguir ese efecto visual en las estadísticas?
–Pueden ser intencionadas.

El papel de las asociaciones

Marina Reyna indicó que actualmente las asociaciones tienen mucha demanda pues familiares de víctimas de violencia o mujeres violentadas se acercan para solicitar información o pedir ayuda.
Expuso que el trabajo de las asociaciones civiles es vigilar el cumplimiento del programa para prevenir, atender, sancionar y erradicar el problema de la violencia contra las mujeres, solicitar la declaratoria de violencia de género de acuerdo con la Ley 553 de Acceso de las mujeres a una vida libre de violencia. También para medir el impacto de las acciones de gobierno.
Una función de las asociaciones es ser acompañantes de las mujeres que denuncian violencia ante las instituciones encargadas de atenderla, porque cuando una mujer que sufre violencia y recurre a una instancia donde no es atendida en la forma correcta regresa al entorno de violencia del que buscaba salir y es posible que ya no busque ayuda otra vez porque el trato que recibió no fue el adecuado: “servimos como puente porque vinculamos estas instancias con las necesidades y verificamos y damos seguimiento que la atención sea la adecuada”.
El trabajo de las asociaciones tiene sustento legal, tanto en los tratados internacionales como en las leyes nacionales y estatales, explicó la conferencista.
Desde 2019 se empezó a disminuir el financiamiento de las asociaciones civiles por parte de Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) hasta desaparecer y ahora se mantienen con aportaciones de organizaciones internacionales.

 

Señalan deficiente registro del Estado de casos de violencia hacia las mujeres

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La violencia hacia las mujeres no ha disminuido, pero las instituciones pueden manipular cifras, separando los asesinatos en homicidios dolosos y feminicidios, y excluyendo las muertes culposas, que también deben ser investigadas bajo protocolos especiales antes de descartar un crimen, denunció la directora de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres (Agcvim), Marina Reyna Aguilar.
Consultada vía telefónica sobre el informe mensual del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP, que reporta en Guerrero diez víctimas de homicidio dolosos de mujeres y un feminicidio en noviembre, de un total anual de 108 víctimas de homicidios dolosos y 13 feminicidios.
Reyna Aguilar denunció que si las instituciones clasificaran como delitos de feminicidios los homicidios dolosos y culposos (fuera de accidentes viales), la cantidad se triplicaría. Ante el reclamo constante de las organizaciones feministas, desde la administración anterior sólo agregaron a las fichas policiacas de los casos, la leyenda que los casos se investigarían bajo el protocolo de feminicidio, a modo de justificación. Ahora sabe que “algunos casos” son turnados a la Fiscalía Especializada en feminicidios.
A partir de la declaratoria de Alerta de Violencia de Género (AVG) por violencia feminicida en Guerrero, en 2017, la Agcvim realiza un monitoreo de feminicidios en los medios de comunicación, que le permite decir que la violencia no ha disminuido, no obstante que no todas las muertes dolosas ni culposas son publicadas por la prensa impresa y digital.
“El SESNSP quiere disfrazar y juega con las cifras. Tampoco veo que la violencia se reduzca, a pesar de que estamos con dos AVG (en 2020 se aprobó la segunda por Agravio Comparado). Lo que observamos es más demanda de las mujeres pidiendo justicia”.
De los datos oficiales resaltó el de sobrevivientes de violencia familiar, a quienes la FGE debe evaluar el grado de riesgo en que se encuentran las mujeres, y en su caso, emitidas medidas cautelares. Además de tener georreferencias de los casos para que haya políticas públicas adecuadas para diferentes áreas. La estadística señala 3 mil 175 delitos por violencia familiar de enero a noviembre de este año, y 251 mil 159 el país.
“No basta emitir medidas, sino darles seguimiento y eso no lo hacen, monitorear a las víctimas”.
Reconoció la intención del gobierno del estado, de impulsar acciones para levantar algunas medidas de las Alertas de Violencia de Género, que informó la directora Estatal para Prevenir la Violencia hacia las mujeres, Yenedith Barrientos Santiago,
También como integrarte del Grupo Interinstitucional y Multidisciplinario de la Alerta de Género por violencia feminicida, que evalúa los informes de trabajo que envía el gobierno del estado a la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia hacia las Mujeres (Conavim), Reyna Aguilar dijo que estarán muy pendientes del reporte y del seguimiento que haya a las medidas.
Confirmó que la entrega de un diagnóstico de modalidades de violencias elaborado por una institución como es la UNAM, podría hacer posible el levantamiento de la primera medida de la alerta por violencia feminicida.
“Hay rumores de que en un municipio se va a levantar la Alerta, y no es así de simple, todas las demás acciones deben tener seguimiento y sostenerse en el tiempo”.
Asimismo, señaló la importancia de que haya una georreferencias de las violencias, para que en las regiones se hagan acciones a la medida, conforme a las necesidades que se requieran y que sean compatibles a lo que está ocurriendo en cada parte del estado”.
Recordó que los indicadores también revelan que, con las fiestas de fin de año suben las violencias, por las reuniones familiares y mayor consumo de alcohol.

