Se refugiaron en los cuartos hechos con Peña Nieto, relatan vecinos de La Libertad

En la casa de Carlos Daniel Félix se refugiaron 18 personas luego de que los vientos del huracán Otis derribaron su casa de adobe, en la colonia Libertad parte alta Foto: Daniel Velázquez

Daniel Velázquez

Vecinos de la colonia La Libertad parte alta se refugiaron en los cuartos que construyó el gobierno federal en el sexenio del priista Enrique Peña Nieto, como parte de las reconstrucciones que hizo la federación por la tormenta Manuel.
Para llegar a la parte alta de esta colonia, se toma una camioneta sobre la avenida Lázaro Cárdenas, el pasaje que antes era de 10 pesos ahora está en 15 pesos.
El acceso a la colonia está pavimentado, pero en algunas partes el concreto estaba quebrado y la fuerza del agua lo levantó, por lo que algunos tramos de la calle Emiliano Zapata son accidentados.
Durante el gobierno de Peña Nieto, el gobierno federal impulsó el programa Un Cuarto Más, el cual es una habitación de cuatro por cuatro metros de dos metros de altura, las paredes son de tabicones y el techo de azotea, tiene una puerta y una ventana.
Las experiencias de los vecinos son similares, en medio del huracán, cuando el viento voló los techos de sus casas, buscaron refugio en las pequeñas habitaciones de concreto, las casas se movían y pensaron que también las volaría el viento, pero afortunadamente resistieron las dos horas del huracán.
Los vecinos indicaron que por las paredes de esas casas, cada vez que llueve se trasmina el agua, pero fueron su único refugió contra el viento.
En la parte alta, en el límite de la zona habitada y el bosque del cerro, está la casa de la señora Juana Díaz Merino, originaria de Petatlán, municipio de Atlixtac, vive en Acapulco desde hace un año, su hijo compró la casa en 60 mil pesos y se vinieron a vivir al puerto.
Los vientos del huracán Otis volaron el techo de la casa de dos habitaciones y un corredor, y derribó una pared. Todas sus cosas se mojaron, sus colchones, su ropa, su televisión y por eso duermen en petates.
Juana Díaz contó que vio en las noticias que venía el huracan y se fue a la casa de su hija Josefina Félix Díaz, quien vive unos 30 escalones abajo, pues tuvo miedo y se refugiaron en la habitación de Un Cuarto Más. Ahí permanecieron durante el huracán y la madrugada, cuando amaneció vieron el desastre.
En el caso Carlos Daniel Félix, tenía una casa de adobe. Primero el viento se llevó el techo que era de lámina galvanizada, después el viento y la lluvia carcomieron las paredes, sólo quedaron cimientos. Son una familia numerosa, de 18 personas y todos se refugiaron en el cuartito de 4 por 4 metros, durante el huracán estuvieron de pie toda la madrugada.
María Angélica Caudillo Hernández también vivió una situación similar. Estaba sola en su casa, con sus dos hijos, la habitación de Un Cuarto Más es el cuarto de su hija, pero cuando el viento les voló las láminas, se refugiaron en esa habitación y no salieron hasta el dia siguiente.
Las vecinas Isaías Cortés Bibiano, Jania Salinas y Rocío Salinas se refugieron también en un cuartito, siete personas, tres adultos y cuatro menores. El cuarto se movía y las paredes se humedecieron.

Agua

Los vecinos de la parte alta de la colonia La Libertad se abastecen agua de un manantial con mangueras, es el único servicio que tienen, la energía eléctrica es inestable, “hay por ratitos”. A veces en el día, otras ocasiones por la noche, coincidieron los vecinos.

