Vecinos de la comunidad de Carrizalillo llamaron a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos a que vayan a ese poblado para buscar a sus hijos.
Ayer en una visita a la comunidad del municipio de Eduardo Neri (Zumpango), algunos pobladores que pidieron a los reporteros que acudieron no revelar su identidad debido al hostigamiento que tienen de la delincuencia organizada, dijeron que hay indicios de que los estudiantes pudieron ser llevados a ese lugar luego de los ataques que sufrieron en Iguala entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre del 2014, como se publicó en estas páginas anteriormente.
Las personas a las que se entrevistó forman parte del grupo que defendió al presidente del Comisariado Ejidal Ricardo López García, a quien el miércoles policías federales intentaron detener y que fueron retenidos por los vecinos junto a un presunto halcón del grupo criminal Guerreros Unidos.
Uno dijo que la noche del 27 de septiembre del 2014 llegó a Carrizalillo un grupo de aproximadamente 30 sicarios de Guerreros Unidos de Iguala, quienes ingresaron a la comunidad a bordo de camionetas de lujo, portando chalecos antibalas, granadas y armas de alto poder.
Agregó que este grupo de sicarios pertenecen al grupo criminal Los Peques, a quienes identifican como el brazo armado de Guerreros Unidos, que en Carrizalillo está a la cabeza la familia Peña Celso, de la que uno de sus integrantes fue retenido junto a policías federales.
Expuso que esa noche algunos pobladores vieron trabajar una retroexcavadora, que dos montículos de tierra que había afuera del panteón del pueblo, destinados al aplanamiento de una calle, desaparecieron, porque la mañana del 28 de septiembre ya no estaban.
Comentó que el pasado miércoles cuando retuvieron a nueve policías federales y a Modesto Onofre Peña Celso, presunto halcón de Guerreros Unidos, éste confesó que en los cerros de Carrizalillo hay fosas, en donde sepultaron los cuerpos de sus víctimas.
Dijo que la revelación de Onofre Peña, así como los ataques en contra de los estudiantes la noche del 27 de septiembre del 2014, los hace suponer que los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos fueron llevados a Carrizalillo, y probablemente se encuentren en las fosas de las que habló Peña Celso.
Luego de una operación en la que participaron gendarmes, policías federales, militares y marinos en Carrizalillo, el 21 de octubre del 2014, en donde detuvieron a integrantes de la familia Peña Celso, a quienes vinculan con los Guerreros Unidos, éstos abandonaron la comunidad y se refugiaron en Iguala.
El 22 de octubre del 2014 se publicó en estas páginas que una comisión de los padres de los estudiantes se trasladó a ese poblado a buscar a sus hijos, porque recibieron una llamada anónima que les informó que un grupo de jóvenes estaba retenido ahí.
Los habitantes de Carrizalillo explicaron que antes de la operación del 21 de octubre, Guerreros Unidos difundió el rumor de que en cualquier momento llegarían al pueblo los padres de los 43 normalistas y estudiantes de Ayotzinapa, para buscar por la fuerza a sus hijos.
Recordó que los padres de los normalistas no subieron a Carrizalillo, situación que consideró prudente porque en esas fechas aún había presencia de sicarios de pistoleros de Guerreros Unidos, y no fue hasta después de la operación del 21 de octubre del 2014 que los vecinos de esa comunidad dejaron de ser sometidos por la delincuencia, porque se organizaron.