 

 

Son el incremento de las desapariciones un nuevo fenómeno del feminicidio: AGCVIM

Emiliano Tizapa Lucena

Chilpancingo

De enero a noviembre de este año, la Asociación Guerrerense Contra la Violencia hacia las Mujeres (AGCVIM) ha registrado 101 homicidios dolosos con presunción de feminicidio en 29 municipios del estado, una violencia que no ha disminuido sino que continúa, afirmó la directora y activista Marina Reyna Aguilar.
También, aseguró que la desaparición de los medios de comunicación en algunas zonas del estado dificulta el monitoreo de la violencia hacia la mujer.
Sostuvo que es grave el problema del suicidio, porque muchas veces el origen es la violencia familiar o de pareja, y llamó a las instituciones educativas a poner atención al problema del acoso y el abuso escolar.
Ayer se conmemoró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) fue en el 2000 en una Asamblea General que se designó el 25 de noviembre para esta fecha, en el que se invitó a los gobiernos y las organizaciones a coordinar actividades para hacer conciencia de este problema y buscar soluciones.
La AGCVIM es una asociación civil sin fines de lucro constituida el 13 de noviembre de 2003 por mujeres y hombres, que busca contribuir en la disminución de los índices de violencia en mujeres y niñas de Guerrero.
La asociación es dirigida por la activista y defensora de derechos humanos, Marina Reyna Aguilar, quien además es peticionaria de la primera Alerta de Género por Violencia Feminicida para Guerrero, que se emitió en 2017 a ocho municipios del estado.
La AGCVIM tiene un Monitor de Violencia de Género y de Feminicidios de Guerrero, que es un sistema para generar información estadística sobre la violencia hacia la mujer, en sus diversas expresiones, y pretende crear conciencia en la población de esta problemática, que permita la construcción de políticas públicas de prevención y atención a las víctimas.
En Guerrero, según el Monitor de Violencia de Género y Feminicidios, de enero a noviembre de 2022 han contabilizado 101 muertes dolosas con presunción de feminicidio, concentrados principalmente en Acapulco con 29 casos; Chilpancingo con 15; Iguala con 11; Taxco con cinco; y Copanatoyac y Cuajinicuilapa con cuatro cada uno.
Según las cifras de la asociación el feminicidio en los últimos tres años ha disminuido en la entidad: en 2016 registraron 151 homicidios de mujeres con presunción de feminicidio; en 2017 se registraron 165; en 2018 se contabilizaron 235; en 2019 acumularon 194; en 2020 se reportaron 165; y en 2021 disminuyó a 138.

El monitoreo

Consultada ayer por teléfono, Marína Reyna dijo que han tenido dificultades para sostener su monitoreo, porque los medios de comunicación han dejado de circular y de ellos actualizaban sus estadísticas. Dijo que actualmente sus fuentes son El Sur y otros medios como El Sol de Chilpancingo, éste último que dejó de circular en físico, pero se mantiene en digital.
Expuso que las estadística podrían mostrar que la violencia disminuyó, y que incluso podría darse una lectura de que los programas gubernamentales están surtiendo efecto, pero afirmó que la violencia continúa y se sigue manifestando, “hay otros factores que inciden para vulnerar mayormente a las mujeres y a las niñas”.
Mencionó que no todos los casos de violencia son expuestos a los medios, y que si acuden a la Fiscalía General del Estado hay otros datos, “son más casos de homicidios dolosos contra mujeres, pero ellos no te dan información”.
Precisó que también hay casos de municipios donde no hay prensa o no llegan los corresponsales, pero la violencia sigue, aunado a un problema que se ha ido incrementado: las desapariciones.
Sostuvo que la desaparición es “la puerta del feminicidio”. Hay muchas mujeres que no aparecen, y esas niñas, adolescentes, que no son localizadas tampoco se les puede dar calidad de muertas, siguen teniendo la calidad de desaparecidas hasta encontrarlas con vida o muertas”.
De acuerdo con la plataforma del Monitor de Violencia de Género y Feminicidios en Guerrero, que también se basa en los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de enero a agosto de 2021 denunciaron 2 mil 70 mujeres haber sido víctimas de violencia familiar; menos de las 2 mil 980 registradas en 2020.
También, señala que el 2019 ha sido el año con más denuncias por violación simple en Guerrero, cuando contabilizó 242, y en los dos años siguientes ha disminuido, reportando 189 denuncias en 2020 y 164 en 2021.
Respecto al delito de violación equiparada en Guerrero ha ido en aumento en los últimos tres años, pues en 2019 se registraron 103 denuncias, y para 2020 y 2021 se mantuvo el registro de 143 cada año.
Según las estadísticas de la AGCVIM, el 2020 con el confinamiento por la pandemia de Covid-19 se dispararon las denuncias por acoso sexual en el estado, de registrar 36 casos en 2019, pasó a 114 en 2020, y para 2021 bajó nuevamente a 42.
El delito del abuso sexual también se disparó en 2020 en el estado, las denuncias de mujeres víctimas de este delito en 2019 fueron 287, y aumentaron a 342 en 2020, y en 2021 sumaron 200.