Sin trabajo

En la colonia La Libertad, la vecina Ofelia Hernández Mena, que se dedica a hacer empanadas de arroz, de camote y plátano, desde el huracán no ha salido a vender, primero por estar ocupada en recuperar las láminas de su casa, porque vive con su mamá Maria Mena Casimiro que tiene 100 años y la sacaron a rastras de la casa, donde el viento voló las láminas para refugiarse en el cuartito de 4×4 que les construyó el gobierno federal, ahí se encerraron ocho personas.
El vecino Víctor Manuel Carrillo contó que él se dedica a la venta de mariscos en playa Icacos y por el huracán no ha salido a trabajar.
Su casa es de un nivel, las ventanas tienen herrería y cortinas. No ha colocado vidrios y el aire “entraba recio” en la casa, por lo que él, su esposa y su hijo, se refugiaron en un cuartito hasta que pasó el huracán.
Se mojaron los sillones de su casa, todavía los tiene al sol, en espera de que se sequen. El tinaco del baño el viento se lo llevó y también un techado de herrería que tenía afuera de su casa para protegerse del sol.
Los dos vecinos coincidieron en que se mantienen con las despensas que les han regalado, pero para conseguirlas tienen que salir hasta la avenida Lázaro Cárdenas, porque la ayuda no llega a las partes altas.

 

Desconocen cuándo reconstruirán el plantel, denuncian padres de primaria Rafael Ramírez

Padres y maestros de la primaria Rafael Ramírez, denunciaron que los alumnos siguen tomando clases en aulas provisionales y exigieron a las autoridades agilizar la reconstrucción del plantel.
En conferencia de prensa en las canchas de la colonia Galeana, donde están las aulas provisionales, los padres se quejaron de que no hay avance en la reconstrucción de la escuela, que fue afectada por la tormenta Manuel y por los recientes sismos.
El maestro Miguel Ángel Ventura Ramos recriminó que las autoridades de los tres órdenes de gobierno los han mantenido en la incertidumbre, porque aún desconocen dónde van a construir el plantel.
“Seguimos dando clases en aulas móviles, en condiciones deplorables. Los niños sufren porque están incomodos, porque no tienen un espacio idóneo para recibir clases”, dijo.
Por lo que manifestó que los maestros y padres se han visto en la necesidad de emplazar a las autoridades educativas, para que asuma compromisos formales y les den una respuesta firme. (María Avilez Rodríguez / Chilpancingo).

 

Denuncian trabajadores del Fonden que no deposita la Sedatu salarios devengados

Los 33 trabajadores del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) denunciaron que van dos viernes sin que la Secretaría de Desarrollo Rural, Territorial y Urbano (Sedatu) les deposite un mes de salario devengado de los tres que les adeudan, como habían acordado con funcionarios de la dependencia en la Ciudad de México.
Los trabajadores iniciaron un paro laboral el 16 de mayo porque les debían cinco meses de salario devengado. El 24 de ese mes, les depositaron un mes sólo a 29 de los 33 trabajadores.
El miércoles 31 de mayo, los empleados se reunieron en la capital del país con funcionarios en las oficinas centrales de la Sedatu, ahí les prometieron pagarles otro mes de salario devengado y que cada viernes les depositarían un mes más hasta terminarles de pagar el 23 de junio.
Sin embargo, ayer vía telefónica la trabajadora del Fonden, Violeta Medina dijo que los viernes 9 y 16 de mayo no les depositaron en sus cuentas bancarias el pago de un mes de salario devengado de los tres que les adeudan.
Agregó que hasta ayer, a los 33 trabajadores ya les pagaron dos meses de salario devengado, y falta que les depositen los tres meses de su salario.