Abuso escolar y suicidios

Al respecto, Reyna Aguilar, expuso que está surgiendo problemas como el acoso y el abuso escolar, son problemas que se tienen que trabajar desde las instancias educativas, y cuando se convierte en un delito se tienen que denunciar ante las instancias correspondientes, además, “las instituciones deben aplicar sus procedimientos internos”.
Manifestó que es un problema que está surgiendo y cada instancia lo debe atender, “debemos poner atención y a trabajar sobre ello, porque hay que prevenir, para no tener que atender”.
Añadió que otro de los problemas graves es el suicidio, problema que la Secretaría de Salud ha focalizado, y que argumentó muchas veces el origen es la violencia familiar o de pareja, casi no se toca este problema en las noticias, “solamente se ve que se ahorcó, se suicidó y no se toma como feminicidio. Sin embargo, si se investiga se encontraría que las razones son por violencia, y que estas personas no encontraron otras salidas más que quitarse la vida”.
Añadió que estos casos de suicidio se archivan, pero detrás de las historias de las víctimas, se encontraría que son personas que vivían violencia extrema.
En Guerrero aún se mantienen las dos alertas de Violencia de Género por Violencia Feminicida, emitida en 2017 y que tiene 21 medidas para el gobierno; y por Agravio Comparado emitida en 2020, con 12 medidas, ambas por la Secretaría de Gobernación a través de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contras las Mujeres (Conavim).
Al respecto, Marina Reyna Son manifestó que el gobierno estatal debe cumplir y que en diciembre deberá entregar un informe a la Conavim donde se evaluará las acciones que ha anunciado el gobierno de Evelyn Salgado Pineda,
Reprochó que en Guerrero se debió atender con emergencia las alertas pero no ha sido así, “en Guerrero y en el país las alertas han sido como si fueran programas ordinarios y no es así, tendrían que ser programas emergentes”.
Expresó que el grupo interinstitucional e interdisciplinario de la Alerta de Género que coordina la Conavim evaluará el informe del gobierno de estado para determinar si de verdad se cumplieron con algunas medidas.

 

Sí aplican autoridades estatales las recomendaciones de la CEDAW, responde la titular de la Semujer

La titular de la Secretaría de la Mujer (Semujer), Mayra Pineda Martínez, aseguró que las autoridades estatales sí están aplicando las recomendaciones de la Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres (CEDAW, por sus siglas en inglés), y dijo que no conoce las declaraciones que hizo la presidenta de la Asociación Guerrerense Contra la Violencia hacia las Mujeres, Marina Reyna Aguilar.
En conferencia de prensa el lunes, Reyna Aguilar denunció que el gobierno incumple estas recomendaciones y que eso se refleja en el aumento de las cifras de feminicidios y desapariciones de mujeres.
En declaraciones después del abanderamiento y pase de revista del Grupo de Operaciones Especiales Jaguar, la secretaria de la Mujer dijo que existe una agenda nacional y en el estado, “que no ha parado, estamos dando respuesta y ya les platicaré, porque son importantes las acciones de igualdad que se llevan a cabo a través del sistema de igualdad para las mujeres y los hombres”.
Aseguró que no ha escuchado las críticas que hizo Marina Reyna, “ella siempre ha sido una mujer respetuosa de todas las acciones que se realizan, no sé si lo dijo, pero por supuesto que platicaremos con ella, porque forma parte de las comisiones que tenemos para prevenir sancionar, atender y erradicar la violencia en el estado”, expresó.
Siempre desconociendo las declaraciones que se hicieron en la conferencia de prensa del lunes con respecto al incumplimiento de las recomendaciones de la CEDAW, Pineda Martínez añadió, sin embargo, que la opinión no solamente de Reyna Aguilar, sino de las dirigentes de todas las organizaciones, es importante para la dependencia.
“No hay simulación, eso sí te lo puedo reafirmar”, insistió la funcionaria.
En la conferencia de prensa, Reyna Aguilar también denunció que no funciona el banco de datos de las víctimas, pero la secretaria de la Mujer aseguró que ésta es una situación en la que se va avanzando en todo el país, “la situación de datos no impera solamente en el estado de Guerrero como una cuestión que tiene oportunidades de mejora, es en todo el país en donde se está haciendo un esfuerzo importante para mejorar el banco de datos, y en Guerrero se está haciendo lo propio”, aseguró.
Informó que en breve habrá un cambio en la situación del banco de datos, “muy a favor de las mujeres”, pero dijo que esto lo tendrá que informar la instancia correspondiente.
Cuando el reportero insistió en que son declaraciones que se hicieron en conferencia de prensa y que están publicadas, insistió que, “tendría yo que analizar esa declaración, yo no puedo opinar respecto a las posturas ciudadanas de personas, yo necesito analizar lo que está aconteciendo, pero ellas (las que declararon) son parte de las comisiones como ciudadanas y como impulsoras de muchos temas en el estado de Guerrero, y ya lo platicaremos para poder consensuar”.
Con respecto a la iniciativa de ley que abre la posibilidad de la interrupción del embarazo sin necesidad de que lo avale un Ministerio Público en caso de violación, que está detenido en el Congreso local, la funcionaria declaró que ha dialogado con los diputados y que es un asunto que ya forma parte de la agenda legislativa.

 

Los feminicidios son ya un problema de salud pública, advierte Marina Reyna

Ante el incremento de las muertes de mujeres en la entidad, la presidenta de la Asociación Guerrerense contra la Violencia hacia las Mujeres, Marina Reyna Aguilar, denunció que los feminicidios en Guerrero son un problema de derechos humanos, de salud pública, de justicia y un problema de carácter social.
Señaló que el problema persiste, no obstante que entre varias acciones hay una ley general y otra ley local de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia, que se decretó una Alerta de Violencia de Género en Guerrero y se diseñó un programa de atención para el seguimiento de la declaratoria.
En lo que del año se ha documentado 94 casos de homicidios dolosos contra mujeres, con presunción de feminicidio.
“A las mujeres las siguen matando y se observa que hay impunidad ante estos graves hechos, que hay una ausencia de la reparación integral del daño para ellas y su familia, principalmente, para sus hijas e hijos menores de edad, a quienes se les trunca de manera violenta todo su proyecto de vida, su bienestar y desarrollo integral, al que todo niño y niña tienen derecho”.
La activista fue consultada sobre la última racha de asesinatos de mujeres, donde el viernes hubo dos casos en Tlapa: una mujer muerta en un hospital tras ser agredida en su domicilio, y otra hallada en la carretera dentro de un bolsa; así como la ejecución de una mujer en Chilpancingo, en una calle céntrica de la ciudad, y el asesinato de una mujer más en Acapulco.
Recordó que la declaratoria de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres para el estado de Guerrero, emitida por la Secretaría de Gobernación a través de la Conavim, dice que de conformidad con el artículo 26 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, se debe diseñar un plan individualizado de reparación integral del daño respecto a los casos de homicidios de mujeres y/o feminicidios.
También establece que, para estos efectos, se deberán considerar los estándares básicos en materia de reparación del daño, reconocidos por el derecho internacional de los derechos humanos, así como lo establecido en la Ley General de Víctimas y la Ley 553 de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para el Estado de Guerrero.
En este mismo sentido, dijo que la Ley 450 de Víctimas del Estado Libre y Soberano de Guerrero, en su artículo 14, señala que las medidas de reparación integral serán las de restitución, rehabilitación, compensación y no repetición de hechos, entre otras.
Pero en 2018 se han contabilizado 94 casos documentados de homicidios dolosos contra mujeres, con presunción de feminicidio, “mujeres que en su mayoría se encontraba en edad reproductiva y muchas de ellas tenían hijos. En este sentido, una vez iniciada la carpeta de investigación de los casos, debería estarse dando seguimiento por las autoridades competentes. Pues no hay un seguimiento puntual, ni una articulación interinstitucional para dar atención integral a las hijas e hijos de víctimas de esto casos. Lo cual deja a los menores de edad en total desamparo, riesgo e indefensión”.
Destacó el caso de la nutrióloga Magdalena Aguilar Romero, de 25 años de edad, asesinada por su pareja en Taxco en enero, que dejó a dos menores, uno de seis y una niña de cuatro años de edad. De Gladis, de 30 años, asesinada en febrero de este año por su pareja en Tlalchapa, quien dejó a una bebé de ocho meses.