Falta una parte de la tercera entrega de granos a damnificados de la Montaña

Integrantes del Consejo de Comunidades Damnificadas de la Montaña acordaron buscar reuniones con autoridades estatales y federales para que les entreguen los granos básicos faltantes, maíz, frijol y arroz, de la tercera remesa en 63 comunidades, por lo que además generarán acciones para que se los entreguen.
Asimismo, señalaron que está pendiente la cuarta entrega a la que se comprometió el gobernador priista Héctor Astudillo Flores, pero no tiene fecha de inicio, y que quedan pendientes la quinta y la sexta entregas que pedirán al gobierno federal.
Luego de la revisión de los asuntos de la reunión, los nahuas, me’phaa y na savi participantes dijeron que buscarán los acercamientos, por lo que acordaron que una comisión de 11 representantes acuda a la Ciudad de México a una reunión con el senador Armando Ríos Piter, este 27 de abril, para que medie en la entrega de los granos para las familias de los 13 municipios que integran el Consejo.
Buscarán que los atienda el secretario de Desarrollo Social, Gustavo Miranda, con quien tuvieron acuerdos cuando era subsecretario de Gobernación federal, ya que el actual, René Juárez, los ha ignorado, para que les resuelvan la quinta y la sexta entrega de los granos básicos.
Asimismo, acordaron que en la semana buscarán platicar con el gobernador para que les diga cuándo iniciará la cuarta entrega a la que se comprometió su gobierno.
Dijeron que esperarán una respuesta de las autoridades antes del 6 de mayo, o de lo contrario iniciarán movilizaciones para exigir el derecho a la alimentación y que se ve vulnerado porque sus tierras quedaron dañadas luego de la tormenta Manuel de septiembre de 2013, y no pueden producir.
En la reunión estuvieron el director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, y representantes de los municipios de Malinaltepc, Atlamajalcingo del Monte, Acatepec, Atlixtac, Zapotiltán Tablas y Tlacoapa, entre otros.
La reunión inició a las 10 de la mañana y terminó alrededor de las 2 de la tarde.

Deja 15 casas destruidas un incendio en Tierra Colorada; eran para los damnificados por Manuel en 2013

 

Ayer, 15 casas que fueron construidas por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) para damnificados por la tormenta tropical Manuel en 2013, fueron destruidas totalmente por un incendio forestal, cerca de los ejidos Plan de Lima y Papagayo, en el municipio de Juan R. Escudero (Tierra Colorada).
Fuentes de la Secretaría de Protección Civil estatal informaron que a las 4:10 de la tarde recibieron un reporte de que en la comunidad de Papagayo había un incendio en las casas para damnificados por la tormenta Manuel.
Brigadistas de la dependencia y vecinos hicieron los trabajos para sofocar el fuego, que dejó 14 viviendas con daño total, una parcial y otra que fue destruida por los brigadistas como técnica para sofocar el incendio.
Las fuentes dijeron que en el predio cerca de la comunidad de Papagayo, había 29 casas construidas por parte de la Sedatu y que serían entregadas a los damnificados.
Más tarde, fuentes de Sedatu informaron que “ese predio está en desuso, (porque) la (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) Profepa, lo calificó como no apto para edificar viviendas, por ello, sumando al error en el método constructivo, el fraccionamiento habrá de edificarse en una nueva ubicación”.

 

Siguen las obras de viviendas en áreas inundables de la zona Diamante, se quejan damnificados

 

El presidente de la Coalición de Afectados por Contingencias Naturales, Arturo Flores Mercado, lamentó que las autoridades sigan sin atender sus demandas y permitan que se sigan construyendo viviendas en zonas inundables.
Reprochó que las autoridades al parecer esperan que llueva nuevamente en forma torrencial, para atenderlos, como ocurrió con el paso de la tormenta tropical Manuel.
El pasado 13 de septiembre los integrantes de la Coalición protestaron en la glorieta de La Diana para exigir a autoridades federales y del estado solución a los afectados por las inundaciones de hace tres años en la Unidad Habitacional Luis Donaldo Colosio, Villas Paraíso, Princess del Marqués y Misión del Mar, entre otras.
En declaraciones, Flores Mercado dijo que cada vez que piden una audiencia “volvemos a caer en el mismo vicio de mesas simuladas y al final no resuelven nada” y siguen con el temor de inundarse.
Recordó que a ellos la Dirección de Protección Civil les envió escritos para informarles que estaban en zonas de riesgo y que desalojen, “nos están corriendo.
¿Pero a dónde nos vamos? Es nuestra casa, en la que invertimos”.
Flores Mercado expuso que los tres niveles de gobierno se pasan la responsabilidad y nadie atiende a los afectados de la zona Diamante, que no admiten que siguen en riesgo y permiten que las empresas constructoras sigan haciendo y ofertando viviendas en zonas de riesgo.
“No estamos atendidos y vemos con dolor que no les importa lo que pase en la zona Diamante, esperamos que no venga un fuerte huracán donde tengamos que decir ‘te dije” comentó el representante de los afectados. Agregó que seguirán buscando que los atiendan y que las autoridades les den soluciones ante el riesgo en el que se encuentran.

 

 

Toman damnificados por Manuel la caseta de La Venta; piden entrega de viviendas y apoyo

Damnificados por la tormenta tropical Manuel tomaron la caseta de La Venta y dieron el paso libre por casi tres horas, para exigir la entrega de 80 viviendas a familias, además de reclamar al gobierno del estado 4 millones 700 mil pesos de proyectos para el campo.
A las 11:40 de la mañana, unos 150 damnificados de los municipios Juan R. Escudero, Tixtla y Acapulco, además de ejidatarios de Icacos, tomaron la caseta y dieron el paso libre a los automovilistas, transporte de carga y autobuses, para exigir la presencia de las autoridades del estado y que una comisión fuera atendida en Chilpancingo.
En declaraciones, el secretario estatal de la organización Alianza Ciudadana Democrática (ACD), Wildler Pita Navarrete, informó que 80 familias de las comunidades de Papagayo, Juan R. Escudero y Acatempan, en Tixtla, y de Kilómetro 38, Kilómetro 21 y Los Órganos de San Agustín, de Acapulco, seguían sin ocupar las casas ofrecidas por el gobierno federal a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu).
Además de que no han recibido 4 millones 700 mil pesos para proyectos del campo, que fueron solicitados en tiempo y forma a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del estado.
Por la tarde, el también integrante de ACD, Demócrito Flores Sonduk, informó que el gobierno del estado liberó 200 mil pesos de los proyectos para el campo.
Al mediodía, el delegado de la Sedatu, José Manuel Armenta Tello, llegó a la zona de la protesta y los damnificados le reprocharon que cada vez que dialogan sólo les promete que lo resolverá pero no cumple los acuerdos firmados.
Después, en una reunión improvisada y de forma privada, los damnificados y el delegado platicaron y, según lo informado por Flores Sonduk, una vez más el funcionario les prometió acelerar la construcción y entrega de las casas. En el caso de la comunidad de Papagayo, finiquitar la compra del predio para la reubicación.
Al lugar llegó el delegado de Gobernación federal, Juan Moreno Barrios, que advirtió a los manifestantes que si no retiraban su protesta serían desalojados, lo que no pasó.
También llegó el delegado regional de Gobernación, Osiel Morales Nava, quien pidió a los manifestantes retirarse de la caseta para que una comisión fuera recibida en Chilpancingo.
Después se informó que en la mesa de diálogo en Chilpancingo, el subsecretario de Asuntos Políticos, Martín Maldonado, atendió a tres representantes con quienes programó otra reunión el próximo martes.
A las 2:36 de la tarde, los inconformes se replegaron a un costado de la caseta, y a las 4:26 de la tarde se retiraron, luego de la reunión y acuerdos en Chilpancingo.
Durante la manifestación permanecieron entre 15 y 19 patrullas de la Policía Federal en la zona, además acudieron dos patrullas de estatales y dos de municipales.
Los ejidatarios de Icacos que se sumaron a la movilización demandaron al gobierno federal la entrega de los predios expropiados y ocupados por Pemex, la Sedena y el Centro de Convenciones.

 

 

Bloquean campesinos de La Montaña las carreteras de Tlapa a Puebla y a Chilpancingo; exigen diálogo

Na savi, me’phaa, nahuas y mestizos que integran el Consejo de Comunidades Damnificadas de La Montaña bloquearon las carreteras federales de Tlapa a Puebla y de Tlapa a Chilpancingo para exigir una mesa de diálogo con los gobiernos federal y estatal que acepten sus peticiones de granos básicos, y la reconstrucción de viviendas e infraestructura de inmuebles como escuelas, y centros de salud, así como la rehabilitación de caminos y puentes afectados por la tormenta Manuel y las lluvias de marzo.
Los inconformes iniciaron este jueves la jornada Contra el hambre y la discriminación, con una reunión en la Casa del Jornalero, donde acordaron bloquear las carreteras, en lugar de marchar como anunciaron.
En la carretera Tlapa-Chilpancingo, el primer bloqueo fue en el crucero de Atlamajalcingo del Río, donde participaron campesinos de los municipios de Tlacoapa, Alpoyeca, Acatepec y San Luis Acatlán, pero al ver que los conductores buscaban salidas alternas, una parte del grupo se trasladó a la salida del balneario Paraíso Escondido, en la carretera vieja, para cerrarla totalmente.
En la carretera Tlapa-Puebla ocurrió algo similar; primero se plantaron en La Nopalera, y de ahí, al ver que se usaba el cauce del río Tlapaneco como vía alterna, se trasladaron al puente de El Otate para cerrar el paso. Aquí estuvieron vecinos de Malinaltepec, Atlamajalcingo del Monte, Alcozauca, Xalpatláhuac, Atlixtac e Iliatenco, entre otros.
En ambos sitios se permitió el paso a quienes llevaban enfermos. En el bloqueo participaron más de 3 mil indígenas de 185 comunidades.
El líder Moisés Solano Cano dijo que esperaban que se cumplieran los acuerdos con el gobierno federal, ya que las mesas de trabajo no se han concretado y se postergan unos días antes de las fechas, como ocurrió este 30 de marzo, cuando no les confirmaron la reunión.
Dijo que la petición es que en 2016 les doten granos básicos como maíz, frijol y arroz, y sal en el programa Que llueva maíz en La Montaña, para más de 16 beneficiarios, ante las afectaciones a sus tierras de labor, y que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) responda a su compromiso de reconstruir 4 mil 800 viviendas y las escuelas, caminos y puentes afectados por la tormenta.
Además exigen que se atienda de manera emergente a los cafetaleros que en su mayoría son parte del Consejo, ante las afectaciones que dejó la plaga de la roya que no les permitió obtener cosechas.
Mencionó que no se levantaría el bloqueo si no recibían a la comisión y que ya llevan más dos años y medio exigiendo que cumpla al gobierno federal, que minimiza a los delegados, comisarios y principales de las comunidades que acuden en representación de sus pueblos.
Alfonso Ayala Vicario, de Malinaltepec, lamentó que las autoridades sólo engañen a la gente y que los apoyos lleguen tarde, como ocurrió con las lluvia y los vientos del 8 de marzo, cuando decenas de casas se quedaron sin techos, y la poca ayuda llegó 20 días después cuando políticos se aprovecharon de la miseria al entregarles a algunos unas cuantas láminas y una despensa, “con eso pisotean la dignidad de la gente y no nos resuelven las necesidades, porque las casas que hicieron ya están mal, se fueron las láminas, nos dan atole con el dedo”, lamentó.
Los comentarios fueron por la visita del gobernador, Héctor Astudillo Flores, a la comunidad na savi de Alacatlatzala, municipio de Malinaltepec, el 29 de marzo, “sólo llamaron a la gente y no le dieron nada, actuaron de mala fe para llenar una cancha y sólo le dieron los apoyos a unos cuantos, fue otra jugada contra nosotros”, denunció.
El bloqueo fue levantado a las 9 de la noche y recibieron la propuesta de una fecha para reunirse con el subsecretario de Gobernación, Luis Enrique Miranda. Al cierre de esta edición continuaban en reunión deliberando sobre continuar o no su jornada de lucha.
En un boletín, el Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan apunta que ante la grave crisis productiva que enfrentan las familias indígenas, los pueblos cuya economía se basa en la agricultura de temporal y en la comercialización del café están al borde de una situación de gravedad.
Por eso pedían el programa Que llueva maíz en la Montaña, como una medida emergente que compense el déficit de producción de granos básicos que ha obligado a decenas de familias a salir de la región para contratarse como jornaleras agrícolas.
Exigieron que las autoridades cumplan con la construcción de vivienda, que de acuerdo con el censo del Consejo, suman 4 mil 250 casas dañadas tras las tormentas Manuel e Ingrid.
Menciona que la lucha de los pueblos es para hacer que las autoridades se comprometan a cumplir sus compromisos.
El Consejo emplaza a los gobiernos estatal y federal a retomar la mesa de diálogo que quedó trunca desde diciembre de 2015, y ante el vacío que generan las autoridades, el Consejo protesta masivamente y exige el cumplimiento de la segunda etapa del programa Que llueva maíz en la Montaña, y que se atienda la construcción de viviendas.
Llamaron al gobernador de Guerrero Héctor Astudillo Flores a que asuma su compromiso de proteger los derechos fundamentales de la población más olvidada de Guerrero.

Protestan unos 100 me’phaa en la CFE de Tlapa para exigir que restablezcan la energía eléctrica

 

Comisarios, delegados y principales de comunidades me’phaa bathaa de los municipios de Tlapa, Metlatónoc, Atlamajalcingo del Monte y Cochoapa el Grande protestaron en las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para exigir el restablecimiento de la energía eléctrica, revisión de líneas, cambio de postes, bajadas y contra las altas tarifas.
Se quejaron de que el gobernador, Héctor Astudillo Flores fue a sus comunidades el domingo 13 de marzo y les prometió que, a más tardar el miércoles, tendrían energía porque llegando a Chilpancingo lo reportaría, “lo malo es que nos confiamos y no preguntamos qué miércoles iba ser porque ya pasaron varios”, se quejaron.
Unos 100 vecinos me’phaa de la variante bathaa llegaron alrededor de las 10 de la mañana a la CFE, donde presionaron en la entrada unos 40 minutos, y luego fueron recibidos en la sala de reuniones.
Los usuarios inconformes explicaron que carecen del servicio de energía eléctrica desde las lluvias y fuertes vientos del 8 al 10 de marzo, que apenas el 27 la CFE lo restableció y media hora después volvieron a quedarse sin ella.
Además, dijeron que hay postes y transformadores caídos, algunos de hace unos días y otros desde la tormenta Manuel, de septiembre de 2013; asimismo, solicitaron más de 100 bajadas en las distintas comunidades, que se reubiquen algunos postes y otros sean cambiados, porque son de madera y ya están deteriorados, y que se vea si los árboles causan afectaciones, para podarlos.
Los representantes de la CFE, cuyo responsable es Iván Martínez Borja, se pusieron a la defensiva ante los reclamos, pues de inmediato los acusaron de colocar alambres en las líneas de conducción para restablecer la energía, y eso generaba cortos y afectaciones mayores en los equipos costosos de la CFE, de más de 20 mil pesos, porque ese alambre no permite cortar la energía, causando daños mayores.
La CFE se comprometió a podar los árboles que afectan el cableado, pero con la ayuda de los habitantes de las comunidades, como lo han hecho en otros lugares.
Los inconformes explicaron que no reportaban el corte del servicio porque los teléfonos funcionan con electricidad y se les complicaba ir a las oficinas de la CFE a dejar un oficio que luego ignoran.
Les dijeron que los comisionistas contratado por la comisión son propuestos por la comunidad y la CFE les da un sueldo.
Los representantes de la CFE justificaron su desatención con que hay más poblaciones que no tienen energía desde hace más de 20 días, mientras que los afectados les reprocharon que al presidente de Xochihuehuetlán, que tiene una gasolinera en Xalpatláhuac, le restablecieron la energía tras reportar el corte.
Las comunidades afectadas de los cuatro municipios sumaron 19 en el registro, la mayoría hablantes de me’phaa bathaa, aunque algunas son na savi, entre ellas Juanacatlán, Francisco I. Madero, San Juan Puerto Montaña, San Agustín y Agua Dulce.
Los participantes pertenecen al Consejo Regional de los Pueblos Me’phaa bathaa, quienes plantearon que las deficiencias en el servicio eléctrico son añejos, “desde que empezamos con el difunto Cándido Félix Santiago”, recordaron.
Como parte del Consejo estuvieron su presidente, Zaragoza Hurtado García; el vicepresidente, Zeferino Villanueva Galindo; el secretario, Marcos García Catalán; los vocales, Andrés Flores Candia y Nazario Félix Cano, y el contralor social, Joaquín Catalán Estrada.
La reunión terminó alrededor de la 1 de la tarde con la firma de la minuta con que la CFE se compromete a iniciar el restablecimiento de la energía a partir del 28 de marzo, cuando verificarán la línea principal y luego los ramales, los postes que se cayeron y el cambio de los que están en mal estado, y que la reubicación sería la parte que más llevaría tiempo porque tendrían que mover postes y llevar nuevos.

Sigue parada la construcción de casas de damnificados en El Mirador, en la capital

Las obras para la construcción de viviendas para familias damnificadas por la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, en el fraccionamiento El Mirador, al sur de la capital, siguen suspendidos debido a que la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) emitió una sanción porque la obra carece de un estudio de impacto ambiental.
Mientras tanto, un grupo de ingenieros civiles revisa las viviendas ya construidas y el terreno para verificar el riesgo, tras la denuncia de los beneficiarios de las casas ya entregadas ante la inestabilidad del suelo.
A dos años y medio de los daños provocados por la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, no han sido terminadas las mil 200 viviendas que se comprometió a construir la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu) para igual número de familias damnificadas, y por el contrario, las que ya fueron construidas están siendo valoradas por ingenieros encabezados por el universitario Roberto Arroyo Matus.
Consultados al respecto, los ingenieros se negaron a adelantar los resultados del trabajo, pues argumentaron que no están autorizados hasta que concluyan la revisión.
Mientras tanto, cientos de familias siguen en espera de que se les asigne su casa, pues de las mil 200 viviendas que se comprometió a entregar allí la Sedatu, a las familias damnificadas, sólo unas 300 han sido reubicadas.
Sin embargo, tras la denuncia del dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG), Nicolás Chávez Adame, en el sentido de que las familias beneficiadas con las casas corren riesgo por la inestabilidad del terreno, se comenzó una revisión de las casas y del terreno, pero aún no se ha concluido el trabajo.
La denuncia también motivó que la Profepa suspendiera la obra, debido a que no encontró que se haya hecho un estudio de impacto ambiental, por lo que ordenó la suspensión de la entrega de viviendas a las familias damnificadas, según fuentes oficiales de la dependencia.
En estas circunstancias, a dos años y medio de la devastación ocasionada por los fenómenos meteorológicos Manuel e Ingrid, el resto de las casas que se construyen en ese predio podrían no entregarse, pues se ha determinado que el suelo no es factible para la construcción, según insistió el dirigente de la APPG Chávez Adame.
Y es que el predio en el que se edifican las casas para las más de mil familias afectadas por los fenómenos de 2013, presenta deficiencias, y corren el riesgo de deslaves y grietas que afecten a las familias, por lo que las casas ya no serán entregadas en ese lugar.
Actualmente están habitando sólo unas 300 familias de las mil 200 que serían reubicas allí, según informó inicialmente la Sedatu.
El dirigente cuestionó, que si tardaron casi tres años en construir las viviendas, entonces qué tiempo requerirán ahora para iniciar desde cero las casas para cientos de familias que perdieron sus hogares.
Mientras tanto, los vecinos que ya habitan algunas de las casas informaron que no tienen conocimiento de cuál es el siguiente paso de las autoridades luego del anuncio sobre la inestabilidad del predio. (Zacarías Cervantes / Chilpancingo).